Lucas Platero, activista transexual: “Eliminar Educación para la Ciudadanía puede provocar el aumento del acoso escolar contra los alumnos LGTB”

Lucas Platero

Lucas Platero / EVA FLÓREZ

Poco a poco los menores transexuales van consiguiendo visibilidad en la sociedad. Sin embargo, en los cuentos infantiles y juveniles es más difícil encontrar a personajes LGTB. Para lograr que estos menores comiencen a estar presentes en la literatura, la  editorial Bellaterra ha lanzado una colección de cuentos infantiles en la que hay personajes transexuales, homosexuales o que rompen con los roles de género.

“No consiste en que el protagonista del cuento sea trans. Por ejemplo, en La fiesta de Blas , el personaje trans es secundario, uno que pasaba por allí”, explica el coordinador de esta colección,  Lucas Platero -activista transexual y sociólogo-, en una entrevista con eldiario.es. Entre los cuentos publicados hay algunos con un título bastante explicativos como Laura tiene dos mamás, y otros como Mi Princesito, en el que se aborda la actitud del entorno cuando un niño es femenino y rompe con el rol de género.

Han lanzado esta colección para dar visibilizad a los menores trans en la literatura infantil, ¿considera que la temática LGBT tiene escasa presencia en los materiales educativos?

Existen pocos materiales que aborden esta temática. Muchos padres y muchos colegios nos pedían documentación. Por eso en la editorial Bellaterra nos planteamos que hacía falta publicar cosas frescas. Por ejemplo, atreverse a plantear que el protagonista del cuento es un niño pequeño, que es trans y que no pasa nada.

¿A qué se debe este vacío en el temario educativo?

Hay un temor a todo lo relacionado con la sexualidad. Hay gente a la que le cuesta darlo en clase, hay gente que piensa que va a ser un tema polémico… Al final lo único polémico que existe en la igualdad entre hombres y mujeres es que hay gente que no quiere que esa igualdad exista.

Colectivos LGTB llevan décadas intentando que los estudiantes puedan reafirmar su identidad y su orientación sexual en el colegio. ¿Cómo se puede contribuir a que la escuela no sea un entorno hostil para salir del armario?

Hay que establecer climas donde la gente pueda hablar con honestidad. Hace unos años entrevisté a David, que ahora ya tiene 19 años. Me contaba cómo salió del armario en segundo de Bachillerato, lo contó el primer día de clase, ningún compañero le dijo nada. Cuando salieron al recreo, la gente no sabía cómo actuar. Por eso no solo consiste en salir del armario, sino en tratar el tema como si fuese algo cotidiano. Por ejemplo, se puede plantear en clase el día de la “salida del armario”, todos tenemos algo por lo que salir del armario: porque eres adoptado, porque quieres más a tus abuelos que a tus padres…

¿Y hay recursos para conseguir que las escuelas no sean entornos hostiles para estos alumnos?

Yo creo que se debe revalorizar el trabajo de la enseñanza porque es donde suceden las cosas más importantes. Es evidente que la educación es un caballo de batalla, todas las fuerzas políticas saben que la educación es la clave, es la herramienta a través de la que se difunden unos valores. Si quitan del temario todo lo que tiene que ver con las libertades sexuales y lo cambian por emprendimiento, están mandando un mensaje rotundo.

Con la entrada en vigor de la LOMCE ha desaparecido del temario la única asignatura que abordaba la libertad sexual, Educación para la Ciudadanía, ¿la eliminación de estos contenidos influye en el acoso escolar?

Si, clarísimamente. Si los roles en clase se vuelven más estrictos, cualquiera que se salga un poco de los límites establecidos sufrirá discriminación. Si en la vida cotidiana estamos viviendo el clasismo y la xenofobia, la escuela se vuelve más clasista y más xenófoba. Los valores sociales dominantes y hegemónicos atraviesan la escuela. Si en la tele están diciendo: “Vamos a limpiar Cataluña o Navarra de inmigrantes”, ¿cómo se están sintiendo los chavales inmigrantes de ese sitio?

Con la nueva ley ya en vigor, ¿tienen facilidades para que los libros que ustedes editan entren en los colegios públicos y concertados?

Desafortunadamente depende de la sensibilidad de los profesores y profesoras. Aunque si ellos no la tienen, se pueden encontrar con que lo demanden las asociaciones de padres y de madres. Hay algunas organizaciones, como Galehi (Asociación de familias homoparentales), que acuden a la escuela a preguntar a los profesores qué libros tienen en la biblioteca y pueden solicitar al centro que incorpore los que ellos crean convenientes.

Usted explica que la orientación y la identidad sexual se tratarán ahora en clase solo si los profesores tienen sensibilidad. Por lo tanto, ¿qué pasa con aquellos docentes que no tienen esa preocupación? ¿Y qué pasa con sus alumnos?

Los profesores deberían de tener esta sensibilización. Es preocupante que se piense que la educación sexual es opcional, ya que todos los niños desarrollan la identidad de género. Y cuando un alumno no es como se supone que debe ser, la discriminación puede llegar a ser muy alta. Tendríamos que plantearnos que los planes de intervención sobre el acoso escolar no los podemos implementar a los 16 años. Los tenemos que empezar a hacer antes, porque el bulling y la homofobia comienzan en educación infantil y continúan en primaria.

Si desde educación infantil se incluyese en el contenido educativo temática que visibilizase al colectivo LGTB y se combatiesen los roles de género, ¿sería más sencillo prevenir el acoso escolar?

Sí, sería bastante más fácil. El profesorado estaría más preparado para prevenir el bullying si tuvieran claro que los alumnos pueden romper las expectativas de los roles de género y siguen siendo seres queribles. No hay que percibir a los chavales LGTB como sujetos con un problema de disciplina. Hay quienes no rompen con los roles de género para fastidiar.

Los profesores que dan clase en infantil, primaria y secundaria ¿se plantean que un porcentaje de sus alumnos pueden ser LGTB? ¿están formados para entender a esos estudiantes?

El profesor tiene que estudiar estos temas. No te puedes acercar intuitivamente a la sexualidad y a la identidad de género, porque intuitivamente puedes meter mucho la pata. La gente percibe que el inglés es muy importante, pero pocos se acuerdan de que la formación en cuestiones LGTB o de feminismo también son importantes durante la formación del profesorado.

El miedo de la derecha italiana a incluir en las escuelas una teoría para acabar con la homofobia

Un comité del partido Fratelli dItalia en la región de Trento lanzó una campaña con el lema No a la ideología del género en los colegios

Un comité del partido Fratelli d’Italia en la región de Trento lanzó una campaña con el lema “No a la ideología del género en los colegios”, utilizando la imagen de un transexual de 17 años que decidió acabar con su vida después de que sus padres trataran de imponerle una terapia curativa.

La filósofa, profesora de la Sorbona y diputada del Partido Democrático italiano, Michela Marzano, se disponía hace un par de semanas a presentar en Pádova su nuevo libro ‘Mamma, papà e gender’ (Mamá, papa y el género). Pero a última hora el alcalde Massimo Bitonci, de la derechista Liga Norte, le negó el acceso al consistorio con el fin de impedir que se propague la teoría del género”. La presión de un grupo de intelectuales propició que finalmente Marzano pudiera celebrar su conferencia en el aula magna de la Universidad de Pádova y de paso reapareciese el debate sobre esta corriente.

Porque, ¿qué es exactamente la teoría del género? Según la propia autora de este libro, “nada”. Marzano explica a eldiario.es que existen diferentes “estudios del género, que se desarrollaron a partir de los años 70 sobre todo en Francia”, que indagan en el comportamiento del ser humano en un ámbito social, familiar, cultural o sexual, desposeyéndolo de su carácter femenino o masculino. Es decir, separando la disyuntiva antropológica entre hombre y mujer de la relacionada con la masculinidad o feminidad, de modo que un hombre podría tener comportamientos femeninos y viceversa.

Precisamente para poner un poco de claridad en medio de semejante confusión, la filósofa ha escrito este libro con el que pretende “acabar con la idea de que un homosexual parte de una posición de inferioridad o la idea machista más extendida aún de que una niña es inferior a un niño”. “Hablamos de igualdad, todo lo demás son invenciones”, explica.

Según Marzano, como respuesta a estas reivindicaciones, grupos ultracatólicos y de extrema derecha llevan tiempo “agitando el fantasma de esta supuesta teoría del género, que vendría a destruir la familia”. Quienes la critican apuntan a que son las organizaciones que defienden los derechos de los homosexuales quienes tratan de imponerla en el conjunto de la sociedad.

Flavio Romani, presidente de Arcigay, el principal colectivo LGTB italiano, lo compara con los Protocolos de Sion, un libelo publicado en la Rusia de los zares en el que se recogen los supuestos planes de un grupo ultrasecreto judío para controlar el mundo y bajo el que se justificaron los pogromos antisemitas por parte de los rusos.

“Nos acusan de decir que una persona puede cambiar a cada momento de tendencia sexual y de querer convertir a todos en homosexuales”, reconoce a este medio Romani. Añade que a través de esta idea se desarrolla en la sociedad un sentimiento “homófobo” y que sus iniciativas en las escuelas para divulgar la igualdad entre diferentes tendencias sexuales cuentan con un fuerte y creciente rechazo.

Campañas contra la ‘teoría del género’

Este verano el alcalde de Venecia, Luigi Brugnaro, apoyado por una coalición de derechas, decidió retirar de las escuelas 49 libros al afirmar también que defendían la “teoría del género”. En octubre, el Consejo Regional de Liguria, gobernado por Giovanni Toti, del partido Forza Italia de Silvio Berlusconi, aprobó incluso una resolución para prohibir esta ideología en los colegios. Y poco antes un comité del partido Fratelli d’Italia en la región de Trento lanzó una campaña con el lema “No a la ideología del género en los colegios”, utilizando la imagen de un transexual de 17 años que decidió acabar con su vida después de que sus padres trataran de imponerle una terapia curativa.

La fotógrafa Rose Morelli, quien captó el rostro lloroso del joven maquillado Leelah Alcorn, anunció acciones legales contra el partido. Al igual que hizo tiempo atrás el célebre publicista de Benetton Oliviero Toscani cuando Fratelli d’Italia puso el rótulo de “Un niño no es un capricho” a una obra de Toscani en la que dos parejas homosexuales sostienen a un bebé.

Fratelli d’Italia puso el rótulo de Un niño no es un capricho a una obra del publicista de Benetton Oliviero Toscani

Fratelli d’Italia puso el rótulo de “Un niño no es un capricho” a una obra del publicista de Benetton Oliviero Toscani en la que dos parejas homosexuales sostienen a un bebé.

El jefe del grupo parlamentario de Fratelli d’Italia, Fabio Rampelli, responde aeldiario.es que aquellas fueron “iniciativas autónomas” y que no pueden “controlar la publicidad de todos los círculos del partido”. Lo importante para Rampelli es que “la diversidad entre hombre y mujer existe y no hay ninguna razón para que los niños aprendan conceptos que son contrarios a la naturaleza humana”.

“Los adultos tienen total libertad para decidir cambiarse de sexo o para tener relaciones homosexuales”, defiende el portavoz del partido, pero “no es algo que se deba inocular a los niños”. “Ojalá fuera cierto que la teoría del género no existe, porque eso significaría que hemos ganado la partida, pero hemos comprobado que hay una actividad espasmódica de ciertos grupos que no hace ningún bien al sistema educativo”, agrega.

La propia ministra de Instrucción, Stefani Giannini, se vio obligada a declarar que la reforma educativa que está en marcha no introducirá “ninguna teoría del género”. Para el jefe parlamentario de Fratelli d’Italia “lo que se debe explicar a los niños es cómo funciona el cuerpo y eso ya se hace”. Mientras que los colectivos homosexuales reclaman que se eduque en la igualdad, porque “apenas hay referencias a la sexualidad en los libros de texto italianos y las únicas aportaciones parten a nivel individual de las escuelas o de algunos colectivos”.

Tanto para la filósofa Marzano como para el presidente de Arcigay lo que hay detrás es “una estrategia de los grupos católicos y conservadores para no dar un paso atrás ante la ley de uniones civiles”. Actualmente en el Parlamento italiano se debate esta propuesta legislativa para regular los enlaces entre parejas del mismo sexo.

El Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo ha condenado a Italia por ser uno de los pocos países europeos que no cuentan con una legislación que proteja los derechos de las parejas homosexuales. Pero a pesar del impulso del primer ministro Matteo Renzi y de figuras del PD, el debate no sólo cuenta con la oposición de todos los grupos de derechas, sino también de algunos sectores del propio partido de gobierno.

Los creadores del Candy Crush se enfrentan a un juicio por despedir a un homosexual

Un juzgado de Barcelona estudia si echaron al trabajador después de que sufriese un “acoso moral con carácter reiterado de sus superiores en la empresa”

Imagen de uno de los juegos de la empresa King

Imagen de uno de los juegos de la empresa King EL MUNDO

Cuando P.S. entró a trabajar en la sede de Barcelona de la empresa King Shared Services, la creadora del conocido juego Candy Crush entre otros, pensó que le había tocado la lotería. Pasó seis entrevistas, dejó su empleo anterior en el ámbito de las finanzas para ejercer una profesión altamente especializada y con contactos directos con Londres, sede de la matriz de la empresa, pese a que no era directivo. Incluso alabó las modernas condiciones laborales que le ofrecía King como la presencia de un mediador en Recursos Humanos en caso de tener un conflicto con alguien de la compañía para solucionarlo.

Y eso que era una de las condiciones que esperaba no tener que utilizar. Pero empezó a no ver más remedio cuando al poco de entrar, en marzo de 2014, su inmediato superior en la empresa comenzó a hacer comentarios que el trabajador consideraba «incómodos» y por los que se sentía «ridiculizado». Algunos los hacía en los momentos de descanso durante la jornada laboral en un espacio de la misma empresa donde jugaban al futbolín. Allí el jefe le llamaba «marica» cuando quería que le diese más fuerte a la bola.

La situación se fue agravando con el paso de los días ya que a cualquier objeción del trabajador su jefe decía «no seas marica» o «no te asustes con tu jefe en Londres que es un poco loca», cuando debía viajar para recibir formación.

«Creo que desconocía que soy homosexual y ese tipo de comentarios me ofenden, aunque al margen de mi orientación sexual no debía hacerlos», afirma P.S. que fue aguantando varios meses lo que consideraba un tono ofensivo de su jefe hasta que no pudo más y a principios de diciembre de 2014 habló con Recursos Humanos para que mediasen. En esta reunión explicó sus problemas de trato con su superior y afirmó que también existían situaciones de desorganización dentro de su departamento. Los responsables de la compañía hablaron con el directivo afectado quien desde entonces empezó a presionarlo y a tratarlo mal hasta provocar que cogiese la baja médica durante 23 días hasta que fue despedido cuando se reincorporaba. «No dejaron que subiese a la sede de la empresa, me citaron en la cafetería de debajo y allí me dieron la carta de despido», añade P.S. quien detalla que lo echaron oficialmente «por una razón disciplinaria y por bajo rendimiento».

Por eso interpuso una demanda que fue admitida por el Juzgado Social 25 de Barcelona que celebrará el próximo enero el juicio correspondiente contra la empresa por despido nulo ya que no se llegó a ningún acuerdo durante la conciliación laboral. En el escrito judicial del abogado Ibán Fernández Girón, representante de P.S., se indica que durante varios meses su cliente sufrió «acoso moral con carácter reiterado de sus superiores en la empresa con la clara finalidad de dañar su autoestima y reputación ante sus compañeros». Además, indica que su jefe directo, que está citado como testigo en el juicio y que fue despedido por la empresa dos semanas después de la salida del trabajador, intentó «vejar a mi mandante ridiculizando su opción sexual».

En declaraciones a este diario, el letrado explica que su cliente fue despedido de forma nula tras «intentar solucionar un problema interno por los cauces que la propia compañía había puesto para mediar este tipo de conflictos». Ibán Fernández Girón considera que las «vejaciones» que sufrió el demandante por suorientación sexual provocan la nulidad del despido.

La demanda admitida por el juzgado indica que «bajo la apariencia de una estrategia empresarial para obtener mejores resultados se esconde otro tipo de estrategia que quiere llevar al trabajador a su autoeliminación de la empresa». También añade que «el despido es nulo porque se trata de una venganza de la empresa tras la queja expresada por mi mandante ante las vejaciones sufridas por su superior» y que se produjo tras una «baja médica» ya que el demandante «no podía soportar el trato recibido « por su jefe. Por eso, considera que debe percibir cerca de 22.500 euros de indemnización por parte de la empresa por los daños morales sufridos a partir de las vejaciones, más uno de los dos bonus semestrales que perciben los empleados -y que consiste en un 10% del salario-, un plan destock options al que tenía derecho el trabajador y un total de 164 horas extras realizadas por el demandante entre marzo y septiembre de 2014. El juicio por la reclamación de esta cantidad se realizará en enero de 2017, un año más tarde que el previsto para determinar si el despido es nulo o no.

El trabajador explica que su superior empezó a cambiar su trato con él tras la mediación de recursos humanos y que sólo se comunicaba con correos electrónicos o a través de otra directiva, aunque él intentó tener una conversación con su jefe para pedirle un trato respetuoso. La presión laboral empezó a pasarle factura cuando sufrió fuertes dolores en el estómago que hicieron que cogiese la baja por estrés. El día que se reincorporaba fue despedido. En total estuvo en la empresa unos 10 meses y todavía se sigue medicando por la ansiedad. Al dedicarse a un sector muy específico teme que su caso pueda perjudicarlo para conseguir otro empleo.

Una directiva de King en Inglaterra explicó a este diario que su empresa nunca comenta casos concretos que afectan a empleados o ex trabajadores, como esta demanda por un despido nulo. Pese a esto, recordó que King apoya públicamente y sin fisuras la diversidad ya que participan en varios eventos que reivindican igualdad de derechos de los homosexuales como los desfiles del Orgullo Gay en Londres o Estocolmo de este año y del pasado. Incluso destacó que directivos de King patrocinaron en varias ciudades europeas la campaña NOH8, una protesta con fotografías realizada en todo el mundo contra de la Proposición 8 de California, que prohíbe el matrimonio entre personas del mismo sexo en ese estado. Desde King detallan que su apuesta es por la igualdad de todas personas. Precisamente esta política de la tolerancia fue una de las razones por las que P.S. quiso trabajar en esta empresa ya que se ajustaba a sus características profesionales y personales.

Hace unas semanas la empresa de videojuegos Activision Blizzard anunció lacompra de la compañía King Digital Entertainment por unos 5.900 millones de dólares.

OSÉ LUIS BEIZTEGUI SEXÓLOGO DE LA CLÍNICA BIKO ARLOAK: “Los hombres buscamos más el placer y somos menos conscientes del riesgo”

Cada dos o tres años una nueva tendencia sale a la luz desde las oscuridades de las relaciones eróticas. En esta ocasión, es el Chemsex -Chemical Sex o sexo químico- el que parece estar a la moda

JOSÉ LUIS BEIZTEGUI SEXÓLOGO DE LA CLÍNICA BIKO ARLOAK

BILBAO – José Luis Beiztegui, sexólogo de la clínica Biko Arloak, en Bilbao, analiza esta nueva tendencia, por qué el perfil principal son los hombres gays y cuáles son los motivos por los que estos participan en estas fiestas donde las relaciones eróticas en grupo y las drogas se combinan en una fiesta que puede durar hasta 72 horas sin descanso.

Relaciones eróticas y drogas. No es una combinación nueva.

-Para nada. Y en el mundo gay menos. Históricamente, en buena parte de este colectivo, ha habido prácticas eróticas que han tenido que ver con el uso de drogas, como el popper, la cocaína, etc. Y en cuanto a las relaciones eróticas en grupo, es decir, aquellas en las que participan tres o más personas, también se han venido dando más o menos regularmente y con más asiduidad que en la subcultura heterosexual. Aun así, el Chemsex sí que tiene algunas connotaciones diferenciales que son nuevas. Principalmente, que se usan nuevos tipos de drogas.

¿Cuál sería el perfil de los participantes en estas fiestas?

-Generalizando, sería el hombre gay que vive su sexualidad y su erótica muy en el terreno de la noche, la fiesta, el desfase y la transgresión. Más que centrarnos en la edad, que creo influye poco o nada, yo destacaría ese perfil más personal de afición por el sexo rápido, descomprometido emocionalmente y cuyo objeto prioritario es el placer.

¿Por qué gay?

-Es tan evidente que de tanta evidencia la gente no se da cuenta. Las relaciones gays están conformadas por hombres. Muchas veces pensamos que hay una división entre heteros y gays, cuando la división real es entre hombres y mujeres. Un encuentro erótico gay es un encuentro entre dos o más hombres que se desean eróticamente, pero sobre todo entre hombres. Y los hombres, por lo general, buscamos relaciones mucho más explosivas, parafílicas e instrumentales. Podríamos decir que buscamos más el placer por el placer, el éxtasis erótico más centrado en lo corporal y, sobre todo, en lo genital. Es decir, son relaciones bastante más hedónicas, donde lo que importa es el disfrute, el gozo y el deleite. Y muy importante: solemos tener menos susceptibilidad ante el riesgo porque se bloquea más la parte racional del cerebro y se activa la zona límbica.

¿Y en las relaciones lésbicas y heterosexuales?

-No creo que se den tanto este tipo de festividades. Las mujeres en general suelen tener bastante más cabeza para estas cosas, porque lo analizan desde una perspectiva más racional y compensada. Como las relaciones lésbicas están conformadas por mujeres, sus modos, objetivos y metas eróticas de relación también son diferentes. En las heterosexuales, aun siendo una configuración diferente, también se establecen convenios eróticos y prácticas no tan tendentes al exceso y la voluptuosidad.

¿Cuáles serían las razones por las que estos hombres participan en estas fiestas?

-Algunos opinan que para sentirse más liberados. Otros, para superar problemas de pudor o vergüenza o para sentirse pertenecientes a un grupo. Hay quien elucubra que es incluso para reafirmar su orientación sexual. Sin embargo, yo no estoy de acuerdo con ninguna de estas posibles causas, que me parecen ridículas. En mi opinión y como ya he mencionado anteriormente, estas tendencias se dan por la forma en la que los hombres viven su sexualidad y su erótica, que tiene unas connotaciones diferenciales claras.

¿Cómo se podrían volver estas prácticas más saludables?

-Es complicado, ya que lo hedónico y lo preventivo desde el contexto de las prácticas de las que estamos hablando son caminos difíciles de reconciliar. Alguien que va buscando como meta principal la transgresión y el éxtasis sensorial excitatorio per se inhibe y neutraliza la parte racional más cercana al de la evitación de posibles riesgos en sus prácticas eróticas, como ponerse el preservativo, estar vigilante a posibles infecciones, etc. Las asociaciones vinculadas a la salud sexual supongo que dirán que se continúen haciendo este tipo de fiestas con cabeza y protección. Eso sería lo razonable, obviamente. Pero alguien que va buscando y se quiere dejar arrastrar por la efervescencia de los sentidos muchas veces no está pensando en eso ni le está dando importancia, aunque la tenga. En cualquier caso, son apuestas soberanas de los individuos.

Entonces está a favor de este tipo de fiestas.

-Este tipo de festividades son un culto dionisíaco a los placeres y a la voluptuosidad, que me parecen no sólo respetables sino cultivables y promocionables. El único problema, que es real y en el que nos estamos centrando, es el uso abusivo, descontrolado e ignorante de la ingesta de drogas y las consecuencias perniciosas que conllevan desde múltiples puntos de vista. Es ahí en todo caso donde habremos de centrar las intervenciones.

Los homosexuales chinos buscan el amparo de la ley para su lucha

Aunque la aceptación de los LGBT en China es cada vez mayor, aún existen prejuicios

Activistas homosexuales chinos, en un maratón en noviembre

Activistas homosexuales chinos, en un maratón en noviembre. / XU KANGPING (EFE)

Aunque la aceptación de los LGBT (lesbianas, gais, bisexuales y transexuales) en la sociedad china es cada vez mayor y ha logrado progresos notables en la última década, aún se ve lastrada por una nube de desconocimiento y de prejuicios, especialmente dentro de las propias familias. Todavía existen en China clínicas que usan el electrochoque para “curar” la homosexualidad o libros que definen la atracción por el mismo sexo como una “desviación”. Para luchar por sus derechos, los activistas han empezado a recurrir a los procesos judiciales.

La discriminación está, por ley, prohibida en China. Y la homosexualidad dejó de estar vetada en 1997, cuando dejó de estar penada como “gamberrismo”. En 2001, se eliminó oficialmente del registro de enfermedades mentales. No existen grupos de activistas contra los homosexuales, como pueda ocurrir en EE UU. Entre los jóvenes que viven en las ciudades, “más del 80% dice aceptar a los LGBT”, puntualiza Xin Ying, directora de la ONG Beijing LGBT Center. Pero aún es un tema tabú, del que no se habla en público y que cuesta aceptar a las familias.

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a mentalidad confuciana considera una maldición la falta de descendencia. Numerosas familias coaccionan a sus hijos homosexuales para que se casen y tengan descendencia. Muchos acaban cediendo a la presión y casándose con personas que desconocen la verdadera orientación sexual de su cónyuge. Otros optan por matrimonios de conveniencia entre gay y lesbiana.

El Segundo informe sobre la comunidad LGBT del grupo WorkforLGBT, divulgado este mes y que sondeó a casi 19.000 personas, destaca que apenas el 6% de lesbianas han salido del armario. Entre los hombres, el porcentaje es del 3%. Para el 77% de gais y el 80% de lesbianas, la presión familiar es su principal preocupación.

“Mi familia no lo supo hasta hace dos años. Cuando se enteraron, les afectó mucho y no lo podían aceptar, pues nunca habían oído hablar sobre la homosexualidad. Desde entonces la situación no ha mejorado mucho”, explica Peng Yanzi, de 32 años.

Para complacer a sus padres, Peng decidió en 2014 acudir a una de las muchas clínicas que se anuncian por Internet como “correctoras”. La “terapia de aversión”, con un coste de 4.500 euros, incluía el uso de electrochoque para “provocar una reacción de horror”. “Calculé que recibiría cerca de un centenar. Después de 100 descargas eléctricas, uno no se convierte en heterosexual, sino en un neurópata”, considera.

Decidió entonces llevar a la clínica a juicio por estafa y publicidad fraudulenta. En diciembre pasado, los jueces le dieron la razón y obligaron a la clínica a devolverle el importe que había adelantado, en un caso que los activistas consideran un hito.

“Las organizaciones pro derechos LGBT han comenzado recientemente a entender que las demandas judiciales y los cambios en la política son muy importantes [para luchar contra la discriminación]. Muchas han empezado a recabar datos para demostrar esta discriminación y convencer a los abogados y al Gobierno”, explica Xin Ying.

Resultados limitados

Este año los tribunales han visto otros dos casos sobre derechos de los gais. La estudiante Chen Qiuyan conseguía esta semana llevar ante un tribunal al Ministerio de Educación tras descubrir que los libros de su Universidad siguen calificando la homosexualidad como un “desorden” patológico. Y el director Fan Popo ha presentado una demanda contra la súbita censura en Internet de su películaMama Rainbow, sobre las relaciones entre madres y sus hijos homosexuales.

“Quiero que me expliquen las razones para bloquearlo”, declara Fan, a la espera de que el tribunal emita sentencia en un par de semanas. “Me dicen que mi vídeo es perjudicial para la sociedad. Pero se muestra todo este amor de estas madres ¿Qué daño puede hacer a la sociedad el amor maternal?”

De momento, los resultados de estas iniciativas aún parecen limitados. Las clínicas “correctoras” siguen existiendo y al menos un 10% de los psiquiatras, según el informe de WorkForLGBT, aún cree necesario el uso de terapia. En el caso de la estudiante Chen, el Ministerio de Educación rechazó cualquier responsabilidad sobre el contenido de los libros de texto. Pasos más avanzados, como el matrimonio entre personas del mismo sexo, parecen aún una posibilidad muy distante.

Pero poco a poco se van logrando más avances. Fan Popo recuerda que la asociación PFLAG (Padres, Familias y Amigos de Lesbianas y Gais) de China comenzó su primera reunión con solo cuatro familias. Hoy son más de mil. Y aunque Mama Rainbow se haya suprimido sin explicaciones, la censura sí ha cedido en otro caso. La coproducción francochina Seek McCartney, del director Wang Chao, cuyos personajes centrales son abiertamente gais, recibió en septiembre el visto bueno de las autoridades para su exhibición en cines.

Las grandes empresas hacen campaña

La estrategia de activistas como el Beijing LGBT Center incluye también reclutar para su causa a las empresas. Hasta el momento han encontrado receptividad entre grandes multinacionales y empresas del mundo de la comunicación o de la tecnología.

El gigante del comercio electrónico Alibaba se apuntó un tanto publicitario al enviar este año a 10 parejas gais a que pudieran casarse en EE UU. Eso sí, en las empresas más pequeñas “la situación es más complicada”, reconoce la activista Echo. Un 31% de LGBT cree que trabaja en una empresa “muy poco amistosa” hacia su comunidad.

Grecia reconocerá a las parejas de hecho homosexuales sin contemplar adopción

El primer ministro, Alexis Tsipras, durante un encuentro con el patriarca de la Iglesia Ortodoxa rusa. EFE

El primer ministro, Alexis Tsipras, durante un encuentro con el patriarca de la Iglesia Ortodoxa rusa. EFE

Grecia reconocerá a las parejas de hecho homosexuales, según un proyecto ley que, si bien es un avance, no contempla el matrimonio y dista de satisfacer a la comunidad LGBT, que exige una legislación igualitaria.

El borrador de ley contempla equiparar las parejas de hecho homosexuales a las heterosexuales, con la condición de que estén registradas en Grecia.

Este tipo de uniones civiles gozará de derechos similares a los del matrimonio, como el de heredar las posesiones del cónyuge o tener acceso a la Seguridad Social amparada, pero no permite la adopción.

El proyecto establece también la creación de un Consejo Nacional contra el Racismo y la Intolerancia que se encargará de diseñar políticas que protejan a las minorías y de formar a los funcionarios respecto a estos temas.

Hasta la fecha, no se ha definido cuándo pasará el proyecto al Parlamento, debido al alto número de sugerencias que recibió esta iniciativa durante la consulta pública, informó a Efe una portavoz del Ministerio de Justicia.

Grecia es un país confesional de facto, en el que la Iglesia ortodoxa tiene gran influencia, y decisiones como ésta se topan con la resistencia de un amplio sector conservador de la sociedad, como demuestra el aluvión de comentarios críticos que aparecieron en la página web en la que se publicó el borrador de ley, a modo de consulta pública.

Las críticas de los conservadores

Los participantes, en su mayoría creyentes, califican el reconocimiento a las parejas homosexuales como un retroceso “inaceptable y destructivo“.

“Este tipo de progreso nos pierde…”, afirma un ciudadano en el portal digital. “Queremos que nuestros hijos y nuestros nietos vivan en una familia ortodoxa y griega, como la que nos dieron nuestros padres y antepasados”, dice otra.

La Iglesia ha manifestado su oposición mediante una carta oficial dirigida al Ministerio de Justicia, en la que el arzobispo de Atenas Jerónimo afirma que la unión civil es “un premio neoliberal a la falta de responsabilidad en las relaciones entre personas”.

El líder religioso rechaza toda otra forma de cohabitación que no sea la boda cristiana.

Discursos como el del obispo de El Pireo Serafim, quien, en enero pasado, dijo que “para los padres de la Iglesia la homosexualidad es el pecado más asqueroso y sucio”, representan las posiciones homófobas de esta comunidad.

No todos los griegos piensan como los citados exponentes de la Iglesia, ni como los que han participado activamente en el portal gubernamental para comentar la ley.

Ciudadanos como Lambros, por ejemplo, se muestran indignados con que todavía no se reconozcan los derechos de los homosexuales

“Todavía los homosexuales no pueden demostrar su relación en público. Estamos atrasados más de 50 años respecto a otros países”, asegura.

La opinión de los gays

La comunidad LGBT (las siglas que engloban a lesbianas, gays, bisexuales y transexuales) espera que este proceso sea rápido para que Grecia de por fin un primer paso en el reconocimiento de sus derechos.

Jóvenes como Vasilis Tomarópulos esperan que este proyecto, aunque no contemple la adopción, les de más visibilidad.

“Para mi familia no es normal que sea gay. Ellos son ultraconsevadores y creen que es cuestión de rebeldía”, afirma este estudiante de Física.

El joven universitario, de 19 años, cuenta que su hermano lo trata de “idiota”, porque publica en las redes sociales algunos artículos que reivindican los derechos de los gays.

Participar en manifestaciones y asistir a reuniones para dialogar sobre los problemas que afectan a su comunidad le ha permitido liberar el miedo al rechazo.

Vasilis discute constantemente su situación con otros voluntarios de la organización Juventud de Color (Colour Youth). Sus compañeros creen que la sociedad griega podría cambiar de mentalidad si la ley se transforma.

Todavía el Código Penal Griego contempla normas discriminatorias, como la diferencia de edades para consentir relaciones sexuales (las mujeres y los heterosexuales a los 15 y los homosexuales hombres a los 17).

Los jóvenes insisten en que la Iglesia y el Estado deben separarse para que la sociedad deje de rechazarlos.

Para este grupo, comprender su situación también es cuestión de “sentido común”.

Vasilis lo define como un asunto de “principios fundamentales; de derechos humanos”.

Iruñea no se calla ante las agresiones lesbihomotrans

Ayer se realizo en Iruñea una concentración-Besada pública para denunciar las agresiones LesbiHomoTrans.

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En las últimas dos semanas, se han denunciado públicamente dos agresiones homo/bi/les/trans fobas por parte de los colectivos sociales. Esta es una realidad que, aunque parezca ya superada, se sigue produciendo hoy en día en nuestra sociedad con total impunidad tanto en las calles, como en los hogares o en instituciones; ya sean unidades educativas, residencias u otros centros.

En la Iglesia católica, la homosexualidad es un fenómeno extendido: Carmelo Abbate

Noticia publicada por Revolución 3.0

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El periodista y escritor italiano Carmelo Abbate habló sobre la homosexualidad dentro de la iglesia católica para la prensa mexicana. “Hay un mundo oculto que vive su sexualidad de una manera enferma. No estamos hablando de poca gente, sino de la gran mayoría de los sacerdotes”, relató.

El italiano es una voz acreditada para el tema ya que escribió en 2011 “Sexo y el Vaticano” tras pasar meses encubierto. En el libro, evidencia no sólo a curas homosexuales, sino a los que siguen saliendo con mujeres, teniendo hijos -que dan en adopción o fuerzan a las mujeres a abortar- y hasta convirtiéndose en adictos al cibersexo.

El escritor compartió parte de sus experiencias dentro de la iglesia católica para el periódico Reforma

“Me sorprende que aún nos sorprendamos y qué la gente siga preguntando si es cierto (que hay sacerdotes gays). La Iglesia lo sabe, todos lo saben. De ahí que la regla sea ‘haz lo que quieras, pero que no te descubran’”, afirma.

La entrevista se dio dentro del contexto del estreno del documental “Amores Santos”, que recopila imágenes inéditas de decenas de curas homosexuales.

Sobre la pregunta de qué tan frecuente es este tema, Abbate contestó que es muy frecuente y citó a Richard Sipe, un ex monje benedictino, autor de una decena de libros sobre este tema afirma que el 30 por ciento de los curas estadounidenses son homosexuales, el 25 por ciento ha tenido relaciones con mujeres y otro 30 por ciento tuvo algún encuentro homosexual.

Cuando se le cuestionó sobre lo que más le impactó declaró que el nivel moralino lleno de hipocresía “me afectó la hipocresía, el oscurantismo y los chantajes.”, concluyó mientras también decía que todo lo demás que se sabe él no lo cuenta ya que al no haber pruebas “no ha pasado”.

Los hombres gais que odian a las mujeres

por Sean Faye

Este artículo fue publicado originalmente en Broadly, nuestra plataforma dedicada a las mujeres.

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Ilustración por Katherine Killeffer

«Los peores actos de misoginia que he sufrido han sido perpetrados por hombres gais. Y es más horrible que si viniera de un hombre heterosexual. Ni siquiera están tratando de expresar interés sexual hacia mí, simplemente están reafirmando su dominio sobre mi cuerpo porque son hombres. Lo hacen porque pueden».

Victoria Sin es una mujer drag queen que vive en Londres. Hace poco apareció en un documental de Broadly sobre el arte del drag y desde entonces, algunos hombres gais en Facebook la han acusado de «apropiarse» de la cultura gay y drag. «¿De qué me estoy apropiando? Es pura misoginia y estupidez», dijo Sin.

El tema de la misoginia entre los hombres gais es muy difícil de abordar. En mi experiencia, los hombres se niegan a creer que existe este fenómeno o cambian de tema inmediatamente con la frase «Sí, ¿y qué me dices de las mujeres homófobas?».

Tengo cuerpo de hombre, soy bisexual y también gender queer. Sin embargo, también he sufrido misoginia por parte de hombres gais y heterosexuales por mi aparente feminidad. En una fiesta en la que la mayoría eran hombres que trabajaban en asesoría política, me preguntaron «¿A qué te dedicas, corazón? ¿A algo divertido como la moda?». En aquella ocasión llevaba tacones, pintalabios rojo y un top sencillo. «No», respondí de forma cortante. «Trabajo como abogado mercantil en el distrito financiero y también soy escritor independiente». Su respuesta fue: «¿En serio?».

Esta misoginia puede variar entre lo insidioso hasta lo explícito y provocador, como demostró el columnista de Breitbart Milo Yiannopoulos en un ensayo sobre feminismo en el que describe a las mujeres como «las feministas infollables que prefieren la compañía de hombres gais que desde siempre se han aprovechado de nosotros para lograr lo que quieren». En noviembre del año pasado, la actriz y cantante Rose McGowan habló sobre la misoginia que ha sufrido por parte de hombres homosexuales en el sector. «Los hombres gais son igual de misóginos que los heterosexuales, si no más. Ahora mismo estoy muy indignada con la comunidad gay», señaló.

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Foto por Mattia Pelizzari vía Stocksy

En realidad, los conflictos en torno a la misoginia han estado presentes desde que surgió el mismo movimiento de los derechos de los gais. El Frente de Liberación Gay, el que organizó la primera marcha del orgullo en Londres, fue un movimiento emblemático para la emancipación queer en Reino Unido. Se formó en 1970 y en 1973 ya se había dividido en varias líneas políticas; una de ellas era el género. Un artículo de opinión en el número dos de Gay Left, un periódico socialista publicado por la comunidad gay en 1976, reflexiona acerca de los efectos de la división del movimiento:

«A partir de la separación entre las mujeres y los hombres en el movimiento… los hombres gais se volvieron más aislados y formaron un nuevo gueto. Después de esto, desaparecieron gran parte de los cuestionamientos serios de los roles de género… El movimiento gay de los hombres, en vez de desafiar y confrontar el sexismo, se puso a la defensiva».

En su panfleto de 1995 Lesbofobia: hombres gais y misoginia, la escritora Megan Radclyffe señaló que muchas lesbianas dejaron el Frente de Liberación Gay en 1971 y citó a Janet Dixon cuando dijo que «al final, una vez más, las mujeres estaban sirviendo a los hombres, las mujeres estaban creando consciencia… [y] estaban dándole su energía a los hombres».

Desde siempre, el activismo lésbico ha sido idéntico al feminismo; a fin de cuentas, la liberación de las mujeres queer requiere que desaparezcan los roles de género y las estructuras familiares que oprimen a las mujeres. Para los exintegrantes del FLG como Dixon, quedó claro que algunos hombres gais estaban buscando una forma de liberación que les diera licencia para sus preferencias sexuales sin dañar su posición social como hombres en el patriarcado.

La homosexualidad masculina tiene múltiples historias –y, por supuesto, fue ampliamente satanizada en la sociedad occidental judeocristiana como una desviación sexual del rol de género correcto para los hombres–. Sin embargo, existen otras relatos que se basan en la noción romántica y erótica de los hombres que tenían relaciones en la Antigua Grecia, las cuales, según la poesía de Homero, eran más importante que las relaciones con las mujeres. Esta historia paralela es visible en la celebración de la belleza masculina en el arte renacentista, a través de los escritos de Walter Pater, un crítico del siglo XIX que escribió extensamente acerca de la estética de la belleza masculina y la «amistad».

«Estamos seguros de que existió», señaló San Solomon, un profesor inglés de la Universidad de Sussex y codirector del Centro para el Estudio de la Disidencia Sexual, «aunque influía mucho la clase social: era un ideal de vinculación afectiva y avance que solo era posible para los hombres adinerados y educados. Los otros hombres y las mujeres estaban excluidos».

De hecho, la idea de que los hombres gais son superiores a las mujeres ha existido desde el siglo XIX. Solomon señala a Edward Carpenter, uno de los primeros socialistas que defendieron la homosexualidad. Él creía que los hombres que deseaban a otros hombres «no eran “afeminados”, más bien eran cualidades combinadas que los convertían en los mejores impulsores del progreso social». Carpenter argumentó que los uranistas masculinos (término con el que se refería a los homosexuales) combinaban a la perfección la franqueza de los hombres con la sensibilidad emocional de las mujeres.

He visto el legado social de esta idea en mi trabajo como abogado, donde la contratación en los rangos más bajos de la profesión se divide de forma equitativa entre los géneros. Sin embargo, en los rangos más altos, solo el 24 por ciento de los socios en las firmas comerciales británicas son mujeres. En contraste, las firmas de abogados como Freshfields y Simmons & Simmons están entre las más elogiadas por las organizaciones LGBT como Stonewall UK por ser gay-friendly y tener el mayor número de abogados y socios gais.

En ciertos ámbitos corporativos, los hombres gais avanzan más y con mayor velocidad que sus compañeras. Por eso no resulta sorprendente que prefieran presentar menos desafíos al statu quomarcado por el género; incluso puede que refuercen esas formas androcéntricas de trabajar que no presentan los obstáculos a los que deben enfrentarse las mujeres, como el cuidado de los niños o la baja por maternidad.

Quizá los profesionales gais de la actualidad son más culpables de sacar provecho del sexismo que de perpetrarlo. No obstante, el sexismo en los hombres gais puede adquirir formas mucho más directas. La queja más común de las mujeres con las que hablé tiene que ver con la invasión a menudo inapropiada de los cuerpos de las mujeres, muchas veces disfrazada bajo el pretexto de la cercanía y el aprecio, por ejemplo: los gais borrachos que tocan los senos de las mujeres o se arriman a ellas en los bares y que se ofenden si les plantan cara.

Un grupo controlado por hombres me está diciendo a mí, una mujer, cómo presentarme para ‘encajar’.

«Cuando era joven, muchos hombres me tocaban y decían, “No cuenta porque soy gay”. Pero sí cuenta porque soy una persona y merezco respeto», dijo Victoria Sin. Le dije que en varias ocasiones he oído comentarios como «Las vaginas son asquerosas, no conozco a nadie que sea capaz de acostarse con una», y Sin confirmó que también ha oído comentarios similares. «Si hablo de mi periodo, algunos amigos gais dicen, “¡Puaj!, no hables de eso. Es asqueroso”. No, es mi cuerpo y no es asqueroso». En mi opinión, esto se debe a una aseveración inconsciente de la identidad sexual de los hombres gais; pero confirmar que te gustan las pollas no significa que tengas que fingir repulsión hacia las mujeres y sus cuerpos. Es ofensivo y ridículo: después de todo, decir que las vaginas son asquerosas es contradictorio viniendo de alguien que practica el sexo anal.

La «escena» gay, si es que existe, también muestra señales de conflictos institucionales con las mujeres. «Cuando fui a G-A-Y [un club nocturno en Londres], me dijeron que “no era miembro” –lo que sea que eso signifique– por ser una mujer que se presentaba como “femme” (o la que hace de mujer en una relación lésbica)», explicó la escritora Josie Thaddeus-Johns. «Esto fue antes de que me presentara como bi. Es triste pensar que las mujeres que no están listas para este tipo de etiquetas tengan que lidiar con problemas de discriminación por parte de la comunidad gay incluso antes de entrar en un espacio queer. Un grupo controlado por hombres me está diciendo a mí, una mujer, cómo presentarme para “encajar”».

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Foto por Mattia Pelizzari vía Stocksy

Cuando permiten la entrada a las mujeres, a menudo se las confina a un espacio totalmente aparte. «¿Por qué a las lesbianas siempre las mandan al puto sótano?», preguntó Sin. «Incluso cuando es una noche para lesbianas o una noche “queer”, si se organiza en un recinto gay frecuentado por hombres, siempre hay hombres que lo ven como una invasión de “su espacio”. Una vez, un tipo en un bar interrumpió una conversación entre mi amiga y yo y dijo “Ecs, lo siento, hay demasiado estrógeno en esta conversación”».

Lyall Hakaraia, el dueño de un bar queer de Londres llamado Vogue Fabrics , cree que esto siempre ha sido así a lo lago de la historia de los recintos gais en la mayoría de las ciudades. «Todo tiene que ver con el sexo. Muchos creen que los hombres solo pueden funcionar de cierta manera sexual si no hay mujeres a su alrededor. Pero es mentira. Tal vez sí sea cierto para algunos, pero no para todos. La idea se distorsionó y ahora significa que las mujeres no deberían entrar porque su presencia podría arruinar el ambiente. Hay una gran diferencia entre ir a un sex club, diseñado específicamente para ligar o buscar una pareja sexual, e ir de marcha. Y que algunos hombres gais no puedan ver la diferencia entre estos dos conceptos significa que son lentos, por no decir más».

Así que la expresión de Sin sobre la feminidad «en el sótano» es una metáfora bastante buena de muchas de las actitudes de los hombres gais en cuanto al sexo en sí. En las aplicaciones para citas entre gais, los usuarios con frecuencia expresan su preferencia por hombres con apariencia masculina o que actúen como heterosexuales, algunos perfiles ponen explícitamente: «No chicas», en referencia a quienes hacen de «chicas» en una relación gay. Por el contrario, la expresión de deseo a menudo se convierte en un fetiche, en algo crudo y no solicitado. Justo esta mañana, un «Don Juan» me preguntó en Grindr: «¿Te pondrías ropa interior y medias largas para mí, chico sucio?» Esta misoginia refractada también se proyecta en el sexo gay: si salgo con rímel en una foto de perfil, debo ser consciente de que me dirán todas las cosas malas que le harán a mi «agujero».

«Nunca le he dicho a alguien con quien he salido cómo me gustaría que se comporte o qué aspecto debe tener. Me parece que los hombres gais ignoran por completo que están ejerciendo ese privilegio», me dice Shy Charles, músico queer de 25 años de edad que en su día a día luce pelo largo y barba, además de uñas postizas y sombra de ojos.

En las aplicaciones para citas entre gais, los usuarios con frecuencia expresan su preferencia por hombres con apariencia masculina o que actúen como heterosexuales.

«Los hombres homosexuales no se dan cuenta de que si te dicen: “Que no se te vaya a notar mucho la pluma”, te están pidiendo que finjas ser otra persona con el fin de satisfacer sus preferencias sexuales», continúa Shy Charles. «Un gay una vez me dijo que no ir al gimnasio y no cortarme el pelo era un “desperdicio” —el hecho de que físicamente no tuviera aspecto masculino era como echarme a perder. ¡Como si mi principal objetivo en la vida fuera ser atractivo para gente como él y necesitara orientación! Como si mi aspecto fuera algún tipo de accidente».

Algunos gais no solo se sienten con derecho de fiscalizar la apariencia de queers o gais, sino que también lo hacen cuando se trata de mujeres, en particular con mujeres que aparecen en los medios de comunicación. Si estas mujeres no tienen que ser sexualmente atractivas para los gais, existe una expectativa generalizada de que deben ser glamurosas, guapas e «icónicas». En resumen, una mujer perfecta irreal e idealizada.

Entre los hombres homosexuales blancos, la adoración de artistas de color como Beyoncé y la afición a programas como RuPaul’s Drag Race puede producir estereotipos insoportables de mujeres negras. En Push the Button, una sesión gay nocturna de música pop en Londres, los gais blancos asistieron a la fiesta anual de las Spice Girls con pelucas afro, en un supuesto homenaje a Mel B.

Las mujeres negras se enfrentan a una doble discriminación dentro de la sociedad blanca y patriarcal; la fusión informal de la experiencia de un gay blanco con la de las mujeres negras es apropiación, no solidaridad. Las mujeres trans se enfrentan a opresiones complejas similares —al igual que las mujeres cisgénero de color—y a menudo se les rebaja a estereotipos mediáticos.

De hecho, los hombres homosexuales cisgénero le deben muchas de sus libertades a las mujeres trans; fueron las mujeres trans quienes lideraron los disturbios de Stonewall en 1969. Sin embargo, los hombres gais (junto con lesbianas y bisexuales cisgénero) tienen una historia de altibajos cuando se trata de solidaridad política con las personas trans y las mujeres trans en particular. La principal organización benéfica británica de la comunidad LGBT, Stonewall -nombre que adquirió debido a los disturbios- no había participado oficialmente en cuestiones trans hasta este mes de febrero —16 años después de su fundación. Está claro que la mayoría de las organizaciones han aprendido de los errores del pasado y se han comprometido a proceder mejor en cuanto a temas relacionadas con trans. Pero una reciente petición en línea que dice, «Eliminad la T» de «LGBT», sirve para indicar que la transfobia persiste en la comunidad gay.

Con el fin de incluir de verdad a las mujeres trans en su política, los gais (de hecho, todas las personas LGB cisgénero) deben saber en qué punto la comunidad los está ignorando o fallándoles. Sin embargo, el estar abierto a esta crítica es mucho más difícil de lograr que la nota de «aceptación» que parecen tener los medios de comunicación. Por ejemplo, a pesar de que la portada de Caitlyn Jenner en Vanity Fair fue, sin duda, un hito para la visibilidad de los trans, su gran presupuesto hizo de aquello una mera representación superficial de la celebridad.

A todos nos afecta el patriarcado, pero en muchos contextos, los hombres gay son los que se encuentran en un posición más susceptible de ser arrastrados a conspirar con este.

La forma eficaz en que Jenner salió del armario no refleja lo que la mayoría de las mujeres trans experimenta en su transición. La actriz y modelo trans Hari Nef señaló en una entrevista con The Coveteur que «La gente solo ve a los trans como una fachada, por lo tanto, como algo no auténtico; la gente ve los cuerpos trans como “falsos”. Incluso cuando llevo una camiseta holgada y pantalones de pijama, sigo recibiendo expresiones de burla o desagrado».

Es importante que la lealtad de los gais hacia Jenner y sus hermanas trans no tan famosas vaya más allá de la apreciación estética y se den cuenta de que los cuerpos femeninos no deben ser objeto de crítica o consumo. Para las mujeres trans, sus cuerpos son el escenario de una guerra cultural que mata a un número creciente de personas.

Nick Adams, el director de programas de medios de comunicación en la Alinaza Gay y Lésbica contra la Difamación (GLAAD, por sus siglas en inglés), ha representado asuntos trans en los medios de comunicación estadunidenses durante 17 años. De hecho Nick es gay y trans. «Es imposible establecer una correlación científica entre el aumento de visibilidad de las mujeres trans en los medios de comunicación y el aumento del número de mujeres trans asesinadas en EUA», afirma Adams, «Pero tenemos que ser conscientes de que es posible. En lo que llevamos de año 2015, 20 mujeres o personas que no están conformes con su género han sido asesinadas, una cifra mayor que la del año pasado».

Adams se mantiene optimista respecto al apoyo político que la comunidad gay masculina ha mostrado hacia las personas trans, señalando los hechos relevantes que se han logrado en los últimos años para la representación de los trans, y el creciente impacto de activismo y comunicación en línea. «Si nos fijamos en la reacción generalizada de indignación a la reciente película Stonewall, de Roland Emmerich, que pone en primer plano a un hombre blanco gay cisgénero en la historia en lugar de a Martha P. Johnson, la mujer trans de color de la vida real, se puede ver que la comprensión de esto entre los hombre blancos gais está aumentando, lo cual es bueno».

Es bueno, pero para seguir avanzando siempre se debe examinar críticamente qué es lo que se puede mejorar. La homofobia no es hermana de la misoginia; es su hija. El patriarcado odia a los hombres gais porque sexualmente se comportan «como mujeres», odia al lesbianismo porque las lesbianas son mujeres que «se niegan» a follar con hombres, y odia a las personas trans que dicen critican sus supuestas verdades.

A todos nos afecta el patriarcado, pero en muchos contextos, los hombres gay son los que se encuentran en un posición más susceptible de ser arrastrados a conspirar con ésta. Las llamadas a tal conspiración son insidiosas y a menudo imperceptibles dentro de la masculinidad en sí. Por lo tanto, escuchar las voces y las quejas de las mujeres, los gais afeminados y las personas trans es crucial para todos los hombres gais. De lo contrario, pueden encontrar que ese mundo que goza de una liberación frágil, lograda a expensas de los demás, es de hecho un mundo confuso y contradictorio en el que no existe liberación alguna.

Dos detenidos por planificar el secuestro y asesinato de una homosexual

Los arrestados trataron de matar a la mujer cuando ésta no quiso establecer una relación sentimental con uno de ellos

El foso que iba a ser usado para ocultar el cadáver

El foso que iba a ser usado para ocultar el cadáver. | GUARDIA CIVIL

La Guardia Civil ha evitado el secuestro, violación y asesinato de una mujer, motivado por su orientación sexual, y ha detenido a dos hombres acusados de planificar en Quintanar de la Orden (Toledo) toda la operación, incluyendo un foso en el que pensaban ocultar el cadáver.

Los detenidos, en el marco de la operación Mollete, son J.B.G.P., de 39 años, yS.C.R. de 49, ambos de nacionalidad española, ha informado la Guardia Civil.

Según la investigación, uno de los detenidos había tratado de mantener una relación sentimental con la mujer cuando ésta residía en Quintanar de la Orden, pero la mujer se negó y le informó de su orientación homosexual.

Este detenido, que ya había sido condenado anteriormente a 10 años de prisión por agresión sexual, planificó entonces el secuestro, la violación y el asesinato de la mujer junto al otro detenido, propietario de una chatarrería.

Fuentes de la investigación han indicado a Efe que la víctima llegó a Quintanar de la Orden a vivir en verano de 2014 y estuvo allí un año, hasta el verano de 2015, cuando decidió marcharse para dejar de sufrir acoso y amenazas por parte del detenido.

La víctima había conocido en Quintanar al principal promotor de los hechos y al segundo detenido, ya que había trabajado en alguna de las chatarrerías de su propiedad.

También han precisado las fuentes que el detenido principal disponía de 9.000 euros para pagar al chatarrero y lo que necesitara durante su acción delictiva.

La investigación se inició el pasado mes de noviembre, cuando los agentes conocieron estos hechos, localizaron a los presuntos autores, en Quintanar de la Orden, y establecieron un dispositivo policial que permitió verificar el plan urdido y asegurar, a su vez, la integridad de la posible víctima.

Durante los registros domiciliarios y de los establecimientos de los detenidos, la Guardia Civil halló en una de las chatarrerías un foso que iba a ser utilizado para ocultar el cadáver.

La investigación, dirigida por el Juzgado de Instrucción número 1 de Quintanar de la Orden y la Fiscalía de Toledo, ha sido llevada a cabo por el Equipo de Secuestros y Extorsiones de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil y unidades territoriales de la zona.