En Holanda la eduación sexual comienza en la guarderia: Esto es lo que les dicen y porqué!

Artículo publicado en Medicinas Naturales

“La gente suele pensar que empezamos muy pronto a hablar sobre las relaciones sexuales a los  niños de primaria. La sexualidad es mucho más que eso. Es también la propia imagen de ellos, el desarrollo de su propia identidad, los roles de género, y se trata de aprender a expresarse, sus deseos y sus límites “-. Ineke van der Vlugt, experto en desarrollo sexual de los jóvenes de Rutgers WPF, el instituto de investigación de la sexualidad holandesa.

educacion-sexual-paises-bajos

¿Sabía usted que los Países Bajos tienen una de las tasas más bajas de embarazo adolescente en el mundo? ¿Sabía usted que la mayoría de los adolescentes en los Países Bajos dice que sus primeras experiencias sexuales fueron “consentidas” y “divertidas?” Podría deberse a que por ley, todos los estudiantes de la escuela primaria en los Países Bajos deben recibir algún tipo de “educación sexual”. Esto no se llama educación “sexual”, porque la idea, según der Vlugt, es tener conversaciones abiertas y honestas sobre las relaciones y el amor.

Un informe de las Naciones Unidas de 2008 encontró que la educación sexual integral permite a los jóvenes  “explorar sus actitudes y valores, y  practicar la toma de decisiones y otras habilidades para la vida, que tendrán que ser capaces de tomar decisiones informadas sobre su vida sexual.”

Según el informe que se hizo por la PBS:

“El sistema permite flexibilidad en cómo se enseña. Pero debe abordar ciertos principios fundamentales – entre ellos, la diversidad sexual y la asertividad sexual. Eso significa un estímulo del respeto a todas las preferencias sexuales y ayudar a los estudiantes a desarrollar habilidades para protegerse contra la coerción sexual, la intimidación y el abuso. El principio subyacente es sencillo: El desarrollo sexual es un proceso normal que todos los jóvenes experimentan , y tienen el derecho a la información franca, de confianza sobre el tema “.

Los resultados de este tipo de programas parecen hablar por sí mismos. Cuando se trata de la salud sexual de los adolescentes, en promedio, los adolescentes en los Países Bajos no tienen relaciones sexuales a una edad más temprana en comparación con otros países europeos o en Estados Unidos. También, como se mencionó anteriormente, los encuentros sexuales de adolescentes en los Países Bajos son “buscados” y divertidos “, mientras que en los Estados Unidos, el 66 por ciento de los adolescentes sexualmente activos encuestados dijeron que deseaban haber esperado más tiempo a tener relaciones sexuales por primera vez. Otro estudio encontró que cuando los adolescentes en los Países Bajos tienen practican sexo, aproximadamente el 90 por ciento de ellos utiliza protección de alguna forma. Las tasas de embarazo adolescente en los Países Bajos son algunas de las más bajas  del mundo, al igual que las tasas de infección por VIH y enfermedades de transmisión sexual.

Un estudio muy reciente de la Universidad de Georgetown muestra que los embarazos no deseados, la mortalidad materna, y las ETS se evitan más a menudo cuando la educación sexual comienza en la escuela primaria.

“Las lecciones están diseñadas para que los niños piensen y hablen sobre el tipo de intimidad que sienten. Otras lecciones se centran en el conocimiento del cuerpo. Por ejemplo, los estudiantes dibujan cuerpos de chicos y chicas, cuentan historias sobre amigos que toman un baño juntos, y discutir al que le gusta hacer eso y a quién no. A los siete años, se espera que los estudiantes sean capaces de nombrar correctamente las partes del cuerpo, incluyendo los genitales. También aprenden sobre los diferentes tipos de familias, lo que significa ser un buen amigo, y que un bebé crece en el útero de una madre. ”

El impacto negativo de la sexualización en los Medios.

“Había preocupaciones por parte de la sociedad de que la sexualización en los medios de comunicación podría estar teniendo un impacto negativo en los niños. Queríamos demostrar que la sexualidad también tiene que ver con el respeto, la intimidad y la seguridad “-. Ineke van der Vlugt

Lo que vemos en los medios de comunicación hoy en día es bastante ridículo. Ya se trate de una persona medio vestida, casi completamente desnuda, o actuaciones perturbadoras, nuestra idea del sexo en general ha sido completamente programada en nosotros. El hecho de que los niños tengan tal inocencia es lo que los hace aún más susceptibles a este tipo de programación.

Se nos enseña a pensar, qué hacer, y cómo vivir nuestras vidas y esto incluye todos los aspectos de la misma, incluyendo la percepción del sexo y el amor.

Luego está el tema de la pornografía, que ha dominado la corriente principal, como se clasifican los sitios web porno entre los mejores en el mundo.

Es, definitivamente, un problema que puede provocar un debate interminable.

“En los EE.UU., los adultos tienden a ver a los jóvenes como estos haces de hormonas que estallan. En los Países Bajos, hay una fuerte creencia de que los jóvenes pueden ser educados en el amor y en las relaciones. “- Amy schalet, un sociólogo norteamericano que se crió en los Países Bajos y ahora estudia las actitudes culturales hacia la sexualidad de los adolescentes, con un enfoque en estos dos países.

Las españolas del escándalo porno, en la mira de la Justicia argentina

Las dos activistas en pleno espectáculo sexual en la Universidad de Buenos Aires

Las dos activistas en pleno espectáculo sexual en la Universidad de Buenos Aires.

La Justicia de Argentina ha identificado a las jóvenes españolas Majo Pulido y Elena Urko, activistas del grupo catalán “Post-Op”, como las protagonistas estelares de la polémica muestra pornográfica montada en un espacio público de Buenos Aires e investiga si perpetraron un delito.

EL MUNDO ha podido saber este miércoles que el fiscal Mauro Tereszko consiguió individualizarlas por pesquisas del Cuerpo de Investigaciones Judiciales. Y, además, ha requerido los videos de la orgía que tuvo lugar, el pasado miércoles 1, en el hall de ingreso a la facultad de ciencias sociales de la pública Universidad de Buenos Aires (UBA).

Primero el funcionario judicial toma declaraciones a los testigos, entre ellos los dirigentes del centro de estudiantes, y reúne más pruebas. Aunque en breve podría citar a las españolas a declarar como imputadas, junto a otros activistas que participaron de la orgía titulada “Miércoles de placer”.

A todos ellos podrían imputarles el delito de “exhibiciones obscenas“, que reprime a quien ejecute o hiciese ejecutar por otros actos de exhibiciones expuestas a ser vistas involuntariamente por terceros. En este caso concreto estudiantes, profesores y visitantes debían pasar obligatoriamente frente al show .

El fiscal Tereszko, que inició la investigación de oficio, ha establecido que “los hechos, que resultan de notorio conocimiento, podrían ser vistos como actos de impudicia del autor, más allá de que para otras personas sea aceptado como una demostración artística“.

Si las españolas fuesen declaradas culpables y se estableciera que actuaron contratadas y sin saber que había testigos involuntarios recibirían multas de entre 1.000 y 15.000 pesos (100 a 1.500 euros). Pero si se demuestra que actuaron por vocación podrían caerles hasta cuatro años de prisión.

Pulido y Urko, que se definen como “monstruas empoderadas que les gusta mostrar su sexualidad, monstruas deseables y deseantes”, viajaron a Argentina financiadas por la Consejería de Cultura de la Embajada de España para participar en la Bienal de Performances.

Mostraron su show en la Casa del Bicentenario, el Centro Cultural Paco Urondo y en la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA. También dieron conferencias junto al profesor universitario y activista queer español Paul Preciado, que nació mujer y se pasó al sexo masculino.

Reivindicaciones

Ellas reivindican el ‘posporno’ que, según dicen, busca sacar a la pornografía del ámbito heterosexual y exhibir cuerpos alejados de los estereotipos clásicos.

En la zona de ingreso a la facultad montaron el numerito desnudas y con atuendos sadomasoquistas. Urko protagonizó el papel activo y Pulido el pasivo, echada sobre la mesa de un chiringuito del trotskysta Partido Obrero. Como allí se estudia Comunicación Socialusaron un micrófono a modo de juguete sexual.

El decanato amenazó con “sancionar” a los responsables, que incluyen a profesores, investigadores y estudiantes del área de Comunicación, Géneros y Sexualidades, pero de momento no se sabe que ello haya ocurrido. Y el rectorado se lamentó, en un comunicado, por si con el numerito porno se hirió “alguna sensibilidad”.

La Policía impedirá carteles sobre gays, campesinos o el aborto en la gira del Papa por Paraguay

El papa Francisco lega, durante la actual gira por Ecuador

El papa Francisco lega, durante la actual gira por Ecuador. Robert Puglla EFE

Mientras miles de fieles de todo Paraguay iniciaron la cuenta regresiva para la llegada del Papa Francisco al país, una ola de indignación se ha generado en diferentes organizaciones socialesante la prohibición por parte del Ministerio del Interior de portar carteles o pancartas alusivas a ciertos temas, especialmente sentidos para la nación guaraní.

Bajo el título ‘Informaciones útiles a tener en cuenta durante la visita del Papa Francisco’, el Ministerio del Interior publicó una serie de recomendaciones, donde sobresale una lista de prohibiciones, que regirán desde el viernes 10 de julio hasta el domingo 12 de julio, lapso de tiempo en que se extiende la gira de Bergoglio por el país.

Dentro de los lugares comunes ante este tipo de eventos masivos se incluye la prohibición de “portar armas de cualquier tipo; de fuego, armas blancas y otros objetos corto punzante, que representen peligro, además de municiones y petardos. La distribución, comercialización y consumo de bebidas alcohólicas a todo el público general a lo largo del Itinerario. El uso de paraguas y/o sombrillas, no se permitirá la portación ni uso de punteros láser“, junto a varios etcéteras.

Pero lo que llama la atención y despertó la indignación de los representantes de organizaciones sociales de Paraguay es la siguiente imposición, citada en el punto 7 del articulado. “No se permitirá, la colocación de pasacalles y/o portar pancartas que obstaculice la visual, ni que contengan alusivos referentes a grupos de lucha social (a favor o en contra del aborto, matrimonio gay, campesinos sin tierra, etc.)”.

Precisamente, los colectivos de campesinos e indígenas se han movilizado en las últimas horas a partir de que no fueron incluidos en la agenda oficial de entrevistas con el Papa Francisco, y han llamado a la manifestación pacífica para lograr visibilidad en aquellos puntos donde recale la gira oficial. En este marco la Policía del país comunicó que requisará todos y cada uno de los carteles que versen sobre el matrimonio gay, los campesinos e indígenas o a favor del aborto.

Porno junto a las Torres de Serranos de Valencia

Escenas  SM hetero en Valencia.

Escenas pornográficas en Valencia.

Un hombre y una mujer protagonizaron varias escenas de pornografía junto a las Torres de Serranos delante de viandantes, algunos de ellos niños de corta edad, mientras una tercera persona grababa con una cámara de vídeo los contactos sexuales en plena calle.

Los hechos ocurrieron el pasado jueves por la tarde en las inmediaciones del monumento histórico después de que el hombre paseara a la mujer semidesnuda, con una cadena que rodeaba su cuello y la evidente complacencia de sentirse humillada, ante un grupo numeroso de personas que pasaban por el lugar y se detuvieron para contemplar la escena masoquista.

Algunos de los viandantes grabaron vídeos de la extraña pareja con sus teléfonos móviles y realizaron también fotografías, unas imágenes que se difundieron de forma masiva a través de los grupos de WhatsApp. En una de las fotos, el hombre aparece sentado en un banco de piedra con un cigarrillo en la boca, sin soltar la cadena, y la mujer se encuentra de rodillas a su lado en actitud sumisa.

Otra imagen grabada y difundida de la pareja podría acarrear consecuencias penales a los protagonistas de estas escenas de pornografía, ya que una niña de corta edad mira a escasos metros a la mujer semidesnuda mientras el hombre le introduce un juguete sexual en el ano. La penetración tuvo lugar a plena luz del día en la explanada de las Torres de Serranos.

Tras recibir una queja de un ciudadano, una patrulla de la Policía Local acudió al lugar, según informaron fuentes municipales, pero la pareja y el hombre que grababa con una cámara de vídeo ya se habían marchado.

Mercadeo rosa para la amnesia del movimiento

David Molina

020_img_3660

La influencia de las grandes redes empresariales de lesbianas, gais, trans y bisexuales (LGTB) en la organización de los “Orgullos” tiene un carácter diverso en la geografía estatal. Mientras que en las cuatro capitales vascas las manifestaciones del 28-J volverán a excluir la publicidad empresarial, el “Pride” barcelonés, organizado por una asociación empresarial con patrocinio de las multinacionales Coca-Cola, Estrella Damm, Brugal y Hard-Rock Café ha vuelto a ser convocado el mismo día y a la misma hora que la histórica manifestación, que desde 1978, se lleva celebrando con carácter reivindicativo.

La situación en Madrid, que vuelve a trasladar la fecha de celebración al primer sábado de julio (sueldos de la gente recién cobrados), se sitúa entre las inercias de apropiación del espacio público por parte de AEGAL, asociación de empresarios LGTB coorganizadora del Orgullo, y la recién estrenada entrada en el Ayuntamiento de Madrid de una candidatura de unidad popular.

El caso más paradigmático es una propuesta de desfile de belleza canina, con la que esta entidad empresarial busca mantener su presencia en la plaza del madrileño barrio de Chueca, ya que la organización de un “acto cultural” es una condición imprescindible según la ordenanza municipal para poder autorizar la presencia de barras auxiliares.

Establecimientos, comercios y lugares de consumo orientados a un público homosexual mayoritariamente masculino con un nivel adquisitivo medio-alto. Ésta es la punta de lanza del mercado rosa que convierte a potenciales activistas en clientes. Un mercado que produce amnesia movimentista, donde las representaciones del mundo ya no se discuten, si no que se consumen. ¿Alguien podría imaginarse una manifestación del 1º de mayo llena de publicidad de grandes empresas?

Las consecuencias del capitalismo no son novedosas, pero hay que recordarlas: mayor desigualdad, discriminación social, racial y de género, exclusión social y privatización de espacios públicos.

 

Contra el heterosexismo global y sus aberraciones

015_mg_3314-copy

Como activista del movimiento queer-feminista he asistido en las tres últimas décadas a transformaciones sociales, de más o menos calado, para sujetos LGTTBI, y he sido testigo directa de la redefinición de sus estrategias y objetivos políticos. También he compartido cierto desá­nimo al observar la irrupción de un amplio proceso de desmovilización e institucionalización de un movimiento que, en la medida que se ampliaba en número, articulaba su identidad y reconocimiento en los ritos, hábitos y relaciones consumistas propios del capitalismo global.

En esta deriva, considero que el movimiento LGTTBI, lejos de redefinir la agenda política española, está integrando su existencia en la homologación de derechos dentro del actual marco heteropatriarcal, que define la familia, la propiedad, el derecho al propio cuerpo y la política sexual como norma y matriz.

Ello estaría impidiendo desplazamientos hacia otro modelo de existencia o producción social que en algún momento abanderamos y creíamos posible en el Estado español.

En esta coyuntura, la izquierda de base marxista no pocas veces ha tratado al movimiento LGTTBI como una extravagancia o muestra de particularidades injustificadas que han fragmentado su estrategia.

Así, mientras el capitalismo nos integra en su deseo para incrementar plusvalías, la izquierda nos empuja a renunciar a una agenda política propia que pueda alterar la vida en sus prácticas, significados y construcciones, en campos como las leyes, la medicina, la ciencia y sus tecnologías, las políticas de inmigración y naturalización del género, las políticas sociales y de empleo, o el reconocimiento de otros modelos familiares. Lejos de ello, los sujetos sociales LGTTBI se institucionalizan como aberrantes, anómalos o demasiado particulares.

El momento político actual debería armonizar un proceso de integración y sinergias que incluya las luchas por la sexualidad en toda su complejidad y potencialidad a la hora de ampliar la libertad y la felicidad de la ciudadanía.

La manifestación del Orgullo pide en Madrid “leyes por la igualdad real”

Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y Alberto Garzón coinciden en la  cabecera de la marcha al inicio de la manifestación 

tres participantes del tradicional desfile del Orgullo Gay en las calles de Madrid

Tres participantes del tradicional desfile del Orgullo Gay en las calles de Madrid (EFE)

MADRID. La marcha del Orgullo ha recorrido esta tarde las calles de Madrid  bajo el lema “leyes por la igualdad real, ya!”, para reivindicar la  aplicación de medidas legislativas concretas que superen “las  barreras de discriminación que aún existen en España”.

La manifestación ha recorrido el Paseo del Prado y el Paseo de  Recoletos hasta llegar a la Plaza de Colón, donde se encontraba la  alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, y se ha leído un manifiesto. En  la cabecera han coincidido en su inicio el secretario general del  PSOE, Pedro Sánchez, el secretario general de Podemos, Pablo  Iglesias, y el candidato de IU a la Presidencia del Gobierno, Alberto  Garzón.

Junto a ellos también se encontraban Angel Gabilondo (PSOE), Carla  Antonelli (PSOE), Beatriz Gimeno (Podemos), Ignacio Aguado  (Ciudadanos), Antonio Miguel Carmona (PSOE), Begoña Villacís  (Ciudadanos) o Jorge García Castaño (Ahora Madrid).

También encabezaban la marcha el secretario general CC.OO.,  Ignacio Fernández Toxo, el secretario general de UGT, Cándido Méndez,  y los presidentes de COGAM (Colectivo de Lesbianas, Gays,  Transexuales y Bisexuales de Madrid) y FELGTB (Federación Estatal de  Lesbianas, Gays,  Transexuales y Bisexuales), Jesús Grande y Jesús  Generelo, respectivamente.

La manifestación ha sido convocada por COGAM y FELGTB, para  demandar que se redacte una Ley Integral de Transexualidad y una Ley  “antiLGTBfobia” tanto de ámbito estatal como autonómico.

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha señalado este  sábado como “un día de orgullo” para millones de españoles y  españolas que comparten la misma causa que el colectivo LGTB.  Asimismo, ha querido dar las gracias a este colectivo porque “hoy  España es un país mejor gracias a la lucha de los gais lesbianas,  transexuales y bisexuales, por hacer de él un país mucho más libre y  mucho más justo”.

El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha declarado que el 4 de  julio “es un día maravilloso” del que hay que estar “orgullosos”, ya  que “es un día para que continúen las reivindicaciones”.

A pesar de ello, ha señalado que “todavía queda mucho trabajo por  hacer”, ya que falta un ley integral de transexualidad y para ello  “tienen que trabajar todas las fuerzas políticas unidas”, con el fin  de “poder seguir presumiendo de tener un país que es un referente en  la igualdad de derecho a nivel mundial”.

Por su parte, el candidato de IU a la presidencia del Gobierno,  Alberto Garzón, ha señalado que además de ser un día de celebración  para divertirse, sobre todo es para “reclamar que no hay democracia,  si no hay democracia e igualdad para todas las personas con  independencia de su orientación sexual”.

Durante la manifestación se han podido ver pancartas con los  colores azul y blanco de la bandera de Grecia y mensajes de apoyo al  pueblo heleno que mañana está convocado a un referéndum.

El Orgullo Gay salió a la calle en Madrid

El Orgullo Gay salió a la calle en Madrid.

El Orgullo Gay salió a la calle en Madrid.

‘SELFIS’ Y REIVINDICACIÓN. Los turistas y visitantes que ayer recorrían el centro de Madrid asistieron a la Marcha del Orgullo Gay como si se tratara de un espectáculo y se hicieron numerosas fotos con los participantes. La manifestación, que este año se convocó bajo el lema Leyes por la igualdad real ya, repitió el recorrido de la última edición, saliendo de Atocha para llegar a Colón, porque se trata del único recorrido “seguro, inclusivo y sostenible” en este momento, en palabras del presidente de COGAM, Jesús Grande. Foto: Efe

La próxima guerra cultural

Niños del Coro Archidiocesano de Boston en Cambridge, Massachusetts, el 28 de febrero de 2013

Niños del Coro Archidiocesano de Boston en Cambridge, Massachusetts, el 28 de febrero de 2013. / JESSICA RINALDI (REUTERS)

El cristianismo está en declive en Estados Unidos: el número de estadounidenses que se declaran cristianos y van a la iglesia está cayendo y los votantes evangélicos constituyen una cuota cada vez más pequeña del electorado. Los miembros de la generación del milenio se alejan de las instituciones religiosas en tropel.

Los reveses más graves que se ha llevado el cristianismo se encuentran en el reino de los valores: la cultura estadounidense se está separando de las posturas cristianas ortodoxas en materia de homosexualidad, sexo antes del matrimonio, métodos anticonceptivos, hijos nacidos fuera del matrimonio y divorcio, entre toda una gama de cuestiones sociales. Cada vez más cristianos se sienten ajenos a la cultura mayoritaria, y temen que pronto empezarán a ser tratados como parias sociales, el equivalente moral de los segregacionistas, por su fidelidad a las enseñanzas bíblicas sobre el matrimonio homosexual. Temen que sus universidades pierdan credibilidad, que sus instituciones religiosas pierdan sus exenciones fiscales, que su libertad religiosa sufra un acoso aún mayor.

La decisión del Tribunal Supremo sobre el matrimonio homosexualse ha sentido como una especie de puñetazo culminante en medio de este clima de asedio. Rod Dreher, autor del excepcional libro How Dante Can Save Your Life [Cómo Dante puede salvarte la vida],escribió un ensayo en Time en el que afirmaba que para los cristianos era hora de retirarse estratégicamente a sus comunidades, donde “la llama de la fe seguiría brillando merced a la oscuridad cultural en derredor”.

Y seguía: “Tenemos que aceptar que vivimos en un país culturalmente poscristiano. Las reglas fundamentales de las que han dependido los cristianos durante mucho tiempo ya no existen”.

La mayoría de los analistas cristianos han optado por otra estrategia: seguir luchando. La semana pasada, varios colaboradores de la revista First Things, en un especial sobre la decisión del tribunal en elcaso Obergefell, aseguraban que la resolución era como el caso Roe contra Wade —que abordó el tema del aborto— del matrimonio: hay que oponerse a ella una y otra vez. Robert P. George, probablemente el teórico social conservador más brillante del país, aseguraba que de la misma manera que Lincoln rechazó constantemente la decisión delcaso Dred Scott —sobre la esclavitud—, “nosotros tenemos que rechazar y resistirnos a un acto atroz de usurpación judicial”.

Estos conservadores están enfrascados en una guerra cultural que lleva décadas librándose sobre los temas surgidos de la revolución sexual, y la mayoría de los analistas conservadores que he leído en los últimos días están decididos a seguir librando esa guerra.

Yo me sitúo a la izquierda de la gente que he descrito en casi todas estas cuestiones sociales. Sin embargo, confío en que me vean como un amigo y admirador. Y desde esa posición privilegiada, yo me limitaría a pedirles que se planteasen un cambio de rumbo.

Que se planteasen dejar de lado, en el clima actual, la guerra cultural que orbita alrededor de la revolución sexual. Dejar de lado una guerra cultural que ha propiciado que buena parte de tres generaciones no sienta ningún tipo de apego por la religión o las creencias. Dejar de lado un esfuerzo que ha supuesto un desastre en lo que concierne a la comunicación, y ha reducido una fe rica, compleja y hermosa a una obsesión pública por el sexo. Dejar de lado una guerra cultural que, al menos a corto plazo, están destinados a perder.

Que se planteasen una guerra cultural diferente, una igual de importante para su fe y con un ejemplo persuasivo mucho más poderoso.

Vivimos en una sociedad asediada por un cambio informe y radical, donde los vínculos, las estructuras sociales y los compromisos se tensan y se rompen. Millones de niños viven en unas condiciones inestables y abrumadoras. Muchas comunidades han sufrido una pérdida de capital social. Muchos jóvenes crecen en un contexto sexual y social que se ha vuelto bárbaro porque no hay normas comunes. Muchos adultos anhelan unas vidas regidas por el bien y la relevancia, pero carecen del vocabulario espiritual con el que reflexionar.

Los conservadores sociales podrían ser las personas que ayudasen a revigorizar, a unir de nuevo los tendones de la sociedad. Ellos ya se adhieren a una fe construida sobre el amor desinteresado, y pueden servir de ejemplo de compromiso. Poseen el vocabulario para distinguir el bien del mal, lo que dignifica y lo que envilece. Ellos ya pagan el diezmo a los pobres y ofrecen consuelo a los abandonados, aunque lo hagan en privado.

El rasgo definitorio del conservadurismo social podría ser el siguiente: ser las personas que van a zonas desamparadas y crean organizaciones para ayudar a formar familias estables. Ser las personas que construyen instituciones comunitarias en lugares donde escasean. Ser las personas que pueden ayudarnos a comprender que el desempleo y la pobreza espiritual se alimentan mutuamente. Ser las personas que nos hablan de los elementos trascendentes de la vida cotidiana.

Esa guerra cultural tiene más de Albert Schweitzer y Dorothy Day que de Jerry Falwell y Franklin Graham; más de Ejército de Salvación que de Mayoría Moral. Está haciendo en público, con gran determinación, lo que los conservadores sociales ya hacen en privado.

No espero que los conservadores sociales cambien su postura sobre el sexo, y es evidente que las disputas sobre la definición del matrimonio tienen como objetivo reparar la sociedad. Sin embargo, la revolución sexual no tocará a su fin a corto plazo. La lucha más práctica consiste en reparar una sociedad fragmentada, despiadada e inhóspita. Los conservadores sociales están bien equipados para reparar ese tejido, para ser mensajeros de amor, dignidad, compromiso, comunión y gracia.

 

Un arcoíris sobre Madrid

Un caballero, elegante, fornido, entra en el backstage de la primera carroza de la marcha, en pleno centro de Madrid, un rato antes de que comience el recorrido. Es cuestión de dos minutos: se volatiliza el traje y aparece una malla ceñida silueteando las nalgas. El ojo, de súbito, contorneado de negro. Y las pestañas largas inician su cortejo con el mundo como dos pavos reales poco discretos. Entonces el zapato ya es tacón estratosférico aunque las piernas continúen velludas. Es cuestión de dos minutos, o tal vez de ninguno, parecer uno u otra mientras se es hondamente lo mismo. Gira una cabeza sin peluca, sube las escaleras del furgón y se exhibe a la ciudad, híbrido, hermoso y sin complejos.

La manifestación del Orgullo de este año, bajo el lema «Leyes por la igualdad real, ¡ya!», trató el sábado por la tarde de subrayar el protagonismo del colectivo transexual, más maltratado que otros no sólo en el ámbito social, sino también en el jurídico. De Atocha a Colón, el multitudinario desfile trascendió la juerga y dejó una estela de exigencias: entre ellas, una Ley Integral de Transexualidad. «Estamos agradecidos a la Ley de Identidad de Género, pero falta protección, por ejemplo, para los menores y la crueldad de los institutos», explica Santiago Rivero, miembro de COGAM [Colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de Madrid]. «Por no hablar de los adultos, que presentan una tasa de paro altísima. También a los inmigrantes transexuales, perseguidos en sus países de origen, se les niega aquí asilo político». Rivero asegura que la incomprensión de la causa ya se evidencia en el nombre del equipo de apoyo: «La UTIG [Unidad de Trastornos de Identidad de Género] sigue considerándolos enfermos», asevera, recordando que la «despatologización» se les hace urgente.

Otra de las batallas prorrogadas de la marcha fue la aprobación estatal de una Ley antiLGTBfobia, «que nos cuide de los delitos de odio no sólo físicos, sino, además, del acoso o insulto por redes sociales», sentencia Rivero.

Entre las banderas arcoíris anudadas al cuello y las pecheras desnudas supurando purpurina -al estilo paladín de la libertad sexual- cojea Manolo, sobrio alicantino de 61 años, que vuelve al Orgullo después de ocho, pero «no tanto por la fiesta como por la reivindicación». Asegura que, como «chico de pueblo» que es, ha sufrido persecuciones y agresiones -«¡pues claro!»-, pero, sobre todo, mucha «hipocresía»: «Delante de la gente me han dicho ‘Quita, maricón’, y detrás ‘Ven, guapo’», cuenta, con dolor. Pero se repone al instante: «Estoy curado de espanto. Se creen que me han utilizado, pero los he utilizado yo a ellos». Sonríe y sigue paseando su pierna herida y las memorias de sus viejas fiestas de pueblo.

Desde una carroza que luce un «Orgullosos de formar familias» -publicitada por una clínica de reproducción asistida-, saludan niños vivarachos. A pie de manifestación, Aina, de 33 años, asidua a las fiestas desde hace siete, las celebra por primera vez con su hija. «Nos quedamos embarazadas al tercer intento», sonríe, señalando a su pareja. Una cabeza diminuta nos observa desde el carrito. «Qué te voy a decir: mírala, es lo mejor que me ha pasado en la vida». Y parece que nunca existió el junio del 77 en Barcelona; no, no hubo jamás una protesta primeriza por el sexo libre contra la que cargaron los grises. Chueca jamás fue un gueto. Nunca rabia, cuándo miedo. Aina abraza a su esposa y el mundo gira, inmaculado, en el sentido correcto.

La reivindicación política acabó dejando paso a la estética. Sergio, de 23 años, viene al Orgullo con un par de amigos de Toledo y rúbrica de chulazos: pequeña tropa de cristianos ronaldos bramando -como en permanente celebración de un gol- y reclamando el culto ajeno a su cuerpo. «Nosotros no somos gays ni nada, eh, eso apúntalo», insiste. «Venimos aquí a lucirnos. Estamos metidos en el mundo del cuerpo y buscamos llamar la atención».

Cristina nació en Ecuador y se pinta la raya del ojo muy larga, casi aledaña a las raíces del pelo. Aún no ha pasado por la operación genital que edificará la vagina con la que fantasea, pero «¿cuántos culos tan perfectos has visto, reina?» Lleva a sus espaldas 15 Orgullos y luce «excesiva, ya lo sé, pero una vez al año no hace daño». «No me digas que no me vas a sacar foto», lamenta. Y más música, y más laca, y más pistola de agua, y más carcajada ardiente desembocando en Colón. Fue un constante abrir de cremalleras, un «ésta es la verdadera piel, la que hay detrás, ¿o es que es la misma?» Cuestión de dos minutos de probador secreto. O tal vez de ninguno.

@lorenagm7