Los Gobiernos cierran las puertas a la adopción para homosexuales y solteros

Captura de pantalla del mapa de ILGA sobre adopciones por parte de parejas homosexuales.

Captura de pantalla del mapa de ILGA sobre adopciones por parte de parejas homosexuales.

Las opciones para ser padres se les agotan a los gais y las lesbianas españolas, que ven con impotencia cómo los Gobiernos de algunos países —por presiones religiosas o políticas— deciden cerrarles las puertas para adoptar. Tal situación afecta más a los varones, ya que sus posibilidades de paternidad se limitan a la gestación subrogada (cuesta casi 100.000 euros en EE UU) o al acogimiento familiar, escaso en España.

La tendencia a obstaculizar la adopción afecta también, de rebote, a los solteros heterosexuales, y empezó a agudizarse cuando, en 2005, se aprobó en España el matrimonio homosexual, según Javier Álvarez-Ossorio, de la Coordinadora para la Adopción y Acogimiento (CORA).

Rusia ha sido el último en restringir las adopciones. El mes pasado prohibió esta opción a los matrimonios homosexuales y, para evitar conceder niños a gais o lesbianas solos, también lo vetó a los solteros de países donde las bodas gais son legales. Para Jesús Santos, directivo de la Asociación de Gais y Lesbianas con Hijos (Galehi), el problema con la decisión rusa es su efecto contagio en el Este europeo. “Ya Moldavia y Kazajistán han manifestado su intención de copiar esa legislación”, afirma.

En Reino Unido, Países Bajos, Escandinavia, Alemania, España y Portugal todavía se puede adoptar sin problema, según Santos, mientras que en Italia “es imposible” y en Francia “hay cierto bloqueo”. De Asia, destacó el caso de China, donde no permiten la adopción por parte de los matrimonios homosexuales, pero sí de los solteros, aunque estos deben jurar ante un notario que no son gais o lesbianas. En India, las familias monoparentales pueden adoptar, pero el proceso tarda años y a veces es anulado por cambios en las leyes locales.

En América, las opciones de los homosexuales se reducen a Canadá, EE UU (algunos Estados), México (solo el Distrito Federal), Brasil, Argentina y Uruguay. Los demás países lo prohíben tajantemente o el proceso es engorroso. En el continente africano, únicamente Sudáfrica permite las adopciones por parejas gais, mientras que en Nigeria y Senegal solo los solteros lo pueden hacer. En el resto de países “es imposible” pensar en adoptar, según Santos, ya que sus leyes criminalizan la homosexualidad.

Juicio por lesbianismo en el siglo XVII

'Auto de fe de la Inquisición', óleo de Francisco de Goya de la Academia de Bellas Artes.

‘Auto de fe de la Inquisición’, óleo de Francisco de Goya de la Academia de Bellas Artes.

Un drama digno de un filme o de una novela repleta de crueldad, un amor pasional, verdadero y la larga sombra de la Inquisición. Un título que llama a la ficción, pero que está crudamente anclado en la historia. Las Cañitas, libro del historiador estadounidense Federico Garza Carvajal (Laredo, Texas, 1959), recoge un largo proceso por lesbianismo a principios del siglo XVII entre Valladolid y Salamanca; el peregrinaje y calvario de dos mujeres que se amaron contra todo lo imaginable, que lucharon por estar juntas y se defendieron como pudieron en una época oscura y hostil.

En junio de 1603, Inés de Santa Cruz, una mujer que fue “monja-beata-priora”, y su compañera Catalina Ledesma, resultaron detenidas y juzgadas en Salamanca por “bujarronas” [todos los entrecomillados proceden de la rigurosa transcripción de documentos históricos]. Según el frágil y amarillento legajo de hace más de 400 años, “trataba la una a la otra con un artificio de caña en forma de natura de hombre”. A su manera, Inés y Catalina se inventaron (y fabricaron) una especie de consolador, objeto tan antiguo que la arqueología data algunos con más de 25.000 años. En los tiempos de Las Cañitas, eran muy populares y de diversa factura. La descripción de las relaciones íntimas de las dos mujeres llega a detalles como estos al referirse a Inés: “Con sus manos la abría la natura a la dicha Catalina hasta que derramaba las simientes de su cuerpo en la natura de la otra por lo cual las llamaban Las Cañitas y esto es público y notorio entre las personas que las conocen”. El escribiente no se cortó en detalles: “Había mucho escándalo y murmuraciones en el barrio”. Aquel había sido el punto más sórdido y doloroso de la historia, pero en realidad, la lucha de Inés y Catalina venía de lejos. Como señala Garza Carvajal, “a efectos judiciales no era la primera vez que Catalina e Inés estuvieron detenidas por tener relaciones lésbicas”. Y hay un proceso anterior en Valladolid en 1601 a las mismas mujeres que también ha sido sacado ahora a la luz, como dos siniestros capítulos del mismo drama.

Facsímil de la copia del proceso a Las Cañitas archivo general de simancas

Facsímil de la copia del proceso a Las Cañitas archivo general de simancas

Federico Garza Carvajal (que procede de una familia de judíos sefardíes) encontró en Simancas un tesoro inexplorado: “Hacía tiempo había empezado a investigar sobre la sodomía masculina a partir de que me doctoré en Ámsterdam en 2000. Tardé dos años en la lectura y transcripción del proceso, y primero escribí mi libro en inglés, e hice después un segundo libro en español que se edita primero. A fines del verano saldrá la edición inglesa”. En Simancas está en su caldo de cultivo ideal: “En los archivos españoles hay mucho que buscar, y aunque vivo a caballo entre París y Valladolid, no quiero alejarme de Simancas. También he investigado en archivos de Sevilla, Burgos, Madrid y Toledo. Mi vida está en los archivos y doy gracias a Isabel Aguirre [jefa de la Sala del Lector del Archivo de Simancas], que me ha ayudado mucho. Recuerdo que en 1992 el historiador español Rafael Carranco, que actualmente es catedrático en Montpellier, me orientó hacia Simancas”. Hasta en la Capilla de las Reliquias del Archivo de Valladolid hurgó el investigador en busca de faltantes a su potente relato.

No es posible asegurar que este documento de 142 páginas sea único, pero lo cierto es que, hasta hoy, es la única pieza documental que ha salido a la luz de la historiografía moderna. Sin embargo, como reconoce el propio Garza Carvajal, sí hay un relativamente abundante material en archivos tanto españoles como del resto de Europa de procesos por sodomía masculina: “Creo que es un material de archivo único. Algunos estudiosos han escrito sobre lesbianismo en el siglo XVII, pero fundamentalmente a base de materiales literarios”.

La cuidada edición, que se puede calificar de paleográfica, recoge los tres procesos —dos en Valladolid y uno en Salamanca— que se incoaron contra Inés y Catalina entre los años 1603 y 1606. Desde entonces, el mote de Las Cañitas rozó el mito y se sumergió en la oscuridad. Garza Carvajal rebusca en las biografías de las dos mujeres y las sitúa en el tiempo exacto, las tormentosas circunstancias y vicisitudes que culminaron, después de múltiples apelaciones, con la drástica separación de las dos amantes, que insistieron en reencontrarse. Catalina Ledesma e Inés Santa Cruz fueron azotadas y condenadas al destierro. Años más tarde llegó un perdón real.

Entre las dos mujeres, todos los contrastes de personajes novelescos: una de solvente cuna, la otra de baja extracción. Inés de Santa Cruz, relata Garza Carvajal, tenía incluso influencias familiares en la Real Cancillería de Valladolid, mientras Catalina Ledesma era analfabeta y ejercía como sirvienta, además de estar casada.

El libro, de próxima aparición, es un objeto artesanal muy cuidado con mucho material facsimilar, las tapas en piel grabada y los troqueles que evocan a los antiguos legajos, con un diseño ideado por Daniel Gómez Bonet.

El obispo de Alcalá liga la ideología en la escuela con la homosexualidad

Reig Plà iguala la batalla contra el aborto con la que se libró por la abolición de la esclavitud

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El obispo de Alcalá en una imagen de mayo pasado

Juan Antonio Reig Plà, obispo de Alcalá de Henares, ha vuelto a poner sobre la mesa su controvertida visión acerca de la homosexualidad. En la presentación del Encuentro internacional por la vida, que tendrá lugar el fin de semana en la Universidad CEU San Pablo, el prelado ha asegurado que la introducción de ciertas ideologías en el ámbito escolar provoca que los niños se planteen su condición homosexual.

Reig Plà ha agradecido que le preguntasen acerca de las polémicas declaraciones que hizo hace un año sobre en una homilía retransmitida por TVE y en la que arremetió contra los gais y la prostitución. “En la vida oirá de mi boca hablar de homosexuales, es una palabra que no empleo”, ha asegurado Reig. Esa palabra, ha pretendido puntualizar, significa “igualdad” —homo— y “diferente” —sexual—, y que “unir en una misma palabra igualdad y diferencia es una batalla política, no cultural”.

Sobre las palabras vertidas aquel 7 de abril, el prelado ha asegurado que “hablaba de niños que, llevados por una ideología, pueden dudar de su condición e identidad sexual y que a veces puede llevar a que uno pruebe si es de una manera o de otra”. El religioso ha añadido que “probando”, los chicos pueden “llegar incluso a prostituirse”, porque “la prostitución existe” y los niños “llegan a ser utilizados por otros”. Reig ha reiterado que los locales de prostitución existen. “No hay más que salir a la noche madrileña”, ha dicho.

No obstante, ha querido puntualizar que, con lo que dijo entonces, su intención era “ponerlo a la misericordia de Dios, nunca para denunciar” a nadie y que nunca se refirió a homosexuales. “Sí hablé de niños, de empresarios, de personas que, para ganar estado en su empleo, también entran en relaciones sexuales con sus jefes”, ha subrayado. “Querer empecinarse en que yo dije lo que no dije y negar la realidad de los hechos conocidos personalmente, entiendo que es un empecinamiento o es una batalla política para desautorizar la voz de un obispo”.

También se ha referido al aborto, del que ha dicho que el día en que se deroguen las leyes que lo regulan será un día “un grito de libertad”, como cuando se abolió la esclavitud. “Que un día, ojalá sea pronto, podamos decir que todas las leyes que en España permiten la muerte de seres inocentes en el seno de sus madres o todas aquellas que puedan por acción u omisión promover la muerte de ancianos o enfermos, al final, van a ser abolidas en España”.

Reig ya ha protagonizado encendidos debates debido a sus declaraciones. En 2011 dio permiso para que en la página web de su diócesis fuera colgada una guía con pautas para los homosexuales que buscasen “un cambio”. En 2010, además, aseguró que las parejas de hecho estaban más inclinadas hacia la violencia de género que los matrimonios católicos y un año antes, ofició una misa para los caídos en Paracuellos en la que se lució una bandera preconstitucional.

“Vendetta” tras destapar una mafia

ONG y partidos arropan a una sindicalista imputada y “perseguida” por la policía tras descubrir una trama de explotación de extranjeros que salpica a “poderosos”

Laura Bugalho, ayer en los juzgados junto a la concentración convocada para reclamar el archivo del caso

Laura Bugalho, ayer en los juzgados junto a la concentración convocada para reclamar el archivo del caso. ANDRES FRAGA

Laura Bugalho lleva 21 años asistiendo a inmigrantes indefensos y expuestos a caer en manos de mafias y empresarios sin escrúpulos. El 26 de mayo de 2009 agentes de la policía nacional la abordaron en su puesto de trabajo en la CIG y se la llevaron detenida. La acusaban de falsear documentación para regularizar a los extranjeros a los que ayudaba. El caso fue archivado pero la fiscalía logró que la juez lo reabriera. Ayer, en el juzgado de Santiago al que acudió a declarar, ni el ministerio público ni la policía que la acusa se presentaron, relata ella. A las puertas, representantes de ONG, colectivos culturales, sindicatos y partidos clamaban contra lo que Bugalho considera “una vendetta”. Y es que justo antes de ser arrestada, esta mujer se había convertido en una persona incómoda para policías y empresarios presuntamente corruptos.

Las denuncias presentadas por Bugalho desde diciembre de 2007 hicieron estallar en febrero de 2009 la Operación Peregrino, que investiga una supuesta trama de explotación laboral de inmigrantes sin papeles en la que están imputados al menos empresarios y un sindicalista de CCOO y que salpica a mandos y funcionarios de Extranjería, a “gente con mucho poder”. Bugalho acompañó a las 57 víctimas a poner la denuncia, a la que luego se adhirieron otros 18 extranjeros. Según sus testimonios, la trama les cobraba 10.000 euros por conseguirles un visado y un trabajo con bajos salarios y alojamientos infrahumanos. “Uno de ellos trabajaba en una granja y dormía en las cortes de las vacas”, recuerda Bugalho sobre un caso que sigue en fase de instrucción judicial.

La sindicalista está convencida de que la causa contra ella es una venganza de los implicados en la trama. Siete días antes de ser detenida, con el caso Peregrino ya al descubierto, Bugalho, en compañía de unos vecinos, denunció la presencia de unos extraños en la casa de sus padres, un asalto nunca esclarecido. “En la policía de A Coruña ya me advirtieron que venían a por mí”, afirma. Esta activista, que en 2011 recibió el Premio Nicolás Salmerón de Derechos Humanos patrocinado por el Ministerio de Cultura, se siente “perseguida” por la policía nacional y está harta de que los agentes la paren por la calle para pedirle la documentación. Aún recuerda las palabras que le disparó un mando de Extranjería cuando fue arrestada: “Laura, por fin te cogí”.

Alternativa Galega de Esquerda (AGE) sostiene que Bugalho se enfrenta a “una acusación injusta por ayudar a gente sin papeles a obtener padrones, analíticas médicas o avales” y pide el archivo del caso. El Foro Galego da Inmigración tacha de “lamentable” la actuación judicial contra la sindicalista y rechaza la “fuerte persecución policial” que sufren los inmigrantes. Bugalho ha rechazado una rebaja de pena a cambio de declararse culpable. Prefiere ir a juicio: “Soy inocente. No voy a confesar lo que no he hecho”.

Mi vida como ‘tongqi’

Ni los gais ni las mujeres que permanecen solteras son bien vistos en China. Por ello, millones de ellos forman matrimonios de ficción

Celebración de bodas en Shenzen, en la provincia china de Guangdong

Celebración de bodas en Shenzen, en la provincia china de Guangdong. / GETTY

Xiao Qiong se casó hace tres años con el amor de su vida, pero nunca se ha acostado con él. Ni siquiera se han besado. Su marido es homosexual y ella lo sabía desde el principio. Pero, tradicional hasta la médula como es, educada para sobresalir en la escuela, convertirse en una esposa abnegada y no alzar la voz en casa jamás, creyó que eso de ser gay era una moda y que ya se le pasaría. (…) Se define como una tongqi —término de argot que se forma a partir de tongzhi (literalmente, camarada, pero también se emplea para identificar a un hombre homosexual), y qizi (esposa)—, aunque nunca pronuncia esta palabra en público. No es un término ofensivo, pero le resulta humillante que la gente lo sepa porque nada en la vida le importaba tanto como casarse. Desde pequeña soñaba con el día de su boda y tenía planeada la ceremonia al detalle: sería junto al mar, no con el típico qipao o vestido tradicional rojo de novia, sino con un vestido de cola blanco, como las princesas y “las modelos de la Vogue”. Se descalzaría y bailaría sobre la arena con su marido mientras al fondo se ponía el sol. Ese era su plan. Desde pequeña se había empleado a fondo para ser un día la chica descalza de la playa, con el velo al viento. Al final todo le salió al revés.

Es difícil determinar con exactitud cuántas tongqi hay en China. Se cree que unos 16 millones de mujeres están casadas con homosexuales, pero podrían ser muchas más. Muchos homosexuales llevan una doble vida porque el coste de salir del armario es demasiado alto. La tolerancia que se practicaba en la antigüedad contrasta con el conservadurismo del último medio siglo.

Durante las dinastías Song, Ming y Qing, como en la Grecia antigua, el amor entre hombres era común, pero siempre se revestía de metáforas y ambigüedad. Algunos poemas hablan también de relaciones íntimas entre mujeres a las que separaban luego para que se casaran. La primera ley homófoba entró en vigor en 1740, durante la dinastía Qing, aunque los gais no fueron perseguidos sistemáticamente hasta 1949, con el nacimiento de la República Popular. Para el maoísmo, los gais eran contrarrevolucionarios, habían abrazado una perversión capitalista y, por tanto, había que eliminarlos. En el mejor de los casos los obligaban a casarse con una mujer y a tener hijos. En el peor, los castraban, torturaban o condenaban a trabajos forzados durante décadas. Los parques, las saunas y los retretes públicos se convirtieron en lugares de encuentros clandestinos entre hombres.

Ser gay siguió siendo delito hasta 1997 y solo al cabo de otros cuatro años dejó de describirse como una enfermedad mental. Hoy los homosexuales siguen sin poder donar sangre porque se les considera un grupo peligroso. Existen bares, asociaciones de apoyo y alguna revista gay, pero es un circuito muy limitado. Para la sociedad china, profundamente confuciana, casarse y procrear es fundamental. En el ámbito rural, los homosexuales que se niegan a contraer matrimonio para guardar las apariencias se exponen a un calvario. La sexóloga He Xiaopei, del colectivo gay Pink Space, me contó consternada que no sabía cómo ayudar a un campesino de 35 años de Sichuan, a tres mil kilómetros al suroeste de Pekín. El hombre vivía en una aldea remota y llevaba días llamándola: sus vecinos se habían enterado de que era homosexual y no había salido de su casa en varios meses por miedo a que lo lincharan.

Sincerarse es muy complicado. Muy poca gente se aventura a contarlo en casa. Cuando se acerca el Año Nuevo lunar, fecha en la que se reúnen las familias, empieza a aumentar la presión para los solteros en general, pero sobre todo para los homosexuales. Son conscientes de que en algún momento de la cena un familiar les preguntará por qué no tienen pareja y a qué esperan para encontrarla. Desde hace unos años, muchos gais y lesbianas se ponen en contacto a través de foros especiales de Internet y pactan falsos noviazgos. Van primero a casa de uno y después del otro para calmar a las familias respectivas, luego se vuelve cada uno a su hogar, y tan amigos. Al cabo de unas semanas anuncian que han roto o bien se casan y viven separados, pero mantienen las apariencias en las fiestas de guardar. (…)

Casarse con Xu Bing significaba para ella una mezcla de muchas cosas: sentirse útil al ayudar a un amigo con problemas, abandonar el nido familiar, dejar de verse como una perdedora social y tener con quien alquilar, por fin, una barca de remos en el parque. Pero, sobre todo, suponía una victoria histórica después de tanto tiempo, un final feliz en su novela rosa particular.

Las primeras discrepancias surgieron cuando empezaron a organizar la boda. Xiao Qiong no acababa de quitarse de la cabeza la playa, el velo, los invitados riendo y las luces indirectas. Xu Bing quería firmar un papel. Había conocido a un chico que le gustaba y lo que más le apetecía era brindar con él por su libertad. (…)

Fue una mañana de invierno. Después de firmar el certificado de matrimonio, comieron en un hotel, sin más pompa que la de cualquier cumpleaños. Los padres de ella y los padres de él, ni un invitado más. El novio llevó a cabo el ritual de servirle el té a sus suegros. Mientras llenaba los vasos, exclamó: “Padre, quédese tranquilo. Voy a cuidar de Xiao Qiong”. A la novia se le revolvió el estómago pero no dijo nada.

Después de la cena, acompañaron a los mayores a sus coches. Cuando los vieron alejarse, Xiao Qiong y Xu Bing también se dijeron adiós. Ella se fue a su piso y pasó su noche de bodas viendo la televisión y comiendo cacahuetes. Él se marchó al apartamento de su novio, donde se instaló desde el primer día. (…)

A Xiao Qiong le gusta que quedemos para pasear. Cuando empieza a andar no para: pueden pasar horas antes de que decida sentarse. Dice que así se relaja y que le viene bien para dormir. Lleva meses tomando infusiones de hierbas y raíces que su médico le prepara para conciliar el sueño. (…) “Creo que estoy angustiada desde la boda”, dice. “No tuve ni anillo, ni luna de miel, ni fiesta en condiciones y me siento frustrada. Cuando vi que ni siquiera pasaba la noche de bodas conmigo, me di cuenta de que no había ganado nada casándome, pero era como una espiral de la que no sabía cómo salir”.

Del libro Hablan los chinos (Aguilar), de Ana Fuentes, excorresponsal de la cadena SER en Pekín, que se publica el 19 de septiembre.

El matrimonio gay ya es imparable

Tras la aprobación de las bodas homosexuales en Nueva York, la batalla en EE UU se da por el reconocimiento federal – Derogar una norma de 1996 implicaría una legalización nacional de facto

Connie Kopelov (sentada) y Phyllis Siegel (a su espalda) tras casarse

Connie Kopelov (sentada) y Phyllis Siegel (a su espalda) tras casarse. / J. DECROW (AP)

El del matrimonio gay es un objetivo que, hoy por hoy, parece más alcanzable que nunca en Estados Unidos. Desde que en 2004 se legalizaran las uniones entre personas del mismo sexo en Massachusetts, un total de seis Estados y el Distrito de Columbia, capital federal, han seguido el mismo camino, bien a través de decisiones judiciales, bien por trámites legislativos. Pese a las fuertes resistencias, la ola se extiende con vistas a conseguir el reconocimiento de estos matrimonios a escala federal, que permitiría a las parejas homosexuales casarse en los Estados que lo permiten y residir como matrimonio en cualquier lugar de EE UU.

En total, el matrimonio entre personas del mismo sexo es legal en una zona que abarca a 35,5 millones de habitantes. Pero ¿lo es del todo? Aún carecen de algunos beneficios de los que sí disfrutan los homosexuales en España, por ejemplo, donde desde 2005 estas parejas están completamente equiparadas con las heterosexuales que se casan, incluida la posibilidad de adoptar conjuntamente. En EE UU, una ley aprobada por los republicanos en 1996 deniega a esas licencias matrimoniales validez federal.

Barack Obama quiere verla derogada. Los grupos ultraconservadores, por el contrario, quieren una reforma de la Constitución que determine que la unión matrimonial solo puede serlo entre hombres y mujeres. Algo similar a lo que sucede en España, donde el PP tiene recurrida la ley de matrimonio homosexual hace ya casi seis años ante el Tribunal Constitucional. Entonces promovía una ley de uniones civiles para los gais y lesbianas que reservara la denominación de matrimonio a los heterosexuales.

Desde el domingo, el matrimonio gay es legal en Nueva York, que con 19,3 millones de habitantes es el tercer Estado más poblado del país. Ahora ya es legal allí y en Iowa, Massachusetts, Connecticut, Vermont, New Hampshire y la capital federal. Solo es válido, sin embargo, ante las respectivas autoridades regionales, y no ante el Gobierno central. Es así debido a la citada ley de los republicanos de 1996, llamada significativamente Defensa del Matrimonio y ratificada entonces por Bill Clinton. En aquella época, Hawai había comenzado los trámites (infructuosos) para aprobar las uniones de gais, y el Congreso nacional actuó con rapidez, ya que en EE UU la Constitución no define el matrimonio como una unión heterosexual. En España la situación es parecida. La Constitución define el derecho a casarse de hombres y mujeres, pero no dice que tengan que hacerlo entre sí.

En la Cámara de Representantes había entonces tres legisladores abiertamente gais (Barney Frank y Gerry Studds, demócratas, y Steve Gunderson, republicano) que calificaron la ley de agresión frontal contra los homosexuales. Ante ellos, el autor de la norma, el republicano ultraconservador Bob Barr denunció, en una recordada comparecencia, los “vientos del hedonismo, las llamas del narcisismo, el fuego de la moralidad autocomplaciente que están mermando los cimientos de la sociedad”. “América no será el primer país del mundo que lance el concepto de matrimonio por la ventana”, dijo.

Según Joe Solmonese, presidente de Human Rights Campaign, el mayor lobby gay del país: “Esa ley impide hoy en día que unos 1.100 derechos, beneficios y responsabilidades matrimoniales a nivel federal se apliquen sobre parejas homosexuales legalmente casadas. Entre ellos se incluyen los beneficios de la Seguridad Social para viudedad, los seguros sanitarios para cónyuges de funcionarios federales, la protección para que los cónyuges no pierdan sus hogares en caso de emergencias médicas graves, el derecho a solicitar visados de inmigrante para cónyuges extranjeros, las garantías para bajas médicas a parejas y la capacidad de tramitar declaraciones de la renta de forma conjunta, entre muchos otros”.

Solo ahora, algunos políticos han comenzado a exigir que se derogue la ley. La primera en hacerlo de forma pública, la semana pasada, fue Dianne Feinstein, una veterana senadora demócrata de California, que en 1978 estaba presente en el Ayuntamiento de San Francisco cuando un perturbado asesinó al activista gay Harvey Milk. Feinstein se queja ahora de que los matrimonios oficiados en Nueva York o Massachusetts sean legales en España pero no ante el Gobierno federal de EE UU. “Se trata, simple y llanamente, de discriminación, no hay otra forma de decirlo”, dijo la senadora en una conferencia en el National Press Club. “Esta no es una causa que vayamos a abandonar. Si no logramos la derogación este año, lo intentaremos el próximo”.

Al día siguiente, Feinstein presentó el texto de derogación en el Comité de Asuntos Judiciales del Senado. Junto a ella comparecieron algunos homosexuales que relataron la discriminación a la que se hallan sujetos. Ron Wallen, de 77 años, perdió hace unos meses a su pareja, con quien compartió 50 años. El Gobierno le deniega una pensión, a pesar de que ambos se casaron en California en 2008, en el breve espacio de tiempo en que las uniones homosexuales fueron legales allí. Un juzgado ha reconocido la validez de su licencia de matrimonio. Andrew Sorbo, de 64 años, se casó en 2009 en Connecticut con un veterano del Ejército. Su marido murió recientemente, después de 30 años de relación. El Pentágono le ha denegado la pensión militar por viudedad. Aunque en junio de 2008 el Tribunal Supremo de California legalizó las uniones gays, en noviembre del mismo año los votantes decidieron en referéndum prohibirlo. De momento, las licencias que se concedieron mantienen su validez debido a una decisión judicial.

En realidad, políticos de ambos signos se han manifestado a favor de las uniones homosexuales en EE UU. Dick Cheney, vicepresidente bajo el mandato de George W. Bush, ha apoyado en numerosas ocasiones las uniones entre personas del mismo sexo y ha contado que su hija, Mary, es lesbiana y mantiene una relación desde hace años con su novia. Del mismo modo se han significado Laura y Barbara Bush, mujer e hija del expresidente. “Creo que es algo que llegará inevitablemente, es solo cuestión de tiempo”, le dijo la ex primera dama al presentador de CNN Larry King en 2010.

Tienen esos políticos conservadores una visión más progresista, oficialmente, que la del propio Barack Obama. En realidad, el presidente ha cambiado con frecuencia sus opiniones al respecto. En 1996, en la campaña para senador en el Estado de Illinois, respondió en un cuestionario político que estaba totalmente a favor de los matrimonios entre personas del mismo sexo. “Estoy a favor de legalizar los matrimonios homosexuales y combatiría cualquier esfuerzo para ilegalizarlos”, dijo. Esa fortaleza de convicciones se iría atenuando con los años. Al llegar a la Casa Blanca, en 2009, era contrario a los matrimonios, pero apoyaba las uniones civiles.

Desde entonces, el presidente se ha empleado en mostrar una especie de proceso público de calculada indecisión. En una entrevista concedida a la revista gay The Advocate en diciembre, dijo: “Me he enfrentado a la opinión personal de que el matrimonio tradicionalmente tenga unas connotaciones diferentes. Pero tengo muchos amigos, muy cercanos, que son gais y lesbianas, y que tienen parejas”. De ese modo, y a pesar de su oposición pública y su indecisión privada, Obama ha tomado una medida inédita en un presidente en activo: apoyar públicamente la derogación de la ley de Defensa del Matrimonio planteada por la senadora Feinstein. La semana pasada su portavoz dijo que el presidente lo hacía “con orgullo”, en un guiño al movimiento gay. Si la derogación se aprueba, sería una legalización de facto del matrimonio gay nacionalmente.

Antes que en España, país pionero en la equiparación total de las parejas gais y heterosexuales, fue el Estado de Massachusetts (6,5 millones de habitantes) el que aprobó el matrimonio gay por la vía judicial. Aquello despertó las alarmas de los grupos conservadores, que presionaron para que se propusiera en el Congreso una reforma de la Constitución donde dejar por escrito que el matrimonio es la unión exclusiva y excluyente entre un hombre y una mujer. El expresidente Bush, que estaba en campaña electoral, apoyó esa fórmula, que hubiera supuesto la primera reforma constitucional propuesta desde los años setenta. Solo ha habido 17 reformas en más de dos siglos de historia norteamericana.

“La unión de un hombre y una mujer es la institución humana más duradera, honrada y defendida por todas las culturas y todas las fes”, dijo entonces Bush. “La institución del matrimonio no puede desvincularse de sus raíces culturales, religiosas e incluso naturales sin debilitar su buena influencia sobre la sociedad”. Para triunfar, aquella reforma constitucional debía haber obtenido dos tercios de los votos del Congreso y la ratificación de 38 Estados. Se ha votado sobre ella ya en tres ocasiones. En todas ha fracasado.

Hay grupos conservadores que, sin embargo, han decidido hacer de la lucha constitucional su principal batalla. Creen que si el Congreso, con la nueva mayoría republicana en la Cámara de Representantes, aprueba la modificación de la Carta Magna, todos los matrimonios gais aprobados hasta ahora en los diferentes Estados se verán invalidados de golpe. En el Congreso, la semana pasada, el portavoz del grupo ultraconservador Focus on the Family, Thomas Minery, detalló los peligros que entraña, a su parecer, el matrimonio homosexual: mayor número de divorcios y menor monogamia, principalmente.

Tras la estela española

– Desde que España aprobó el matrimonio entre personas del mismo sexo en 2005, otros ocho países han seguido, hasta la fecha, la misma senda: Holanda, Bélgica, Portugal, Suecia, Noruega, Canadá, Sudáfrica y Argentina. Además, estos enlaces están permitidos en siete Estados de EE UU: Iowa, Massachusetts, Connecticut, Vermont, New Hampshire, Nueva York, y también en la capital federal, el distrito de Columbia. También en México DF (el Estado de la capital).

– En muchos de estos países (Holanda, los nórdicos) antes de la plena equiparación había fórmulas intermedias, como leyes estatales de uniones civiles o de parejas de hecho que reconocían en la práctica casi los mismos derechos a dos contrayentes homosexuales que a una pareja heterosexual casada, aunque con excepciones (la más clara era la de poder adoptar conjuntamente).

– La Asociación Internacional de Lesbianas y Gais (ILGA) reconoce que hay otros 14 países en los que la equiparación de las parejas gais y las casadas heterosexuales es casi total: Brasil, Colombia, Israel, Alemania, Austria, Dinamarca, Finlandia, Hungría, Irlanda, Islandia, Liechtenstein, Reino Unido, Suiza y Nueva Zelanda, y otros 10 con una equiparación algo menor (Ecuador, Uruguay, República Checa, Croacia, Francia, Andorra, Eslovenia, Luxemburgo, EE UU y Australia).

– En el extremo opuesto están quienes persiguen las relaciones homosexuales. Son 76 países, con los casos más graves en los territorios donde este tipo de prácticas pueden castigarse con la pena de muerte: Arabia Saudí, Irán, Mauritania, Sudán, Yemen, 12 Estados del norte de Nigeria y zonas del sur de Somalia.

Un empujón a una industria boyante

Habían esperado años. Así que el domingo, cuando se legalizaron los matrimonios de gais y lesbianas en Nueva York, centenares de parejas acudieron a casarse en todos los rincones del Estado, desde la frontera con Canadá y las cataratas del Niágara a los embarcaderos del río Hudson, en Manhattan. Solo en la ciudad de Nueva York, 659 parejas obtuvieron sus licencias y 484 se casaron. De ellas, 107 venían de Estados como Alabama, donde las uniones entre homosexuales no están legalizadas. Nueva York no requiere a los contrayentes que estén empadronados en el Estado para que puedan unirse en matrimonio.

Las primeras en casarse, en Buffalo, ante las famosas cataratas que marcan la frontera con Canadá, fueron Kitty Lambert, de 54 años, y Cheryle Rudd, de 53, que tienen cuatro hijos y 12 nietos. Una bandera multicolor, símbolo del movimiento gay, se proyectó sobre la cascada de agua.

En Manhattan, las primeras fueron Phyllis Siegel, de 77 años, y Connie Kopelov, de 85, que han estado juntas durante 23 años. “Es increíble que haya llegado el momento en que podemos hacer esto como cualquier otra pareja”, dijo Siegel de la mano de su ya esposa, con lágrimas en los ojos.

La clase política celebró el día con los activistas. El gobernador de Nueva York, el demócrata Andrew Cuomo, celebró una fiesta con diversas parejas gais. El alcalde Michael Bloomberg, republicano convertido en independiente, casó a dos colaboradores suyos, ambos varones, que tienen dos hijas, en su residencia oficial. Todos hicieron hincapié en que el movimiento de lucha por los derechos de los gais nació oficialmente en Manhattan, en los disturbios de Stonewall, un pub de Nueva York, el 28 de junio de 1969, fecha desde entonces del Orgullo Gay, Lésbico, Transexual y Bisexual.

Con los derechos llegan, también, las oportunidades de negocio. Nueva York está viviendo un resurgir de su industria de servicios debido a la legalización de esas uniones, tal y como lo hizo California en los cinco meses en que allí fue legal en 2008. Aseguran consultoras como Community Marketing Inc. que el llamado mercado gay mueve, solo en EE UU, unos 43.000 millones de euros al año. Se estima, además, que siete millones de turistas gais visitan la ciudad de Nueva York cada año, donde se dejan unos 11.000 millones de euros.

La ONU otorga el estatus consultivo a un colectivo internacional de homosexuales

La asociación ya lo había obtenido en 1993, pero lo perdió por la presencia de grupos que abogaban por la abolición de las leyes sobre la edad de consentimiento sexual

El Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas ha otorgado el estatus consultivo a la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersexuales (ILGA), lo que permite a esta organización asistir e intervenir en las conferencias de la ONU y enviar declaraciones. La decisión se ha tomado hoy en Ginebra por 29 votos a favor, 13 en contra y 6 abstenciones, según ha informado el colectivo en un comunicado.

La ILGA obtuvo ya el carácter consultivo de la ONU en 1993, pero lo perdió en los años siguientes por la presencia de grupos que abogaban por la abolición de las leyes referidas a la edad de consentimiento sexual. La consecuencia fue que la organización expulsó a esos grupos y enmendó sus

estatutos para que se estableciera claramente en ellos su compromiso contra el abuso infantil.

Renato Sabbadini, cosecretario general de este colectivo ha calificado de este día de “histórico” y Pedro Paradiso Sottile, secretario general de la ILGA en Latinoamérica y el Caribe, ha subrayado que se trata de “un acto de justicia y un motivo de orgullo para la comunidad internacional que trabaja por un mundo donde los derechos humanos sean realmente respetados sin ningún tipo de discrimiación”.

Las muertes por VIH bajan al mayor ritmo en una década

El sida mata cada vez menos en España. El VIH ha causado en 2009 1.079 muertes, un 11,2% menos que el año anterior, su mayor descenso de los últimos 11 años. Es la variación más llamativa entre las causas de muerte de los españoles, según se desprende del último informe del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), con datos de 2009.

En ese año se produjeron un total de 384.933 fallecimientos, 1.391 menos que en 2008. Las tres causas principales fueron las enfermedades de los sistemas circulatorio (31,2 por cada 100 muertes) y respiratorio (11,2 de 100) y los tumores (27,3).

Un portavoz del Ministerio de Sanidad sostiene que esa baja, percibida desde 1996, se debe a la aparición de los antirretrovirales, lo que ha permitido “mejorar la calidad de vida de los pacientes, retrasar el avance de la infección y, en consecuencia, evitar que se desarrolle el sida y se produzcan fallecimientos por esta causa”.

Desde el comienzo de la pandemia en 1981 se han notificado en España un total de 79.363 casos de sida, según datos oficiales. “La extensión de los tratamientos antirretrovirales ha disminuido la incidencia del sida”, dice el ministerio.

La principal causa externa de los fallecimientos es el suicidio y afecta mucho más a los hombres. Un total de 3.429 personas perdieron la vida de ese modo (ocho más que en 2008), de los que ocho de cada diez eran varones. El factor que encabeza la lista después de que los fallecimientos por accidentes de tráfico descendieran a casi la mitad desde los últimos cinco años.

La diferencia, para la doctora Pilar Saiz, miembro de la Sociedad Española de Psiquiatría, está en la prevención. “En suicidio no hay estrategias preventivas. Nuestras autoridades sanitarias no acaban de ver que el suicidio es un verdadero problema en este país y sería muy adecuado que se pusieran en marcha políticas preventivas”. Las muertes por tumores, trastornos mentales y las provocadas por enfermedades del sistema nervioso también ascendieron.

Las enfermedades del sistema circulatorio siguieron siendo la primera causa de muerte entre las mujeres, seguidas por las enfermedades isquémicas del corazón que también fueron la principal causa de muerte masculina.

La Audiencia Nacional anula la sanción a Intereconomía por homofobia

El tribunal considera que la multa impuesta por el Gobierno vulnera la libertad de expresión y el derecho de crítica del medio. La cadena asegura que se criticó la asistencia a un acto festivo, no la identidad sexual.

La Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional ha declarado nula la sanción del Ministerio de Industria que condenaba a Intereconomía a pagar 100.000 euros por la emisión de un spot promocional que cuestionaba que el Día del Orgullo Gay fuese subvencionado con fondos públicos. El vídeo, que fue emitido 273 veces entre julio y septiembre de 2009, reproduce imágenes de homosexuales junto al eslogan “Un día del orgullo gay. 364 de orgullo de la gente corriente”.

La denuncia formulada por el Consejo Audiovisual de Andalucía fue admitida a trámite por Industria, que consideró “ilícita” la campaña por considerar que va en contra de lo que establece la ley, donde se afirma que “la publicidad televisiva no puede atentar contra el debido respeto a la dignidad de las personas o a sus convicciones religiosas y políticas ni discriminarlas por motivos de nacimiento, raza, sexo, religión, nacionalidad y opinión”.

Intereconomía recurrió asegurando que “el anuncio de autopromoción suponía únicamente una crítica a un preciso acto festivo que no resulta ser representativo de la totalidad de los homosexuales, sino de un grupo de personas que está enfrentado con otros en lo que se refiere a la celebración del Día del Orgullo Gay”, según explica en su página web.

Esta nueva sentencia prima “el carácter prioritario que ostenta la libertad constitucional de opinión y más aún cuando es formulada por un medio de comunicación” apoyándose en el artículo 20 de la Constitución. La Audiencia sostiene que “no toda crítica o percepción negativa entraña por sí sola discriminación” y añade que si el Estado de Derecho acepta este precepto, “los contenidos de la libertad de expresión y el derecho a la crítica quedarían reducidos hasta su virtual desaparición”.

Intereconomía ha considerado esta resolución como el “triunfo de la libertad de expresión”. Juan José Aizcorbe, el director general jurídico de la cadena, ha reconocido que su principal preocupación no eran los 100.000 euros de multa, sino que dentro de las concesiones de las cadenas de televisión, tener una sanción puede implicar la no renovación de la licencia. “No hemos vulnerado ningún derecho y reseñamos que por encima de una decisión política ha sobrevenido una decisión con todo el peso de la ley”, ha defendido Aizcorbe. La Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales ha expresado en un comunicado que “la Justicia ha actuado desproporcionalmente, con una arbitrariedad clara, cuando antepone el derecho a la libertad de expresión de esta televisión privada pero no el de las personas”. La organización ve un clara discriminación por orientación sexual e incitación a través de las imágenes y mantienen que Intereconomía desprestigia a su colectivo.

Gonzalo excusó el cierre de la Cámara de Vizcaya en vacaciones y deudas domiciliadas

La existencia de “débitos domiciliados” en la cuenta de la Cámara de la Propiedad Urbana de Vizcaya fue una de las razones o excusas aducidas por José María Gonzalo para mantener operativa esa entidad más de tres años después de que un decreto del Gobierno al que representaba estableciera su extinción. Gonzalo era delegado territorial del Departamento de Vivienda y Asuntos Sociales en Vizcaya y en su condición de tal fue comisionado por el consejero Javier Madrazo para finiquitar la Cámara.

Lejos de ello, se embarcó en una operación que nadie entiende, ni quienes le conocen y le atribuyen una honestidad fuera de duda, ni quienes, conociéndole o no, consideran que su condición de jurista -es letrado del Gobierno- le hacía conocedor de lo que estaba haciendo y de sus eventuales consecuencias. Todos dan por hecho que no se ha lucrado personalmente, y fuentes vinculadas entonces a EB dan por hecho que los responsables de la organización y del departamento debieron extrañarse del modo en que se estaba financiando una película producida por un servicio del Gobierno, Berdindu. Por ejemplo, de que no hubiera recurrido a las ayudas que ofrece el Departamento vasco de Cultura y más tratándose de un rodaje en euskera.

Según consta en la documentación que obra en el Gobierno, Gonzalo envió a finales de abril de 2009 -el decreto de extinción data de enero de 2006- un escrito al director de Finanzas del Ejecutivo, dependiente del Departamento de Hacienda, que dirigía la también vicelehendakari Idoia Zenarruzabeitia. En él expresaba la “imposibilidad” de cerrar la cuenta corriente y prometía enviar “en breve” una información “más detallada y precisa (…) con vistas al cierre definitivo (…)lamentando habernos retrasado en su elaboración da causa del paréntesis vacacional”. Gonzalo respondía a un requerimiento de principios de ese mismo mes, uno después de celebradas las elecciones autonómicas que originaron el relevo del Gobierno tripartito de Juan José Ibarretxe. En él se le pidió el cierre de las cuentas y el traspaso de los saldos a la Tesorería General del País Vasco. Con anterioridad, el delegado de Vivienda en Vizcaya había sido ya emplazado desde la Oficina de Control Económico (OCE) en dos comunicaciones distintas para que liquidara la Cámara y enviara a la OCE relaciones de cobros y pagos, extractos bancarios y otra documentación.

A la llegada del nuevo Gobierno de Patxi López, en mayo de 2009. y con la exploración de los departamentos para su reorganización el responsable de Vivienda se encontró con la Cámara sin liquidar y la de Empleo y Asuntos Sociales con una nómina que se pagaba a un empleado en ella. El 10 de noviembre el Ejecutivo destituyó a Gonzalo y encargó la auditoría.

* Este articulo apareció en la edición impresa del Viernes, 1 de abril de 2011