El cura homosexual expulsado pide al Papa que “abra el corazón y la razón de los obispos”

SÍNODO DE LA FAMILIA

El prelado polaco Krzysztof Charamsa, oficial en la Congregación para la Doctrina de la Fe

El prelado polaco Krzysztof Charamsa ofrece una rueda de prensa tras anunciar públicamente su homoxexualidad, en Roma. (EFE)

MADRID. Krzysztof Charamsa, el sacerdote homosexual expulsado de la  Congregación para la Doctrina de la Fe tras revelar su condición  sexual, ha pedido al Papa Francisco en una carta que abra el “corazón  de los obispos” en el Sínodo de la Familia y en la que le ha  explicado “la razones de su decisión” de hacer pública su condición  sexual.

“Le he pedido que recuerde a los obispos que delante del Sínodo  están todas las familias, porque si la iglesia es universal debe  pensar en todos, ninguna minoría puede estar fuera; debe ocuparse no  solo de las familias heterosexuales, porque todas las familias tienen  un deseo de comunicar amor a otros, y no pueden excluirse a las  familias homosexuales, de lesbianas o transexuales”, ha indicado  Charamsa en una entrevista Catalunya Ràdio.

En su opinión, “el Sinodo puede ser una gran revolución” de la  Iglesia si el Papa “abre el corazón y la razón de los obispos como lo  ha hecho en todo el mundo a la gente que está fascinada por Jesús,  por el natural deseo de trascendencia de una Iglesia que no es  mala”.

El sacerdote se ha reafirmado en su decisión de hacer pública su  condición sexual y ha dicho sentirse “un cura mejor que dos o tres  días antes” de hacerlo. “He liberado mi vida, he dicho por fin quién  soy y éste debe ser un momento bueno para la Iglesia”, ha indicado el  religioso polaco.

Asimismo, ha asegurado que los homosexuales no son “pedófilos,  enemigos de la familia, ni maníacos de placeresa, sino personas que  buscan amor”. Por este motivo considera que “la Iglesia de Cristo  debe saber y debe acoger seriamente la vida de homosexuales y  lesbianas que son buena gente”. Se ha ratificado asimismo en su “amor  a la Iglesia”.

Krzysztof Charamsa se ha mostrado muy crítico con la Congregación  para la Doctrina de la Fe, de la que formaba parte como secretario  adjunto de la Comisión Teológica Internacional,  por “haberse cerrado  a cualquier discusión” y “no aceptar críticas sobre el Sínodo” y  “hacer todo lo posible porque el tema de la homosexualidad sea algo  cerrado, estigmatizado”.

El prelado ha ensalzado la postura del Papa Francisco y su  “discurso claro contra cualquier discriminación”. Para el sacerdote,  el Pontífice representa una “una esperanza increible y profunda en la  Iglesia” con un discurso claro contra cualquier discriminación.

Ha recordado, asimismo, que el Papa Francisco ha dicho que  “existen muchos problemas porque hay personas que quieren Iglesia, y  que quieren respuestas realistas por la propia vida”, pero “no se ha  hecho nada, solo una suerte de marginalización y estigmatización”. Ha  añadido que, además, de “una homofobia hay también una  ‘franciscofobia’ hacia un Papa que ha sembrado la esperanza, el amor  y que ha mostrado que la Iglesia es fantástica”.

Madrid ofrece a todas las mujeres el servicio de reproducción asistida

Cristina Cifuentes asegura que será de forma inmediata y con independencia de su condición sexual y de si tienen o no pareja

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, el pasado lunes

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes. / Efe

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha anunciado hoy que la administración regional dará entrada de forma inmediata a todas las mujeres en los tratamientos públicos de reproducción asistida con independencia de su condición sexual y de si tienen o no pareja.

En declaraciones a RNE, Cifuentes ha avanzado que su Gobierno abrirá este servicio a todas las mujeres a través de la cartera de servicios sanitarios autonómica -que complementa la nacional- o bien a través de las leyes de identidad sexual y de protección contra la discriminación que prepara su equipo.

La presidenta madrileña ha asegurado que, en su opinión, los tratamientos de reproducción asistida del sistema sanitario público para todas las mujeres con independencia de su situación deberían estar incluidos en la cartera de servicios “para toda España” del Ministerio.

Con estas palabras, Cifuentes se ha referido a la decisión del Ministerio de Sanidad de julio de 2013 de aprobar una nueva cartera básica del Sistema Nacional de Salud en la que la financiación de la reproducción asistida se ofrecía “por motivos terapéuticos o preventivos”. Esta decisión excluyó de los tratamientos de reproducción asistida a las mujeres sin pareja masculina y generó el rechazo de comunidades como Andalucía, Asturias, País Vasco o Islas Canarias, así como de asociaciones de homosexuales, al entender que deja fuera de la financiación pública a lesbianas y mujeres sin pareja fértiles pero que necesitan de estos tratamientos para poder ser madres.

Condena a un hospital

Cifuentes ha explicado que la Consejería de Sanidad estudia cómo aplicar esta medida tras ser preguntada sobre la sentencia que condenó al hospital Fundación Jiménez Díaz y a la Consejería de Sanidad madrileña a indemnizar en casi 5.000 euros a una lesbiana por haber sido discriminada por su orientación sexual en el acceso a un tratamiento de reproducción asistida. Ni la Comunidad ni el centro recurrirán este fallo, ha asegurado la presidenta de la Comunidad de Madrid, que ha recalcado que esa mujer “en la actualidad” está recibiendo el tratamiento.

Cifuentes ha defendido que establecer medidas complementarias a las que existen para que la reproducción asistida sea accesible a las mujeres con independencia de su condición sexual y si están solteras, casadas o en pareja supone “avanzar en igualdad”. Según ha recalcado, todas las mujeres deben estar en las mismas condiciones que una pareja heterosexual y “tiene el mismo derecho” en cuanto a la reproducción asistida.

Cifuentes anuncia que Madrid dará reproducción asistida a todas las mujeres

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, el pasado lunes

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, el pasado lunes. EFE

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha anunciado este miércoles que la administración regional dará entrada de forma inmediata a todas las mujeres en los tratamientos públicos de reproducción asistida con independencia de su condición sexual y de si tienen o no pareja.

En declaraciones a RNE, Cifuentes ha avanzado que su Gobierno abrirá este servicio a todas las mujeres a través de la cartera de servicios sanitarios autonómica -que complementa la nacional-, o bien a través de las leyes de identidad sexual y de protección contra la discriminación que prepara su equipo.

La presidenta madrileña ha asegurado que, en su opinión, los tratamientos de reproducción asistida del sistema sanitario público para todas las mujeres con independencia de su situación deberían estar incluidos en la cartera de servicios “para toda España” del Ministerio.

Con estas palabras, Cifuentes se ha referido a la decisión del Ministerio de Sanidad de julio de 2013 de aprobar una nueva cartera básica del Sistema Nacional de Salud en la que la financiación de la reproducción asistida se ofrecía“por motivos terapéuticos o preventivos”.

[Ser mujer estéril, el requisito de acceso a la reproducción asistida pública]

Esta decisión excluyó de los tratamientos de reproducción asistida a las mujeres sin pareja masculina y generó el rechazo de comunidades como Andalucía, Asturias, País Vasco o Islas Canarias, así como de asociaciones de homosexuales, al entender que deja fuera de la financiación pública a lesbianas y mujeres sin pareja fértiles pero que necesitan de estos tratamientos para poder ser madres.

Cifuentes ha explicado que la Consejería de Sanidad estudia cómo aplicar esta medida tras ser preguntada sobre la sentencia que condenó al hospital Fundación Jiménez Díaz y a la Consejería de Sanidad madrileña a indemnizar en casi 5.000 euros a una lesbiana por haber sido discriminada por su orientación sexual en el acceso a un tratamiento de reproducción asistida.

Ni la Comunidad ni el centro recurrirán este fallo, ha asegurado la presidenta de la Comunidad de Madrid, que ha recalcado que esa mujer “en la actualidad” está recibiendo el tratamiento.

Cifuentes ha defendido que establecer medidas complementarias a las que existen para que la reproducción asistida sea accesible a las mujeres con independencia de su condición sexual y si están solteras, casadas o en pareja supone “avanzar en igualdad”.

Según ha recalcado, todas las mujeres deben estar en las mismas condiciones que una pareja heterosexual y “tiene el mismo derecho” en cuanto a la reproducción asistida.

La Iglesia suspende a un sacerdote por decir que entiende la pederastia y no a los gais

“He estado mucho con niños, los conozco, y sé que por desgracia hay algunos que buscan afecto porque no lo tienen en casa y pueden encontrar a algún sacerdote que cede”, afirmó Gino Flaim

La Iglesia Católica ha suspendido de sus funciones a un sacerdote por unas polémicas declaraciones concedidas a un canal de televisión italiano en las que afirmó poder entender la pederastia, pero no la homosexualidad. El sacerdote italiano es Gino Flaim, ayudante de un párroco en Trento (norte de Italia), a quien la archidiócesis de la región le ha retirado de su cargo de colaborador pastoral y el derecho a predicar, según un comunicado de la institución.

“La pedofilia puedo entenderla, la homosexualidad no lo sé”, dijo el sacerdote en una entrevista emitida este martes por la cadena de televisión La7. “He estado mucho con niños, los conozco, y sé que por desgracia hay algunos que buscan afecto porque no lo tienen en casa y pueden encontrar a algún sacerdote que cede”, agregó.

Preguntado por la periodista sobre si “son un poco los niños la causa” en los casos en los que religiosos cometen abusos contra menores, Flaim respondió que “en buena parte sí”, además de considerar que la homosexualidad es “una enfermedad” y que no estaba seguro de poder entenderla. El religioso opinó que “quien vive estas situaciones, pedofilia u homosexualidad, experimenta cierto sufrimiento, creo yo, porque se ven diferentes al resto”.

Tras esas polémicas declaraciones, la archidiócesis de Trento ha afirmado que “se desvincula plenamente” de esas opiniones, según un comunicado, en el que se señala que el sacerdote “ha expresado argumentos que no representan de ninguna manera la posición de la archidiócesis y el sentir de toda la comunidad eclesial”.

Las lesbianas a quienes negaron la reproducción asistida: ‘Hemos sufrido discriminación de Estado’

V. y T. unen sus manos formando un corazón. El matrimonio de mujeres homosexuales no quiere revelar su identidad

V. y T. unen sus manos formando un corazón. El matrimonio de mujeres homosexuales no quiere revelar su identidad. ANTONIO HEREDIA

Tania y Verónica viven entre adjetivos en mayúscula, «estamos desbordadas», «nos sentimos expuestas», «la orden ministerial es retrógada y debe ser derogada», «nuestro instinto es maternal, como el de tantas mujeres»…

Traen a la entrevista esa mezcla de festejo y vértigo que inyectan en el ánimo los acontecimientos históricos, sobre todo si uno los protagoniza. O una. O dos.

Porque ellas, que son pareja desde hace ocho años y que nunca fueron el centro más que de sí mismas, son las responsables de una sentencia pionera en España que condena a la Fundación Jiménez Díaz y a la Comunidad de Madrid por discriminarlas por razón de orientación sexual en un proceso de reproducción asistida. Son las causantes del fallo de un juzgado que abrirá a la maternidad a miles de lesbianas y de mujeres solas que podrán sortear una orden del Ministerio de Sanidad «discriminatoria» (lo dice la sentencia) que sólo permite esa fecundación de laboratorio a quienes hayan fracasado «tras un mínimo de 12 meses de coito vaginal» (lo dice la orden).O sea, con hombre de por medio.

Verónica y Tania. Nadie en su trabajo sabe quiénes son. Ningún vecino sospecha qué han conseguido. Ni un solo medio de comunicación ha podido hablar con ellas. Viven lejos del ruido de la historia que han creado. Tanto que nos piden que las llamemos Verónica y Tania aunque no se llaman así.

– ¿Por qué aceptáis esta entrevista y por qué no queréis que se os reconozca?

– Porque queremos contar qué nos pasó y cómo vivimos esta sentencia tan importante, no sólo para nosotras, sino para otras mujeres. Y queremos anonimato porque tenemos mucho que perder. Tenemos miedo a la discriminación que nunca vivimos, porque sabemos que eso ocurre, que aún existe la homofobia… Queremos intimidad porque hemos visto mucha oposición a esta sentencia.

Tania y Verónica van de la mano por la calle desde hace ocho años, y hace tres que se casaron «para poder filiar a nuestros hijos, para ser madres legales». Tan grande era su run run de maternidad, su idea de familia por hacer, que empezaron un proceso de reproducción asistida en una clínica privada «nada más volver de la luna de miel».

Pero al poco tiempo supieron que la Fundación Jiménez Díaz era uno de los pocos centros en España que ofrecía ese servicio dentro del sistema público de salud.

Así, en septiembre de 2014 Tania inició en ese hospital madrileño el primer ciclode su buena esperanza. «Estuvimos muy agradecidas a la Fundación, porque ofertaba un servicio que nos parecía insdiscutible, pero que muy pocos hospitales públicos daban. Hicimos el primer ciclo, no hubo resultados positivos y nos citaron para un segundo tratamiento, en marzo de 2015».

Sin embargo, por sorpresa, el hospital les convocó muchos meses antes. Verónica: «Nos citaron el 28 de noviembre de 2014. Íbamos muy contentas por el adelanto. Hacíamos hasta cuentas del posible nacimiento si todo salía bien. Pero en cuanto entramos, la doctora nos dijo que, según la orden ministerial que se acaba de aprobar, no podían atendernos más, que no cumplíamos los requisitos». Tania: «Me quedé seca. Estaba en shock. En mi vida había pasado tanta vergüenza. Pero enseguida todo eso se convirtió en enfado. No me podía creer que nos estuvieran discriminando por nuestra orientación sexual, que no incluye al hombre».

Tania y Verónica se sacudieron la cabeza y pidieron por escrito al hospital la readmisión en el proceso de fecundación. Sin suerte. «Nos dijeron que debido a la orden del Ministerio estábamos fuera. A nosotras, que íbamos abrazadas por la calle, que nos habíamos casado, que vivíamos en un país respetuoso, de repente, pum, un golpe, un paso atrás. Igual ese país no era tan así. Igual nos habíamos creído una cosa que no era».

Las dos llevan camisas de colores en este 6 de octubre lleno de verano en Madrid. La ventana está abierta y la calle ocurre ajena a esta charla de derechos recuperados. Ellas miran los apuntes que tomamos y beben agua. Se respetan los turnos de palabra y hasta hablan una de la otra. Como Verónica, que dice que en aquellos días de noviembre Tania era un enfado absoluto. «Le removía la homofobia, la discriminación, quería denunciar. Yo no me lo creía, sabía que era una discriminación clara, pero pensé que no podía ser, que era tan increíble que se solucionaría. Y por supuesto apoyé la denuncia».

Pero, pese al carpetazo del hospital, el sonido de la maternidad seguía tarareándoles las tripas. Verónica: «Nos fuimos a una clínica privada porque no estábamos dispuestas a perder la ocasión de ser madres.El tiempo apremiaba». Tania: «Yo tenía 39 años y había que correr».

La vida de las dos se multiplicó en dos: el proceso de fertilización en la clínica privada y el proceso judicial contra la Administración Pública. Women’s Link Worldwide asumió la demanda de las dos mujeres y llevó a juicio a tres instituciones: la Fundación Jiménez Díaz, la Comunidad de Madrid y el Ministerio de Sanidad.

El fallo del Juzgado de lo Social Número 18 de Madrid afirma que la interrupción del tratamiento «agravó el daño» psicológico de Tania. ¿Por qué? «Yo había estado en una psicóloga anteriormente porque me costaba aceptar que siento lo que siento. Mi entorno me repetía que yo no era diferente por querer a una mujer. Y esa expulsión del hospital me hizo volver al punto de partida: sí, eres diferente. Así que volví a la psicóloga. Fue duro. Y lo sigue siendo».

Meses después de la exclusión, en abril de este año, el hospital volvió a dar lasorpresa. Tania: «Un día recibí un mensaje en el móvil con una cita para mayo. Fui yo sola porque Verónica tenía trabajo. Yo iba muy preocupada y muy alucinada. No sabía por qué nos llamaban. La doctora me dijo que mientras se resolvía el tema con la Comunidad de Madrid, el hospital estaba llamando a todas las personas a las que había excluido del tratamiento. Habían pasado como cinco o seis meses desde la interrupción y volvimos al proceso. Estoy segura de que nos llamaron por la denuncia. Eso influyó. Seguro».

A veces se asienten y a veces se matizan. Verónica parece más informativa y Tania más reservada. «Es que te calientas y lo cuentas todo», suelta entre risas.

Durante mayo y junio de este año, Tania fue sometida a un segundo ciclo de fecundidad en la Jiménez Díaz. Tampoco hubo embarazo.

Pero, mientras, el embrión de la Justicia siguió creciendo y a mediados de septiembre todas las partes fueron a juicio. Y ahora, en este octubre de historia para ellas y tantas como ellas, nació una sentencia. Tania: «Nos calma que la sentencia nos dé la razón. Nosotras, que estuvimos siete años sin un solo ataque homófobo, de repente sufrimos una discriminación institucional, una discriminación de Estado. Y por fin un tribunal lo reconocía». Verónica: «Esa orden ministerial nos ofende. Es retrógada, obsoleta, anticuada, discriminatoria… Si ya hay distintos modelos de familia, no puede ser que haya algo que retrase tanto la Historia. Entiendo que es difícil de aceptar, pero para los homosexuales la reproducción sólo puede ser asistida. Es así. Y con esa orden, esa necesidad no está cubierta. Hay que derogar esa orden, el Ministerio tiene que eliminarla ya».

Es la orden de la infertilidad del «coito vaginal» como requisito para la reproducción asistida. Tania: «Parece que nuestra opción es un capricho, un antojo. Pero yo tengo el mismo instinto maternal que cualquier mujer heterosexual…». «… Y nuestra infertilidad viene de no acostarnos con hombres. Por eso debemos tener el mismo derecho que las mujeres que sí lo hacen», remata Verónica. Y vuelve Tania: «La gente es tolerante, pero tienes que andar justificando por qué reclamas ese derecho…». «… Porque además afecta a laSeguridad Social y la pagamos todos. Por eso hay más oposición», vuelve a coronar Verónica.

– ¿Qué será esta sentencia?

Verónica: «La sentencia va a ser la bomba. Es una satisfacción personal y colectiva, porque esperamos que sensibilice a la población y llegue a los políticos, que mueva conciencias para cambiar algo injusto». Tania: «Todo esto no está siendo fácil ; a mí me da bochorno, un poco de corte. Yo nunca había estado en un juicio. Me siento expuesta. Yo no quiero ser abanderada de nada, me gusta la intimidad. Todo esto me desborda».

Tania nos dice que está nerviosa por el texto que ustedes están leyendo, que nunca ha salido en un periódico y que tiene miedo a la homofobia de salón, a esa gente que no entiende la homosexualidad y se pone agresiva. Y en eso Verónica nos mira y le dice al cuaderno: «Sabemos que hay insultos e intolerancias. Incluso políticos que hacen leyes que discriminan. A mí me gustaría sentar a esa gente frente a mí para hablar. No de mal rollo. Yo me siento con ellos y se lo cuento».

Condado de Tennessee pedirá perdón a Dios por matrimonio gay

Noticia publicada en El Mañana

Algunos habitantes no están contentos con el fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos de legalizar el matrimonio entre homosexuales

ESTADOS UNIDOS.- Dicen que es mejor pedir perdón que permiso y así lo hará un condado de Tennessee.

La Comisión del condado de Blount tiene el orden del día planificado para su reunión de este martes: abordar los asuntos presupuestarios. Restructurar los comités. Aprobar una resolución para condenar la tiranía judicial y pedir la misericordia de Dios.

Al parecer, algunas personas en Blount —un condado de 122,000 habitantes justo al sur de Knoxville— no están contentas con el fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos que legalizó el matrimonio entre personas del mismo sexo en todo el país.

Así que la comisionada Karen Miller ha patrocinado una resolución que critica a la Corte Suprema y pide a Dios que perdone al condado cuando él finalmente, según el razonamiento de la resolución, destruya a Estados Unidos por el matrimonio entre personas del mismo sexo.

Obligados a hacerlo

“Adoptamos esta resolución ante Dios para que él pase de largo en su ira venidera y no destruya a nuestro condado, como lo hizo con Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas”, lee la propuesta de Miller.

Al parecer, nadie en el gobierno del condado de Blount tomará la ruta de Kim Davis y tratará de manera activa de evitar que los matrimonios entre personas del mismo sexo se lleven a cabo. Sin embargo, la resolución deja en claro que algunas personas en el condado sienten que están siendo obligadas a estar de acuerdo con algo que es pecaminoso.

“Adoptamos esta resolución suplicando su favor a la luz de que hemos sido obligados a cumplir y reconocer que el estado de Tennessee, al igual que muchos otros estados que tienen temor de Dios, podrían haber caído presa de un poder judicial anárquico al legalizar lo que Dios y la Biblia prohíben expresamente”, afirma la resolución.

La resolución también funciona como un llamado a las armas para quienes se oponen al matrimonio entre personas del mismo sexo.

“Nosotros, la legislatura del condado de Blount apelamos a los funcionarios del estado de Tennessee, al gobernador, al fiscal general, y a los miembros de la legislatura de Tennessee, para que se unan a nosotros, y utilicen la autoridad con la que cuentan a fin de proteger al matrimonio natural de las anárquicas opiniones de una corte”.

La resolución critica a un poder judicial federal que es “anárquico”, y acusa a los jueces federales de utilizar “poder que no les ha sido delegado”, al afirmar que la Corte Suprema estaba pisoteando los derechos de los estados, e insistió en que “es momento de recordarle a la Corte” que está ahí para juzgar, no legislar.

‘Pérdida de tiempo’

Al ser un condado rural en un estado conservador, no es de sorprenderse que el fallo sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo no sea tan popular en el condado de Blount. Sin embargo, parece haber una reacción inesperada a la resolución de Miller.

Ginny West Case, una educadora cristiana retirada, le dijo al periódico local The Daily Times que la ira venidera de Dios podría tener un objetivo distinto.

“Creo que la ira de Dios está más inclinada a caer sobre aquellas personas que son tan condenatorias y críticas”, le dijo al periódico.

Otro residente del condado, Brett Rich, dijo que el asunto era “una ridícula pérdida de tiempo y de dinero de los impuestos”.

Las opiniones del público sobre la resolución serán enérgicas… y coloridas. El Tennessee Equality Project, un grupo de defensa que lucha por los derechos de los homosexuales en el estado, insta a las personas a expresarse en contra de la resolución en la reunión de este martes, y a vestir de rojo para demostrar su apoyo hacia el matrimonio entre personas del mismo sexo.

El Sínodo reflexiona sobre la eucaristía de los divorciados vueltos a casar y rechaza el matrimonio gay

El Papa Francisco, hoy, en el Sínodo

El Papa Francisco, hoy, en el Sínodo. ETTORE FERRARIEFE

Las parejas de divorciados vueltos a casar no pueden acceder a la eucaristía, no por el “naufragio del primer matrimonio” sino a causa de la “convivencia en la segunda relación”. Así lo ha asegurado esta mañana el cardenal Peter Erdö, arzobispo de Budapest y relator general del Sínodo, durante la lectura del documento introductorio de la primera sesión de trabajo del Sínodo ordinario sobre la Familia que arrancó este domingo en el Vaticano. El Sínodo reflexionará sobre esta y otras cuestiones, como la acogida de los homosexuales en la Iglesia, desde hoy y hasta el 25 de octubre.

El cardenal Erdö leyó un resumen de los temas más importantes sobre los que debatirá la asamblea sinodal durante las próximas semanas. Sobre los divorciados que se han vuelto a casar aseguró que es “necesario un acompañamiento pastoral misericordioso” excluyendo la posibilidad de que puedan acceder al sacramento de la eucaristía. ‘Instrumentum Laboris’, el documento preparatorio de éste Sínodo que parte de las conclusiones del documento final del precedente Sínodo sobre la familia celebrado en octubre de 2014, ya recogía la cuestión sobre los divorciados vueltos a casar porque durante la anterior asamblea se reflexionó sobre la posibilidad de que pudieran acceder a la eucaristía. Pero todavía es necesario profundizar en esta cuestión, según el cardenal Erdö. El arzobispo de Budapest recordó además como la integración de estas personas en la Iglesia puede realizarse de varias maneras “diferentes de la admisión a la eucaristía”.

Según el documento leído por el cardenal húngaro, Dios perdona al pecador a través de la misericordia, pero es necesario que haya una “reconversión”. “El pecado no es sólo el comportamiento que puede haber provocado el divorcio en el primer matrimonio”, aclara Erdö. “No es el naufragio del primer matrimonio, sino la convivencia en la segunda relación lo que impide el acceso a la eucaristía”, asegura el arzobispo de Budapest.

El cardenal húngaro ha explicado otras cuestiones que serán afrontadas durante las próximas semanas como los desafíos de la familia en la sociedad contemporánea, la denuncia del aborto y la defensa de la vida, o la pobreza y el problema de la inmigración, que provoca la “disgregación de las familias en muchas partes del mundo”. Respecto al capítulo sobre la atención pastoral de las personas con tendencias homosexuales, Erdö recordó que –como recoge el documento conclusivo de la anterior asamblea sinodal– “cada persona tiene que ser respetada en su dignidad independientemente de su tendencia sexual”, pero rechazó el matrimonio entre personas del mismo sexo. “No existe fundamento alguno para asimilar o establecer analogías, ni siquiera remotas, entre las uniones homosexuales y el diseño de Dios sobre el matrimonio y la familia”.

‘El Sínodo no es un parlamento’

Durante la homilía con la que ha saludado a los participantes del Sínodo de los Obispos sobre la Familia, el Papa Francisco ha asegurado que el Sínodo no es un parlamento para reunir un consenso común. Y ha pedido no dejarse asustar por las seducciones del mundo y expresarse con franqueza. “El Sínodo no es un congreso, un parlamento o un senado donde nos ponemos de acuerdo”, ha dichoFrancisco. “Es un caminar juntos con el espíritu de colegialidad”.

En este sentido, el cardenal André Vingt-Trois, arzobispo de París, presidente de turno del Sínodo y uno de los tres padres sinodales encargados de la presentación este lunes de la primera sesión de trabajo de la asamblea, ha insistido en que “no hay que esperar que el Sínodo recomiende al papa que disposición general debe tomar”. “Si habéis venido a Roma con la idea de un cambio espectacular en la doctrina -ha asegurado el cardenal francés– os iréis decepcionados”. Porque como ha añadido monseñor Bruno Forte, arzobispo de Chieti-Vasto y secretario especial del Sínodo, tras esta asamblea sinodal no habrá grandes cambios en la doctrina católica. “No es un sínodo doctrinal sino pastoral como lo fue el Concilio Vaticano II” que busca encontrar el modo de acercar la Iglesia “a los hombres y mujeres de nuestro tiempo”.

Vulnerado el derecho fundamental de dos lesbianas a su reproducción asistida

Fundación Jiménez Díaz de Madrid

Fundación Jiménez Díaz de Madrid. SERGIO GONZÁLEZ

El hospital Fundación Jiménez Díaz y la Comunidad de Madrid han sido condenados por “vulnerar el derecho” de dos lesbianas “a no ser discriminadas por su orientación sexual” en un proceso de reproducción asistida. Y aunque ambos organismos interrumpieron el tratamiento basados en una orden ministerial que impide el acceso a estas técnicas a mujeres solas o lesbianas (sólo se permitirá la fecundación médica a quienes no se hayan quedado embarazadas tras un año de “coito vaginal”, es decir, con un hombre) y luego lo retomaron, el Ministerio de Sanidad ha sido absuelto. ¿Por qué? Porque el Ministerio “no tiene competencias en la prestación sanitaria”.

Lo cuenta todo una sentencia del Juzgado de lo Social Número 18 de Madrid, que estima parcialmente la demanda de la organización Women’s Link Worldwide y que habla de “daños morales y patrimoniales”, “vulneración de un derecho fundamental” y discriminación, aunque “escasa en el tiempo”, porque la mujer “tenía derecho a seguir sometida a tratamiento”.

La Fundación Jiménez Díaz ya ha anunciado que va a recurrir la sentencia “porque se limitó a aplicar una norma estatal vigente” y porque, como reconoce el fallo judicial, “no existió voluntad de discriminación”.

Mientras, el Ministerio se ha limitado a decir que “respeta” la decisión de la juez y, al menos de momento, no tiene intención de modificar la polémica orden llevada por el equipo de la entonces ministra Ana Mato al Consejo Interterritorial de Sanidad, que la aprobó tiempo antes.

La sentencia, que penaliza a la Fundación Jiménez Díaz, por la responsabilidad de la violación del derecho fundamental a la no discriminación y a la Consejería de Sanidad madrileña como responsable de la prestación de la asistencia sanitaria,es pionera en España. Es la primera vez que un tribunal condena a una institución por la orden ministerial de noviembre de 2014, un texto señalado como discriminatorio por muchos colectivos y partidos políticos durante el último año y ahora por los jueces. Tanto el hospital como la Consejería deberán indemnizar a la mujer de la pareja que se sometió a los tratamientos con 4.875 euros por el “agravamiento” del daño psicológico que le produjo el retraso de la atención sanitaria de fecundación y el patrimonial, derivado de los gastos que tuvo en una clínica privada a la que acudió “para evitar dilaciones”.

El tuétano de la cuestión estriba en la prioridad que el centro sanitario y la Administración autonómica dieron a una orden ministerial sobre una ley. La juez señala que la Ley 14/2006 sobre Técnicas de Reproducción Asistida, donde se establece el derecho a los tratamientos de reproducción asistida, “con independencia de su estado civil y orientación sexual”, es de rango superior a la Orden Ministerial y por lo tanto, según la sentencia, “las normas de rango inferior que se dicten no pueden ir en contra de lo dispuesto en la Ley, se deben aplicar las normas según la jerarquía normativa.”

La Orden Ministerial 2065/2014 publicada el 31 de octubre de 2014 y que el Ministerio de Sanidad distribuyó a las comunidades autónomas para su aplicación, excluye de los tratamientos de reproducción asistida a todas las mujeres sin una pareja masculina: “Ausencia de consecución de embarazo tras un mínimo de 12 meses de relaciones sexuales con coito vaginal sin empleo de métodos anticonceptivos”. Para la juez, “al tener una relación afectiva con otra mujer, este hecho es imposible y se la discrimina por su condición sexual”. Por eso condena a la Fundación, “que debió interpretar la norma de acuerdo con la Ley” y a la Comunidad de Madrid, que es “responsable de la prestación sanitaria y la concertó con la Fundación”.

La historia de Verónica y Tania (nombres no verdaderos por su expreso deseo de preservación de la intimidad) arranca en abril de 2014, cuando una de ellas inició un tratamiento de reproducción asistida, continuado después en julio con otro de fecundación in vitro. Ese primer ciclo se cerró tras comprobar que no existían embriones que transferir.

La Fundación Jiménez Díaz citó a la mujer para marzo de 2015 con la intención de iniciar un segundo ciclo. Sin embargo, el propio hospital adelantó muchos meses la cita y en noviembre de 2014 llamó a la pareja para comunicarle oralmente que no podría iniciar el segundo ciclo por la aprobación de la orden ministerial.

Unos días después, en diciembre de 2014, las dos mujeres presentaron una reclamación por escrito en la que pidieron la continuación del tratamiento, la explicación de la negativa del centro y la entrega del expediente médico.

En enero de 2015 la Fundación les comunicó por carta, tanto a ellas como a otros pacientes, la imposibilidad de la continuación del tratamiento debido a la vigencia de la orden del Gobierno central.

Para “evitar dilaciones” en el proceso de fecundación, la mujer acudió a una clínica privada de Valencia, donde se sometió a pruebas de fertilidad e intervenciones quirúrgicas en enero, marzo y abril de este año, según refleja la sentencia.

En abril, la Fundación llamó a la mujer y le dijo que aun “a la espera de instrucciones por parte de la Comunidad de Madrid” la citaba para el 13 de mayo, un movimiento que repitió con otros casos. A partir de ahí, la mujer fue readmitida en el tratamiento, que, aunque no provocó embarazo, sí “mejoró la calidad del embrión”.

La sentencia sostiene que la Fundación no tuvo voluntad de discriminar por orientación sexual a la mujer, pero “de hecho se produjo esa discriminación”. Si bien, “escasa en el tiempo”, según la juez. Es decir, entre finales de noviembre de 2014, fecha en que se le comunica que no seguirá en tratamiento, hasta finales de abril de 2015, cuando se le dice a la mujer que podrá ser sometida al segundo ciclo unos días después. El fallo también afirma que no hubo mala fe en el hospital porque se informó rápidamente a la pareja (se adelantó el ‘no’ de marzo de 2015 a noviembre de 2014).

La Fundación Jiménez Díaz asegura que aun estando a la espera de instrucciones de la Comunidad de Madrid, se citó a la mujer para un segundo ciclo “por el beneficio de la paciente” y que sigue “pendiente de otro tratamiento”. Además, subraya que atiende “al margen de la condición sexual” de los pacientes y que lo hace “con el máximo respeto a la legalidad vigente”.

“Aunque la Fundación Jiménez Díaz había reiniciado nuestro tratamiento, decidimos seguir adelante con la demanda para que se reconociera la discriminación que sufrimos nosotras y para evitar que otras mujeres pasen por situaciones semejantes” han dicho Verónica y Tania al conocer la sentencia.

“Esta decisión sienta un gran precedente judicial porque es clara en afirmar que se debe interpretar siempre la norma de acuerdo con la ley de rango superior, y supone, además, una victoria para todas las mujeres que quieren acceder a este tipo de tratamientos de reproducción asistida, sin importar si tienen pareja masculina y sin importar su lugar de residencia” señala Glenys de Jesús, Directora Legal de Women’s Link , la ONG que llevó el caso a los tribunales, y añade “si bien la jueza no puede condenar al Ministerio de Sanidad, el espíritu de la sentencia no deja lugar a dudas sobre la necesidad de derogar o no tener en cuenta una ley de rango inferior que además es claramente discriminatoria”.

Expulsado del instituto por ser gay

A Lance Sanderson no solo se le prohibió la entrada a la fiesta de inicio de curso. Se le amonestó con una semana de castigo

Lance Sanderson

Lance Sanderson

En algunos institutos norteamericanos, además del prom o baile de graduación, realizan anualmente una fiesta con motivo del incio del nuevo curso. Es el caso del Christian brothers High School, una institución privada masculina que tiene a Lance Sanderson entre sus alumnos de último curso. El joven, decidió acudir a la fiesta con su pareja, un chico de otro colegio cercano. Y esto fue lo que pasó:

“Se me negó la oportunidad de llevar a mi cita al baile porque somos del mismo sexo. Intenté convencerles, pero lanzaron varios mensajes en la red interna del colegio informando a todos los estudiantes de las citas con personas del mismo sexo estaban prohibidas. Por otro lado, se animaba a todos los chicos a que trajeran a chicas de otros colegios al baile”, cuenta Sanderson en su página de Facebook.

Inició una campaña de Change.org que ya supera las 25.000 firmas. Las redes, por su parte, y junto al hashtag #letLanceDance (deja a Lance bailar) llevan toda la semana exigiendo que el colegio se retracte.

El Papa llama a la Iglesia «a no cerrar sus puertas a quien se equivoca»

Francisco abre el Sínodo sobre la Familia marcado por la confesión de un cura homosexual

El papa Francisco ha advertido este domingo durante la misa de apertura del Sínodo de la Familia de que la verdad no cambia según “modas pasajeras” pero también ha llamado a la Iglesia a no cerrar sus puertas a quien se equivoca. “Una Iglesia con las puertas cerradas se traiciona a sí misma y a su misión, en vez de puente se convierte en barrera”, ha avisado el Pontífice en su homilía ante los participantes del Sínodo. De esta forma, ha insistido en las palabras de San Juan Pablo II quien dijo que la Iglesia debe combatir el mal o el error pero acoger y amar al hombre que se equivoca.

El Papa ha subrayado que en un contexto social y matrimonial “bastante difícil”, la Iglesia está llamada a desarrollar su misión “en la verdad, la fidelidad y la caridad”. En este sentido, ha recordado a los cardenales, obispos, sacerdotes, religiosos y laicos presentes que “la verdad no cambia según modas pasajeras u opiniones dominantes” y les ha advertido del “riesgo fatal” que para el amor tiene una cultura sin verdad, donde el amor se convierte en egoísmo, en algo temporal, en mero sentimentalismo o en “un envoltorio vacío que se rellena”.

Si bien, también les ha avisado de que tampoco están para “señalar con el dedo para juzgar” sino para estar cercanos a las parejas heridas y mostrarles misericordia, para ser “hospital de campaña” y defender los valores fundamentales, para educar en el amor auténtico sin olvidar ser “buenos samaritanos con la humanidad herida”.

El amor duradero

Francisco ha lamentado que “cada vez haya menor seriedad en llevar adelante una relación sólida y fecunda” y que el amor “duradero, fiel y fértil es cada vez más objeto de burla y considerado como algo anticuado”. “Parece que las sociedades más avanzadas son las que tienen la tasa más baja de natalidad, y el mayor promedio de abortos, divorcios, suicidios y de contaminación ambiental y social”, ha alertado.

Asimismo, ha defendido que el matrimonio “no es una utopía de adolescentes” sino “un sueño de Dios” y se ha mostrado convencido de que incluso el hombre de hoy que “ridiculiza” esta idea y “corre tras los placeres de la carne”, se siente “atraído y fascinado por el amor fecundo y fiel” y “desea la entrega total”.

También se ha referido al drama de la soledad y ha señalado que este afecta hoy a muchos hombres: Los ancianos abandonados por sus propios hijos, los viudos y viudas, quienes han sido abandonados por su marido o su mujer, los inmigrantes y refugiados que huyen de la guerra o los jóvenes víctimas de la cultura del consumismo y el descarte. “Hoy se vive la paradoja de un mundo globalizado en el que vemos tantas casas de lujo y de gran altura pero menos calor de hogar”, ha puntualizado.