Barcelona impedirá oficiar matrimonios a concejales que se opongan a casar a parejas del mismo sexo

La concejala de ciclo de vida, feminismos y LGTBI, Laura Pérez

La concejala de ciclo de vida, feminismos y LGTBI, Laura Pérez EFE

El Ayuntamiento de Barcelona ha decidido que los concejales que expresan su objeción a casar a parejas del mismo sexo no puedan celebrar ningún tipo de boda. La decisión, anunciada este jueves por la concejala de Ciclo de Vida, Feminismos y LGTBI, Laura Pérez, y comunicada el lunes de la semana pasada a los concejales por la alcaldesa Ada Colau, responde a una situación producida en el año 2014. El entonces concejal del PP Óscar Ramírez se negó a casar a una pareja de mujeres. El caso llegó al Síndic de Greuges que lo consideró una violación de sus derechos.

El Consejo LGTBI de la ciudad llegó a la misma conclusión que el Síndic: que “la objeción de conciencia ante la celebración de un matrimonio de personas del mismo sexo constituye una vulneración de los derechos de los colectivos LGTBI”. Por eso la alcaldesa, que es quien delega la potestad de oficiar ceremonias de matrimonio, la retirará a aquellos concejales que manifiesten objeción a casar a parejas del mismo sexo para garantizar los derechos de este colectivo.

Este jueves se ha reunido el Consejo LGTBI para constituir un grupo de trabajo de la aplicación de la ley contra la LGTBIfòbia aprobada la pasada legislatura en el Parlament. “Hay que acompañar a las entidades que han trabajado para que se aprobara esta ley”, ha remarcado Laura Pérez, que ha explicado que actualmente están analizando desde el ayuntamiento el trabajo realizado en este sentido por el gobierno Trias y haciendo formación específica a los trabajadores municipales.

Impulso al Centro municipal de recursos LGTBI

El Ayuntamiento ha decidido destinar un local de 1.314 metros cuadrados para ubicar el Centro Municipal de Recursos LGTBI en respuesta a las medidas recogidas en el Plan Municipal LGTB 2010-2015. El proyecto se ha trabajado con el Casal Lambda, el Frente de Liberación Gay de Catalunya (FAGC), la Asociación de Padres y Madres de Gays, Lesbianas y Transexuales (AMPGIL), la Asociación de Familias Lesbianas y Gays, y Gays Positius, y ahora se abre a un proceso participativo.

Madrazo se desliga de la gestión de su exsubordinado en Bizkaia

Gonzalo Casal, principal acusado en la causa de la Cámara de la Propiedad, apela a su inocencia

import_8323149_4

BILBAO – Javier Madrazo, exconsejero vasco de Vivienda y Asuntos Sociales, aseguró ayer ante la Sección Segunda de la Audiencia de Bizkaia desconocer las supuestas irregularidades cometidas por el ex delegado territorial de Bizkaia de Vivienda, José María Gonzalo Casal, cuando en febrero de 2006 fue designado para liquidar la Cámara de la Propiedad Urbana de este territorio. En el juicio iniciado ayer, la fiscalía acusa a Gonzalo Casal de malversación de fondos al atribuirle el gasto de 1,5 millones de euros en obras realizadas en la sede de la Cámara, en la calle Henao de la capital vizcaina, cuando su cometido era liquidar dicha sociedad. Asimismo, se le acusa de contratación de personal y de desviar fondos de la Cámara de la Propiedad para la financiación de la película Ander. Junto a Gonzalo Casal se sentó también en el banquillo de los acusados Jon Alonso Hornes, contable contratado por Gonzalo Casal, a quien se le acusa de apropiarse de 106.000 euros. Para Gonzalo Casal hay una petición fiscal 5 años y 9 meses de prisión, además de 9 años y medio de inhabilitación absoluta, mientras que Alonso Hornes se enfrenta a una pena de 4 años y 9 meses de cárcel y 9 años de inhabilitación absoluta.

En su declaración en calidad de testigo de la acusación, Madrazo aseguró que encomendó esta tarea a Gonzalo Casal en función de la “profesionalidad y eficacia” que había demostrado como delegado territorial de Vivienda. El exconsejero aseguró que no era su cometido estar al tanto de las obras realizadas en la sede de la Cámara de la Propiedad, así como de la contratación de personal, pero dejó claro que sí era consciente del mal estado en el que se encontraba el edificio, así como del “déficit de personal con el que debía enfrentarse”. No obstante, aseguró que en su función como consejero de Vivienda no constaba el estar al corriente de las obras.

Con respecto a la película Ander, Madrazo reconoció que había un acuerdo entre el Gobierno vasco y la asociación sin ánimo de lucro Aukeratu para la financiación del filme, y que su departamento aportó 60.000 euros para la financiación de la película, pero desconocía si se habían desviado fondos de la Cámara para este fin o que José María Gonzalo Casal figurara como productor ejecutivo de la película y que Jon Alonso fuera el ayudante de producción. Además, afirmó que en lo relacionado a fondos, patrimonio y personal, Gonzalo no rendía cuentas a su departamento sino a Hacienda, área que, según afirmó, “me consta que estaba informada”.

OBRAS NECESARIAS El principal acusado, Gonzalo Casal, negó todas las acusaciones que pesan sobre su persona. Con respecto a la contratación de Jon Alonso como contable, aseguró que cuando le encomendaron la labor de liquidar la Cámara de la Propiedad se encontró con una total falta de personal para acometer esta labor. Afirmó, asimismo, que conocía a Alonso Hornes “solo de vista” y tras entrevistarse con él le contrató primero para un periodo de pruebas y más tarde, una vez superado este periodo, para ejercer las labores de contable. A este respecto, al de contratación de personal de forma directa y sin publicidad, aseguró que la Cámara era una entidad privada y que, por tanto, no estaba sometida a un régimen de contratación pública.

Gonzalo Casal aseguró en su declaración que esperaba que el cometido que le habían encomendado, la liquidación de la Cámara de la Propiedad, se llevara a cabo en un breve periodo de tiempo, lo que sí ocurrió con las cámaras de Gipuzkoa y Araba, cuyo proceso de liquidación se acometió con diligencia, pero causas ajenas a su voluntad retrasaron el proceso en Bizkaia. Con respecto a las obras, aseguró que fueron “necesarias” porque en el edificio “había cables por el suelo, no disponía de medidas de seguridad ni de accesibilidad, ni casi de instalación para internet, a lo que había que añadir que el inmueble está considerado patrimonio cultural y hubo que restaurar algunos elementos”. Sobre la película Ander, Gonzalo Casal explicó que era un encargo del Gobierno vasco y que únicamente “se adelantó una cantidad” hasta que se cobraran las aportaciones de las distintas administraciones.

UN MANDADO Por su parte, el otro acusado, Jon Alonso Hornes, aseguró en todo momento que él era un simple mandado que cumplía las órdenes de Gonzalo Casal, quien dijo que era el que manejaba todos los pagos y gastos. En su declaración, reconoció que ejercía labores de contable tanto para la Cámara de la Propiedad como para Aukeratu y por ello recibía una remuneración extra.

Así, según afirmó, Gonzalo Casal le abonó diversos ingresos, aparte de la nómina, al considerar que realizaba “trabajo extra sin remunerar”. Alonso reconoció haber recibido 106.000 euros, de los que afirmó que había devuelto la mitad. “Se lo comenté a una amiga y me dijo que no era normal los ingresos que me estaban dando, me pareció que la cosa se estaba desmadrando y devolví la mitad del dinero que me habían pagado de más, porque el resto ya me lo había gastado”, afirmó.

Acusan al delegado de Vivienda con Madrazo de repartir pisos por amiguismo

El juicio contra Txema Gonzalo y Jon Alonso por su gestión en la Cámara de la Propiedad descubre una supuesta red de complicidades políticas, personales y económicas

Txema Gonzalo y Jon Alonso, ayer, en la sala de vistas

Txema Gonzalo y Jon Alonso, ayer, en la sala de vistas. / I. PÉREZ

El exportavoz de Ezker Batua (EB), Serafín Llamas, vivió durante una larga temporada de manera presuntamente irregular en uno de los pisos de la extinta Cámara de la Propiedad en Bilbao, que fue rehabilitado y amueblado con fondos del organismo a pesar de que en ese momento se encontraba ya en proceso de liquidación. ¿Por qué vivía en un edificio que había pasado a ser de titularidad pública? «Porque se había separado recientemente» de su pareja, el hermano de Txema Gonzalo, que era el exdelegado territorial de Vivienda en Bizkaia en la época en la que Javier Madrazo dirigía ese departamento, su compañero de filas en EB y, en último término, la persona que había recibido el encargo de liquidar la Cámara de la Propiedad Urbana de Bizkaia como corporación de derecho público -proceso iniciado en febrero de 2006- para integrar sus bienes en la Administración.

Esta fue una de las principales revelaciones que dejó ayer el inicio del juicio que se sigue en la Sección Segunda de la Audiencia de Bizkaia contra el propio Txema Gonzalo y contra Jon Alonso -un trabajador contratado por el primero- a raíz de las numerosas irregularidades de gestión detectadas por el Tribunal Vasco de Cuentas Públicas (TVCP). Los testimonios recabados en la vista pública de ayer dejaron al descubierto una supuesta red de complicidades de carácter personal, político y económico que se tejieron al calor del proceso de liquidación de la Cámara y que fue la base de las supuestas irregularidades que se juzgan ahora.

La Fiscalía pide para Gonzalo 5 años y 9 meses de prisión -además de una inhabilitación absoluta por 9,5 años- por unos supuestos delitos de malversación de caudales públicos y prevaricación. En el caso de Alonso, que fue contratado como contable, el Ministerio Público pide 4 años y 9 meses de prisión -y 8 años de inhabilitación absoluta- por cooperación en la malversación.

Según la auditoría del Tribunal de Cuentas -adelantada por EL CORREO-, durante el proceso de liquidación se gastaron 4,3 millones de euros. Según sus cálculos, no deberían haberse desembolsado más de 1,7 millones ya que, sobre el papel, su función debía limitarse a realizar la gestiones oportunas para que el patrimonio de la entidad pasase directamente a engrosar las arcas de la Hacienda vasca. Sin embargo, durante su gestión se realizaron contrataciones sin respetar las normas de la función pública y se aprobaron «multitud de gastos e inversiones» que ahora, diez años después, han llevado a Gonzalo y Alonso al banquillo de los acusados. Entre los numerosos gastos que la acusación considera «ajenos al proceso de liquidación» se encuentran los 1,7 millones desembolsados para «rehabilitar» y «amueblar» un edificio de la calle Henao de Bilbao, el convenio suscrito con la asociación Aukeratu para financiar la película de temática gay ‘Ander’, un viaje a un festival de cine a Montevideo y la contratación de una agencia de detectives.

En este contexto, la declaración de Jon Alonso supuso un auténtico vuelco en el proceso. El extrabajador, que conocía de «vista» a Gonzalo, confesó haber cometido diversas irregularidades. Admitió que percibió en su cuenta corriente 106.000 euros de los fondos de la Cámara al margen de su nómina, que rondaba los 1.500 euros netos. Según dijo, estos pagos fueron autorizados por Gonzalo por los trabajos contables que realizó para Hegoak -una organización sin ánimo de lucro que trabaja por los gays y lesbianas-, para Aukeratu -la entidad que recibió el encargo de gestionar Berdindu, el servicio del Departamento vasco de Asuntos Sociales de apoyo a los homosexuales- y para la película ‘Ander’. El imputado aseguró que, «cuando las cosas empezaron a desmadrarse», pidió consejo a una amiga, que le dijo que aquellos pagos eran una «bomba», que eran «ilegales». Y decidió reintegrar a la Cámara «lo que tenía» en ese momento: unos 53.000 euros.

Desde Uruguay a Miribilla

El declarante aseguró que Gonzalo era quien «decidía todo» y el único que tenía «firma» para autorizar los pagos. También le responsabilizó de las contrataciones de personal de «amigos del partido» (EB) para trabajar en la Cámara. A preguntas de las acusaciones, Alonso confesó que Serafín Llamas residía en una de las viviendas y aseguró que Gonzalo invitó a venir a Bilbao a un ciudadano uruguayo con doble nacionalidad -J. A. García Casal- para trabajar en Berdindu y vivir en un piso del Gobierno vasco en el barrio de Miribilla. Las facturas de esta vivienda pública -dijo- también se abonaban con cargo a los fondos de la extinta Cámara de la Propiedad. Y afirmó que Madrazo «estaba al tanto» de lo que ocurría en la entidad.

Las confesiones de Alonso fueron de tal calibre que el letrado de Gonzalo preguntó si había llegado a algún pacto con las acusaciones para rebajar la pena. Txema Gonzalo, por su parte, aseguró que las obras en el inmueble fueron «totalmente necesarias» por las carencias que sufría y por la necesidad de trasladar allí parte de los servicios públicos que ofrecía su departamento. También dijo que envió un informe sobre la remodelación al Departamento de Hacienda -entonces dirigido por Idoia Zenarruzabeitia (PNV)- y que «en ningún momento se le notificó» que hubiera irregularidades. Sobre el hecho de que se fichase a seis personas «de forma directa y sin publicidad», el imputado aseguró que la Cámara era una entidad privada y, por tanto, no estaba sometida a las leyes de contratación pública. Además, aseguró desconocer cómo llegaron los 106.000 euros a la cuenta bancaria de Alonso y deslizó la responsabilidad sobre el otro imputado. Las declaraciones se retomarán el viernes.

Madrazo asegura que su exdelegado no debía informarle sobre las obras en la Cámara

El exconsejero de Vivienda y Asuntos Sociales del Gobierno vasco, Javier Madrazo, insistió ayer en que Txema Gonzalo no le tenía que dar cuenta sobre los temas relacionados con los «fondos, patrimonio y personal» del proceso de liquidación, aunque sí conocía las obras de remodelación del edificio. Eso era -dijo- responsabilidad del Departamento de Hacienda. Madrazo explicó que sufrían «problemas por falta de personal» y dijo desconocer que se habían repartido pisos de forma irregular.

Una niña de la clase de Diego, también acosada: “Le llamaban maricón”

«Diego sufría lo mismo que yo. Le llamaban soso, maricón, empollón de mierda, se reían de él, se reían hasta de cómo se sentaba en su pupitre, cuando en realidad él era más listo que todos ellos. Le hacían el vacío, igual que me lo hacían a mí, porque yo también sacaba muy buenas notas. Al final, intentas sacarlas peores, porque así te dejan en paz. En quinto de Primaria el rendimiento de Diego empezó a bajar, sus notas empeoraron, no quería ni jugar en el patio, no quería hacer deporte, yo misma tenía que animarle para que jugara. Estaba muy triste. Me da mucha pena lo que le ha pasado. Me siento culpable, porque si me lo hubiera llevado conmigo igual no hubiera pasado nada de esto».

Así, con esta singular madurez, se explica Valeria, de 12 años, que coincidió cinco, en la misma clase del colegio Nuestra Señora de los Ángeles, con Diego González, el niño de 11 que se suicidó lanzándose desde la ventana de su vivienda familiar, en el quinto piso de un edificio de Leganés (Madrid), el pasado 14 de octubre.

Después del año y medio de acoso escolar que Valeria y sus padres denuncian en EL MUNDO, la niña cambió de colegio. Fue en septiembre pasado, hartos sus padres de buscar respuestas en este centro religioso en el que ya se han registrado otras denuncias por acoso. «Sólo nos decían que todo se arreglaría, que era cosa de niños, que sólo tenían que jugar entre ellos y todo mejoraría», explica Liberio, padre de Valeria. «Me decían que lo que me hacían me haría más fuerte, que me acostumbrara», narra la niña, amiga íntima de Diego y que se fue del Nuestra Señora de Los Ángeles en septiembre pasado. El crío se mató el 14 de octubre, y dejó una nota en la que decía: «No puedo volver al colegio y esta es la única forma de no ir».

Los padres de esta niña han solicitado declarar ante la juez de Instrucción 1 de Leganés, que estaba a punto de dar carpetazo a la muerte del niño cuando los padres hicieron pública la misiva que dejó a su suicidio, que apuntaba inequívocamente al centro. La magistrada ha reabierto la causa apoyándose en un testimonio que apunta a un presunto acoso sexual en el centro, pero varios padres han solicitado declarar para narrar otras irregularidades.

Cuando Valeria, que comenzó a salir del colegio temblando y llorando a principios de 2014, llevaba varias semanas de terapia, sus padres recibieron de su psicóloga una inesperada noticia que la propia niña narra ahora a EL MUNDO: «El padre Rivas, el director, me llevó a su despacho junto con las niñas que me estaban acosando, una de las cuales era hija de profesores del centro. Me sentó ante él, dejó aparte a las otras niñas, y me dijo que si seguía quejándome a mis padres de que me acosaban, me expulsarían del colegio. A ellas no les dijo nada».

Terrores nocturnos

Valeria llevaba ya meses con terrores nocturnos, sin ganas de ir a clase, «llorando todo el rato», explican sus padres, «pero nunca nos había contado eso, que el propio director la había metido en su despacho para chantajearla». La circunstancia sorprendió a los progenitores, pero más se sorprendieron cuando ellos mismos vivieron esa misma situación en sus carnes: «Increíblemente, el director nos metió en el despacho para decirnos que dejáramos de decir que nuestra hija sufría acoso, que eso no pasara de la puerta de aquel despacho y que nosotros no teníamos ni idea de lo que es acoso escolar».

Poco después, «muy impresionados con la actitud del colegio, que consistía en negarlo todo y taparlo todo», cambiaban a su hija de centro. «Ahora está en otro colegio, por cierto que también religioso, y ha cambiado de la noche al día. El centro está muy vigilante con ella y nos apoya al 100%. Es decir, lo que uno espera de un colegio: que enseñen a los niños a respetarse».

Uno de los primeros episodios del acoso que refiere Valeria (el nombre es ficticio para proteger la identidad de la menor) tuvo lugar delante de su propia tutora, en el Nuestra Señora de Los Ángeles: «La niña que empezó todo me llamó gilipollas delante de todos, incluso de la profesora, que no hizo nada», explica la niña.

«Al principio, la verdad es que también a nosotros nos parecía una cosa de críos, no nos preocupaba», cuenta su padre. «Nos contaba que tenía problemas con otras niñas y pensábamos que todo pasaría, que sería cosa de tiempo. Pero luego su ánimo empezó a cambiar. Le habían puesto brackets en los dientes y le llamaban de todo».

“Me decían que era un oso”

Valeria: «Tengo como vello en el cuerpo y me decían que era un oso… Me acababan haciendo el vacío muchos niños porque esta niña lo decía». Su padre:«Ir a clase se le volvió un infierno. Hubo incluso una vez en que la empujaron escaleras abajo, se hizo una fisura en el pie y los profesores ni siquiera la llevaron al médico. Cuando la fuimos a recoger, tenía el pie que no podía andar. Era todo increíble. Cuando tuvo problemas, preguntamos por pedagogos u orientadores que tuvieran en el colegio. Nos dijeron que no había nada, que todo se arreglaría solo, que no nos metiéramos».

Los progenitores creen que en el origen de todo se halla un desencuentro que ellos mismos tuvieron con los padres de esta niña: «Fue una bobada y jamás le dijimos nada a ella, pero da la impresión de que ellos no hicieron precisamente eso». Los padres de esta otra cría son profesores en el centro, «que es bastante como una secta en determinadas cosas», dice el padre de Valeria. Lo que hubiera quedado en un choque infantil se enquistó «porque el colegio se negó a defender a nuestra hija, se negó incluso a intervenir: decían que todo se arreglaría por sí solo, que los niños lo único que tenían que hacer era jugar juntos».

Los padres de Valeria, al igual que la niña, dicen sentirse «un poco culpables con lo que le ha pasado a Diego. Si hubiéramos denunciado, igual todo hubiera sido diferente…», explica su padre, con la mirada perdida.

Gonzalo: “Gastar 1,5 millones para remodelar la Cámara fue totalmente necesario”

El exdelegado de Vivienda en Bizkaia cuando Javier Madrazo (EB-IU) dirigía ese departamento, José María Gonzalo, ha defendido hoy que fue “totalmente necesario” el gasto de 1,5 millones de euros en remodelar la Cámara de la Propiedad en Bilbao en el marco del proceso de liquidación de dicha entidad iniciado en 2006. La Fiscalía, en su escrito, eleva los gastos totales de remodelación a 1.815.584 euros.

La Sección Segunda de la Audiencia de Bizkaia ha comenzado este martes el juicio contra Gonzalo por los delitos de malversación y prevaricación por los que  la Fiscalía pide una pena de 5 años y 9 meses de prisión, además de inhabilitación absoluta por 9 años y medio.

En este mismo juicio también está acusado de cooperación en la malversación Jon Alonso, contratado por Gonzalo, para quien la Fiscalía solicita cuatro años y 9 meses de prisión, y 8 años de inhabilitación absoluta.

Según ha justificado hoy Gonzalo en su declaración, las obras fueron “necesarias” porque en el edificio “había cables por el suelo, no disponía de medidas de seguridad ni de accesibilidad, ni casi de instalación para Internet, a lo que había que añadir que el inmueble está considerado patrimonio cultural y hubo que restaurar algunos elementos”.

El fiscal y la acusación particular, en representación del Gobierno Vasco, consideran que dichas obras eran “ajenas al proceso de liquidación”, aunque Gonzalo ha argumentado que parte de su departamento se ubicó en dicho inmueble por falta de espacio en otros edificios públicos y que desde allí se ofrecía un servicio público al ciudadano.

La Fiscalía mantiene que Gonzalo “transfirió 106.653 euros desde la cuenta de la Cámara de la Propiedad a la cuenta de Jon Alonso” en ingresos sucesivos desde el 23 de junio de 2008 hasta el 8 de julio de 2009. Asegura que con el mismo ánimo lucrativo, “transfirió desde la misma cuenta a la de una asociación de la que era administrador 420.000 euros” también entre 2008 y 2009 y pagó con cargo a la Cámara de la Propiedad gastos por importe de 34.681 euros, además de compras destinadas a la rehabilitación del edificio, adquisición del mobiliario y enseres incurriendo “en unos gastos totales de 1.815.584 euros “ajenos a su proceso de liquidación y actuando el acusado al margen de los órganos competentes para estas contrataciones y de cualquier procedimiento administrativo”.

Gonzalo ha resaltado también que se envió un informe sobre la remodelación al Departamento de Hacienda del Gobierno Vasco, en aquel momento dirigido por Idoia Zenarruzabeitia (PNV) y que “en ningún momento se notificó que se hubiera detectado algo incorrecto”.

También le acusan de contratar a seis personas, entre ellas a Alonso como contable, “de forma directa y sin publicidad”, aunque Gonzalo ha afirmado que la Cámara era una entidad privada y que, por tanto, no estaba sometida a un régimen de contratación pública.

Dinero por adelantado

Sobre otra acusación referida a la transferencia de fondos de la Cámara de la Propiedad para financiar la película de temática gay “Ander”, ha explicado que dicho filme era una encargo del Gobierno Vasco y que únicamente “se adelantó una cantidad” hasta que se cobraran las aportaciones de las distintas administraciones.

Ha rechazado también que autorizara el pago de un total de más de 104.000 euros al otro acusado, Jon Alonso, y ha afirmado que se le pagaba su nómina “sin ningún abono particular”.

El contable, sin embargo, ha relatado en su declaración que Gonzalo le abonó diversos ingresos, aparte de la nómina, al considerar que realiza “trabajo extra sin remunerar” ya que también le encargaron la contabilidad de otras entidades.

“Se lo comenté a una amiga y me dijo que no era normal -ha relatado Alonso-, me pareció que la cosa se estaba desmadrando y devolví la mitad del dinero que me habían pagado de más, porque el resto ya me lo había gastado”.

Durante la primera sesión del juicio también ha comparecido como testigo Javier Madrazo, quien ha asegurado que conocía las obras de remodelación del edificio, pero que en lo relacionado a fondos, patrimonio y personal, Gonzalo no rendía cuentas a su departamento sino a Hacienda, área que, según ha dicho, “me consta que estaba informada”. “Sí puedo decir que había problemas de falta de personal”, ha precisado.

Respecto a la película “Ander”, Madrazo ha mantenido que su consejería aportó 60.000 euros para su financiación y que desconocía que la Cámara hubiera adelantado fondos.

La Italia católica se moviliza en su último intento contra el matrimonio homosexual

Italia se moviliza para reclamar el reconocimiento de las uniones homosexuales

Italia se moviliza para reclamar el reconocimiento de las uniones homosexuales EFE

Han pasado 2.000 años desde que los romanos se reuniesen en el Circo Máximo para contemplar a las cuadrigas bramando alrededor de la pista. Pero, el pasado sábado, una nueva batalla fue rescatada de la antigüedad. Con pancartas en lo alto que rezaban “Defendemos a nuestros hijos” y “La familia se basa en el matrimonio entre un hombre y una mujer”, cientos de miles de personas se reunieron por “El día de la familia” en protesta ante un proyecto de ley que legaliza las uniones entre parejas del mismo sexo.

“Tenemos muchos nietos; su futuro está destruido si el matrimonio se destruye”, manifestaba Ida. “Los niños tienen el derecho de tener un padre y una madre. Para crecer de una forma saludable, necesitan una figura masculina y femenina”. La ley, que se está siendo fuertemente debatida en el senado, tiene por objeto garantizar derechos jurídicos para las parejas homosexuales por primera vez en Italia. Entre las clausulas se encuentran las uniones civiles, el derecho a heredar la pensión de sus parejas y un controvertido artículo sobre la “adopción de un hijastro”, que permitirá legalmente que un niño tenga padres del mismo sexo en el caso de que una persona homosexual adopte al hijo biológico de su pareja.

Las concentraciones en Roma tuvieron un trasfondo tanto patriótico como religioso. Se vendían banderas italianas y ondeaban las pancartas religiosas mientras los curas y las monjas caminaban entre la multitud. “Creo en el Cristianismo y en los valores familiares. Nuestros hijos no están en venta”, declaraba Gianluca, un participante de la manifestación.

Los organizadores estiman que dos millones de personas asistieron a las protestas, una cifra que no ha podido ser corroborada de momento por la policía italiana. Los jóvenes voluntarios se ofrecieron a ayudar y numerosas familias desplegaron manteles de picnic y sillas de camping en la hierba. No es coincidencia que, mientras se han garantizado derechos a las parejas del mismo sexo en otros países con mayoría católica, como España e Irlanda, el hogar del Vaticano continúe siendo el último país en el oeste de Europa que no ofrece derechos a los homosexuales.

El referéndum irlandés, celebrado el pasado año, para legalizar el matrimonio homosexual fue calificado como “fracaso para la humanidad” por el Cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano. El nuevo proyecto representa un tremendo desafío a las autoridades de la iglesia católica en un momento en el que su influencia sobre la política italiana y la sociedad se está viendo disminuida. La causa ha movilizado también a conservadores de todos los partidos, que argumentan que la ley traiciona a la “familia natural” y a la constitución italiana.

“En Italia, el tribunal constitucional proclama que el matrimonio es solo entre un hombre y una mujer…esta ley es un fraude, porque requiere cambiar la constitución”, dice Gianfranco Amato, uno de los organizadores de la protesta. De hecho, la constitución italiana se refiere a “cónyuges” sin especificar el género, aunque el tribunal estipulase en 2010 que prohibir las uniones entre personas del mismo sexo no violase los derechos constitucionales de los ciudadanos. Mientras que el proyecto de ley no menciona en ningún momento la palabra “matrimonio”, otro organizador de la movilización, Toni Brandi, defiende que las uniones entre homosexuales son un “ataque directo” a la tradición del matrimonio.

El Papa en contra del matrimonio ‘que no quería Dios’

Los manifestantes han aguardado a las declaraciones del Papa Francisco con entusiasmo, que no ha emitido un comentario acerca de la ley pero ha dejado claro su punto de vista sobre el asunto. “No puede haber confusión entre la familia que quería Dios y cualquier otro tipo de unión”, manifestó el pasado mes.

Aquellos en contra de la ley han encontrado un respaldo fantástico en la figura del cardenal Angelo Bagnasco, presidente de la conferencia italiana de los obispos, que ratificó que el tener hijos no debía ser un derecho. “Los niños tienen el derecho de crecer con una madre y un padre. La familia es un hecho antropológico, no ideológico”, añadió.

Pero la influencia de la iglesia es marcadamente más débil que en 2007, cuando triunfó la campaña política en contra del proyecto de ley por el matrimonio homosexual. Los organizadores de “El día de la familia” se han esforzado en remarcar que el evento ha sido impulsado por los ciudadanos, no por la iglesia, y han destacado que entre los manifestantes se encontraban también laicos y musulmanes.

Cuando los senadores comenzaron a debatir el proyecto en la mañana del martes, una densa columna de humo sobre Roma hacía desaparecer la basílica de San Pedro de las panorámicas. Pero Alessia Crocini, quien tiene un hijo con su pareja Chiara, afirma que la fortaleza de la oposición de la iglesia continúa siendo palpable en la ciudad eterna. “Somos un símbolo, el último reducto. Es como si la iglesia fuese a colapsar [si la ley sigue adelante], el Vaticano fuese a caer y San Pedro a desmoronarse”, expone. “Así que es una resistencia muy potente”.

El proyecto de ley italiano llega seis años después de que Argentina -donde el Papa fue arzobispo de Buenos Aires- legalizase los matrimonios entre personas del mismo sexo. El cardenal Jorge Mario Bergoglio, como era entonces conocido el Papa, se opuso abiertamente a la ley, aunque los activistas se apoyen en que el pontífice admitió su apoyo en secreto a las uniones del mismo sexo.

El alcance de la ley: de la iglesia a los negocios

Más allá de la iglesia, el debate ha alcanzado el sector empresarial en Italia con la compañía de trenes Italo ofreciendo un 30% de descuento a los pasajeros que se dirigiesen al “Día de la familia”. La firma se ha defendido en que los motivos de la decisión eran “puramente comerciales”. No es una estrategia sin precedentes pues, en 2013, el presidente de la empresa de pasta Barilla advirtió que nunca utilizaría a una pareja homosexual en sus anuncios. Si a los compradores no les gusta su enfoque, pueden comprar otra marca de pasta, añadió Guido Barilla.

Pero también hay señales de esta corriente de cambio. La presión pública hizo que Barilla emitiese una disculpa, mientras que la firma de moda D&G se enfrentaba a un boicot después de que los diseñadores Domenico Dolce y Stefano Gabbana criticasen a las familias formadas por personas del mismo sexo. El sábado, estos mismos diseñadores lanzaron una nueva linea de bolsos y camisetas homenajeando a las parejas homosexuales.

En política, el principal opositor de la ley ha sido el ministro del Interior, Angelino Alfano, un antiguo pupilo de Silvio Berlusconi, que ha declarado recientemente que la adopción de los hijastros amenaza con fomentar el “repugnante y negocio ilícito” de la maternidad de alquiler a Italia. Alfano forma parte de una difícil coalición con el primer ministro de izquierdas, Matteo Renzi, que ha urgido a los legisladores a retirar el proyecto de ley.

“La sociedad y la gente está mucho más avanzada que los políticos”, afirma Crocini. “Ante este tipo de situaciones sociales nunca obtenemos malas reacciones, estamos ofendidos o sufrimos discriminación”. Los políticos locales están tomando los pasos más valientes, con alcaldes desafiando la prohibición de algunos matrimonios a través de la inclusión de sociedades homosexuales contratadas desde el extranjero en el registro de los ayuntamientos. Esta actuación ha sido tildada de ilegal pero, sin embargo, estimula el debate y muestra a una sociedad preparada para el cambio.

Europa apoya ahora después de diez años

“El día de la familia” ha demostrado sin duda que existe una oposición, pero las protestas se organizaron una semana después de la manifestación “¡Despierta Italia!”, que reunió a los defensores de los derechos para los homosexuales en más de 100 plazas italianas. Y mientras el motor que impulsó los matrimonios del mismo sexo en el Parlamento fracasó hace casi diez años, los activistas ahora tienen el apoyo de la Corte Europea de los Derechos Humanos. El año pasado, la corte falló en favor de tres parejas homosexuales que declararon que Italia violaba sus derechos al no darles reconocimiento legal y forzarles a tener vidas paralelas.

Crocini reconoce que su “vida es complicada” desde que necesita un documento firmado por Chiara para recoger a su bebé, Levon, de la guardería. “Según la ley, Levon solo tiene una madre -Chiara-, así que es el hijo de alguien que casualmente vive con otra persona”, explica.

Se ha ofrecido la opción de que Renzi se comprometa con la ley, si se salta la clausula de la adopción de hijastros, para incitar a las sociedades civiles a apoyarla, pero Crocini y otros miembros de grupos LGBT han dicho que eso sería un completo fracaso. “Nuestra principal esperanza es que la ley se apruebe [sin cambios], lo que sería un pequeño paso por ahora, pero el primero hacia la igualdad”, manifiesta Crocini. Aquellos que apoyan el proyecto de ley se han prometido a seguir luchando hasta conseguir todos los derechos para el matrimonio. Van a confrontar una dura batalla. Por su parte, los conservadores se han prometido a recoger 500.000 firmas para conseguir un referéndum si las propuestas actuales son aprobadas.

“Hoy en día, las parejas homosexuales tienen todos los derechos en Italia”, dice Amato, defendiendo que el proyecto de ley es una mera distracción ante los asuntos más serios. “Como si Italia no tuviese problemas de paro, el Isis o el orden público. El país está lleno de problemas y el Parlamento se pone a hablar de adopciones. Es absurdo”.

Asier Etxeandia: “Si alguien no me ha dado trabajo por ser homosexual, él se lo pierde”

asier etxeandia

Asier Etxeandia

Es uno de los actores del momento y uno de los favoritos de cara a los próximos Goya. Sin embargo, Asier Etxeandia (40) prefiere no pensar si su nombre sonará el próximo 4 de febrero cuando se descubra quien se llevará el ‘cabezón’ en la categoría de mejor actor de reparto por ‘La novia’. De momento, la película de Paula Ortiz que protagoniza Inma Cuesta acaba de arrasar en la última edición de los premios Feroz, llevándose seis de los nueves galardones a los que aspiraba. Pase lo que pase en los Goya, Etxeandia trata de mantener la mente ocupada con sus otros proyectos, al margen de sus compromisos con la serie ‘Velvet’. Además del disco que lleva meses planeando y de la película ‘La puerta abierta’, que ya ha rodado con Carmen Machi y Terele Pávez, el actor bilbaíno prepara una fiesta semanal con la que espera revolucionar los miércoles en la capital. Un proyecto que sacará adelante con Factoría Madre Constriktor, la productora que creó con su pareja, el también intérprete José Luis Huertas

No queda nada para los Goya. ¿Está preparado?
No lo pienso mucho.
Pero su gente se lo recordará.
Sí, pero prefiero no pensarlo. Para mí ya fue impactante cuando descubrí que estaba nominado y me quedo quedar con esa sensación. Iré a la gala, la disfrutaré y no quiero pensar más.
Siempre que dicen el nombre del ganador, las cámaras de televisión enfocan a todos los nominados. ¿Tiene ensayada la cara por si no se lleva el ‘cabezón’?
Es que todo eso lo ven y lo piensan los demás. Yo no pienso en esas cosas, de verdad. Te lo juro, no te estoy engañando. Además, es que he visto el trabajo de mis compañeros y es acojonante.
¿Por quién apuesta?
Darín, Casablanc… No sé, es que Luis [Tosar] es acojonante. Soy muy fan de los tres de toda la vida.
¿Y si consigue el premio? ¿Dónde lo colocará?
¡No lo sé! (se ríe). No me hagas pensarlo. No tengo ni idea y me niego a pensarlo (se ríe).
Y si no, tampoco se acaba el mundo.
Por supuesto que no, para nada. Todo lo contrario.
Seguro que sí sabe cómo irá vestido a la ceremonia.
Sí, de Lander Urquijo.
¿Cómo se vive ese día, que empieza bien temprano con todo el jaleo de vestirse y peinarse?
Sí, además con muchas entrevistas y fotos de días anteriores. Bueno, está bien. Es buena promoción. Pero sí, esas cosas son las que te ponen más nervioso. Por eso, procuro no pensarlo.
¿En qué piensa uno cuando se enfrenta a una alfombra roja con tantos ‘flashes’?
El secreto de una estrella es solamente comportarse como tal.
¿Qué otros proyectos tiene?
Ahora voy a dirigir una fiesta muy grande, una fiesta que espero que cambie la noche madrileña. Se va a reabrir la sala Florida y los miércoles pertenecen a Factoría Madre Constriktor. Voy a dirigir un espectáculo que hemos ideado entre Cayetana Guillén Cuervo, Chevi Muraday, Paco Tomás y yo. Voy a ser el que invite a todo el mundo a que venga y va a ser un ‘divershow’ muy especial. Serán los miércoles a partir de abril.
¿Cantará también usted?
Sí, aunque voy a dirigir. Está abierto a todo, porque va a cambiar de números con estrellas invitadas: actores, cantantes, artistas de todo tipo…
Usted anunció que grabaría un disco. ¿Cómo va?
Forma parte de un proyecto, pero el disco vendrá más tarde. No he podido hacerlo aún… Con tanto lío, la nominación y la promoción de las pelis, no hemos podido todavía.
Usted es un hombre valiente por dos cosas. La primera de ellas es que criticó a Rajoy antes de las elecciones generales del 20 de diciembre. ¿Cómo vive la situación política actual? ¿Esperaba que el los votantes reaccionaran más?
Es muy pronto todavía. No da a tiempo a nada. Está todo el mundo como a la gresca, a saltar por unos y por otros. Siguen en guerra entre ellos. Tanto de un lado como de otro y eso es lo que menos me interesa. Como veo que la gran mayoría de lo que se dice tiene que ver, como siempre, lo mal que lo hace el de enfrente, pues me interesa poco. Yo lo veré con los hechos. Yo solamente buscaba el cambio radical. Bueno, no sé si radical, pero sí un cambio. Esperemos qué ocurre con el cambio. Lo ideal sería que, si no funciona una persona, se vote a otra. Pero parece ser que en este país como que no lo entendemos.
El gremio de actores siempre se ha distinguido por compartir sus ideales. Curiosamente, las pasadas elecciones generales fueron las que menos manifestaciones políticas hubo por parte de sus compañeros.
No sé lo que hacen los demás. Yo sé lo que hago yo.
No sé si ha visto el programa de Bertín Osborne con Paco León, pero declara abiertamente su bisexualidad. Antes hablábamos de su valentía, porque usted también ha compartido su orientación sexual. ¿Cree que sigue habiendo reparo a la hora de hablar de estos temas?
Yo no lo vivo como que tenga que defender o reivindicar nada respecto a eso. Para mí, parte de la reivindicación es tanta normalidad como que no sé lo que me va a deparar mi vida. Mi sexualidad está abierta a mi creatividad y a lo que me ocurre en este momento. No es interés de nadie, como que no es de interés quién es hetero y quién realmente no.
Hay compañeros que temen estas confesiones públicas afecten a su volumen de trabajo. ¿Le ha pasado a usted?
Nunca he pensado en ello. No he tenido necesidad de ocultarlo ni de soltarlo tampoco. Nunca he sentido que fuera un impedimento para mí. No lo sé. Si alguien no me ha dado trabajo por ser homosexual, él se lo pierde, porque yo no voy a dejar de trabajar. Si no me lo das tú, ya me lo monto yo.
En cualquier caso, usted no para de trabajar. ¿Piensa que todavía hay reparos para hacer pública la condición sexual?
Bueno, es problema de cada uno. Ya caerá por su propio peso.

Dolce & Gabbana estrena colección a favor de la adopción gay

Noticia publicada en Quien

Parece que la pareja de diseñadores están completamente arrepentidos de sus declaraciones y ahora hacen hasta lo imposible por remediar tal error.

domenico-stefano

La pareja de diseñadores no hará comentario alguno sobre esta colección. Foto:Getty Images

Stefano Gabbana y Domenico Dolce hicieron polémica hace un año al referirse a los bebés nacidos por fertilización in vitro como “bebés sintéticos”, condenando además la adopción gay. Tras meses de escándalo y ganarse enemigos como Elton john y Ricky Martin, la ex pareja lanza una colección de “familias tradicionales y LGBT”.

dg

Estas son algunas de las prendas que lanzaron. Foto:Instagram

Los diseñadores más tarde trataron de aclarar sus comentarios iniciales, y aunque Domenico continuó hermético, ahora en su Instagram se pueden ver algunas bolsas, blusas y otros productos con diseños de familias tradicionales y LGBT, que ha catalogado con el hashtag #DGFamily.

gd

Algunos diseños para bolsas que llevará la marca italiana. Foto:Instagram

Por otra parte, las imágenes de la colección fueron publicadas ‘por casualidad’ a unos días de que se espere que los políticos italianos voten sobre una medida que les permitiría a las parejas del mismo sexo adoptar.

ddgg

Esta colección está por ser lanzada en Italia. Foto:Instagram

 

Los católicos intentan evitar una ley de uniones gays en Italia

Una gran manifestación en Roma a favor de la familia tradicional presiona al Gobierno de Matteo Renzi

Hay dos Italias en la calle. Una, que se manifestó la semana pasada en 80 ciudades del país, no comulga con el matrimonio tradicional y pide una ley que permita la unión civil y la adopción a las parejas del mismo sexo. La otra, que se congregó este domingo Roma con el respaldo siempre poderoso de la Iglesia católica, sigue considerando que casamiento y mortaja del cielo bajan y pide con vehemencia a los políticos que se opongan a la iniciativa del Gobierno de Matteo Renzi de aprobar una ley que, aunque tarde, pretende homologar Italia al resto de Europa en materia de derechos civiles.

Aunque el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo condenó el pasado mes de julio a Italia por no reconocer la unión legal de las parejas del mismo sexo, la aprobación del proyecto redactado por la senadora del Partido Democrático (PD) Monica Cirinnà ya ha sido aplazada en dos ocasiones y amenaza con romper el Gobierno de coalición e incluso la formación del centroizquierda a causa de la oposición de los parlamentarios católicos. Hasta el momento, Renzi ha optado por lavarse las manos dejando libertad de conciencia a sus ministros y senadores, pero da la impresión de que, sin su participación directa, el proyecto de ley –una de sus promesas para el año en curso— tiene todas las papeletas para naufragar o ser mutilado en uno de sus puntos más polémicos en Italia: la adopción del hijo del cónyuge, por cuanto los sectores más críticos sostienen que es una vía que podría permitir la gestación subrogada.

Desde un escenario instalado en el Circo Máximo, Massimo Gandolfini, un neurocirujano conocido por sus ataques a los homosexuales y organizador del Día de la Familia, ya advirtió de que la oposición al proyecto de ley será frontal. “No se trata de quitar una palabrita de aquí o de allí para maquillarlo”, dijo, “porque no es válido de la primera a la última letra. Tenemos que hacer una oposición radical, porque las leyes pueden cambiar la cultura de un pueblo y tenemos que estar atentos a las leyes destructivas”. Gandolfini presumió de contar con el apoyo de la Confederación Episcopal Italiana (CEI) y de destacados miembros del Gobierno, entre ellos del ministro del Interior, Angelino Alfano, y del de Medio Ambiente, Gianluca Galletti, que incluso asistió a la concentración de Roma en un claro desafío a Renzi, quien necesita del apoyo de los partidos de centro para poder seguir al frente del Gobierno.

A pesar de la condena del Tribunal de Derechos Humanos, de la promesa de Renzi, del apoyo multitudinario en 80 ciudades de Italia y del trabajo incansable de la senadora Cirinnà, el proyecto de ley ya está sufriendo una vieja táctica parlamentaria consistente en la lluvia de alegaciones, casi nunca destinadas a mejorar el texto, sino a torpedearlo hasta hacerlo inviable o retrasarlo hasta el infinito. De hecho, la Liga Norte –el partido xenófobo que suele enfrentarse con la Iglesia por la atención a los inmigrantes– camina ahora junto a los obispos y ya ha presentado más de 6.000 enmiendas.

El proyecto del PD evita cualquier cercanía con la palabra matrimonio. Pero ni por esas. En materia de derechos civiles, Italia sigue anclada en el pasado.

2×1

MANUEL JABOIS

En muchos ámbitos públicos una pareja de hombres o mujeres se ve como anomalía, o como excepción, o como objeto de condescendencia

La legalización del matrimonio homosexual fue unos de los pocos momentos en los que un Gobierno español legisló en tiempo real con la sociedad. En momentos impagables, incluso adelantándola. De hecho una de las frases más afortunadas de aquella época procedió no del colectivo gay sino del PP: el Gobierno socialista, según la oposición, estaba generando un debate en donde no había. En un país claudicante, aquello estaba mal visto. Para el PP las “cosas que no importan a nadie” o “los asuntos de los que nadie habla” no deberían de ser ocupación del Gobierno. Pero a menudo debería de ser la primera: para eso es el poder, para ejercerlo.

Ese Ejecutivo de Zapatero fue un Gobierno que visibilizó un problema, abrió una discusión pública y, como se denunció, dividió a los españoles entre los que creían que un homosexual debía de tener los mismos derechos que cualquier persona, y los que no; se necesitan más divisiones así. La ley convirtió a España en el tercer país del mundo que permitía contraer matrimonio a los homosexuales. Semejante velocidad en materia de derechos humanos sacó a la calle a decenas de miles de personas enfurecidas que volverían a protestar por la ley del aborto. Por un lado denunciaban que la tradición de la izquierda era intervenir la vida privada del ciudadano; por el otro, se ponían a gobernar la cama de todo el mundo.

Italia vive hoy el debate que España superó hace diez años. La oposición conservadora dice que las bodas de homosexuales “alteran las leyes de la naturaleza” y “dividen en asuntos en los que estábamos de acuerdo”. Ése es el buen camino, pero cuando se recorra quedará otro: que la sociedad se ponga a la altura de la ley. Como aquí el Gobierno fue por delante de la normalización, siguen produciéndose enormes desajustes. En muchos ámbitos públicos una pareja de hombres o mujeres se ve como anomalía, o como excepción, o como objeto de condesdendencia.

La cadena VIPS ha dado un paso natural: una publicidad de 2×1 con el mensaje de que la oferta no te pille sin pareja; la ilustra una pareja gay. La plataforma HazteOir acoge la petición de que se retire porque “normaliza una familia que no es natural” bajo la amenaza de boicot. Lleva más de 10.000 firmas. “Niños y jóvenes las están viendo. Niños y jóvenes que podrían ser tus hijos, tus sobrinos o tus nietos”. Sería bueno que la viesen todos. Para que no tengan que sentir ellos la sensación de anormalidad que tienen en exclusiva los que pretenden hacérsela sentir.