Jalid y Firas: el amor prohibido que la guerra de Siria no pudo matar

Jalid y Firas se abrazan en su casa de Mersin (Turquía), donde viven a escondidas su homosexualidad

Jalid y Firas se abrazan en su casa de Mersin (Turquía), donde viven a escondidas su homosexualidad. LLUÍS MIQUEL HURTADO

Su refugio es un cuchitril en el que hasta las grietas de sus tabiques desconchados por la humedad rezuman ternura. Jalid y Firas, unidos cada noche sobre un colchón mugriento en el suelo, cubierto primorosamente con una funda floreada. Pagando con una vida miserable el juntar sus corazones contra todo y todos mientras su patria se desintegraba. «Me enamoré de él desde la primera mirada». Su amor se ha convertido en un estigma que entorpece su vida en un exilio, en Turquía, marcado por una pesadilla.

– Cuéntemela, Firas.

– Octavo mes del año pasado. Acabábamos de llegar a Estambul. Dormimos en el piso de un amigo de Jalid. Navegamos por internet en busca de trabajo. Un hombre, alegando ser homosexual y querernos ayudar, nos ofreció trabajo. Concertamos una cita en un lugar extraño a las afueras. Al poco se acercó un Skoda con cinco personas, el conductor hablaba árabe y los otros cuatro ocupantes, que llevaban largas barbas, turco. Nos invitaron a subir. Durante media hora nadie habló. Inquieto, pregunté adónde íbamos. «Al trabajo», me respondieron. Pero no fue así. Recuerdo que paramos en una zona con muchos árboles y un riachuelo. Nos bajaron del coche y empezaron a gritarnos ‘¡Infieles!’. ‘Huyo de Siria para evitar a los islamistas y acabo topándome aquí con sus amigos’, pensé. Fue a peor. Nos arrearon una golpiza que duró varios minutos. Luego nos pusieron de rodillas. A Jalid le colocaron un cuchillo en el cuello; a mí, una pistola en la cabeza. ‘Matamos a infieles como vosotros para purificar el mundo’, nos soltaron. Y volvieron a golpearnos. Luego nos quitaron todo lo que llevábamos, documentación, ahorros y teléfono, y se fueron. Jalid y yo nos quedamos petrificados unos minutos. Luego ahí, solos, nos abrazamos llorando desconsoladamente.

Firas, poeta desde la cuna, pero abogado de profesión, sólo sabe árabe y se comunica con el traductor de Google. Fue maestro en Raqqa, siempreamenazado por un Estado Islámico que mata a gays tirándolos de un balcón. Jalid, de origen palestino, tímido, mirada conmovedora, sólo se comunica susurrando al oído del chico del que se enamoró en una exposición. «Yo estudiaba en Alepo y acudí como actividad extraacadémica a Damasco, donde él exponía sus cuadros», teclea Firas de Jalid. «Me enamoré de él desde la primera mirada», repite. Jalid asiente. «Nuestras familias nunca lo aceptaron, ya sabes, Siria, demasiado conservadores». Jalid asiente.

– ¿Ellos os agredieron?

– A Jalid le golpearon varias veces y su familia lo retuvo en casa. En 2010, fuearrestado por «conducta impropia» mientras estaba de fiesta en un bar con sus amigos. Le raparon el pelo, insultaron y golpearon. Pasó un mes encarcelado. Yo temía que amigos o familiares me delataran al Estado Islámico.

Jalid susurra; Firas teclea.

– En las sociedades orientales la religión domina sobre las tradiciones, y eso lleva a la represión. Se considera que ser gay es anormal. La ley siria considera la homosexualidad un crimen punible con prisión. Ya no te digo en los territorios donde gobierna el Estado Islámico, donde viví solo y ocultando mi homosexualidad porque me podían ejecutar. En Sira no puedes ser gay.

Jalid y Firas se abrazan en su casa de Mersin (Turquía), donde viven a escondidas su homosexualidad2

Tampoco es fácil ser LGBT en Turquía, donde las ONG denuncian falta de amparo legal a las víctimas de ataques homófobos. «El primer problema es el rechazo a ofrecernos trabajo o alojamiento. Eso me ha obligado a dormir en parques y a ducharme en los baños de las cafeterías», relata Yasar, un joven homosexual huido de su Irán natal hace un año. «Las palizas callejeras son constantes y la Policía no hace nada».

Firas está de acuerdo con Yasar. Hoy, en Mersin, en el cuchitril por el que Jalid y él pagan unos abusivos 100 euros al mes, «huimos del mundo». El poco dinero que ahorran es por un reciente trabajo temporal, trasladando barriles de crudo, y pequeñas transferencias de la hermana de Firas, quien muestra una larga lista de SOS enviados a ONG, algunas españolas. Las más solícitas les responden con cuatro líneas compasivas y un vínculo a la web de ACNUR: «Creía que su labor era ayudar, no pasarse la bola unas a otras».

Son pocas las ONG que atienden a refugiados LGBT. LGBT Istanbul asiste a las víctimas de las guerras y persecución en Oriente Medio. «Con el apoyo del consulado de Holanda pusimos en marcha un alojamiento para refugiados LGBT», explica Ebru Kiranci, una conocida activista turca.

Sin fondos para un bote de la muerte hacia Europa, Firas y Jalid se plantean regresar a Siria, de donde se habían fugado, escondidos en coches, para no sufrir ataques de los grupos armados extremistas. «Turquía también es un infierno», teclea Firas. «Las sociedades islámicas no conciben un musulmán y homosexual a la vez. Y eso que yo pensaba que ser musulmán es ser libre. Que Dios es el mismo para todos».

La vida invisible de los prostitutos

De izquierda a derecha, el trabajador social Iván Zaro y Eddie, trabajador del sexo

De izquierda a derecha, el trabajador social Iván Zaro y Eddie, trabajador del sexo. ÁNGEL NAVARRETE | GIULIO PIANTADOS

«Condones, lubricantes, folletos VIH, dónde hacerse la prueba, dónde saber si tengo gonorrea, qué pasa si me detienen, dónde se puede solicitar un abogado gratuito…». Toda esta enumeración habita la mochila de Iván Zaro, su «despacho portátil», las herramientas con las que, desde hace 12 años, patea las calles madrileñas con un único objetivo, que los hombres que ejercen la prostitución en la capital conozcan sus derechos sociales y sanitarios. Acaba de publicar el libro La difícil vida fácil (Punto de Vista Editores), un volumen que recoge su experiencia como trabajador social y 12 testimonios sobre prostitución masculina.

Tras las páginas hay historias como la de Eddie, brasileño de 28 años que llegó a España con 22, creyendo que le esperaba una vida mejor, «estable y estudiando». No fue lo que se encontró. «La persona que me recibió en España, brasileño también, acabó cogiéndome el pasaporte, me introdujo en las saunas y me fui adaptando a esa vida. Cuando me devolvieron el pasaporte, ya estaba dentro».

Sin embargo, la de Eddie es hoy una historia de éxito, y fue precisamente conocer a Iván lo que fomentó el punto de inflexión hacia un nuevo camino. A día de hoy continúa ejerciendo la prostitución, sobre todo a través de internet, en páginas web como telechapero.com, pero también se está formando.

«Estudio desde casa un curso técnico en desarrollo de ONG, siempre quise estudiar y quiero hacer Trabajo Social», relata a EL MUNDO. Pero aún no tiene la tarjeta de residencia en España y, además, tuvo que superar una enfermedad, justo cuando el protocolo sanitario español viró y las personas sin papeles dejaron de tener asistencia médica.

«Para mí era una especie de proxenetismo, el Estado le estaba obligando a prostituirse para poder pagar unos medicamentos tan caros, todo lo que Eddie ganaba era para la medicación, no tenía ni para el alquiler ni para nada», sostiene Zaro. «Tuve que gastar mucho dinero, unos 2.500 euros y, psicológicamente, aún no estoy recuperado», prosigue Eddie.

Zaro conoce la realidad de la prostitución desde mucho antes de que comenzara su andadura como trabajador social especializado en el asunto. «Crecí en el madrileño barrio de la Concepción, donde vi muchas cosas desde bien pequeño. Mi abuela tenía una vecina arriba que era prostituta, y he visto a la señora Conchita discutir y reír con su hija, que también ejercía. Para mí, la prostitución no era algo ajeno», relata.

A Eddie lo conoció «en su momento más delicado, su problema de salud era urgente, acuciante, y se le cerraban todas las puertas;en los hospitales le decían que se fuera a su país» y le acompañó «en todo el periplo de exigir, reivindicar y denunciar públicamente la violación de derechos humanos».

Es más, Zaro reconoce que «en la prostitución masculina la inmigración juega un papel fundamental». «La gran mayoría son extranjeros aunque los españoles, a consecuencia de la crisis económica, cada vez tienen mayor representatividad. Los clientes también son mayoritariamente masculinos, aunque también hay un sector femenino en la clientela», resume.

Se acuerda de este Iván, con mochila al hombro de sauna en sauna y también por algunos locales nocturnos, el poeta Luis Antonio de Villena, que presentó el pasado día 19 este compendio de historias y que ha escrito el prólogo que les da pie. «Le recuerdo repartiendo condones cuando acuciaba el sida…», comienza a rememorar el escritor.

«Iván suele emplear el término trabajador sexual, no prostituto. Cuando me pidió el prólogo del libro sólo puse como condición que la profesión se reflejara en él con dignidad y respeto. Y así es como Iván lo ha hecho», avanza.

«La prostitución ejercida por hombres es muy diferente de la que ejercen las mujeres. En el caso de ellas, se repite la figura del chulo que, al mismo tiempo que protege, explota. No lo he visto en el caso de los hombres», cuenta.

Se acuerda de Villena de antaño, cuando los trabajadores sexuales masculinos en España «eran españoles, pobres en su mayoría que se prostituían, en la calle y en algunos bares, y porque necesitaban dinero» practicaban la prostitución. «La expresión que empleaban es ‘me hago una chapa’, dinero que empleaban, por ejemplo, para invitar a su novia», relata. También Zaro menciona en su libro esta expresión, «me hago una chapa», de la que, recuerda Villena, deviene el actual término chapero, para referirse a los trabajadores del sexo.

Sin embargo, según detalla Zaro, es el término gigoló, su estereotipo, el que hace daño. «Mantener este estereotipo es machista y trasnochado, supone perpetuar la aprobación de un rol hipersexual sólo y exclusivamente si eres hombre y heterosexual. Sin embargo, cuando nos referimos a una mujer y a personas LGTB sexualmente activas, parece que la mirada se torna más oscura, se tiende a pensar más en el lado perverso o, aun peor, en el paternalismo de creer ‘que sólo valen para eso’ o ‘no dan para más’», amplía.

También apunta este trabajador social convertido en escritor que «la sociedad se sorprendería al conocer que, en la prostitución masculina, los casos de víctimas de trata con fines de explotación sexual son anecdóticos. Es más bien una forma con la que hacer frente a las necesidades económicas aunque de manera inestable».

Su libro muestra lo invisible: el caso de un niño huérfano de 12 años, edad en la que se inicia en la prostitución, la Puerta del Sol de Madrid como epicentro de la prostitución masculina, los picos -pocos- en los que muchos hombres se acuestan por dinero con otros, las saunas -65 en España dirigidas sólo a hombres-, la prostitución a través de internet -cada vez mayor-, los locales de ocio… Las últimas páginas están reservadas a la esperanza, y ofrecen el caso de tres personas que consiguieron abandonar la espiral de la prostitución.

Hombre con hombre, más estigma

Dice Iván Zaro, el trabajador social que ha hecho posible el libro, que la prostitución masculina tiene un mayor estigma que la femenina porque «hablamos de hombres con hombres. No es lo mismo subrayar tu rol viril, porque culturalmente en España un hombre que va de putas es viril y macho». También desmiente Zaro la idea «de que las mujeres no usen prostitutos». «Se cree que las mujeres pueden follar siempre con quien quieran y es mentira. Pero si son clientes de prostitución no pueden decirlo. Es una sexualidad mermada».

La Iglesia escocesa vota a favor de los matrimonios gays entre sus pastores

No obstante, prohíbe todavía a los miembros homosexuales de su clero contraer matrimonio

La Iglesia protestante de Escocia aprobó este sábado en Edimburgo la ordenación de hombres y mujeres casados con una persona del mismo sexo, tres años después de aceptar la ordenación de homosexuales.

En 2015, la iglesia escocesa había aplazado su decisión sobre los miembros del clero casados para consultar a las parroquias y tener tiempo para debatir la cuestión.

Ese mismo año, autorizaron en cambio la ordenación de personas homosexuales habiendo contraído una unión civil, pero no matrimonio. “Para muchos, hoy se trataba de clarificar la situación y de adaptarse a la legislación escocesa”, comentó el reverendo John Chalmers. La moción se adoptó por 339 votos a favor y 215 en contra.

Esta iglesia protestante ya adoptó en 2013 una moción que autorizaba la ordenación de homosexuales tras años de debate entre el sector liberal y el tradicionalista. Por su parte, la Iglesia de Inglaterra prohíbe todavía a los miembros homosexuales de su clero contraer matrimonio.

La Iglesia escocesa, a favor de permitir los matrimonios homosexuales entre sus pastores

Una iglesia en Escocia

Una iglesia en Escocia. E.M.

La asamblea general de la Iglesia de Escocia votó este sábado a favor de permitirque sus pastores puedan estar casados en matrimonios homosexuales y seguir ejerciendo dentro de esa institución.

La histórica votación, celebrada en Edimburgo en la jornada inaugural de ese encuentro, posibilita que los pastores estén casados con personas de su mismo sexo, aunque no se les permite celebrar bodas homosexuales dentro de la iglesia.

El resultado de la votación -con 339 votos a favor frente a 215 en contra– sigue a un año de deliberaciones sobre un asunto que ha generado divisiones dentro de la Iglesia de Escocia. El pasado año, la Asamblea dio luz verde a que los pastores homosexuales de esa institución formaran uniones civiles.

La Iglesia Nacional Escocesa -conocida como The Kirk– adopta una postura por la que mantiene un punto de vista tradicional sobre el matrimonio entre hombre y mujer, pero autoriza a las congregaciones individuales a decidir por sí mismas si desean nombrar a un pastor o a un deán homosexual, que se encuentre casado en un matrimonio o unión civil gay.

Cualquier otra consideración más amplia del enfoque teológico del matrimonio homosexual no se llevará a cabo hasta que el Foro Teológico presente un informe a la Iglesia escocesa el próximo año.

La votación de este sábado diferenciará a esta institución de la Iglesia de Inglaterra en que esta última prohíbe a sus religiosos estar casados o en uniones civiles con personas de su mismo sexo y se ha negado a permitir las bodas homosexuales religiosas.

A la ceremonia formal de inauguración de la Asamblea de este año de la Iglesia escocesa asistió la ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, y durante el acto se leyó una carta de la reina Isabel II.

“En un momento de agitación en el mundo, es reconfortante escuchar que la Iglesia de Escocia ha hecho que sea una prioridad trabajar para desarrollar una respuesta coordinada a problemas que afectan a refugiados y solicitantes de asilo”, rezó la misiva de la monarca, centrada en la actitud escocesa hacia los refugiados.

Denunciarán al cardenal Cañizares por sus declaraciones sobre el “imperio gay” y el feminismo

El colectivo LGTB de Valencia, Lambda, toma la medida por los “comentarios homófobos y machistas” del arzobispo

El arzobispo de Valencia, el cardenal Antonio Cañizares.

El arzobispo de Valencia, el cardenal Antonio Cañizares.

VALENCIA.- El colectivo de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales de Valencia, Lambda, ha anunciado hoy la presentación de una denuncia conjunta de varios colectivos contra el cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, por sus declaraciones sobre el “imperio gay” y el movimiento feminista.

Lambda ha explicado en un comunicado que la denuncia se interpondrá ante la Fiscalía de Delitos de Odio “por sus comentarios homófobos y machistas que sólo hacen que incitar al odio contra las personas que no entran dentro de los arcaicos modelos que defiende la jerarquía católica”.

En una misa celebrada en Valencia el pasado miércoles, Cañizares defendió el “bien precioso de la familia cristiana” ante lo que ha tachado de “escalada contra ella de dirigentes políticos, el ‘imperio gay’ y ciertas ideologías feministas“.

“Ya estamos hartos de las humillaciones continuadas por parte de la intolerancia religiosa y del menosprecio de los derechos humanos básicos”, ha afirmado al respecto la coordinadora general de Lambda, Fani Boronat.

Hasta el momento, se han sumado a la denuncia partidos como València en Comú,Compromís o Verds Equo València, grupos como Joves PV-Compromís o sindicatos como CCOO PV, Intersindical Valenciana o UGT PV.

En cuanto a asociaciones y entidades, se incluye el Movimiento Contra la Intolerancia, la asociación alicantina Diversidad, el Colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de la Safor (CLGS), la asociación de familias homoparentales Galesh y el Colectivo para la Diversidad Afectivo-Sexual, Castellón LGTBI.

La Fundación Daniela, la Asociación de Familias contra la Intolerancia por Género (AMPGYL), la Coordinadora Feminista de Valencia, el Bloc d’Estudiants Agermanats (BEA), la asociación Atenea València, la Coordinadora d’Associacions de Lluita contra el VIH-Sida (CALCSICOVA), MARIola o la Asociación de Familias de Menores Transexuales Chrysallis, también firmarán la denuncia.

Lambda ha informado que le ha hecho llegar una invitación a Cañizares para que compartiera el Orgullo Creyente con los miembros del grupo de Asuntos Religiosos de Lambda el próximo día 4 de junio.

Según el coordinador de dicho grupo, Rafa Abad, las declaraciones del arzobispo son “fruto del desconocimiento de nuestra realidad y no de la mala fe.”

El obispo de Valencia defiende la familia cristiana ante el “imperio gay” y el feminismo

Antonio Cañizares critica la “escalada” de dirigentes políticos contra la familia

Antonio Cañizares, en una imagen de archivo

Antonio Cañizares, en una imagen de archivo. M. BRUQUE (EFE)

El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha defendido este jueves el “bien precioso de la familia cristiana” ante lo que ha tachado de “escalada contra ella de dirigentes políticos, el imperio gay y ciertas ideologías feministas”.

En una misa celebrada en el Instituto Juan Pablo II de Valencia, Cañizares ha recordado a Benedicto XVI cuando, antes de su llegada a Valencia en 2006 para el quinto Encuentro Mundial de las Familias, animó a todos los pueblos a “no ignorar el bien precioso de la familia” fundada sobre el matrimonio.

Según informa el Arzobispado, el cardenal ha dicho a continuación que ese llamamiento papal sigue siendo especialmente necesario en España, que en los últimos años “ha asistido a una importante escalada contra la familia por parte de dirigentes políticos, ayudados por otros poderes como el imperio gay y ciertas ideologías feministas”.

“España ocupa uno de los últimos lugares de Europa en política familiar; junto con Grecia es el país con más bajo índice de natalidad, donde la población juvenil ha decrecido más en los últimos veinte años; y donde más se ha incrementado el número de abortos, las rupturas matrimoniales y las uniones de hecho”, ha señalado el titular de la archidiócesis de Valencia.

En cuanto a la próxima aprobación en la Comunidad Valenciana y en otras regiones de “leyes que fomentan la ideología de género”, Cañizares ha opinado que se trata de “la más insidiosa que ha habido en toda la historia de la humanidad”.

Todo ello, a su juicio, provoca que se esté socavando “el núcleo central de toda sociedad, que es la familia, ámbito inigualable de la solidaridad y escuela de convivencia pacífica que merece toda tutela y ayuda para cumplir su cometido”.

Ante esta situación, el cardenal ha destacado que la Universidad Católica de Valencia “no puede permanecer inerte en absoluto” a estos “ataques”, sino que toda la comunidad universitaria “debe trabajar por la familia, ya que es ahí donde está el futuro del hombre y de la humanidad”.

Drogas, webcams y poco dinero: El crudo relato de un ‘prostituto’ en España

Iván Zaro es el autor de ‘La díficil vida fácil’, un libro que narra los testimonios de 12 trabajadores sexuales en nuestro país. Hablamos con él y con uno de estos chicos para descubrir cómo funciona la prostitución masculina en nuestro país.

El cardenal Cañizares defiende la familia cristiana “ante el ‘imperio gay’ y ciertas ideologías feministas”

El prelado califica la próxima aprobación en Valencia de una ley “que fomenta la ideología de género” como “la más insidiosa que ha habido en toda la historia de la humanidad”

El Cardenal Arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares

El Cardenal Arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares. EFE

VALENCIA.- El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha defendido este miércoles el “bien precioso de la familia cristiana” ante lo que ha tachado de “escalada contra ella de dirigentes políticos, el imperio gay y ciertas ideologías feministas”.

En una misa celebrada en el Pontificio Instituto Juan Pablo II de Valencia, Cañizares ha recordado a Benedicto XVI cuando, antes de su llegada a Valencia en 2006 para el quinto Encuentro Mundial de las Familias, animó a todos los pueblos a “no ignorar el bien precioso de la familia” fundada sobre el matrimonio.

Según informa el Arzobispado, el cardenal ha dicho a continuación que ese llamamiento papal sigue siendo especialmente necesario en España, que en los últimos años “ha asistido a una importante escalada contra la familia por parte de dirigentes políticos, ayudados por otros poderes como el imperio gay y ciertas ideologías feministas”.

“España ocupa uno de los últimos lugares de Europa en política familiar; junto con Grecia es el país con más bajo índice de natalidad, donde la población juvenil ha decrecido más en los últimos veinte años; y donde más se ha incrementado el número de abortos, las rupturas matrimoniales y las uniones de hecho”, ha señalado el titular de la archidiócesis de Valencia.

En cuanto a la próxima aprobación en la Comunitat Valenciana y en otras regiones de “leyes que fomentan la ideología de género”, Cañizares ha opinado que se trata de “la más insidiosa que ha habido en toda la historia de la humanidad”.

Todo ello, a su juicio, provoca que se esté socavando “el núcleo central de toda sociedad, que es la familia, ámbito inigualable de la solidaridad y escuela de convivencia pacífica que merece toda tutela y ayuda para cumplir su cometido”.

Ante esta situación, el cardenal ha destacado que la Universidad Católica de Valencia “no puede permanecer inerte en absoluto” a estos “ataques”, sino que toda la comunidad universitaria “debe trabajar por la familia, ya que es ahí donde está el futuro del hombre y de la humanidad”.

El cardenal Cañizares defiende la familia cristiana ante la “escalada” del “imperio gay”

El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha defendido este miércoles en Valencia el “bien precioso de la familia cristiana” al tiempo que ha lamentado que en los últimos años “ha asistido a una importante escalada contra la familia por parte de dirigentes políticos, ayudados por otros poderes como el ‘imperio gay’ y ciertas ideologías feministas”.

El arzobispo de Valencia, el cardenal Antonio Cañizares

El arzobispo de Valencia, el cardenal Antonio Cañizares. (EFE)

VALENCIA. En una misa conmemorativa de la patrona del Pontificio Instituto Juan Pablo II de Valencia, la Virgen de Fátima, el purpurado ha recordado las palabras de Benedicto XVI, poco antes de su llegada a Valencia en 2006 para el V Encuentro Mundial de las Familias, cuando animó a todos los pueblos a “no ignorar el bien precioso de la familia” fundada sobre el matrimonio.

Ha indicado que ese llamamiento sigue siendo especialmente necesario en España y ha explicado que el país “ocupa uno de los últimos lugares de Europa en política familiar; junto con Grecia es el país con más bajo índice de natalidad, donde la población juvenil ha decrecido más en los últimos veinte años y donde más se ha incrementado el número de abortos, las rupturas matrimoniales y las uniones de hecho”.

Asimismo, el purpurado se ha referido a la próxima aprobación, en la Comunitat Valenciana y en otras comunidades, de leyes que fomentan la ideología de género, “la más insidiosa que ha habido en toda la historia de la humanidad”. Todo ello, ha añadido, provoca que se esté socavando “el núcleo central de toda sociedad, que es la familia, ámbito inigualable de la solidaridad y escuela de convivencia pacífica que merece toda tutela y ayuda para cumplir su cometido”.

Ante esta situación, el cardenal ha destacado que la UCV “no puede permanecer inerte en absoluto” a estos ataques, sino que toda la comunidad universitaria “debe trabajar por la familia, ya que es ahí donde está el futuro del hombre y de la humanidad”.

El arzobispo de Valencia ha subrayado la publicación de la última exhortación apostólica ‘Amoris Laetitia’, en la que el Papa Francisco “ofrece a toda la Iglesia una visión de conjunto, de manera concreta y realista, indicaciones muy precisas sobre la familia para que sean llevadas a cabo”.

Este documento, recuerda que hoy es “urgencia primerísima en la Iglesia, en el mundo y en la sociedad” la defensa de la familia y el matrimonio cristiano. “Esta misión también ha de ser corazón y nervio en la misma universidad que, en colaboración con el Instituto Juan Pablo II, debe investigar y dar difusión a las enseñanzas de la Iglesia sobre esta materia”, ha indicado.

La eucaristía, que ha tenido lugar en la capilla del campus de Valencia-Santa Úrsula de de la UCV, ha sido concelebrada por el obispo de Alcalá de Henares, monseñor Juan Antonio Reig, vicepresidente de la sección española del Instituto, y por el vicario general de la archidiócesis, Vicente Fontestad.

Bizkaia pide eliminar la discriminación por causa de la orientación sexual

Las Juntas Generales de Bizkaia han condenado «todas las formas de violencia y discriminación» contra las personas homosexuales, bisexuales, transexuales, trans- género e intersexuales, y han emplazado a adoptar medidas para «eliminar el trato discriminatorio basado en la orientación sexual o la identidad de género» en cualquier nivel de la Administración. Lo han hecho a través de una declaración institucional, a la que dio lectura en el pleno de ayer la presidenta de la Cámara, Ana Otadui.

El texto acordado por los portavoces señala que «todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos, y los poderes públicos tienen la obligación de evitar la violencia y la incitación al odio por motivos de orientación, prácticas, identidad sexual y de género, así como de respetar los principios de igualdad entre mujeres y hombres, con plena inclusión de las personas o expresiones transgenéricas y transexuales».

Por ello, las Juntas proclaman su compromiso con «el respeto a la diversidad y libertad del ser humano» recogidas en la Declaración Universal de los DDHH, y se ofrecen como «agente activo en la lucha contra la vulneración de estos derechos y promotor de la igualdad efectiva de estas personas, promoviendo su visibilidad, en especial de lesbianas y personas transgénero y transe- xuales, en coordinación con el resto de instituciones y colectivos sociales». Del mismo modo, instan a la derogación de «todas las leyes que den lugar a la discriminación, el procesamiento y la condena de personas exclusivamente por su orientación sexual o identidad de género».