Catalogadas por las normas sociales como raras, perversas o hasta enfermizas, estas prácticas eróticas, aunque inusuales, tienen su pequeño público
Adictos al sadomasoquismo en la convención ‘DomConLA’, en Los Ángeles. / AFP
Nuestra especie ha aprendido a disfrutar del sexo como ninguna otra. Para los seres humanos, todo vale, con amor, sin amor, con uno mismo, a tres en la cama, a diez… Las posibilidades son infinitas. La sociedad considera algunas de las fijaciones sexuales desde extrañas a escabrosas, pero por raro que pueda parecer, hay quien las encuentra placenteras.
Catalogadas por las normas sociales como raras, perversas, o hasta enfermizas, estas prácticas sexuales, aunque inusuales, tienen su pequeño público, aunque la psiquiatría vea en ellas mucho más que simple sexo.
Estos comportamientos considerados extraños o irregulares relacionados con el sexo son las denominadas ‘parafilias’, algunas más aceptadas socialmente que otras. La parafilia es un tipo de comportamiento que se caracteriza por un acto sexual en el que el placer no se obtiene de la manera convencional, sino que implica fetiches y actos sexuales atípicos.
Estas son algunas de estas prácticas sexuales que podrían considerarse no habituales:
Somnofilia
La somnofilia es un tipo de parafilia en la cual la excitación sexual y/o el orgasmo son obtenidos al mantener relaciones sexuales con un desconocido cuando éste está dormido. Hay diferentes rangos, que pueden ir desde la mera excitación o la masturbación hasta la práctica del acto sexual con la persona que duerme. Estas personas se excitan cuando ven a alguien dormido, y esa excitación aumenta por el miedo a que esa persona despierte y ser descubiertos.
Clismafilia
Se trata de las personas que obtienen placer sexual a través de la introducción de líquidos en el ano. En general no se trata de un fetiche compartido, por lo que en general las personas que gustan de esta parafilia se realizan enemas a sí mismos.
Masoquismo y sadismo
El masoquismo y el sadismo son quizá de las parafilias más conocidas, y de las que están más a la orden del día gracias a películas que las muestran en mayor o menor medida, como la famosa ’50 sombras de Grey’. Los masoquistas relacionan el placer sexual con el dolor, la crueldad o el sufrimiento. Les excita recibir golpes, latigazos, ser esclavizado, así como la asfixia o la autoasfixia. Este tipo de prácticas son peligrosas y deben realizarse con conocimiento y precaución, ya llevar el cuerpo al límite puede terminar con un resultado no esperado. El sadismo se basa en experimentar placer erótico al provocar dolor físico o humillación en la pareja.
Acrotomofilia
Consiste en sentir deseo sexual o preferencia por alguien que tiene algún miembro amputado, aunque a parte de la amputación, sus cánones de belleza son los estándar. El deseo sexual, en este caso, está ligado o es dependiente del muñón o muñones de la pareja. Los acrotomofílicos se sienten atraídos por los tocones resultantes de alguna parte del cuerpo amputada, incluso a veces por las partes mismas. Generalmente prefieren las amputaciones de las piernas a las de los brazos, y la mayoría de las veces se sienten más atraídos por las amputaciones con muñón que por las que no los tienen. Muchas veces, los acrotomofílicos terminan amputándose uno de sus propios miembros.
Urolofilia y coprofilia
La coprofilia es una clase de fetichismo que consiste en la excitación sexual que producen en algunas persoans las heces. Estas personas obtienen placer de oler, saborear, tocar las heces, e incluso de presenciar el acto de defecar. Esta actividad erótica se practica tanto de manera individual como colectiva. Algunos coprófilos practican también la coprofagia, es decir, la ingesta de heces.
La urolofilia se refiere a lo propio con la orina. Quienes la practican la conocen coloquialmente como ‘lluvia dorada’. Hay personas a quienes también les gusta orinar en público, orinarse encima, observar cómo orinan otros o ser orinados por otras personas.
Altocalcifilia
Es un tipo de fetichismo en el que se obtiene placer al observar o llevar puestos zapatos de tacón alto. La altocalcifilia hace parte de los fetichismos asociados a prendas de vestir, en particular al fetichismo de calzado conocido también como retifismo, que es la atracción fetichista por los zapatos en general.
El parcialismo
Es el interés sexual por una parte específica del cuerpo, que despierta en el sujeto por lo menos tanto interés erótico como los genitales, sino más. Está sobretodo relacionado con los pies, las manos y las axilas, aunque puede tratarse de cualquier parte del cuerpo exceptuando los genitales. Es uno de los fetichismos más comunes en los varones. La excitación se produce al acariciar, besar, chupar, lamer, oler o tocar la parte del cuerpo objeto de fetiche.
El más común es la podofilia (el fetichismo por los pies), aunque también son usuales entre los parcialistas la maschalagnia (fetichismo por las axilas), la nasofilia (interés extremo por las narices) o la tricofilia (obsesión por el cabello).
Necrofilia
La necrofilia está caracterizada por una atracción sexual hacia los cadáveres tanto en humanos como en animales. Es probablemente una de las parafilias más tabú, y además, ilegal.