Autorizan el cambio de nombre a un niño de 4 años transexual en Guipúzcoa que ahora constará como Lucía

Autorizan el cambio de nombre a un niño de 4 años transexual en Guipúzcoa que ahora constará como Lucía

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número tres de Tolosa (Guipúzcoa) ha autorizado el cambio de nombre a un niño de cuatro años transexual registrado a partir de ahora como Lucía. Se trata del segundo caso en el País Vasco, después de que en 2013 se aprobara otra petición en un Juzgado de Vitoria.    En un comunicado, la asociación de familias de menores transexuales Chrysalis Euskal Herria ha indicado que el juzgado ha autorizado la petición de cambio de nombre para esta esta niña transexual de cuatro años, en la línea de un auto de 2013 que autorizaba a otra menor alavesa a cambiar su nombre registral por su nombre femenino de uso habitual.   

“A Lucía sus padres le pusieron erróneamente un nombre masculino atendiendo a sus genitales, pero ella en el momento que pudo expresarse comenzó a manifestar que era una niña”, ha explicado.    Las mismas fuentes han indicado que desde el 28 de octubre de 2015 el nombre en su documentación corresponde a su sexo sentido, al nombre que usa habitualmente desde los tres años.    La asociación ha indicado que en el Estado hay unos “30 autos favorables al cambio de nombre para menores en situación de transexualidad, pero no existe un criterio común y la decisión queda en manos de cada juez”.

En este contexto, ha exigido que la legislación registral “prevea expresamente a los menores transexuales, para permitirles, tanto el cambio de nombre como la rectificación del sexo registral, para garantizar el respeto de los derechos fundamentales de estos menores“.

Autorizan el cambio de nombre a un niño de cuatro años transexual en Gipuzkoa

Se  trata del segundo caso en Euskadi, después de que en 2013 se aprobara  otra petición en un juzgado de Gasteiz

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número tres de  Tolosa ha autorizado el primer cambio de nombre a un niño  de cuatro años transexual registrado a partir de ahora como Lucía.

DONOSTIA. En un comunicado, la asociación de familias de menores  transexuales Chrysalis Euskal Herria ha indicado que el juzgado ha  autorizado la petición de cambio de nombre para esta niña transexual  de cuatro años, en la línea de un auto de 2013 que autorizaba a otra  menor alavesa a cambiar su nombre registral por su nombre femenino de  uso habitual.

“A Lucía sus padres le pusieron erróneamente un nombre masculino atendiendo a sus genitales, pero ella en el momento que pudo  expresarse comenzó a manifestar que era una niña”, ha explicado.

Las mismas fuentes han indicado que, desde el 28 de octubre de  2015 el nombre en su documentación corresponde a su sexo sentido, al  nombre que usa habitualmente desde los tres años.

La asociación ha indicado que en el Estado hay unos “30 autos  favorables al cambio de nombre para menores en situación de  transexualidad, pero no existe un criterio común y la decisión queda  en manos de cada juez”.

En este contexto, ha exigido que la legislación registral “prevea  expresamente a los menores transexuales, para permitirles, tanto el  cambio de nombre como la rectificación del sexo registral, para  garantizar el respeto de los derechos fundamentales de estos  menores”.

Fiskaltzak 5 urteko espetxe zigorra eskatzen du Txema Gonzalorentzat, Javier Madrazorekin Etxebizitza ordezkaria izan zena eta Hegoakeko presidente ohia, ondasun publikoen bidegabeko eralgitzeagatik

 

BILBAO(27-6-2003)EL CONSEJRO DE VIVIEDA Y ASUNTOS SOCIALES,JAVIER MADARZO ACOMAÑADO POR TXEMA GONZALO,DURANTE LA PRESENTACION DEL ANUNCIO PARA LA CELEBRACION DEL DIA DEL ORGULLO GAY .//TELEPRESS// //TELEPRESS//TELEPRESS//TELEPRESS//TELEPRESS//

Serafín Llamas y Txema Gonzalo, en el festival. Txema Gonzalo y Jon Alonso, ayer, en la sala de vistas

MEDIOETAN:

Gonzalo: “Gastar 1,5 millones para remodelar la Cámara fue totalmente necesario”

El exdelegado de Vivienda en Bizkaia cuando Javier Madrazo (EB-IU) dirigía ese departamento, José María Gonzalo, ha defendido hoy que fue “totalmente necesario” el gasto de 1,5 millones de euros en remodelar la Cámara de la Propiedad en Bilbao en el marco del proceso de liquidación de dicha entidad iniciado en 2006. La Fiscalía, en su escrito, eleva los gastos totales de remodelación a 1.815.584 euros.

La Sección Segunda de la Audiencia de Bizkaia ha comenzado este martes el juicio contra Gonzalo por los delitos de malversación y prevaricación por los que  la Fiscalía pide una pena de 5 años y 9 meses de prisión, además de inhabilitación absoluta por 9 años y medio.

En este mismo juicio también está acusado de cooperación en la malversación Jon Alonso, contratado por Gonzalo, para quien la Fiscalía solicita cuatro años y 9 meses de prisión, y 8 años de inhabilitación absoluta.

Según ha justificado hoy Gonzalo en su declaración, las obras fueron “necesarias” porque en el edificio “había cables por el suelo, no disponía de medidas de seguridad ni de accesibilidad, ni casi de instalación para Internet, a lo que había que añadir que el inmueble está considerado patrimonio cultural y hubo que restaurar algunos elementos”.

El fiscal y la acusación particular, en representación del Gobierno Vasco, consideran que dichas obras eran “ajenas al proceso de liquidación”, aunque Gonzalo ha argumentado que parte de su departamento se ubicó en dicho inmueble por falta de espacio en otros edificios públicos y que desde allí se ofrecía un servicio público al ciudadano.

La Fiscalía mantiene que Gonzalo “transfirió 106.653 euros desde la cuenta de la Cámara de la Propiedad a la cuenta de Jon Alonso” en ingresos sucesivos desde el 23 de junio de 2008 hasta el 8 de julio de 2009. Asegura que con el mismo ánimo lucrativo, “transfirió desde la misma cuenta a la de una asociación de la que era administrador 420.000 euros” también entre 2008 y 2009 y pagó con cargo a la Cámara de la Propiedad gastos por importe de 34.681 euros, además de compras destinadas a la rehabilitación del edificio, adquisición del mobiliario y enseres incurriendo “en unos gastos totales de 1.815.584 euros “ajenos a su proceso de liquidación y actuando el acusado al margen de los órganos competentes para estas contrataciones y de cualquier procedimiento administrativo”.

Gonzalo ha resaltado también que se envió un informe sobre la remodelación al Departamento de Hacienda del Gobierno Vasco, en aquel momento dirigido por Idoia Zenarruzabeitia (PNV) y que “en ningún momento se notificó que se hubiera detectado algo incorrecto”.

También le acusan de contratar a seis personas, entre ellas a Alonso como contable, “de forma directa y sin publicidad”, aunque Gonzalo ha afirmado que la Cámara era una entidad privada y que, por tanto, no estaba sometida a un régimen de contratación pública.

Dinero por adelantado

Sobre otra acusación referida a la transferencia de fondos de la Cámara de la Propiedad para financiar la película de temática gay “Ander”, ha explicado que dicho filme era una encargo del Gobierno Vasco y que únicamente “se adelantó una cantidad” hasta que se cobraran las aportaciones de las distintas administraciones.

Ha rechazado también que autorizara el pago de un total de más de 104.000 euros al otro acusado, Jon Alonso, y ha afirmado que se le pagaba su nómina “sin ningún abono particular”.

El contable, sin embargo, ha relatado en su declaración que Gonzalo le abonó diversos ingresos, aparte de la nómina, al considerar que realiza “trabajo extra sin remunerar” ya que también le encargaron la contabilidad de otras entidades.

“Se lo comenté a una amiga y me dijo que no era normal -ha relatado Alonso-, me pareció que la cosa se estaba desmadrando y devolví la mitad del dinero que me habían pagado de más, porque el resto ya me lo había gastado”.

Durante la primera sesión del juicio también ha comparecido como testigo Javier Madrazo, quien ha asegurado que conocía las obras de remodelación del edificio, pero que en lo relacionado a fondos, patrimonio y personal, Gonzalo no rendía cuentas a su departamento sino a Hacienda, área que, según ha dicho, “me consta que estaba informada”. “Sí puedo decir que había problemas de falta de personal”, ha precisado.

Respecto a la película “Ander”, Madrazo ha mantenido que su consejería aportó 60.000 euros para su financiación y que desconocía que la Cámara hubiera adelantado fondos.

Gonzalo: “Gastar 1,5 millones para remodelar la Cámara fue totalmente necesario”

El exdelegado de Vivienda en Bizkaia cuando Javier Madrazo (EB-IU) dirigía ese departamento, José María Gonzalo, ha defendido hoy que fue “totalmente necesario” el gasto de 1,5 millones de euros en remodelar la Cámara de la Propiedad en Bilbao en el marco del proceso de liquidación de dicha entidad iniciado en 2006. La Fiscalía, en su escrito, eleva los gastos totales de remodelación a 1.815.584 euros.

La Sección Segunda de la Audiencia de Bizkaia ha comenzado este martes el juicio contra Gonzalo por los delitos de malversación y prevaricación por los que  la Fiscalía pide una pena de 5 años y 9 meses de prisión, además de inhabilitación absoluta por 9 años y medio.

En este mismo juicio también está acusado de cooperación en la malversación Jon Alonso, contratado por Gonzalo, para quien la Fiscalía solicita cuatro años y 9 meses de prisión, y 8 años de inhabilitación absoluta.

Según ha justificado hoy Gonzalo en su declaración, las obras fueron “necesarias” porque en el edificio “había cables por el suelo, no disponía de medidas de seguridad ni de accesibilidad, ni casi de instalación para Internet, a lo que había que añadir que el inmueble está considerado patrimonio cultural y hubo que restaurar algunos elementos”.

El fiscal y la acusación particular, en representación del Gobierno Vasco, consideran que dichas obras eran “ajenas al proceso de liquidación”, aunque Gonzalo ha argumentado que parte de su departamento se ubicó en dicho inmueble por falta de espacio en otros edificios públicos y que desde allí se ofrecía un servicio público al ciudadano.

La Fiscalía mantiene que Gonzalo “transfirió 106.653 euros desde la cuenta de la Cámara de la Propiedad a la cuenta de Jon Alonso” en ingresos sucesivos desde el 23 de junio de 2008 hasta el 8 de julio de 2009. Asegura que con el mismo ánimo lucrativo, “transfirió desde la misma cuenta a la de una asociación de la que era administrador 420.000 euros” también entre 2008 y 2009 y pagó con cargo a la Cámara de la Propiedad gastos por importe de 34.681 euros, además de compras destinadas a la rehabilitación del edificio, adquisición del mobiliario y enseres incurriendo “en unos gastos totales de 1.815.584 euros “ajenos a su proceso de liquidación y actuando el acusado al margen de los órganos competentes para estas contrataciones y de cualquier procedimiento administrativo”.

Gonzalo ha resaltado también que se envió un informe sobre la remodelación al Departamento de Hacienda del Gobierno Vasco, en aquel momento dirigido por Idoia Zenarruzabeitia (PNV) y que “en ningún momento se notificó que se hubiera detectado algo incorrecto”.

También le acusan de contratar a seis personas, entre ellas a Alonso como contable, “de forma directa y sin publicidad”, aunque Gonzalo ha afirmado que la Cámara era una entidad privada y que, por tanto, no estaba sometida a un régimen de contratación pública.

Dinero por adelantado

Sobre otra acusación referida a la transferencia de fondos de la Cámara de la Propiedad para financiar la película de temática gay “Ander”, ha explicado que dicho filme era una encargo del Gobierno Vasco y que únicamente “se adelantó una cantidad” hasta que se cobraran las aportaciones de las distintas administraciones.

Ha rechazado también que autorizara el pago de un total de más de 104.000 euros al otro acusado, Jon Alonso, y ha afirmado que se le pagaba su nómina “sin ningún abono particular”.

El contable, sin embargo, ha relatado en su declaración que Gonzalo le abonó diversos ingresos, aparte de la nómina, al considerar que realiza “trabajo extra sin remunerar” ya que también le encargaron la contabilidad de otras entidades.

“Se lo comenté a una amiga y me dijo que no era normal -ha relatado Alonso-, me pareció que la cosa se estaba desmadrando y devolví la mitad del dinero que me habían pagado de más, porque el resto ya me lo había gastado”.

Durante la primera sesión del juicio también ha comparecido como testigo Javier Madrazo, quien ha asegurado que conocía las obras de remodelación del edificio, pero que en lo relacionado a fondos, patrimonio y personal, Gonzalo no rendía cuentas a su departamento sino a Hacienda, área que, según ha dicho, “me consta que estaba informada”. “Sí puedo decir que había problemas de falta de personal”, ha precisado.

Respecto a la película “Ander”, Madrazo ha mantenido que su consejería aportó 60.000 euros para su financiación y que desconocía que la Cámara hubiera adelantado fondos.

Juzgan por malversación a ex delegado de Vivienda en Bizkaia el próximo martes

La Sección Segunda de la Audiencia de Bizkaia juzga el próximo martes por dos delitos continuados de prevaricación y malversación al ex delegado de Vivienda en Bizkaia, José María Gonzalo, nombrado cuando Javier Madrazo (IU) dirigía el departamento vasco de Vivienda en 2006.

Por estos delitos, la Fiscalía pide para Gonzalo una pena de 5 años y 9 meses de prisión, además de la inhabilitación absoluta por 9 años y medio, según el escrito fiscal redactado en 2014.

Acusa también por un delito continuado de malversación a Jon Alonso, contratado por Gonzalo, y solicita para él 4 años y 9 meses de prisión, y 8 años y medio de inhabilitación absoluta.

Este caso se investigó a raíz de un informe interno remitido en 2011 por el Gobierno vasco a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco en el que se describían presuntas irregularidades en la liquidación del patrimonio de la Cámara de la Propiedad Urbana de Bizkaia.

Los hechos narrados se remontan a 2006, cuando Madrazo designó a “Txema” Gonzalo como delegado en Bizkaia durante la liquidación de la Cámara.

La Fiscalía considera que Gonzalo “actuó al margen de las competencias” que le habían atribuido cuando contrató a seis personas, una de ellas Jon Alonso.

Estima, además, que se llevaron a cabo “de forma directa, sin publicidad y sin proceso selectivo, abocando al Gobierno vasco a asumir las consecuencias” de esas “innecesarias contrataciones”.

El Ministerio Fiscal mantiene también que Gonzalo acometió la rehabilitación del edificio de la Cámara, que supuso un gasto de más de 1.800.000 euros, que era “ajeno al proceso de liquidación” y sin que el Gobierno vasco hubiera acordado el destino que le iba a dar a esa sede.

El informe señala que Gonzalo, “aprovechándose de su posición en la Cámara y su disponibilidad sobre los fondos dinerarios de la misma”, transfirió 106.653 euros a una cuenta a nombre de Jon Alonso, sin “justificación alguna salvo el propósito lucrativo con el que actuaron los acusados de común acuerdo”.

Añade que, “con idéntico ánimo lucrativo”, Gonzalo hizo transferencias de más de 420.000 euros a una asociación de la que él era administrador y “pagó con cargo a la Cámara de la propiedad” gastos ajenos a esa institución de unos 35.000 euros.

El fiscal concluye exigiendo responsabilidades a los acusados y considera a Gonzalo como autor de los delitos continuados de prevaricación y malversación y a Alonso como cooperador necesario del segundo de los delitos.

En concepto de responsabilidad civil, la Fiscalía solicita una indemnización por unos 471.000 euros, e interesa la apertura de juicio oral del caso en la Audiencia de Bizkaia.

Sobre estas actuaciones también figura un informe del Tribunal Vasco de Cuentas Públicas de mayo de 2012 en el que se denuncia que la liquidación de la Cámara de la Propiedad Urbana de Bizkaia se había cerrado con un exceso de gasto de 2,6 millones de euros y que Gonzalo, como responsable en este territorio del departamento de Vivienda había realizado contrataciones “irregulares”, “sin respetar los principios de igualdad, mérito y capacidad”.

Aseguró también que el ex delegado “se excedió de las funciones de su nombramiento realizando gastos para los que no tenía competencia” y que “las obras y compras de mobiliario” en el edificio de la Cámara por importe de 2,1 millones de euros, “fueron contratadas al margen de los procedimientos legales previstos”.

También constató otras cuestiones como que Gonzalo “no era competente para autorizar” una partida de 330.000 euros que conllevaba la producción de la película “Ander”, un largometraje de temática gay rodado en euskera, por parte del colectivo Aukeratu.

El TVCP detalló, asimismo, la existencia de facturas por un total de 34.681 euros que produjeron “un perjuicio económico para la Administración de la Comunidad autónoma”.

En ese lote de gastos, situó varias facturas de agua y gas del suministro al domicilio del presidente del colectivo Aukeratu, gastos de viajes a Uruguay y una factura de una agencia de detectives, entre otros.

La Italia católica se moviliza en su último intento contra el matrimonio homosexual

Italia se moviliza para reclamar el reconocimiento de las uniones homosexuales

Italia se moviliza para reclamar el reconocimiento de las uniones homosexuales EFE

Han pasado 2.000 años desde que los romanos se reuniesen en el Circo Máximo para contemplar a las cuadrigas bramando alrededor de la pista. Pero, el pasado sábado, una nueva batalla fue rescatada de la antigüedad. Con pancartas en lo alto que rezaban “Defendemos a nuestros hijos” y “La familia se basa en el matrimonio entre un hombre y una mujer”, cientos de miles de personas se reunieron por “El día de la familia” en protesta ante un proyecto de ley que legaliza las uniones entre parejas del mismo sexo.

“Tenemos muchos nietos; su futuro está destruido si el matrimonio se destruye”, manifestaba Ida. “Los niños tienen el derecho de tener un padre y una madre. Para crecer de una forma saludable, necesitan una figura masculina y femenina”. La ley, que se está siendo fuertemente debatida en el senado, tiene por objeto garantizar derechos jurídicos para las parejas homosexuales por primera vez en Italia. Entre las clausulas se encuentran las uniones civiles, el derecho a heredar la pensión de sus parejas y un controvertido artículo sobre la “adopción de un hijastro”, que permitirá legalmente que un niño tenga padres del mismo sexo en el caso de que una persona homosexual adopte al hijo biológico de su pareja.

Las concentraciones en Roma tuvieron un trasfondo tanto patriótico como religioso. Se vendían banderas italianas y ondeaban las pancartas religiosas mientras los curas y las monjas caminaban entre la multitud. “Creo en el Cristianismo y en los valores familiares. Nuestros hijos no están en venta”, declaraba Gianluca, un participante de la manifestación.

Los organizadores estiman que dos millones de personas asistieron a las protestas, una cifra que no ha podido ser corroborada de momento por la policía italiana. Los jóvenes voluntarios se ofrecieron a ayudar y numerosas familias desplegaron manteles de picnic y sillas de camping en la hierba. No es coincidencia que, mientras se han garantizado derechos a las parejas del mismo sexo en otros países con mayoría católica, como España e Irlanda, el hogar del Vaticano continúe siendo el último país en el oeste de Europa que no ofrece derechos a los homosexuales.

El referéndum irlandés, celebrado el pasado año, para legalizar el matrimonio homosexual fue calificado como “fracaso para la humanidad” por el Cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano. El nuevo proyecto representa un tremendo desafío a las autoridades de la iglesia católica en un momento en el que su influencia sobre la política italiana y la sociedad se está viendo disminuida. La causa ha movilizado también a conservadores de todos los partidos, que argumentan que la ley traiciona a la “familia natural” y a la constitución italiana.

“En Italia, el tribunal constitucional proclama que el matrimonio es solo entre un hombre y una mujer…esta ley es un fraude, porque requiere cambiar la constitución”, dice Gianfranco Amato, uno de los organizadores de la protesta. De hecho, la constitución italiana se refiere a “cónyuges” sin especificar el género, aunque el tribunal estipulase en 2010 que prohibir las uniones entre personas del mismo sexo no violase los derechos constitucionales de los ciudadanos. Mientras que el proyecto de ley no menciona en ningún momento la palabra “matrimonio”, otro organizador de la movilización, Toni Brandi, defiende que las uniones entre homosexuales son un “ataque directo” a la tradición del matrimonio.

El Papa en contra del matrimonio ‘que no quería Dios’

Los manifestantes han aguardado a las declaraciones del Papa Francisco con entusiasmo, que no ha emitido un comentario acerca de la ley pero ha dejado claro su punto de vista sobre el asunto. “No puede haber confusión entre la familia que quería Dios y cualquier otro tipo de unión”, manifestó el pasado mes.

Aquellos en contra de la ley han encontrado un respaldo fantástico en la figura del cardenal Angelo Bagnasco, presidente de la conferencia italiana de los obispos, que ratificó que el tener hijos no debía ser un derecho. “Los niños tienen el derecho de crecer con una madre y un padre. La familia es un hecho antropológico, no ideológico”, añadió.

Pero la influencia de la iglesia es marcadamente más débil que en 2007, cuando triunfó la campaña política en contra del proyecto de ley por el matrimonio homosexual. Los organizadores de “El día de la familia” se han esforzado en remarcar que el evento ha sido impulsado por los ciudadanos, no por la iglesia, y han destacado que entre los manifestantes se encontraban también laicos y musulmanes.

Cuando los senadores comenzaron a debatir el proyecto en la mañana del martes, una densa columna de humo sobre Roma hacía desaparecer la basílica de San Pedro de las panorámicas. Pero Alessia Crocini, quien tiene un hijo con su pareja Chiara, afirma que la fortaleza de la oposición de la iglesia continúa siendo palpable en la ciudad eterna. “Somos un símbolo, el último reducto. Es como si la iglesia fuese a colapsar [si la ley sigue adelante], el Vaticano fuese a caer y San Pedro a desmoronarse”, expone. “Así que es una resistencia muy potente”.

El proyecto de ley italiano llega seis años después de que Argentina -donde el Papa fue arzobispo de Buenos Aires- legalizase los matrimonios entre personas del mismo sexo. El cardenal Jorge Mario Bergoglio, como era entonces conocido el Papa, se opuso abiertamente a la ley, aunque los activistas se apoyen en que el pontífice admitió su apoyo en secreto a las uniones del mismo sexo.

El alcance de la ley: de la iglesia a los negocios

Más allá de la iglesia, el debate ha alcanzado el sector empresarial en Italia con la compañía de trenes Italo ofreciendo un 30% de descuento a los pasajeros que se dirigiesen al “Día de la familia”. La firma se ha defendido en que los motivos de la decisión eran “puramente comerciales”. No es una estrategia sin precedentes pues, en 2013, el presidente de la empresa de pasta Barilla advirtió que nunca utilizaría a una pareja homosexual en sus anuncios. Si a los compradores no les gusta su enfoque, pueden comprar otra marca de pasta, añadió Guido Barilla.

Pero también hay señales de esta corriente de cambio. La presión pública hizo que Barilla emitiese una disculpa, mientras que la firma de moda D&G se enfrentaba a un boicot después de que los diseñadores Domenico Dolce y Stefano Gabbana criticasen a las familias formadas por personas del mismo sexo. El sábado, estos mismos diseñadores lanzaron una nueva linea de bolsos y camisetas homenajeando a las parejas homosexuales.

En política, el principal opositor de la ley ha sido el ministro del Interior, Angelino Alfano, un antiguo pupilo de Silvio Berlusconi, que ha declarado recientemente que la adopción de los hijastros amenaza con fomentar el “repugnante y negocio ilícito” de la maternidad de alquiler a Italia. Alfano forma parte de una difícil coalición con el primer ministro de izquierdas, Matteo Renzi, que ha urgido a los legisladores a retirar el proyecto de ley.

“La sociedad y la gente está mucho más avanzada que los políticos”, afirma Crocini. “Ante este tipo de situaciones sociales nunca obtenemos malas reacciones, estamos ofendidos o sufrimos discriminación”. Los políticos locales están tomando los pasos más valientes, con alcaldes desafiando la prohibición de algunos matrimonios a través de la inclusión de sociedades homosexuales contratadas desde el extranjero en el registro de los ayuntamientos. Esta actuación ha sido tildada de ilegal pero, sin embargo, estimula el debate y muestra a una sociedad preparada para el cambio.

Europa apoya ahora después de diez años

“El día de la familia” ha demostrado sin duda que existe una oposición, pero las protestas se organizaron una semana después de la manifestación “¡Despierta Italia!”, que reunió a los defensores de los derechos para los homosexuales en más de 100 plazas italianas. Y mientras el motor que impulsó los matrimonios del mismo sexo en el Parlamento fracasó hace casi diez años, los activistas ahora tienen el apoyo de la Corte Europea de los Derechos Humanos. El año pasado, la corte falló en favor de tres parejas homosexuales que declararon que Italia violaba sus derechos al no darles reconocimiento legal y forzarles a tener vidas paralelas.

Crocini reconoce que su “vida es complicada” desde que necesita un documento firmado por Chiara para recoger a su bebé, Levon, de la guardería. “Según la ley, Levon solo tiene una madre -Chiara-, así que es el hijo de alguien que casualmente vive con otra persona”, explica.

Se ha ofrecido la opción de que Renzi se comprometa con la ley, si se salta la clausula de la adopción de hijastros, para incitar a las sociedades civiles a apoyarla, pero Crocini y otros miembros de grupos LGBT han dicho que eso sería un completo fracaso. “Nuestra principal esperanza es que la ley se apruebe [sin cambios], lo que sería un pequeño paso por ahora, pero el primero hacia la igualdad”, manifiesta Crocini. Aquellos que apoyan el proyecto de ley se han prometido a seguir luchando hasta conseguir todos los derechos para el matrimonio. Van a confrontar una dura batalla. Por su parte, los conservadores se han prometido a recoger 500.000 firmas para conseguir un referéndum si las propuestas actuales son aprobadas.

“Hoy en día, las parejas homosexuales tienen todos los derechos en Italia”, dice Amato, defendiendo que el proyecto de ley es una mera distracción ante los asuntos más serios. “Como si Italia no tuviese problemas de paro, el Isis o el orden público. El país está lleno de problemas y el Parlamento se pone a hablar de adopciones. Es absurdo”.

Los católicos intentan evitar una ley de uniones gays en Italia

Una gran manifestación en Roma a favor de la familia tradicional presiona al Gobierno de Matteo Renzi

Hay dos Italias en la calle. Una, que se manifestó la semana pasada en 80 ciudades del país, no comulga con el matrimonio tradicional y pide una ley que permita la unión civil y la adopción a las parejas del mismo sexo. La otra, que se congregó este domingo Roma con el respaldo siempre poderoso de la Iglesia católica, sigue considerando que casamiento y mortaja del cielo bajan y pide con vehemencia a los políticos que se opongan a la iniciativa del Gobierno de Matteo Renzi de aprobar una ley que, aunque tarde, pretende homologar Italia al resto de Europa en materia de derechos civiles.

Aunque el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo condenó el pasado mes de julio a Italia por no reconocer la unión legal de las parejas del mismo sexo, la aprobación del proyecto redactado por la senadora del Partido Democrático (PD) Monica Cirinnà ya ha sido aplazada en dos ocasiones y amenaza con romper el Gobierno de coalición e incluso la formación del centroizquierda a causa de la oposición de los parlamentarios católicos. Hasta el momento, Renzi ha optado por lavarse las manos dejando libertad de conciencia a sus ministros y senadores, pero da la impresión de que, sin su participación directa, el proyecto de ley –una de sus promesas para el año en curso— tiene todas las papeletas para naufragar o ser mutilado en uno de sus puntos más polémicos en Italia: la adopción del hijo del cónyuge, por cuanto los sectores más críticos sostienen que es una vía que podría permitir la gestación subrogada.

Desde un escenario instalado en el Circo Máximo, Massimo Gandolfini, un neurocirujano conocido por sus ataques a los homosexuales y organizador del Día de la Familia, ya advirtió de que la oposición al proyecto de ley será frontal. “No se trata de quitar una palabrita de aquí o de allí para maquillarlo”, dijo, “porque no es válido de la primera a la última letra. Tenemos que hacer una oposición radical, porque las leyes pueden cambiar la cultura de un pueblo y tenemos que estar atentos a las leyes destructivas”. Gandolfini presumió de contar con el apoyo de la Confederación Episcopal Italiana (CEI) y de destacados miembros del Gobierno, entre ellos del ministro del Interior, Angelino Alfano, y del de Medio Ambiente, Gianluca Galletti, que incluso asistió a la concentración de Roma en un claro desafío a Renzi, quien necesita del apoyo de los partidos de centro para poder seguir al frente del Gobierno.

A pesar de la condena del Tribunal de Derechos Humanos, de la promesa de Renzi, del apoyo multitudinario en 80 ciudades de Italia y del trabajo incansable de la senadora Cirinnà, el proyecto de ley ya está sufriendo una vieja táctica parlamentaria consistente en la lluvia de alegaciones, casi nunca destinadas a mejorar el texto, sino a torpedearlo hasta hacerlo inviable o retrasarlo hasta el infinito. De hecho, la Liga Norte –el partido xenófobo que suele enfrentarse con la Iglesia por la atención a los inmigrantes– camina ahora junto a los obispos y ya ha presentado más de 6.000 enmiendas.

El proyecto del PD evita cualquier cercanía con la palabra matrimonio. Pero ni por esas. En materia de derechos civiles, Italia sigue anclada en el pasado.

Católicos y conservadores movilizan “dos millones” de manifestantes en Roma a favor de la familia tradicional

Miles de manifestantes Roma en contra del reconocimiento legal de las parejas del mismo sexo

Miles de manifestantes Roma en contra del reconocimiento legal de las parejas del mismo sexo

El fin de semana pasado los organizadores de las movilizaciones que tuvieron lugar en 98 ciudades italianas a favor del matrimonio homosexual calcularon haber reunido en total un millón de personas. Este sábado tuvo lugar en Roma unacontra manifestación a favor de la familia tradicional y, como era de prever, los convocantes del denominado ‘Family Day’ -así se bautizó la jornada– aseguraron que ellos superaron con creces la cifra de la semana pasada: declararon haber llegado a los “dos millones” de manifestantes. La guerra de cifras está servida.

Italia, a la cola en derechos de parejas homosexuales

Sea como sea, lo que está claro es que la sociedad italiana se encuentra dividida entre los que pretenden continuar anclados en el pasado, y los que consideran que no puede ser que Italia esté a la cola de la Unión Europea en el reconocimiento de los derechos de las parejas homosexuales, debido en parte a la influencia conservadora del Vaticano.

Este martes se votará en el Senado italiano la ley de uniones civiles, también conocida como ley Cirinnà, en referencia a la senadora que la impulsó, Monica Cirinnà, del Partido Democrático del primer ministro Matteo Renzi. El artículo principal de la ley establece que dos personas del mismo sexo pueden constituir una pareja de hecho reconocida por el Estado, ante la presencia de dos testigos. También prevé que estas parejas puedan adoptar un hijo o una hija cuyo padre o madre ya sea uno de los dos componentes de la pareja.

Sin límites, nuestra sociedad se volverá loca”, declaró Massimo Gandolfini, responsable de la organización de la jornada de protesta a favor de la familia tradicional de este sábado, que tuvo lugar en la gran plaza del Circo Massimo. “La ley Cirinnà no es aceptable de la primera a la última palabra. No se trata de cambiar tres o cuatro palabritas, sino de rechazarla completamente”, añadió.

Muchos religiosos participaron en la propuesta

Mil quinientos autocares procedentes de toda Italia trasladaron manifestantes a la capital, algunos financiados por colectivos católicos. De hecho, muchos religiosos participaron en la protesta, presidida por una gran pancarta que decía “En defensa de la familia y de los niños”. Otra destacaba “prohibido desguazar la familia”. De eslóganes, había de todo tipo: “Nos gusta la diversidad. Queremos una mamá y un papá“, “la naturaleza no se cambia” o “Cirinnò”, haciendo un juego de palabras con el apellido de la senadora impulsora de la ley, Cirinnà, y la palabra “no”.

En la manifestación no hubo símbolos políticos, pero sí que asistieron al menos dos centenares de parlamentarios, sobre todo del partido Nuevo Centro Derecha -aliado del Partido Democrático en el gobierno-, Forza Italia, Lega Nord, y algunos representantes del ala católica de la propia formación del primer ministro italiano. De hecho, incluso el responsable de la cartera de Interior, Angelino Alfano -perteneciente a Nuevo Centro Derecha-, recibió en el ministerio al organizador de la manifestación, antes del inicio de la protesta. Esta división política hace que sea una incertidumbres saber cuál será el resultado de la votación de la ley.

2×1

MANUEL JABOIS

En muchos ámbitos públicos una pareja de hombres o mujeres se ve como anomalía, o como excepción, o como objeto de condescendencia

La legalización del matrimonio homosexual fue unos de los pocos momentos en los que un Gobierno español legisló en tiempo real con la sociedad. En momentos impagables, incluso adelantándola. De hecho una de las frases más afortunadas de aquella época procedió no del colectivo gay sino del PP: el Gobierno socialista, según la oposición, estaba generando un debate en donde no había. En un país claudicante, aquello estaba mal visto. Para el PP las “cosas que no importan a nadie” o “los asuntos de los que nadie habla” no deberían de ser ocupación del Gobierno. Pero a menudo debería de ser la primera: para eso es el poder, para ejercerlo.

Ese Ejecutivo de Zapatero fue un Gobierno que visibilizó un problema, abrió una discusión pública y, como se denunció, dividió a los españoles entre los que creían que un homosexual debía de tener los mismos derechos que cualquier persona, y los que no; se necesitan más divisiones así. La ley convirtió a España en el tercer país del mundo que permitía contraer matrimonio a los homosexuales. Semejante velocidad en materia de derechos humanos sacó a la calle a decenas de miles de personas enfurecidas que volverían a protestar por la ley del aborto. Por un lado denunciaban que la tradición de la izquierda era intervenir la vida privada del ciudadano; por el otro, se ponían a gobernar la cama de todo el mundo.

Italia vive hoy el debate que España superó hace diez años. La oposición conservadora dice que las bodas de homosexuales “alteran las leyes de la naturaleza” y “dividen en asuntos en los que estábamos de acuerdo”. Ése es el buen camino, pero cuando se recorra quedará otro: que la sociedad se ponga a la altura de la ley. Como aquí el Gobierno fue por delante de la normalización, siguen produciéndose enormes desajustes. En muchos ámbitos públicos una pareja de hombres o mujeres se ve como anomalía, o como excepción, o como objeto de condesdendencia.

La cadena VIPS ha dado un paso natural: una publicidad de 2×1 con el mensaje de que la oferta no te pille sin pareja; la ilustra una pareja gay. La plataforma HazteOir acoge la petición de que se retire porque “normaliza una familia que no es natural” bajo la amenaza de boicot. Lleva más de 10.000 firmas. “Niños y jóvenes las están viendo. Niños y jóvenes que podrían ser tus hijos, tus sobrinos o tus nietos”. Sería bueno que la viesen todos. Para que no tengan que sentir ellos la sensación de anormalidad que tienen en exclusiva los que pretenden hacérsela sentir.