“En Pamplona, si me toca un juez muy de derechas dirá que cometí un delito”

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Abel Azcona junto a su obra Pederastia

Asegura que se encuentra bien, a pesar de que el TSJN publicó su imputación en Twitter antes de notificárselo a él o a su abogado. Abel Azcona (Pamplona, 1988), el artista multidisciplinar especializado en performance y arte de acción, con proyectos de contenido político y reivindicativo, se toma “con bastante humor” el hecho de que la Asociación Española de Abogados Cristianos presentase una querella criminal contra él por “profanación” a raíz de su última exposición en Pamplona. La pieza “Amén” incluía unas fotografías de la palabra “pederastia” formada con una serie de hostias consagradas. Los querellantes entienden que el artista incurrió en “un delito reiterado de profanación” al hacerse con dichas hostias consagradas en 242 misas a las que Azcona asistió en Madrid y Pamplona, además de un delito contra los sentimiento religiosos”. El titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Pamplona acordó abrir diligencias previas tras la querella.

Aún no tiene en su poder la notificación del juzgado, ni sabe exactamente de qué delitos se le acusan. Lleva protección policial para acudir a determinados actos públicos en Pamplona, aunque dice “estar acostumbrado” porque no es la primera ocasión en la que la necesita. “Sobre todo después de lo del Corán”. (Se refiere a la performance en la que, durante nueve horas, se dedicó a comerse, literalmente, el Corán).

¿Pensó que las reacciones a la exposición iban a llegar tan lejos?

Entiendo las piezas como una herramienta de denuncia social y política, por eso siempre tengo asumido que entrañan un riesgo. Sinceramente, con esta pieza no pensaba que iba a correr ningún riesgo. De hecho, si hubiera sabido que iba a haber tanta repercusión, probablemente no hubiera asistido a la exposición de Pamplona. Con aquellas hostias hicimos muchísimas acciones, los nombres de los niños robados de la clínica San Ramón, performance con palomas… muchas acciones que no hemos hecho públicas, porque tal y como está el clima no es el momento más adecuado. Pero para esta exposición en Pamplona elegimos la acción de la pederastia porque el espacio era muy grande y quisimos llenarlo con otras piezas. Planeamos una exposición pequeña, para que vinieran unas 1.000 personas, gente de izquierdas o afín a mi forma de pensar.

Y ha sido la exposición más visitada de 2015.

Sí. Me gusta que mis piezas sean detonantes colectivos. En esta pieza, hice un proceso performativo que consistió en un consumo de eucaristías y en la transformación de las hostias en la palabra pederastia. Todo lo demás, miles de personas rezando y en procesión hasta la catedral, lo único que hacen es alimentar la pieza.

Pretendía denunciar los casos de pederastia en la Iglesia, pero al final el debate público es sobre si ha cometido usted sacrilegio o no.

Una señora quiso presentar una denuncia porque había secuestrado a Jesucristo. Yo soy una persona educada y prometo que intenté hacer esa pieza desde el respeto. Ellos están enfadados porque usé hostias consagradas, pero para mí no hay nada más sagrado que el cuerpo de un niño. Es cierto que la polémica no habla sobre pederastia, sino sobre sacrilegio. Pero estamos en un Estado aconfesional y con estas protestas se abre el debate sobre el proselitismo que diariamente hace la Iglesia, sobre la educación fundamentalista que da a diario y que consigue una sociedad machista. Yo fui a 242 misas para ver qué educación se recibe en las misas, recogí lo que me ofrecían, que eran las hostias, y después he expresado lo que a mí me surge después de su educación. El señor con boina carlista que fue a la exposición todos los días a denunciar sacrilegio lo único que hace es alimentar la pieza. Yo ocupé sus espacios, las misas, y ellos, de alguna manera, han ocupado ahora el mío. Toda esta gente ha asistido a mi eucaristía personal, ha sido muy interesante verles allí arrodillados y rezando. Además, toda esta gente tiene unas redes de información muy consolidadas y le han dado muchísima bola al asunto. Son un poco como un perro herido. Ahora que por fin parece que se puede dar un cambio social en España, sienten miedo y muerden.

¿Tiene la sensación de que se están endureciendo las medidas contra determinadas expresiones artísticas que abordan temas tabú con una intención ejemplarizante?

Es que sólo pueden salir a atacar las expresiones culturales, porque se les acaban las herramientas para atacar a los partidos políticos. Es lo que ha ocurrido con los titiriteros de Madrid, no entienden la sátira ni la acidez. Emplean contra ello medias absolutamente desproporcionadas, creo que el que debería estar metido en la cárcel es el juez que les ha tenido cinco días entre rejas. Y, ahora que han salido, se les debería resarcir de alguna manera. Es que no hay derecho. ¡Pero si les han quitado hasta las marionetas!

¿Qué previsiones tiene sobre el desarrollo de las querellas por las que le han imputado?

En un estado aconfesional de verdad no debería pasar nada. Porque si yo digo que no tuve ninguna intención de ofender, la pieza no puede ser delito. Mi única intención era criticar la pederastia. Sí que es verdad que en Pamplona hay bastantes posibilidades de que el juez y el fiscal sean muy de derechas y terminen pensando que cometí un delito. Esto es Navarra, y como te enfrentes a un fiscal o a un juez del Opus Dei, te pueden condenar. Y el susto te lo llevas, aunque después otro tribunal lo eche por tierra.

¿La posibilidad de acabar en la cárcel le va a hacer parar sus expresiones artísticas?

En absoluto. Si existe la posibilidad de que acabe condenado a ir a la cárcel es porque ha habido una red judicial ultraconservadora que se ha basado en unos artículos de la Constitución que deberían estar derogados desde hace muchísimos años. Pero si ocurriera, si termino en la cárcel, para mí seguiría siendo parte de la performance y eso ayudaría a que se abriera el debate sobre si queremos de verdad un estado aconfesional. No se dan cuenta, pero eso sería contraproducente para la Iglesia. Porque habría más personas que dejarían de estar indiferentes y pasarían a estar en contra del adoctrinamiento de la Iglesia. Cada vez están más heridos y, al final, me dan un poco de lástima. Lo malo es que esta gente que se siente víctima, al final se vuelven verdugos. Y da miedo.

¿Es esa la evolución que ha sufrido usted? ¿Ha pasado de víctima de abusos sexuales en su infancia a verdugo de la pederastia?

He pasado toda mi infancia y mi adolescencia escuchando que iba a terminar como un delincuente, y siempre he tenido muy claro que yo no quería terminar así. Por eso jamás he tenido una expresión violenta contra nadie. Uso la creatividad como herramienta de catarsis. Mis piezas de denuncia siempre se hacen desde el respeto. ¿Qué mejor herramienta que el arte contemporáneo para hacer una denuncia civilizada y sin violencia? España está cambiando de forma muy rápida. Hace 10 años nadie podía pensar que en Madrid iba a gobernar el 15M o que en Pamplona podía haber un Ayuntamiento de Bildu. Y esta gente reaccionaria está viendo que todo se les va de las manos, ven crecer el sentido crítico de la masa y tienen miedo. Y sólo pueden reaccionar ante cuatro cosas culturales que no tienen más importancia, que si el rey Baltasar es negro, que si los reyes de la cabalgata de Madrid parecen o no magos, que si los títeres de una función tienen una pancarta… En realidad, la exposición y la pieza que han provocado todo esto, podían haberse celebrado perfectamente con un Gobierno y un Ayuntamiento de UPN. De hecho, las aprobó el mismo técnico de cultura, un funcionario que estaba en ese puesto con el Gobierno de UPN y con el Gobierno de ahora.

Alexa para todos, menos en el DNI

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“Yo pensaba dejarlo estar, pero mi hija me dijo que no era justo, porque ella ya existía”, relata Ches para explicar por qué va a pelear hasta el final para que su hija, que cumplirá 14 años en marzo, tenga un DNI en el que conste el nombre por el que todos la conocen: Alexa. La niña es transexual y el Registro Civil de Torremolinos le dijo que no podía cambiar su nombre porque la  ley que regula la rectificación registral de la mención al nombre y sexo de las personas no lo permite hasta los 18 años. “Pero es que Alexa es una niña desde que nació”, protesta su madre.

Los padres de Alexa iniciaron el expediente en febrero de 2014 y aportaron todo lo que tuvieron a mano para demostrar que tienen una hija: un informe psicológico de disforia (pese a que la madre reniega del término), otro del endocrino, fotos, un escrito de la pediatra, firmas de allegados, carnets deportivos, un informe del instituto… No sirvió. “La jueza ni se dignó a verla”, denuncia la madre, que ha recurrido la decisión. El Registro Civil justificó la negativa en que la mayoría de edad es un requisito “esencial” para hacerlo, según adelantó Málaga Hoy. En su decisión, la jueza se apoyó en un informe de Fiscalía, que también se oponía a la modificación.

La resolución contrasta con el caso reciente de Lucía, una niña transexual de cuatro años a la que un juzgado de Tolosa (Gipuzkoa) le permitió cambiar de nombre. Las asociaciones de transexuales aseguran que hay unos treinta menores que han logrado que se les reconozca el cambio de nombre y una decena a los que se les ha denegado. Sin embargo, ninguno consigue que se le reconozca su verdadero género.

Ches no entiende por qué la administración tiene que esperar a que su hija sea mayor de edad para comprender lo que todos pueden ver hoy. “¿Tú desde cuándo sabes que eres un chico?”, pregunta. “No te acuerdas. Porque está desde siempre. La identidad es inmutable”. Después de la conversación envía fotos de cuando tenía cinco o seis años, en cumpleaños, carnavales…: “Es una niña desde que nació”.

Los transexuales y sus familias hablan hoy del “derecho a ser”. Alexa es una niña allá donde va: en las listas del instituto, en el equipo de natación sincronizada, para sus amigos y su familia. Para todos menos para el Estado, que dice velar por su interés llevando la contraria a familia, amigos, especialistas y la propia Alexa. La imposibilidad de cambiar su nombre en el carnet de identidad la obligará a explicar a cualquiera que se lo pida (en una puerta de embarque, por ejemplo) por qué ella es la misma persona que aparece en el DNI con nombre masculino. Con 14 años deberá tener carnet de identidad.

“Que una niña, que se comporta como tal, tenga nombre de niño… eso es lo vejatorio”

Para evitar casos como el de Alexa las asociaciones piden un cambio normativo. La Ley 3/2007 regula la rectificación registral de las menciones al sexo y al nombre, que establece como requisitos ser mayor de edad, presentar un diagnóstico de disforia de género y acreditar que se ha seguido un tratamiento hormonal durante al menos dos años. Para Mar Cambrollé, presidenta de la Asociación de Transexuales de Andalucía-Sylvia Rivera, la norma ha quedado obsoleta, vulnera los principios de igualdad y no discriminación y no se ajusta a las recomendaciones de organismos internacionales, que ponen el acento en la necesidad de mecanismos administrativos rápidos y sencillos: “El interés superior del menor es el desarrollo de su identidad. Que una niña, que se comporta como tal, tenga nombre de niño… eso es lo vejatorio”.

En Málaga aún resuena la polémica por la  negativa del Colegio San Patricio a tratar a Gabriela como una niña. Pilar, la madre de Gabriela, cuenta que aunque en su DNI figura nombre de varón, ella siempre firmó como Gabi. Y explica por qué es importante el cambio: “Cada vez que voy en autobús entrego la tarjeta al conductor y a veces me dicen que los quiero estafar, hasta que lo agarro y le explico que mi hija es transexual. ¿Entiendes lo que esto supone?”. Hace apenas unos días recibieron el carnet de familia numerosa que expide la Junta de Andalucía, a la que habían pedido que recogiera el cambio de nombre. La carta de respuesta dice que es “procedente dicho cambio por razones de identidad de género”, pero el carnet nombra Gabriela de la siguiente forma: G. [apellidos] Gabriela. “Nombre legal, apellidos completos y nombre elegido”, explica la carta.

Cambrollé cree que logros como el de Lucía, la niña de Tolosa, son meritorios pero insuficientes: el DNI continuará recogiendo el sexo varón aunque se haya logrado la victoria parcial del cambio de nombre. Por eso, Pilar pide que se suprima la mención al género en el documento de identidad. “Igual que se quitó el estado civil, ¿qué me importa a mí lo que eres o dejas de ser?”, se pregunta.

A Alexa y Gabriela la mayoría de edad le traerá lo que a todos: por ejemplo, podrán votar o beber alcohol legalmente. Pero además, ellas podrán comenzar los trámites para que el Estado las reconozca como son. Hasta entonces la administración se resistirá a admitir lo que todos (su familia, sus amigos, sus maestros, ellas mismas) ven. Su madre razona que Alexa no se convertirá en mujer cuando cumpla 18: “Es que ella nació transexual. La ley no los contempla pero existen y no tienen por qué callarse”.

¿Liquidación de la Cámara de la Propiedad o “barra libre” con dinero público?

El juicio que se ha seguido esta semana en la Audiencia de Bizkaia contra el delegado de Vivienda en Bizkaia en la etapa del consejero Javier Madrazo(Ezker Batua-IU), José María Gonzalo, y contra Jon Alonso, contratado por el propio Gonzalo para realizar labores de contable en la citada Cámara de la Propiedad, ha puesto de manifiesto el descontrol que se vivió en el uso del dinero de este organismo durante el proceso de liquidación de la cámara, iniciado en febrero de 2006.

El caso es relativamente sencillo: el entonces consejero de Vivienda y Asuntos Sociales, Javier Madrazo, nombró en 2006 como delegado liquidador de la Cámara de la Propiedad de Bizkaia a su entonces responsable de Vivienda en ese territorio, José María Gonzalo. Pero entre los años que duró ese proceso -en el que se trataba de inventariar los bienes, integrar los trabajadores de la cámara en la Administración pública y proceder a liquidarla definitivamente- se produjeron una serie de gastos que la Fiscalía y la acusación particular en nombre del Gobierno vasco consideran malversación de fondos o, en su caso, apropiación indebida  por los que el Ministerio Público  pide para Gonzalo una pena de 5 años y 9 meses de prisión, además de inhabilitación absoluta por 9 años y medio. En concreto, José María Gonzalo autorizó unas obras de rehabilitación del edificio que albergaba la Cámara en Bilbao, desvió fondos de la cuenta de la Cámara -en la que solo él tenía autorización como liquidador- a la asociación Aukeratu -de la que era administrador único- para financiar la película de temática gay ‘Ander’ y también otra cantidad de dinero al contable de la Cámara, al margen de la nómina que ya cobraba Alonso por su trabajo en la citada institución.

La Fiscalía sostiene que Gonzalo “transfirió 106.653 euros desde la cuenta de la Cámara de la Propiedad a la cuenta de Jon Alonso” en ingresos sucesivos desde el 23 de junio de 2008 hasta el 8 de julio de 2009. Asegura que con el mismo ánimo lucrativo, “transfirió desde la misma cuenta a la de una asociación de la que era administrador 420.000 euros” [Aukeratu] también entre 2008 y 2009 y pagó con cargo a la Cámara de la Propiedad gastos por importe de 34.681 euros, además de compras destinadas a la rehabilitación del edificio, adquisición del mobiliario y enseres incurriendo “en unos gastos totales de 1.815.584 euros”. Y todo lo hizo fuera de los cometidos del “proceso de liquidación” en marcha y “actuando al margen de los órganos competentes para estas contrataciones y de cualquier procedimiento administrativo”.

El hecho de que Jon Alonso haya admitido los hechos, devolviera en 2008 cerca de 50.000 euros de los 106.653 euros que le dio Gonzalo y, según el informe final de la Fiscalía, haya “contribuido con su confesión al esclarecimiento de los hechos”, ha dejado a Gonzalo en una situación más que comprometida. Su abogado, el penalista Javier Beramendi, que ya se preguntó al principio de la vista oral si no se había producido un acuerdo entre el abogado defensor de Alonso y la Fiscalía a tenor de las declaraciones del acusado, este viernes comprobó sus sospechas al ver cómo Alonso conseguía una rebaja en las penas que, de hecho, le libran de la cárcel (dos años le piden ahora fiscal y la acusación en nombre del Gobierno vasco, frente a los cuatro que solicitaban ambos inicialmente como cooperador necesario en la malversación). “Había pacto cerrado en el que se debía implicar al señor Gonzalo”, ha clamado Beramendi.

“La contabilidad de la Cámara era un caos”

El perito encargado por el Gobierno vasco para auditar la situación de la Cámara tras la liquidación, Jesús María Marín, ha ofrecido al tribunal de la Audiencia de Bizkaia un testimonio demoledor sobre las cuentas en la etapa de Gonzalo y Alonso, sobre todo a partir de 2007. “La contabilidad era un caos, no cuadraba nada”, ha asegurado, al tiempo que cuestionaba el trabajo como contable de Alonso. “No tenía mucho conocimiento práctico de contabilidad”, “aquello era una contabilidad caótica” y, en todo caso, había gastos que “no eran propios de un proceso de liquidación”, ha sostenido Marín en su declaración este viernes.

A los 106.653 euros de la cámara que fueron a parar a las manos de Alonso, hay que sumar los 420.000 que fueron a la asociación Aukeratu para pagar la película ‘Ander’ y otros 34.600, que según el relato de la acusación en nombre del Ejecutivo vasco, sirvieron para pagos muy variados. Entre ellos, el agua, el gas y la luz de un piso de la cámara ocupado por el exportavoz de Ezker Batua-IU Serafín Llamas, que había sido realojado allí después de separarse de su pareja, el hermano de José María Gonzalo. O los gastos de un viaje a un festival de cine en Montevideo. U otros 28.700 euros en mobiliario para el edificio de la Cámara. Y todo ese movimiento de dinero fue ordenado y autorizado por José María Gonzalo, que ha sido definido por las acusaciones como una persona que se creía con libertad total para actuar en su cargo de liquidador de la Cámara de la Propiedad de manera “personalista”, arbitraria, a “capricho” y “como si fuera el gestor de una empresa privada”, en palabras utilizadas por el fiscal en su informe final. Ajeno a cualquier control. El propio consejero Madrazo reconoció en la vista que Gonzalo no tenía que darle cuenta sobre todo lo relacionado con los “fondos, patrimonio y personal” del proceso de liquidación.

El letrado del Gobierno vasco, que ejerce la acusación particular, Mikel Casas, ha hablado en su informe de “barra libre” para definir cómo se había empleado el dinero de la cuenta de la Cámara de la Propiedad y como se había actuado por parte de Gonzalo en todo el proceso de liquidación de dicha entidad. “La función que tenía Gonzalo no podía ser otra que la de liquidar la Cámara (…) Y nada legitima ni justifica el desmadre”, apuntó. “Ese dinero ha desaparecido y Gonzalo no tenía capacidad para hacer lo que hizo”, añadió Casas, para sostener su acusación de malversación de fondos públicos. “Los dos sabían [Gonzalo y Alonso] que se habían metido en un lío”, del que el contable ha querido sacar la pata en el último momento admitiendo los hechos y pactando con las acusaciones.

Y, pese a todo, el abogado de Gonzalo ha puesto todo este relato en cuarentena en su alegato final. Javier Beramendi ha apuntado que su defendido tenía cobertura legal para actuar como lo hizo porque el decreto por el que se declaraba extintas a las cámaras le confería “todas las facultades de los órganos de Administración de las Cámaras”. Ha negado en todo momento el carácter público de esos organismos, para cuestionar así la viabilidad los delitos de prevaricación y malversación de caudales públicos, y ha cuestionado que las órdenes de los pagos las realizara su defendido. “De los 40 cheques, 24 no se le pueden atribuir al señor Gonzalo”, ha asegurado Beramendi.

En el turno final de palabra que el presidente de la Sección Segunda de la Audiencia de Bizkaia ha concedido a los dos acusados ambos se han enzarzado en un cruce de acusaciones. Primero ha tomado la palabra José María Gonzalo, quien ha calificado de “falso e injusto” lo dicho por Jon Alonso, al tiempo que ha lamentado su “ensañamiento contra mí”. Después se ha acercado al micrófono el contable, quien ha afirmado que “todo es verdad” y ha reconocido que “aceptar el dinero [los 106.000 euros] fue malo por mi parte”. Confesó que tuvo una conversación antes del juicio en el que Gonzalo le dijo textualmente en relación a esa cantidad de dinero: “Ese es tu problema, a mí no me metas”. Y sin mirar para atrás, donde se encontraba Gonzalo, ha concluido diciendo: “A mi sí que me duelen puñaladas traperas de este tipo”.

El juicio ha quedado visto para sentencia.

Barcelona impedirá oficiar matrimonios a concejales que se opongan a casar a parejas del mismo sexo

La concejala de ciclo de vida, feminismos y LGTBI, Laura Pérez

La concejala de ciclo de vida, feminismos y LGTBI, Laura Pérez EFE

El Ayuntamiento de Barcelona ha decidido que los concejales que expresan su objeción a casar a parejas del mismo sexo no puedan celebrar ningún tipo de boda. La decisión, anunciada este jueves por la concejala de Ciclo de Vida, Feminismos y LGTBI, Laura Pérez, y comunicada el lunes de la semana pasada a los concejales por la alcaldesa Ada Colau, responde a una situación producida en el año 2014. El entonces concejal del PP Óscar Ramírez se negó a casar a una pareja de mujeres. El caso llegó al Síndic de Greuges que lo consideró una violación de sus derechos.

El Consejo LGTBI de la ciudad llegó a la misma conclusión que el Síndic: que “la objeción de conciencia ante la celebración de un matrimonio de personas del mismo sexo constituye una vulneración de los derechos de los colectivos LGTBI”. Por eso la alcaldesa, que es quien delega la potestad de oficiar ceremonias de matrimonio, la retirará a aquellos concejales que manifiesten objeción a casar a parejas del mismo sexo para garantizar los derechos de este colectivo.

Este jueves se ha reunido el Consejo LGTBI para constituir un grupo de trabajo de la aplicación de la ley contra la LGTBIfòbia aprobada la pasada legislatura en el Parlament. “Hay que acompañar a las entidades que han trabajado para que se aprobara esta ley”, ha remarcado Laura Pérez, que ha explicado que actualmente están analizando desde el ayuntamiento el trabajo realizado en este sentido por el gobierno Trias y haciendo formación específica a los trabajadores municipales.

Impulso al Centro municipal de recursos LGTBI

El Ayuntamiento ha decidido destinar un local de 1.314 metros cuadrados para ubicar el Centro Municipal de Recursos LGTBI en respuesta a las medidas recogidas en el Plan Municipal LGTB 2010-2015. El proyecto se ha trabajado con el Casal Lambda, el Frente de Liberación Gay de Catalunya (FAGC), la Asociación de Padres y Madres de Gays, Lesbianas y Transexuales (AMPGIL), la Asociación de Familias Lesbianas y Gays, y Gays Positius, y ahora se abre a un proceso participativo.

“Ya soy Lucía; estoy preparada para las burlas”

El padre de la niña transexual de cuatro años asegura que no sabían de su transexualidad porque pensaba que solo se daba en adultos

Agustín Arandia, padre de una menor de cuatro años en situación de transexualidad al que un Juzgado de Tolosa (Gipuzkoa) ha autorizado el cambio de nombre por otro femenino (de Luken a Lucía), ha reconocido que ni él ni su mujer tenían ni idea sobre la transexualidad de su hija cuando esta manifestó las primeras actitudes, ya que pensaban que esto solo se daba en personas adultas.

“En infancia no lo veías. Aunque nos enteramos luego, cuando nos informamos, de que la sexualidad se fija entre los dos, tres o cuatro años. Ahí se fija, y uno ya se siente niño o niña, hombre o mujer. Y, después, a veces, tiende a dar esa confusión de orientación sexual. Eso ya viene con las hormonas y es cuando se decide si te atrae un tipo de persona u otro, hombre o mujer, pero la identidad sexual a los dos, tres, cuatro años está decidido”, ha explicado.

En declaraciones a Europa Press Televisión, Arandia ha afirmado que su hija, que ha pasado de llamarse Luken a ser Lucía, era una menor normal que empezó a preferir juegos y juguetes femeninos.

“Entendíamos que era un juego y no había ningún impedimento, ningún problema. Pero fue curioso cuando empezó a hablar en euskara, en euskera los adjetivos son neutros; y ella se pasó muy rápidamente al castellano, sobre todo para referirse a ella misma, como guapa, alta, lo que sea. Al principio, le correjías, aunque te mosqueabas, y empezamos a pensar que detrás había algo”, ha señalado.

Tras consultar con varias asociaciones, empezó a encajarles “el tema” por las preguntas que hacía y cómo explicaba que se sentía. Finalmente, le plantearon la posibilidad de que igual tenían “una niña con pene”.

“Nos encajó, y a ella justo le tocó el momento en que la escuela les explicaban lo que eran niños y niñas, la diferenciación entre pene y vulva. A ella algo no le encajaba y preguntó: Yo tengo pene, ¿pero puedo ser una niña?. Hablamos y fue la conclusión”, ha asegurado.

“Siempre tendía a lo femenino”

Arandia ha recordado que Lucía siempre tendía a lo que socialmente se entiende como femenino, “rosas, princesas, todo ese tipo de cosas”, y que, tras confirmarse la noticia, fue un choque para él y su mujer, -“ante lo desconocido, siempre el miedo”-, pero rápidamente vieron lo que hay que hacer.

“Empiezas a ver el día a día y ves que es una niña más, que tiene sus inquietudes de niña, su problemática y su mundo es el que es, el cercano. ¿En un futuro qué va a tener?, pues, bueno, ya veremos los problemas que le van a venir. Y en nuestro caso, lo tenemos claro, lo que tenemos que hacer es el acompañamiento, informarle, darle herramientas, el que se quiera, que ni estás en un cuerpo equivocado, ni tienes nada mal. Estás en una situación que no es la más habitual, es rara, pero existe y tú eres perfectamente una mujer”, ha sentenciado.

Fue Lucía la que primero pensó en cambiar su nombre, que fue elegido por su hermano mayor. “Dijo: solo llamadme Lucía en casa, solo en casa.  Fuera seguiré siendo una niña, pero seguiré llamándome Luken”, aseguró.

Al cabo de un mes, ha recordado su progenitor, volvió a dirigirse de nuevo a ellos y les explicó: “Ahora, por favor, id a la escuela, a donde Lourdes, la profesora, y le decís, que ya soy Lucía, que estoy preparada para que se rían, o aguantar lo que fuera”.

No obstante, la documentación oficial seguía llamándola Luken, por lo que iniciaron los trámites para cambiar definitivamente de nombre. “En el pediatra, en la escuela, en el pueblo, se la trataba como niña, pero, a la hora de recetarle un antibiótico, aparecía su nombre antiguo. Y a ella le chirriaba; a ella y al hermano mayor, que leía, y decía ¡pero este nombre ya no existe!. Ya es Lucía ahora”, ha recordado.

Arandia se ha felicitado por la aceptación que ha tenido su hija entre los otros menores de la localidad, a quienes les chocaba más “el cambio de nombre que el decir que era una niña”, porque entre los niños ha sido algo “muy natural”. “Ya sabemos los crueles que pueden ser o no. Los niños son unos lienzos en blanco que están absorbiendo. Prejuicios tenemos más los adultos que los niños”, ha aclarado.

Preguntado sobre si la menor hablar de que se va a cambiar de sexo en el futuro, ha dicho que “habla porque lo vé”, sin conocimiento de causa, y dice que “yo igual me quito el pitilín”, o habla de “cuando me salgan las tetas”. Arandia ha subrayado que Lucía no sabe todavía lo que son estas cosas, como “quitarte el pitilín, que es una operación quirúrgica muy potente”.

Luken ya es Lucía a todos los efectos

El juzgado de Instrucción número 3 de Tolosa ha autorizado el primer cambio de nombre por motivos de transexualidad en Gipuzkoa que se ha materializado en un niño de cuatro años, vecino de la localidad de Asteasu, que ha pasado de constar como Luken a ser Lucía en el Registro Civil. Este cambio de nombre es el segundo que se produce en Euskadi después de que en 2013 se aprobara otra petición en Vitoria, según ha informado la Asociación de Familias de Menores Transexuales Chrysallis, que asegura que en el conjunto de España se han dictado alrededor de 30 autos en este sentido. El auto responde al expediente promovido por los padres del menor que solicitaban el cambio de nombre y considera que existe una “justa causa” para llevar a cabo la modificación y porque la denominación femenina “Lucía” es la utilizada habitualmente. El juzgado de Tolosa recuerda en su resolución, dictada en octubre de 2015, que el artículo 4 de la Ley 3/2007 dispone que la rectificación registral de la mención de sexo se acordará siempre que la persona que lo solicite “acredite que le ha sido diagnosticada una disforia de género”, mediante un informe médico o psicológico. En dicho informe deberá constar la existencia de una “disonancia entre el sexo morfológico o género fisiológico inicialmente inscrito y la identidad de género sentida por el solicitante”, así como la persistencia de esta circunstancia y que no exista un trastorno de personalidad. La resolución judicial  entiende que existe un “motivo justificado” que acredita el cambio de nombre por la necesidad de “adecuar la realidad social de Luken a su realidad registral” y en que existe un informe médico que constata la disforia de género del pequeño.

Esta condición implica “una identidad femenina que exterioriza” el menor “no solo físicamente, sino en su comportamiento, a pesar de su corta edad” que hace que sea “tratado como mujer”. Respecto al uso del nombre Lucía, el auto asegura que viene acreditado por la declaración testifical de una compañera de clase que afirma que “tanto en el colegio como en el pueblo” se le llama de esta manera.

Gonzalo: “Gastar 1,5 millones para remodelar la Cámara fue totalmente necesario”

El exdelegado de Vivienda en Bizkaia cuando Javier Madrazo (EB-IU) dirigía ese departamento, José María Gonzalo, ha defendido hoy que fue “totalmente necesario” el gasto de 1,5 millones de euros en remodelar la Cámara de la Propiedad en Bilbao en el marco del proceso de liquidación de dicha entidad iniciado en 2006. La Fiscalía, en su escrito, eleva los gastos totales de remodelación a 1.815.584 euros.

La Sección Segunda de la Audiencia de Bizkaia ha comenzado este martes el juicio contra Gonzalo por los delitos de malversación y prevaricación por los que  la Fiscalía pide una pena de 5 años y 9 meses de prisión, además de inhabilitación absoluta por 9 años y medio.

En este mismo juicio también está acusado de cooperación en la malversación Jon Alonso, contratado por Gonzalo, para quien la Fiscalía solicita cuatro años y 9 meses de prisión, y 8 años de inhabilitación absoluta.

Según ha justificado hoy Gonzalo en su declaración, las obras fueron “necesarias” porque en el edificio “había cables por el suelo, no disponía de medidas de seguridad ni de accesibilidad, ni casi de instalación para Internet, a lo que había que añadir que el inmueble está considerado patrimonio cultural y hubo que restaurar algunos elementos”.

El fiscal y la acusación particular, en representación del Gobierno Vasco, consideran que dichas obras eran “ajenas al proceso de liquidación”, aunque Gonzalo ha argumentado que parte de su departamento se ubicó en dicho inmueble por falta de espacio en otros edificios públicos y que desde allí se ofrecía un servicio público al ciudadano.

La Fiscalía mantiene que Gonzalo “transfirió 106.653 euros desde la cuenta de la Cámara de la Propiedad a la cuenta de Jon Alonso” en ingresos sucesivos desde el 23 de junio de 2008 hasta el 8 de julio de 2009. Asegura que con el mismo ánimo lucrativo, “transfirió desde la misma cuenta a la de una asociación de la que era administrador 420.000 euros” también entre 2008 y 2009 y pagó con cargo a la Cámara de la Propiedad gastos por importe de 34.681 euros, además de compras destinadas a la rehabilitación del edificio, adquisición del mobiliario y enseres incurriendo “en unos gastos totales de 1.815.584 euros “ajenos a su proceso de liquidación y actuando el acusado al margen de los órganos competentes para estas contrataciones y de cualquier procedimiento administrativo”.

Gonzalo ha resaltado también que se envió un informe sobre la remodelación al Departamento de Hacienda del Gobierno Vasco, en aquel momento dirigido por Idoia Zenarruzabeitia (PNV) y que “en ningún momento se notificó que se hubiera detectado algo incorrecto”.

También le acusan de contratar a seis personas, entre ellas a Alonso como contable, “de forma directa y sin publicidad”, aunque Gonzalo ha afirmado que la Cámara era una entidad privada y que, por tanto, no estaba sometida a un régimen de contratación pública.

Dinero por adelantado

Sobre otra acusación referida a la transferencia de fondos de la Cámara de la Propiedad para financiar la película de temática gay “Ander”, ha explicado que dicho filme era una encargo del Gobierno Vasco y que únicamente “se adelantó una cantidad” hasta que se cobraran las aportaciones de las distintas administraciones.

Ha rechazado también que autorizara el pago de un total de más de 104.000 euros al otro acusado, Jon Alonso, y ha afirmado que se le pagaba su nómina “sin ningún abono particular”.

El contable, sin embargo, ha relatado en su declaración que Gonzalo le abonó diversos ingresos, aparte de la nómina, al considerar que realiza “trabajo extra sin remunerar” ya que también le encargaron la contabilidad de otras entidades.

“Se lo comenté a una amiga y me dijo que no era normal -ha relatado Alonso-, me pareció que la cosa se estaba desmadrando y devolví la mitad del dinero que me habían pagado de más, porque el resto ya me lo había gastado”.

Durante la primera sesión del juicio también ha comparecido como testigo Javier Madrazo, quien ha asegurado que conocía las obras de remodelación del edificio, pero que en lo relacionado a fondos, patrimonio y personal, Gonzalo no rendía cuentas a su departamento sino a Hacienda, área que, según ha dicho, “me consta que estaba informada”. “Sí puedo decir que había problemas de falta de personal”, ha precisado.

Respecto a la película “Ander”, Madrazo ha mantenido que su consejería aportó 60.000 euros para su financiación y que desconocía que la Cámara hubiera adelantado fondos.

Gonzalo: “Gastar 1,5 millones para remodelar la Cámara fue totalmente necesario”

El exdelegado de Vivienda en Bizkaia cuando Javier Madrazo (EB-IU) dirigía ese departamento, José María Gonzalo, ha defendido hoy que fue “totalmente necesario” el gasto de 1,5 millones de euros en remodelar la Cámara de la Propiedad en Bilbao en el marco del proceso de liquidación de dicha entidad iniciado en 2006. La Fiscalía, en su escrito, eleva los gastos totales de remodelación a 1.815.584 euros.

La Sección Segunda de la Audiencia de Bizkaia ha comenzado este martes el juicio contra Gonzalo por los delitos de malversación y prevaricación por los que  la Fiscalía pide una pena de 5 años y 9 meses de prisión, además de inhabilitación absoluta por 9 años y medio.

En este mismo juicio también está acusado de cooperación en la malversación Jon Alonso, contratado por Gonzalo, para quien la Fiscalía solicita cuatro años y 9 meses de prisión, y 8 años de inhabilitación absoluta.

Según ha justificado hoy Gonzalo en su declaración, las obras fueron “necesarias” porque en el edificio “había cables por el suelo, no disponía de medidas de seguridad ni de accesibilidad, ni casi de instalación para Internet, a lo que había que añadir que el inmueble está considerado patrimonio cultural y hubo que restaurar algunos elementos”.

El fiscal y la acusación particular, en representación del Gobierno Vasco, consideran que dichas obras eran “ajenas al proceso de liquidación”, aunque Gonzalo ha argumentado que parte de su departamento se ubicó en dicho inmueble por falta de espacio en otros edificios públicos y que desde allí se ofrecía un servicio público al ciudadano.

La Fiscalía mantiene que Gonzalo “transfirió 106.653 euros desde la cuenta de la Cámara de la Propiedad a la cuenta de Jon Alonso” en ingresos sucesivos desde el 23 de junio de 2008 hasta el 8 de julio de 2009. Asegura que con el mismo ánimo lucrativo, “transfirió desde la misma cuenta a la de una asociación de la que era administrador 420.000 euros” también entre 2008 y 2009 y pagó con cargo a la Cámara de la Propiedad gastos por importe de 34.681 euros, además de compras destinadas a la rehabilitación del edificio, adquisición del mobiliario y enseres incurriendo “en unos gastos totales de 1.815.584 euros “ajenos a su proceso de liquidación y actuando el acusado al margen de los órganos competentes para estas contrataciones y de cualquier procedimiento administrativo”.

Gonzalo ha resaltado también que se envió un informe sobre la remodelación al Departamento de Hacienda del Gobierno Vasco, en aquel momento dirigido por Idoia Zenarruzabeitia (PNV) y que “en ningún momento se notificó que se hubiera detectado algo incorrecto”.

También le acusan de contratar a seis personas, entre ellas a Alonso como contable, “de forma directa y sin publicidad”, aunque Gonzalo ha afirmado que la Cámara era una entidad privada y que, por tanto, no estaba sometida a un régimen de contratación pública.

Dinero por adelantado

Sobre otra acusación referida a la transferencia de fondos de la Cámara de la Propiedad para financiar la película de temática gay “Ander”, ha explicado que dicho filme era una encargo del Gobierno Vasco y que únicamente “se adelantó una cantidad” hasta que se cobraran las aportaciones de las distintas administraciones.

Ha rechazado también que autorizara el pago de un total de más de 104.000 euros al otro acusado, Jon Alonso, y ha afirmado que se le pagaba su nómina “sin ningún abono particular”.

El contable, sin embargo, ha relatado en su declaración que Gonzalo le abonó diversos ingresos, aparte de la nómina, al considerar que realiza “trabajo extra sin remunerar” ya que también le encargaron la contabilidad de otras entidades.

“Se lo comenté a una amiga y me dijo que no era normal -ha relatado Alonso-, me pareció que la cosa se estaba desmadrando y devolví la mitad del dinero que me habían pagado de más, porque el resto ya me lo había gastado”.

Durante la primera sesión del juicio también ha comparecido como testigo Javier Madrazo, quien ha asegurado que conocía las obras de remodelación del edificio, pero que en lo relacionado a fondos, patrimonio y personal, Gonzalo no rendía cuentas a su departamento sino a Hacienda, área que, según ha dicho, “me consta que estaba informada”. “Sí puedo decir que había problemas de falta de personal”, ha precisado.

Respecto a la película “Ander”, Madrazo ha mantenido que su consejería aportó 60.000 euros para su financiación y que desconocía que la Cámara hubiera adelantado fondos.

La Italia católica se moviliza en su último intento contra el matrimonio homosexual

Italia se moviliza para reclamar el reconocimiento de las uniones homosexuales

Italia se moviliza para reclamar el reconocimiento de las uniones homosexuales EFE

Han pasado 2.000 años desde que los romanos se reuniesen en el Circo Máximo para contemplar a las cuadrigas bramando alrededor de la pista. Pero, el pasado sábado, una nueva batalla fue rescatada de la antigüedad. Con pancartas en lo alto que rezaban “Defendemos a nuestros hijos” y “La familia se basa en el matrimonio entre un hombre y una mujer”, cientos de miles de personas se reunieron por “El día de la familia” en protesta ante un proyecto de ley que legaliza las uniones entre parejas del mismo sexo.

“Tenemos muchos nietos; su futuro está destruido si el matrimonio se destruye”, manifestaba Ida. “Los niños tienen el derecho de tener un padre y una madre. Para crecer de una forma saludable, necesitan una figura masculina y femenina”. La ley, que se está siendo fuertemente debatida en el senado, tiene por objeto garantizar derechos jurídicos para las parejas homosexuales por primera vez en Italia. Entre las clausulas se encuentran las uniones civiles, el derecho a heredar la pensión de sus parejas y un controvertido artículo sobre la “adopción de un hijastro”, que permitirá legalmente que un niño tenga padres del mismo sexo en el caso de que una persona homosexual adopte al hijo biológico de su pareja.

Las concentraciones en Roma tuvieron un trasfondo tanto patriótico como religioso. Se vendían banderas italianas y ondeaban las pancartas religiosas mientras los curas y las monjas caminaban entre la multitud. “Creo en el Cristianismo y en los valores familiares. Nuestros hijos no están en venta”, declaraba Gianluca, un participante de la manifestación.

Los organizadores estiman que dos millones de personas asistieron a las protestas, una cifra que no ha podido ser corroborada de momento por la policía italiana. Los jóvenes voluntarios se ofrecieron a ayudar y numerosas familias desplegaron manteles de picnic y sillas de camping en la hierba. No es coincidencia que, mientras se han garantizado derechos a las parejas del mismo sexo en otros países con mayoría católica, como España e Irlanda, el hogar del Vaticano continúe siendo el último país en el oeste de Europa que no ofrece derechos a los homosexuales.

El referéndum irlandés, celebrado el pasado año, para legalizar el matrimonio homosexual fue calificado como “fracaso para la humanidad” por el Cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano. El nuevo proyecto representa un tremendo desafío a las autoridades de la iglesia católica en un momento en el que su influencia sobre la política italiana y la sociedad se está viendo disminuida. La causa ha movilizado también a conservadores de todos los partidos, que argumentan que la ley traiciona a la “familia natural” y a la constitución italiana.

“En Italia, el tribunal constitucional proclama que el matrimonio es solo entre un hombre y una mujer…esta ley es un fraude, porque requiere cambiar la constitución”, dice Gianfranco Amato, uno de los organizadores de la protesta. De hecho, la constitución italiana se refiere a “cónyuges” sin especificar el género, aunque el tribunal estipulase en 2010 que prohibir las uniones entre personas del mismo sexo no violase los derechos constitucionales de los ciudadanos. Mientras que el proyecto de ley no menciona en ningún momento la palabra “matrimonio”, otro organizador de la movilización, Toni Brandi, defiende que las uniones entre homosexuales son un “ataque directo” a la tradición del matrimonio.

El Papa en contra del matrimonio ‘que no quería Dios’

Los manifestantes han aguardado a las declaraciones del Papa Francisco con entusiasmo, que no ha emitido un comentario acerca de la ley pero ha dejado claro su punto de vista sobre el asunto. “No puede haber confusión entre la familia que quería Dios y cualquier otro tipo de unión”, manifestó el pasado mes.

Aquellos en contra de la ley han encontrado un respaldo fantástico en la figura del cardenal Angelo Bagnasco, presidente de la conferencia italiana de los obispos, que ratificó que el tener hijos no debía ser un derecho. “Los niños tienen el derecho de crecer con una madre y un padre. La familia es un hecho antropológico, no ideológico”, añadió.

Pero la influencia de la iglesia es marcadamente más débil que en 2007, cuando triunfó la campaña política en contra del proyecto de ley por el matrimonio homosexual. Los organizadores de “El día de la familia” se han esforzado en remarcar que el evento ha sido impulsado por los ciudadanos, no por la iglesia, y han destacado que entre los manifestantes se encontraban también laicos y musulmanes.

Cuando los senadores comenzaron a debatir el proyecto en la mañana del martes, una densa columna de humo sobre Roma hacía desaparecer la basílica de San Pedro de las panorámicas. Pero Alessia Crocini, quien tiene un hijo con su pareja Chiara, afirma que la fortaleza de la oposición de la iglesia continúa siendo palpable en la ciudad eterna. “Somos un símbolo, el último reducto. Es como si la iglesia fuese a colapsar [si la ley sigue adelante], el Vaticano fuese a caer y San Pedro a desmoronarse”, expone. “Así que es una resistencia muy potente”.

El proyecto de ley italiano llega seis años después de que Argentina -donde el Papa fue arzobispo de Buenos Aires- legalizase los matrimonios entre personas del mismo sexo. El cardenal Jorge Mario Bergoglio, como era entonces conocido el Papa, se opuso abiertamente a la ley, aunque los activistas se apoyen en que el pontífice admitió su apoyo en secreto a las uniones del mismo sexo.

El alcance de la ley: de la iglesia a los negocios

Más allá de la iglesia, el debate ha alcanzado el sector empresarial en Italia con la compañía de trenes Italo ofreciendo un 30% de descuento a los pasajeros que se dirigiesen al “Día de la familia”. La firma se ha defendido en que los motivos de la decisión eran “puramente comerciales”. No es una estrategia sin precedentes pues, en 2013, el presidente de la empresa de pasta Barilla advirtió que nunca utilizaría a una pareja homosexual en sus anuncios. Si a los compradores no les gusta su enfoque, pueden comprar otra marca de pasta, añadió Guido Barilla.

Pero también hay señales de esta corriente de cambio. La presión pública hizo que Barilla emitiese una disculpa, mientras que la firma de moda D&G se enfrentaba a un boicot después de que los diseñadores Domenico Dolce y Stefano Gabbana criticasen a las familias formadas por personas del mismo sexo. El sábado, estos mismos diseñadores lanzaron una nueva linea de bolsos y camisetas homenajeando a las parejas homosexuales.

En política, el principal opositor de la ley ha sido el ministro del Interior, Angelino Alfano, un antiguo pupilo de Silvio Berlusconi, que ha declarado recientemente que la adopción de los hijastros amenaza con fomentar el “repugnante y negocio ilícito” de la maternidad de alquiler a Italia. Alfano forma parte de una difícil coalición con el primer ministro de izquierdas, Matteo Renzi, que ha urgido a los legisladores a retirar el proyecto de ley.

“La sociedad y la gente está mucho más avanzada que los políticos”, afirma Crocini. “Ante este tipo de situaciones sociales nunca obtenemos malas reacciones, estamos ofendidos o sufrimos discriminación”. Los políticos locales están tomando los pasos más valientes, con alcaldes desafiando la prohibición de algunos matrimonios a través de la inclusión de sociedades homosexuales contratadas desde el extranjero en el registro de los ayuntamientos. Esta actuación ha sido tildada de ilegal pero, sin embargo, estimula el debate y muestra a una sociedad preparada para el cambio.

Europa apoya ahora después de diez años

“El día de la familia” ha demostrado sin duda que existe una oposición, pero las protestas se organizaron una semana después de la manifestación “¡Despierta Italia!”, que reunió a los defensores de los derechos para los homosexuales en más de 100 plazas italianas. Y mientras el motor que impulsó los matrimonios del mismo sexo en el Parlamento fracasó hace casi diez años, los activistas ahora tienen el apoyo de la Corte Europea de los Derechos Humanos. El año pasado, la corte falló en favor de tres parejas homosexuales que declararon que Italia violaba sus derechos al no darles reconocimiento legal y forzarles a tener vidas paralelas.

Crocini reconoce que su “vida es complicada” desde que necesita un documento firmado por Chiara para recoger a su bebé, Levon, de la guardería. “Según la ley, Levon solo tiene una madre -Chiara-, así que es el hijo de alguien que casualmente vive con otra persona”, explica.

Se ha ofrecido la opción de que Renzi se comprometa con la ley, si se salta la clausula de la adopción de hijastros, para incitar a las sociedades civiles a apoyarla, pero Crocini y otros miembros de grupos LGBT han dicho que eso sería un completo fracaso. “Nuestra principal esperanza es que la ley se apruebe [sin cambios], lo que sería un pequeño paso por ahora, pero el primero hacia la igualdad”, manifiesta Crocini. Aquellos que apoyan el proyecto de ley se han prometido a seguir luchando hasta conseguir todos los derechos para el matrimonio. Van a confrontar una dura batalla. Por su parte, los conservadores se han prometido a recoger 500.000 firmas para conseguir un referéndum si las propuestas actuales son aprobadas.

“Hoy en día, las parejas homosexuales tienen todos los derechos en Italia”, dice Amato, defendiendo que el proyecto de ley es una mera distracción ante los asuntos más serios. “Como si Italia no tuviese problemas de paro, el Isis o el orden público. El país está lleno de problemas y el Parlamento se pone a hablar de adopciones. Es absurdo”.

Los ultracatólicos lanzan una campaña homófoba contra los restaurantes VIPS por publicitarse con una pareja gay

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La campaña publicitaria de la cadena de restaurantes VIPs

Que el 2×1 no te pille sin pareja”. Este es el lema de una campaña de la cadena de restaurantes VIPS, en el que el grupo incluye una imagen de dos hombres y un perro. La imagen, aparentemente una más de las muchas que a diario aparecen en los medios, ha levantado las iras de los movimientos más rancios y conservadores de este país, capitaneados -una vez más- por el lobby ultracatólico Hazte Oír, que ha lanzado una campaña de firmas en la que presiona al grupo no solo para que retire la publicidad, sino para que “incluya y reconozca a la familia natural” en sus estrategias de marketing.

“El jueves pasado fui a comer a VIPS. Y me encontré con un mantel individual con una imagen que me llamó mucho la atención […] Lo que podría parecer una campaña publicitaria inofensiva, me hizo darme cuenta de un enorme peligro: se está normalizando una imagen de la familia que no es natural. Y lo que es peor: VIPS, un grupo que rige establecimientos familiares, se está prestando para este juego”, afirma el grupo ultra, que en su campaña ha recogido, hasta la fecha, más de diez mil firmas.

Hazte Oír fue fundado y es dirigido por Ignacio Arsuaga, un conocido militante de grupos provida, sobrino de Rodrigo Rato y al que distintos informes relacionan como uno de los líderes de  El Yunque, una organización secreta de presión homófoba y ultracatólica, que ha generado alerta incluso entre los propios obispos. Algunos de ellos, como los de Toledo o Getafe, han prohibido a Hazte Oír participar en actividades diocesanas o utilizar parroquias o centros de la Iglesia mientras no abandonen este tipo de activisto secreto.

Rajoy, “contrario a la familia”

Arsuaga, además, es uno de los responsables de las manifestaciones convocadas durante el Gobierno Zapatero para oponerse a la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo, la reforma de la ley del aborto o la implantación de Educación para la Ciudadanía. Su deriva les ha llevado a calificar de “contrarias a la familia” las políticas del Gobierno presidido por Mariano Rajoy, llegando a pedir a sus fieles que no votasen al PP en las pasadas elecciones generales.

“Bombardeados con esa imagen”

“Estas imágenes, y otras parecidas, están por todos lados. En la calle, en los restaurantes del grupo y en las redes sociales. Y niños y jóvenes las están viendo. Niños y jóvenes que podrían ser tus hijos, tus sobrinos o tus nietos. Niños y jóvenes que están siendo confundidos […] Yo pensé en mis hijos y me preocupó mucho pensar que estaban siendo bombardeados con esta imagen. Pensé en las veces que vamos a un VIPS a merendar y en todas las familias veo allí, y que sé que suelen frecuentar sus establecimientos”, culmina la homófoba recogida de firmas.