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Un promotor compra el edificio al Estado por 8,8 millones tras un acuerdo con Hoteles Axel
Alzado de la fachada del hotel cuya apertura está prevista para el verano de 2018. / DV
El debate sobre si tirar o no el pequeño frontón de Arroka se va a quedar pequeño en Amara Zaharra comparado con lo que se avecina. La vieja residencia de policías de la calle Amara se va a transformar en un moderno hotel de 100 habitaciones dirigido a la comunidad gay, que será explotado por el grupo Axel. Un avispado promotor de Tolosa llegó a un acuerdo con esta cadena y se hizo con el edificio en la subasta pública convocada por el Ministerio de Interior a principios de febrero. Su objetivo es abrir en el verano de 2018.
Será el primer hotel de este tipo ubicado no solo en la ciudad sino en todo Euskadi. A diferencia de los establecimientos en los que se declara la bienvenida al cliente homosexual con el término ‘gayfriendly’, el hotel que abrirá sus puertas en la calle Amara se declara ‘heterofriendly’, es decir será un hotel dirigido al publico gay que estará abierto a todo el mundo porque lo que primará será «el respeto y la diversidad», según explica el grupo de Hoteles Axel en su web.
El edificio de la calle Amara 26, antigua residencia de agentes del Cuerpo Nacional de Policía, quedó sin uso tras el cierre del cuartel de Aldapeta. El Ministerio del Interior llevaba seis años intentando su enajenación, pero la crisis hizo difícil casar oferta y demanda de un bloque que fue tasado en 2011 en 13 millones de euros. La parcela, ubicada entre el frontón cubierto del barrio y un nuevo edificio de viviendas, quedó fuera de la operación urbanística de San Bartolomé. El Estado vio cómo, uno tras otro, los concursos de venta quedaban desiertos y fue bajando de precio. En la subasta pública del pasado 8 de febrero un promotor de Tolosa (Igara 46 S.L.) se hizo con el edificio al precio de 8.870.000 euros, 6.000 euros más del precio al que salía a la venta, según nos explicó el empresario, que prefiere mantener su anonimato.
La inversión es consecuencia de un acuerdo con el grupo hotelero Axel fraguado a finales del verano pasado y en el que intervino un intermediario europeo. «Llevaban tiempo queriendo tener un hotel aquí, por la ciudad y su capacidad de atracción de ciudadanos franceses, pero no les gustaban las parcelas que habían visto, lejos del centro y de la playa o edificios muy viejos». El promotor valoró la seriedad y las garantías que aportó Axel. «Apostaron fuerte y el entendimiento fue rápido». La cadena se haya en plena expansión, apoyado por la fortaleza de un fondo de inversión internacional que mediante la inyección de liquidez se ha hecho recientemente con el 33% del grupo. A corto plazo Axel quiere crecer en las capitales europeas y en Estados Unidos, y después pone la vista en Latinoamérica y Asia.
El contrato para el hotel donostiarra se negoció durante «tres o cuatro meses». El promotor compraba la parcela, se queda con la propiedad y se encargará de su derribo parcial y reacondicionamiento como hotel. Axel alquilará el edificio a 20 años y lo explotará. «Querían un hotel de 90 habitaciones mínimo, céntrico, donde se pueda ir andando a la playa». Amara 26 les encajaba. A 350 metros de La Concha, a 100 metros de la plaza Easo, con una boca del futuro Metro al lado, a 5 minutos del Buen Pastor y a 10 minutos de la Parte Vieja. Bingo.
El solar, de unos 730 m2 de superficie, tiene una edificabilidad de 4.875 m2 sobre rasante (planta baja más cinco pisos) y 1.505 m2 bajo rasante (dos plantas de garaje). Con estas características de la parcela, se redacta un proyecto para un hotel de 97 habitaciones, que perfilan un grupo de arquitectos especializados en el diseño de este tipo de establecimientos. El promotor explica que será un hotel «muy diferente, muy trabajado y muy cuidado en los detalles», como lo quiere Axel para la tipología de cliente a la que está orientada su actividad. Habrá habitaciones individuales, dobles y dobles con salón, 30 de ellas con amplia terraza privada, con superficies entre 15 y 27 m2 más los 4-5 m2 del baño. El hotel dispondrá de recepción, salones, cafetería, cocina, lavandería, servicio de aparcamiento, gimnasio y spa (con luz natural en el primer sótano), un elemento clave en los hoteles Axel. Además, habrá un ‘chill out’ en la cubierta del edificio, «un espacio fundamental para nuestros hoteles -según reconocía el consejero delegado de la compañía. Albert Olivé, en una entrevista en 2015- para lograr la interacción entre ciudadanos locales y visitantes».
La escritura de la venta de la parcela se firmará la semana que viene. Los arquitectos ultiman el proyecto de ejecución y tramitarán las licencias en mayo. El edificio, muy cercano a la parroquia de Santiago Apostol, no se derribará por completo, ya que la intención es mantener la estructura para reconstruirlo después. Axel se encargará de la decoración final. El promotor, que realizará una inversión total que rondará los 17 millones de euros, aspira a que el hotel pueda estar en funcionamiento en el verano de 2018. Tiene claro que un establecimiento de este tipo será todo un revulsivo para Amara Viejo. «Los clientes de este tipo de hoteles son muy educados, nada conflictivos, tienen un poder adquisitivo muy alto y su presencia genera un gran impacto económico en los alrededores», matiza.
Los hoteles Axel suponen, más que una pequeña revolución, un revulsivo económico y comercial allí donde se implantan. La cadena obtuvo el pasado año unos ingresos de 16,1 millones de euros y una espectacular ocupación del 98%. Con las nuevas aperturas de Madrid, Berlín e Ibiza (tiene prevista su apertura dentro de un mes en la Cala d’en Bou), Axel Hotels prevé aumentar un 52 % sus ingresos y facturar este año 24,5 millones de euros. El plan de expansión de la compañía contempla abrir diez hoteles en los próximos cinco años.
El promotor de la operación (Igara 64 S.L.), que está detrás de varias de las nuevas aperturas de hoteles en la ciudad, se plantea este fuerte desembolso realizado en Amara como una inversión «a largo plazo». Si las cosas se torcieran o llegara una nueva crisis, «siempre tendré la posibilidad de transformar la parcela en 40 viviendas libres».
DATOS
Ubicación. Calle Amara, 26. El edificio fue residencia para agentes del Cuerpo Nacional de Policía.
Proyecto. Derribo parcial y reconstrucción sobre la actual estructura de un hotel de 97 habitaciones (4 estrellas superior) para Hoteles Axel, grupo catalán icono del turismo gay.
Inversión total. 17 millones de euros.
Previsión de apertura. Verano de 2018.