EISIDA organiza en Donostia el congreso Nacional sobre el Sida e ITS de 2015, del 6 al 8 de mayo

El XVII Congreso Nacional sobre el Sida e ITS, que organiza SEISIDA, se celebrará del 6 al 8 de mayo de 2015 en San Sebastián. La sede será el Centro de Congresos Kursaal de la capital donostiarra. El lema del congreso de este año es “Reduciendo la vulnerabilidad en poblaciones clave”, un lema que va en la línea del de la 20ª Conferencia Internacional del Sida de Melbourbe, en la que se llamó la atención sobre las poblaciones más vulnerables.

Este año además, y siguiendo la estela marcada por el XVI Congreso sobre el SIDA-AIDS Impact de Barcelona de 2013, el congreso incluye en las infecciones de transmisión sexual en su programa, reconociendo así la importancia que la ITS tienen en la la infección por VIH y con el objetivo de hacer una llamada de atención al incremento que están experimentando las ITS en nuestro país en los últimos años.

El plazo para el envío de comunicaciones ya está abierto y se podrán enviar los trabajos hasta el domingo 25 de enero de 2015. Como en otras ocasiones habrá becas, de inscricpión, viaje o alojamiento, para asistir al congreso. La información sobre los requisitos, pero también sobre el programa científico y toda la relacionada sobre el congreso estará disponible en www.congresonacionalsida.es

Becas para el curso de experto Profesional en Formación de Mediadores en la atención a personas con VIH

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El Foro Español de Activistas en Tratamientos del VIH (FEAT) con el apoyo del programa Positive Action de ViiV HEALTHCARE ofrece 20 becas para cubrir los gastos de matriculación del Curso de Experto Profesional en Formación de Mediadores en la atención a personas con VIH de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) en colaboración con, SEISIDA y CESIDA.

El curso está orientado a proporcionar un conocimiento amplio sobre aspectos bio-psico-sociales de la infección por VIH a todas aquellas personas que estén interesadas en ampliar conocimientos para el trabajo multidisciplinar en el apoyo y la educación para la salud a las personas con VIH desde distintos ámbitos: sanitario, social y comunitario, especialmente desde las asociaciones sin ánimo de lucro. Toda la información sobre el curso, duración, plazos de matrícula, requisitos para las becas, se puede consultar en la página web de SEISIDA (http://www.seisida.es).

BUG CHASERS Y GIFT GIVERS

 Esta vez les voy a hablar de un tema que yo desconocía que existiera y que me gustaría compartirles, para que también lo conozcan.

¿Alguna vez han escuchado el término ‘Bug Chaser‘? ¿Y qué tal ‘Gift Giver‘?

Hace unos días mientras navegaba por internet y me encontré con que ellos existen dentro de lo que se considera una subcultura hardcore del ambiente gay. 

Pues resulta que los bug chasers son personas que gustan y buscan tener relaciones sexuales sin protección (bareback) con aquellos quienes tienen VIH positivo, con el objetivo principal y deliberado de infectarse del virus.

 

Los gift givers son aquellos portadores del virus de VIH quienes están dispuestos a ‘donar su virus’ a quien desee recibirlo (en este contexto, a un bug chaser).

Esta práctica inició a ponerse de moda en los años 90 cuando una agrupación gay fetichista buscaba deliberadamente infectarse del virus. De este modo se crearon las ‘bug parties’, fiestas en las que se reunían grupos de alrededor de 20 personas, entre ellas una o dos personas VIH positivas que sólo el o los anfitriones de la fiesta los identificaban, en tanto que los demás invitados sabían que había gift givers entre ellos pero no tenían idea de quienes eran, dando un sentido de ‘ruleta rusa’ al momento de tener sexo entre ellos.

En general, el virus se considera entre ellos ‘un regalo’que merece ser dado y recibido (de ahí el nombre de los gift givers), una experiencia única que merece ser vivida, pero aún con ello existen varias las razones por las cuales un bug chaser busca infectarse del virus de VIH, entre las que se cuentan:

  • La excitación: Hay a quienes les resulta erótico ser infectados o la mera probabilidad de serlo, lo cual resultaría muy parecido a una parafilia.
  • El sentido de pertenencia: Consideran que es adecuado para ellos pertenecer a una comunidad , dado que han sido rechazados por la sociedad o por su imposibilidad de encajar con la misma. Incluso son personas que se sienten solas y ven esto como una solución alternativa para ello.
  • El fortalecer una relación: Personas que son VIH negativo que tienen una relación sentimental con una persona con VIH positivo y ya no desean seguir cuidándose. También por  afianzar la relación para evitar que ésta termine por motivo de los cuidados que implica evitar el contagio.
  • El sentido de inevitabilidad: Aquellos que creen firmemente que será inevitable que en algún momento dado se infecten de VIH y prefieren adquirirla voluntariamente en lugar de ser tomados por sorpresa y vivir en constante preocupación de infectarse.
  • La adrenalina: Personas que lo ven como un ‘deporte extremo’, teniendo relaciones sexuales sin protección porque la sensación de vértigo o el riesgo que implica para ellos les agrada. Incluso hay quienes consideran que el VIH no puede transmitirse por vía sexual y practican sexo bareback sin ningún temor.
  • La obtención de beneficios públicos: Quienes de alguna forma buscan la compasión del Estado o de instituciones de asistencia para obtener servicios médicos, los cuidados requeridos y también, incluso, la compañía, el hecho de saber que alguien se preocupa por ellos.

Este movimiento, por así llamarlo, ha sido objeto de estudios serios por parte de diversas instituciones e investigadores, que en su conjunto tratan de comprenderlo, documentarlo, explicarlo y en lo posible prevenir que el contagio por VIH salga del relativo control que se tiene sobre él; asimismo, se intenta comprender las razones sociales y psicológicas que mueven a los bug chasers para buscar,  obtener y vivir con ‘el regalo’. Se considera por quienes han analizado el tema que son personas que viven en una constante paranoia injustificada e incluso se les ha juzgado como con algún problema sociológico o psicológico que los mueva a ser bug chasers.

Cabe destacar que las motivaciones de los barebackers y los bug chasers que ejercen el sexo ‘a pelo’ son absolutamente distintas; mientras los primeros buscan meramente mayor placer en sus encuentros sexuales y en lo posible se esmeran en evitar enfermedades de transmisión sexual, los segundos lo hacen por la posibilidad y certeza de infección y lo hacen con gente que de antemano saben que tiene VIH.

Inclusive hay un documental hecho en 2003 llamado ‘The Gift’, realizado por Louise Hogarth, en el que se da un seguimiento a 2 personas que son partícipes de esta práctica, cuentan sus experiencias  y sus razones del porqué son bug chasers. El documental también muestra a gays de diferentes ámbitos opinando sobre el tema e incluso a un grupo de hombres ya más grandes de edad que cuentan cómo amigos y amantes han muerto por causa del VIH, los tratamientos que tienen qué llevar y una crítica a las campañas contra elVIH/SIDA. Si desean verlo, fácilmente se puede encontrar en YouTube, aunque dividido en partes y solamente en inglés (la primera parte del documental se las comparto al final del texto).

Aunque aún se desconocen datos a ciencia cierta de cuán popular es esta práctica en diversos países, incluido México, lo cierto es que existe y que de alguna forma u otra quienes están interesados de efectuarla, se contactan de diversas formas, sobre todo mediante foros y salas de chat específicas o mediante contacto directo.

Aunque considero que somos libres para hacer cuanto queramos con nuestros cuerpos y nuestra salud y se respeta las decisiones que puedan tomar quienes consideran que esta práctica les satisface, también creo que es mejor vivir y tener una vida sexual de una forma menos arriesgada y mayormente informada.

Si tienen dudas sobre cuestiones relacionadas al VIH, pueden leer muchísima literatura que hay sobre el tema, acudir con un especialista y acercarse con personas y asociaciones como
SI LO VIVO, que ofrecen para ustedes a través de SoyHomosensual y en su página web un medio de contacto directo y confidencial vía chat en el que pueden aclarar todas sus dudas con seguridad e información completamente fidedigna.Seguramente pueden ver su anuncio en la parte inferior derecha de la pantalla. Anímense e infórmense. 

Espero que el post les haya gustado, al menos para estar al tanto. Como les digo, yo desconocía esta información y he aprendido algo; no cabe duda que la diversidad se vive de maneras muy diferentes.

Saludos, abrazo de oso y toda la cosa y si tienen alguna sugerencia o comentario sobre esto o alguna otra cosa en la que pueda ayudarles, pueden escribir en el espacio destinado para ello al final del post o de manera directa a través de mis redes sociales. 

¿Por qué hay tantos homosexuales sin hogar en EE.UU.?

Las estadísticas revelan que gran parte de las personas sin techo en Estados Unidos se definen como gays, lesbianas, homosexuales o transexuales.

Son más del 40% del total, según el Williams Institute de la Universidad de California, y muchas veces se ven forzados a vivir en la calle a causa del rechazo que genera en sus familias su proceso de definición de una identidad de género.

Las creencias religiosas más conservadoras también representan un papel de peso a la hora de expulsar a jóvenes y adolescentes del hogar, dicen los trabajadores sociales.

La BBC viajó a conocer la historia de Emani Love, alojada en un refugio de la organización de caridad Ruth Ellis de Detroit. Véala en este video.

Producido por Sune Engel Rasmussen, como parte de la serie “Altered States”, de BBC News.

El cuidado del paciente con infección por VIH: entrando en una nueva era

La nueva perspectiva del VIH como una enfermedad crónica es uno de los mayores logros de la medicina moderna

Después de superar la primera era del cuidado del paciente con infección por VIH en la que solo podíamos tratar las infecciones oportunistas y proporcionar a los cuidados paliativos, y la segunda era en que se inició el tratamiento con fármacos antirretrovirales cada vez más eficaces, hoy podemos decir que estamos entrando en una tercera era en el abordaje de esta enfermedad. En esta nueva etapa, tenemos dos objetivos o retos principales: el primero, es el largo anhelo de la superación de las barreras que nos separan de la curación definitiva; el segundo, es el de las comorbilidades asociadas al envejecimiento, frente a las que los pacientes con infección por VIH controlada virológicamente presentan un mayor riesgo.

El primer reto nos sitúa ante la cuestión de los llamados reservorios virales. El reservorio viral es el tipo celular o espacio anatómico que preserva y mantiene viable el VIH, dejando intacta su capacidad replicativa, y es capaz de restaurar la población de células infectadas cuando estas son eliminadas por mecanismos citotóxicos virales directos o por el sistema inmunitario del huésped. Los tratamientos antirretrovirales de gran actividad (TARGA) actuales han logrado controlar la enfermedad al reducir la carga viral hasta concentraciones indetectables en plasma. Sin embargo, el reservorio viral no se ve sustancialmente alterado por estas estrategias terapéuticas a causa de la incapacidad del TARGA para actuar sobre el ADN proviral integrado o en latencia pre-integracional. Por ello, hoy, la presencia del reservorio viral se considera el principal obstáculo para la erradicación del virus.

El segundo reto nos sitúa ante la nueva perspectiva del VIH como una enfermedad crónica, lo que supone sin ningún género de duda uno de los mayores logros de la medicina moderna. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el propio paso de los años y el hecho de que con frecuencia los pacientes con VIH reúnan distintos factores de riesgo para enfermedades características del envejecimiento, ha dado lugar a que cada vez más pacientes con VIH presenten lo que se conoce como multicomorbilidad o polipatología (es decir, muchos problemas de salud al mismo tiempo), lo que obliga a compatibilizar el tratamiento del propio VIH con los tratamientos de estas enfermedades.

Nos encontramos cada vez más frecuentemente con un perfil de paciente distinto del de hace años, que presenta polipatología, es decir, múltiples patologías, y que no está recibiendo sin embargo una atención integral que aborde al paciente en su conjunto, sino una estrategia sumativa de tratamientos separados que actúan aisladamente sobre los distintos factores de riesgo.

Eso ha creado un escenario completamente diferente y mucho más complejo del que teníamos hasta ahora y que está poniendo a prueba la capacidad de reacción y de adaptación del personal sanitario involucrado en el cuidado del paciente con infección por VIH.

De esta cuestión ha venido a hablar a nuestro país en estos días, en el marco del V Congreso Nacional de GeSIDA, la Dra. Amy Justice, una de las mayores autoridades científicas internacionales en materia de VIH y envejecimiento, que dice con mucha razón que la tercera era del abordaje del VIH pasa en gran medida por el estudio de las cuestiones relacionadas con la polipatología y la polifarmacia. ¿Estamos seguros de que no estamos dando una medicación que puede ayudar por un lado, pero perjudicar por el otro? Esta inquietante pregunta es hoy la que nos hacemos todos los profesionales que tratamos el VIH y la que subyace también en el abordaje general todas las enfermedades crónicas.

Por eso, en buena medida, todo lo que aprenderemos en esta tercera era del tratamiento del VIH debería también ser aplicable el resto de enfermedades crónicas y debería transformarse en un conocimiento fundamental para nuestros sistemas públicos de salud, de los que se dice, y con cierta razón, que siguen funcionando hoy con estrategias que fueron pensadas para una realidad de hace 20-30 años, y no para el momento actual con una población envejecida con una gran prevalencia de enfermedades crónicas.

Encontrar las respuestas adecuadas a estos nuevos retos es un objetivo tan prioritario como impostergable, pues revierte en un doble beneficio: sanitario y económico. Lo que está en juego, por decirlo claramente, no es solo la supervivencia y calidad de vida de las personas afectadas por estas enfermedades, sino la propia sostenibilidad económica de unos sistemas sanitarios que tienen que hallar resortes estructurales para controlar el crecimiento del gasto sin perjudicar los objetivos de Salud Pública.

El resto es naturalmente difícil y complejo, pero solo lo alcanzaremos desde la investigación y el conocimiento. Hallaremos las respuestas, como se han encontrado en etapas anteriores, y todas esas respuestas llegarán desde la ciencia y la inversión en investigación e innovación.

Juan Berenguer, presidente de GeSIDA, Grupo de Estudio del SIDA de la SEIMC.

“Tienes el virus del sida, eres pobre y tu tratamiento cuesta 10.000 euros al año”

Médicos Sin Fronteras denuncia “los precios astronómicos” de los nuevos medicamentos contra el VIH y hace un llamamiento a romper el actual sistema de patentes de la industria farmacéutica.

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Un niño posa con su tratamiento contra el VIH en una clínica de Zimbabue

Un día, a la consulta de Jennifer Cohn en un hospital de Nairobi (Kenia) llegó un joven con el virus del sida. Había desarrollado resistencia al tratamiento habitual y la segunda opción para mantener al virus a raya tampoco funcionaba. La tercera opción, un tratamiento a base de nuevos medicamentos, costaba 9.000 dólares al año. En los cuatro años que estuvo en Nairobi, Cohn vivió la misma situación decenas de veces. Sin una terapia accesible, sólo podía anunciar una condena a muerte por motivos económicos.

“Es un precio que los gobiernos no pueden pagar y nosotros no podemos pedir al paciente que lo pague de su bolsillo. Son precios completamente fuera del alcance”, explica la doctora estadounidense. “Intentamos buscar donantes, pero es una situación muy dura. Los pacientes, a veces muy jóvenes, mueren simplemente porque las medicinas son demasiado caras”.

Cohn, de Médicos Sin Fronteras, acaba de presentar en Kuala Lumpur (Indonesia)un informe con datos escandalosos para denunciar “el precio astronómico” de los nuevos fármacos contra el virus del sida, con el que viven 34 millones de personas en el mundo. En algunos países, como Armenia, uno de estos nuevos medicamentos, el raltegravir de la farmacéutica Merck, llega a costar 10.140 euros por persona al año. El salario mínimo en Armenia es de unos 83 euros al mes.

Un cóctel imposible de pagar

Tailandia, con 500.000 personas con VIH, paga 3.652 euros por el darunavir, de la multinacional Johnson and Johnson. Y Paraguay tiene que poner 5.973 euros por persona para comprar etravirina, de Janssen, cuando su sueldo mínimo es de 300 euros. Para un tratamiento completo no basta sólo uno de estos medicamentos, sino que es necesaria una combinación de todos ellos.

En los países más pobres, donde las farmacéuticas sí hacen rebajas, este cóctel cuesta, en el mejor de los casos, 1.539 euros, unas 15 veces el coste del tratamiento habitual de primera línea. “Las patentes mantienen los nuevos medicamentos contra el VIH a precios inalcanzables”, critica Cohn desde Kuala Lumpur, donde tiene lugar la Conferencia de la Sociedad Internacional sobre Sida. A su juicio, “el margen de beneficios de las farmacéuticas es extremadamente grande”. Merck, por ejemplo, ganó en 2012 unos 4.800 millones de euros.

En un comunicado, Médicos Sin Fronteras ha pedido a los gobiernos que atajen el problema de los altos precios de los medicamentos rechazando la concesión de patentes injustificadas. En algunas ocasiones, la industria alarga el monopolio sobre sus medicamentos antiguos blindándolos con patentes sobre modificaciones mínimas, en una práctica conocida como evergreening (reverdecimiento de patentes). En los países ricos, como Suiza, se ha demostrado que esta turbia estrategia aumenta hasta un 8,4% el coste de la sanidad pública. En los países con menos ingresos, sin embargo, esta política de precios inflados pone en juego la vida de los pacientes.

Emergencia sanitaria

El informe de Médicos Sin Fronteras sí constata una bajada de precios de los fármacos esenciales contra el VIH, los llamados tratamientos de primera línea. Estos medicamentos, una pastilla diaria, han pasado de costar 132 euros a 106 por persona y año. La bajada, del 19%, se debe a la llegada de medicamentos genéricos al mercado, sobre todo tras la decisión de India de no aceptar patentes sobre medicamentos antiguos.

Además, en casos de emergencia para la salud pública, las reglas de propiedad intelectual de la Organización Mundial del Comercio permiten a los gobiernos emitir licencias obligatorias, con las que otros fabricantes, y no sólo el dueño de la patente, pueden producir un medicamento. Tailandia y Brasil lo hicieron en 2006 y 2007 con varios fármacos contra el VIH, provocando una bajada de los precios. Sin embargo, estas decisiones políticas se enfrentan a fuertes presiones procedentes de la industria farmacéutica. En 2007, la multinacional Abbott canceló la venta de nuevos medicamentos a Tailandia en represalia por el paso dado por el Gobierno tailandés.

En el mundo, cada vez más pacientes necesitan nuevos fármacos, tras desarrollar resistencias al tratamiento de primera línea. En Khayelitsha, un asentamiento muy pobre cercano a Ciudad del Cabo (Suráfrica), Médicos Sin Fronteras ha dado tratamiento antirretroviral a más de 20.000 personas desde 2001. El 12,2% de los pacientes tratados durante al menos cinco años desarrolló una resistencia y tuvo que cambiar a un fármaco de segunda línea. La ONG calcula que más de 500.000 personas en el mundo necesitan esos segundos tratamientos, cuyo precio se dispara. La combinación más barata cuesta 232 euros al año, un 75% menos que en 2006 pero aún así cara, según el informe de la organización.

No obstante, los precios verdaderamente astronómicos llegan en la tercera línea, cuando los dos primeros tratamientos fallan y hay que optar por una terapia de rescate. Ahí es donde Armenia llega a pagar 10.140 euros anuales por persona. “Estamos empezando a ver que, en el futuro, muchos pacientes necesitarán tratamientos de tercera línea. Si no tienen acceso a fármacos baratos, morirán”, denuncia desde Yemen Letizia di Stefano, médica italiana especializada en VIH de Médicos Sin Fronteras. “La venta de fármacos es el negocio de las farmacéuticas, pero nosotros tenemos necesidades médicas, no podemos cerrar los ojos. Reducir el precio es la única manera de salvar vidas”, zanja.

El tratamiento precoz del sida puede evitar 12 millones de muertes hasta 2025

La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció hoy nuevas recomendaciones para que los tratamientos del sida empiecen en una fase más temprana, lo que permitiría evitar 12 millones de muertes y 19 millones de nuevas infecciones hasta el año 2025 y empujaría al virus a un “declive irreversible”.

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El tratamiento precoz del sida puede evitar 12 millones de muertes hasta 2025

El tratamiento debe iniciarse cuando el nivel de leucocitos de defensa (los CD4) sea inferior a 500 y no 350, como recogían las recomendaciones emitidas por la OMS en 2010 y con las que se preveía evitar nueve millones de muertes y 15,5 millones de nueva infecciones hasta 2025.

“Además, deberá tratarse a todos los niños menores de cinco años, a todas las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia y a todas las personas contagiadas que mantengan una relación con otra sin el virus, independientemente de su nivel de leucocitos”, según la OMS, que presentó las nuevas directrices en una rueda de prensa en Ginebra.

Este anuncio coincide con la celebración en Malasia de una conferencia internacional cuyo tema central es el tratamiento y prevención de esta enfermedad.

Según cálculos del organismo, hay un total de 26 millones de personas infectadas por el sida que serían susceptibles de recibir -bajo las nuevas recomendaciones- los medicamentos antiretrovirales, en comparación con los 17 millones considerados hasta ahora.

“Hay que mantener los esfuerzos para hacer retroceder el virus. Actualmente, 9,7 millones de personas reciben tratamiento para esta enfermedad comparados con las 300.000 de hace diez años”, comentó el coordinador del Departamento para el Sida de la OMS, Gundo Weiler.

Por otra parte, las nuevas directrices indican que el tratamiento preferido por la OMS es de una sola píldora diaria, la que contiene tres antiretrovirales: tenofovir, lamividuna y efavirenz.

El coste de esta pastilla es variable, ya que depende de lo que cada país haya negociado con las farmacéuticas y puede ir desde 127 dólares anuales para tratar a una persona en algunos países de África a 213 mensuales en Suiza.

La OMS considera que es necesario aumentar los esfuerzos para dar a los niños acceso al tratamiento, pues sólo lo recibe uno de cada tres que está infectado, así como a otros grupos que sufren barreras legales y culturales para recibir la terapia (drogadictos, transexuales, homosexuales o trabajadores del sexo).

Para implementar las nuevas directrices hará falta aumentar un 10 por ciento la inversión anual necesaria para la respuesta mundial al sida, que se eleva a 24.000 millones de dólares.

“El aumento de la inversión permitirá que se reduzcan las infecciones y por tanto que esa cantidad pueda rebajarse después de 2025”, explicó Hirnschall.

Por regiones, Latinoamérica es una de las que ha alcanzado una mayor cobertura en los tratamientos antiretrovirales y unas 720.000 personas -sobre 850.000 aproximadamente susceptibles de recibirlo- estaban tratándose contra esta enfermedad.

Cinco países (Brasil, Cuba, República Dominicana, Guayana y México) alcanzaron una cobertura del 80 por ciento en 2011, mientras que Argentina y Venezuela se acercan a ese porcentaje.

La organización humanitaria Médicos Sin Fronteras saludó las nuevas recomendaciones al considerar que un tratamiento precoz del sida ayuda a mantener a las personas más sanas y evita la expansión de la enfermedad en las comunidades.

INFOSALUS:Sida.- Sólo el 30% de los estudios sobre VIH analizan variables específicas de las mujeres

PESE A SER UN GRUPO MÁS “VULNERABLE” A LA INFECCIÓN

Actualmente se estima que menos del 30 por ciento de los estudios que se realizan en el mundo sobre VIH analizan variables específicas de la mujer, una cifra “no todo lo amplia que sería deseable”, según los datos presentados en una jornada de trabajo del programa educativo europeo ‘SHE’, que cuenta con el apoyo de Bristol-Myers Squibb (BMS), celebrada recientemente en Madrid.

En Europa el número de mujeres con este virus está aumentando, hasta el punto que hasta uno de cada tres nuevos casos (35%) fue diagnosticado en ellas, unos casos que plantean una serie de retos y necesidades específicas, como reconoce María José Fuster, portavoz de dicho programa en España.

A la hora de contraer la infección la mujer tiene una mayor vulnerabilidad, en primer lugar, por cuestiones biológicas, con un riesgo dos veces mayor de infectarse que un hombre en una relación sexual. Además, también existen diferencias por sexos respecto al comportamiento del virus en sangre o el efecto de la medicación antirretroviral.
Con iguales niveles de marcadores bioquímicos, la mujer es más “vulnerable” y tiene mayor probabilidad de que la enfermedad progrese más rápido y hay algunos efectos secundarios que sufre de manera diferente, dado que los tratamientos están menos estudiados que en los hombres.

“Las mujeres tenemos una composición corporal diferente, lo que influye en la dosis farmacológica y en la seguridad y tolerancia a largo plazo”, ha asegurado la doctora Celia Miralles, especialista del Hospital Xeral Cies de Vigo (Pontevedra), quien lamenta que esto “no se tiene suficientemente en cuenta”.

Asimismo, en ellas también se advierte una mayor preocupación por el impacto de la enfermedad y el tratamiento en el aspecto físico, como por ejemplo la lipodistrofia.
Según esta experta, el componente sociocultural también influye ya que  “cuando las mujeres no cumplen la terapia se debe normalmente a que están más preocupadas por el cuidado de su familia, actúan bajo el miedo al estigma y, en general, les cuesta más acudir a la consulta para hablar sobre ello”, apunta esta experta.

Para evitar esto, el programa SHE cuenta con un programa médico que analiza la situación de las mujeres con VIH, identificando aquellas áreas que precisan más investigación o mejoras en la atención de estas pacientes en términos de cuidados en general y del tratamiento antirretroviral en particular.

DIFERENTE IMPACTO SEGÚN LA ETAPA DE LA VIDA

Entre los elementos clave, incorpora datos actualizados de la situación del VIH en población femenina, abarcando la etapa infantil, la adolescente, la de potencial maternidad, la de menopausia y la edad avanzada, para así poder dar respuesta a cuestiones como qué debe saberse en relación con la terapia anitirretroviral o cómo afecta en las distintas etapas vitales de la mujer en sus elecciones.

Otro aspecto clave del programa es que la intervención se realiza en el ámbito hospitalario, reconociendo que debe haber unidades específicas que lo desarrollen, con la ventaja añadida de que la formación a los sanitarios se hace sobre aspectos que son concretos del tratamiento del VIH en mujeres.
En definitiva, apuntan los impulsores de esta iniciativa, la prioridad del programa es lograr que la mujer con VIH pueda mejorar su calidad de vida, especialmente mediante un diálogo eficaz y abierto con los profesionales sanitarios, aprendiendo también a saber cómo comunicar su condición de infectadas o, si fuera preciso, cómo sacarle el máximo partido a los servicios sanitarios.

“La educación entre iguales tiene la ventaja de que la persona que la transmite es muy parecida a la persona que la recibe, por lo que el transmisor conoce y entiende cuáles son sus miedos y necesidades”, asegura Fuster, ya que “un varón con VIH no conoce la inquietud de una mujer que desea quedarse embarazada o cómo afectan problemas ginecológicos como la menopausia”.

Las muertes por VIH bajan al mayor ritmo en una década

El sida mata cada vez menos en España. El VIH ha causado en 2009 1.079 muertes, un 11,2% menos que el año anterior, su mayor descenso de los últimos 11 años. Es la variación más llamativa entre las causas de muerte de los españoles, según se desprende del último informe del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), con datos de 2009.

En ese año se produjeron un total de 384.933 fallecimientos, 1.391 menos que en 2008. Las tres causas principales fueron las enfermedades de los sistemas circulatorio (31,2 por cada 100 muertes) y respiratorio (11,2 de 100) y los tumores (27,3).

Un portavoz del Ministerio de Sanidad sostiene que esa baja, percibida desde 1996, se debe a la aparición de los antirretrovirales, lo que ha permitido “mejorar la calidad de vida de los pacientes, retrasar el avance de la infección y, en consecuencia, evitar que se desarrolle el sida y se produzcan fallecimientos por esta causa”.

Desde el comienzo de la pandemia en 1981 se han notificado en España un total de 79.363 casos de sida, según datos oficiales. “La extensión de los tratamientos antirretrovirales ha disminuido la incidencia del sida”, dice el ministerio.

La principal causa externa de los fallecimientos es el suicidio y afecta mucho más a los hombres. Un total de 3.429 personas perdieron la vida de ese modo (ocho más que en 2008), de los que ocho de cada diez eran varones. El factor que encabeza la lista después de que los fallecimientos por accidentes de tráfico descendieran a casi la mitad desde los últimos cinco años.

La diferencia, para la doctora Pilar Saiz, miembro de la Sociedad Española de Psiquiatría, está en la prevención. “En suicidio no hay estrategias preventivas. Nuestras autoridades sanitarias no acaban de ver que el suicidio es un verdadero problema en este país y sería muy adecuado que se pusieran en marcha políticas preventivas”. Las muertes por tumores, trastornos mentales y las provocadas por enfermedades del sistema nervioso también ascendieron.

Las enfermedades del sistema circulatorio siguieron siendo la primera causa de muerte entre las mujeres, seguidas por las enfermedades isquémicas del corazón que también fueron la principal causa de muerte masculina.

España congela la ayuda al Fondo del Sida

Los votos de honestidad no han calado, y España se sumó ayer a otros países, como Alemania y Suecia, que han decidido suspender las ayudas al Fondo Mundial contra el Sida, la Tuberculosis y la Malaria. Lo anunció ayer en el Senado la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Soraya Rodríguez.

La causa de este recelo ante una de los organismos que más ha apoyado el Gobierno, que elevó la aportación española de 100 a 130 millones anuales en 2005, es el escándalo que afectó el año pasado a los fondos repartidos a cuatro países (Mauritania, Zambia, Malí y Yibuti).

Rodríguez ha dicho que en Mauritania un 67% del dinero invertido por el fondo “se ve que ha sido malgastado”, que en Zambia “35 millones de dólares no se justificaron” o que en Malí “cuatro o seis millones de euros destinados a retrovirales parece ser que se han justificado con facturas falsas”.

Fue precisamente el fondo el que detectó el fraude y el que tomó medidas, pero ni eso ni el anuncio la semana pasada de un mayor control han bastado para el Gobierno español.

La cantidad que no se pagará son 120 millones de dólares (unos 87 millones de euros). Según lo que registra la web del organismo, parte de esta cantidad se debe del año pasado (entre 2003 y 2010 se han comprometido 764 millones de dólares y se han entregado 652 millones), pero es posible, apunta un portavoz del fondo, que se trate más bien de que no va haber donaciones en 2011.

La infección por VIH repunta entre los homosexuales

Es la vía de transmisión más frecuente (42,5%), seguida de la heterosexual (34,5%), que se mantiene estable. El contagio por drogas inyectadas decrece (8,1%)

La infección por el VIH en España mantiene una tendencia a la estabilización , aunque hay un “repunte” en la transmisión entre hombres que mantienen relaciones con hombres, la vía de contagio más frecuente. Con motivo de la celebración mañana del Día Mundial del Sida, la ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, ha presentado el balance de los nuevos diagnosticados por VIH y sida junto al secretario general de Sanidad, José Martínez Olmos, y el secretario del Plan Nacional sobre el Sida, Tomás Hernández.

Según ha puesto de relieve Pajín, el pasado año se notificaron 2.264 nuevos diagnósticos de VIH en las 15 CCAA que reportan datos. De estos nuevos casos, el 20,5% eran mujeres, y la edad media de los diagnosticados se sitúa en 37 años. Pajín ha valorado el descenso que se ha producido respecto al diagnóstico tardío. Así, el pasado año, un 50,2% de los nuevos diagnósticos fueron tardíos (lo que significa que en el momento de ser identificados como portadores del VIH eran ya susceptibles de recibir tratamiento antirretroviral), frente al 56% de 2004.

La transmisión entre hombres que mantienen relaciones con hombres es la más frecuente (42,5%), seguida de la heterosexual (34,5%), una vía de contagio que se mantiene estable. La transmisión del VIH entre usuarios de drogas inyectadas está decreciendo y supuso el 8,1% del total. No obstante, la ministra ha matizado que “no hay colectivos de riesgo, sino prácticas de riesgo”, y ha subrayado que nunca se puede bajar la guardia y hay que seguir insistiendo en la importancia de la prevención. Por lo que respecta al número de casos que han progresado hasta sida, ha experimentado un “progresivo declive”.

Según las notificaciones recibidas hasta el 30 de junio de 2010 en el Registro Nacional de Casos de Sida, en 2009 se diagnosticaron 1.275, y desde el inicio de la epidemia en España (el primer caso se diagnosticó en 1981) se han contabilizado un total de 79.363. En 2008, 1.000 personas fallecieron en España a causa del sida. Y las personas que conviven con el VIH en el mundo asciende a 33,3 millones y sigue creciendo.

En España, se estima que entre 120.000 y 150.000 personas están infectadas por este virus. Además, entre un 25 y un 30% no saben que son seropositivos y, de ellos, unos 650.000, se debe al miedo al estigma y la discriminación y a una falta adecuada de la percepción del riesgo.

La ministra ha presentado también la campaña del Día Mundial del Sida, cuyo lema este año es Quiérete. Hazte la prueba. Usa preservativo, que ha sido consensuada con todas las comunidades autónomas. El objetivo es, según ha explicado Pajín, sensibilizar a la población sobre la importancia de prevenir la transmisión sexual del VIH mediante el preservativo y la necesidad de realizarse la prueba si se han mantenido prácticas de riesgo.

La titular de Sanidad ha manifestado su compromiso con las personas y las instituciones que diariamente trabajan para visibilizar a los afectados y por el control de “esta grave enfermedad”, que supone “un reto social y sanitario”. También ha mostrado su apoyo a las personas que viven con el VIH, a las que ha trasladado su “firme compromiso” en la puesta en marcha de acciones sanitarias y sociales que contribuyan a mejorar su calidad de vida y su integración en la sociedad.