Jimena y Shaza encuentran trabajo en un club de playa de Marbella

La malagueña Jimena Rico y su novia egipcia Shaza serán contratadas por el elitista club de playa Funky Buddha Beach, que abrirá sus instalaciones en Marbella en las próximas semanas. Las dos chicas, que se escaparon de Dubai para evitar las amenazas de un padre que no respetaba su condición de homosexuales, hicieron un llamamiento público para encontrar trabajo y poder costearse su estancia en España ,tras haber estado retenidas en Turquía.

Juan Carlos Ferrero, propietario del grupo Funky Buddha, les llamó por teléfono para informarles de que les ofrecía trabajar: a Jimena como coctelera dada su experiencia en locales de alto standing en Londres y, a Shaza, como relaciones públicas para cuidar de su clientela árabe.

“Nos hemos enamorado de su historia y nos han dado un ejemplo de valentía. Las vamos a contratar porque pueden aportar muchas cosas positivas a nuestra empresa. Se merecen una oportunidad. Jimena tiene mucha experiencia en el sector de la hostelería más exclusiva y Shaza habla el idioma de muchos de nuestros clientes”, ahonda Juan Carlos Ferrero, reconocido empresario de la noche de Marbella y con siete salas de ocio nocturno.

Jimena Rico ha confirmado a EL MUNDO que ha aceptado la oferta de trabajo y que está encantada con esta nueva oportunidad que se le presenta. “Yo me he dedicado a enseñar a hacer cócteles, a diseñar las cartas de bebidas por lo que creo que puedo hacerlo bien. Y Shaza en cuanto arreglemos su situación legal también trabajará conmigo”, comenta la malagueña sobre su novia egipcia quien está tramitando una petición de asilo tras haber huido de su progenitor, que le recomendó ir al psicólogo para curar su homosexualidad.