Tres fondos invierten en una vacuna española contra el VIH
Las gestoras de capital riesgo de La Caixa, de Johnson & Johnson y de Ysios Capital aportan 11,5 millones de euros
El proyecto para conseguir una vacuna terapéutica contra el sida en el que trabajaba el centro de investigación catalán Hivacat ha captado 11,5 millones de euros entre un grupo de fondos de inversión, que esperan cerrar las últimas pruebas en los próximos cinco años y poder lanzar el producto al mercado dentro de siete o diez años. Aelix Therapeutics, la empresa desde la que se harán las pruebas, verá cómo se incorporan a su accionariado las gestoras de capital riesgo de La Caixa, del gigante Johnson & Johnson y el fondo biotecnológico Ysios Capital, que ha liderado la operación.
Aelix es una spin off de Hivacat, un consorcio público-privado que investiga la vacuna del sida y que mantendrá “una buena representación” en el accionariado de la empresa, según explicó uno de sus fundadores, Jordi Naval. El objetivo es iniciar en otoño los estudios clínicos en personas no infectadas y haber acabado la segunda fase, que implica la vacunación a pacientes con VIH, a finales de 2019. La vacuna no servirá para prevenir el contagio, sino para curar a quienes ya estén enfermos y evitar así que tengan que depender de los tratamientos antirretrovirales toda su vida. Sin embargo, los directores de Hivacat, Bonaventura Clotet y Josep Maria Gatell, esperan que los descubrimientos que se hagan a lo largo del proceso resulten útiles para crear una vacuna preventiva. Ambos investigadores son fundadores de la compañía y forman parte de su consejo asesor.
El cuarto fundador es Christian Brander, el científico del centro que lideró la línea de investigación que desarrolló el principal compuesto de la vacuna, el HTI. Se trata de uno de los proyectos más prometedores en la búsqueda de un remedio rápido y eficaz contra una enfermedad que padecen 36,9 millones de personas según los últimos datos de Naciones Unidas, que se remontan a 2014. Unas 150.000 residen en España.
La novedad que presenta el HTI es su diseño, según explicó Brander: “Para fabricar una vacuna debes decidir cuáles son las partes del patógeno que vas a incluir. Hasta ahora, los diseños han sido elegidos según análisis de secuencias o de función de proteínas… El nuestro se basa por primera vez en datos experimentales de personas infectadas”. Tras estudiar a miles de pacientes con VIH, el equipo del ahora director científico de Aelix Therapeutics analizó con más detalle a aquellos individuos que eran capaces de controlar el virus sin necesidad de medicamentos y que suponen el 1% de los infectados. “Observando sus respuestas inmunes con más detalle pudimos definir qué partes del virus atacan. Y son estas las que hemos puesto en el inmunógeno”, explicó.
El desarrollo de la vacuna implicará la reducción del coste del tratamiento del sida, según recalcó Gatell: “Una vacuna terapéutica que funcionara bien, por cara que fuera, siempre sería más barata que 60 años de antirretrovirales”. Naval aseguró que “el espíritu y la misión de la compañía” es que el producto “sea accesible al mayor número de personas posible y a un precio justo”.
Los directores de Hivacat, sin embargo, insistieron en que este logro no ha de tomarse como la solución final al sida. “Las personas no somos todas iguales cuando nos infectamos, algunas se convertirán en controladores de élite con la vacuna, otras necesitarán algún complemento, otras se sanarán por completo… Esto habrá que averiguarlo en los estudios y este dinero es suficiente para desarrollarlos en dos modelos de transportadores del HTI: el ADN y el MVA”, explicó Clotet. “El mensaje es que hay otras cosas por hacer y hace falta más dinero”, añadió Gatell.
La patente del HTI pertenece a Hivacat, que la ha transferido a Aelix Therapeutics. Esta contratará a entre cuatro y seis personas y subcontratará servicios a los centros que conforman el proyecto catalán: el Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa y el Servicio de Enfermedades Infecciosas y Sida del Hospital Clínic de Barcelona, que dirigen Clotet y Gatell, respectivamente.
La compañía no quiso detallar cómo queda estructurado su accionariado tras la captación de capital. Ysios Capital, especializado en biotecnología, aporta 3,75 millones de euros lo que “no necesariamente significa que sea el principal inversor”, según puntualizó uno de sus socios, Josep Sanfeliu. Esta es la tercera operación que el fondo saca adelante con La Caixa en los últimos meses, después de las inyecciones de 36 millones de euros en Sanifit y 19,4 millones en Minoryx Therapeutics a finales de 2015. El director de inversiones de Caixa Capital Risc, José Antonio Mesa, adelantó que pronto anunciarán una ronda similar. Junto a Johnson & Johnson, cada uno contará con un miembro en el consejo de administración de la nueva empresa.