Menos del 2% de los matrimonios son entre personas del mismo sexo
No son mayoría, pero ahora están donde antes no estaban: en las estadísticas de matrimonios. En 10 años, desde la entrada en vigor del matrimonio igualitario, en España se han celebrado 31.610 enlaces entre personas del mismo sexo, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). La cifra —baja si se toma en cuenta que apenas equivale al 1,72% de los más de 1,8 millones de casamientos registrados en una década— es lo de menos para las organizaciones que promovieron la ley: nunca se trató de cantidad, sino de tener los mismos derechos que cualquier otra pareja.
El Congreso votó la ley el 30 de junio de 2005, durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE), y casi dos semanas después, el 11 de julio, se celebró la primera boda gay. Emilio Menéndez y Carlos Baturín, que entonces tenían más de tres décadas como pareja, se casaron en el Ayuntamiento de Tres Cantos (Madrid). El primer matrimonio entre dos mujeres llegó 11 días después, el 22 de julio, cuando Tani y Verónica se dieron el “sí” en Mollet del Vallès (Barcelona). Detrás de ellos, muchos más.
Así, con la palabra “matrimonio” y no bajo el amparo de uniones civiles o contratos, empezaron a casarse ante jueces, alcaldes, concejales, notarios, como cualquier ciudadano español. Los hombres son mayoría, con el 61,40% del total de los matrimonios celebrados entre personas del mismo sexo.
Solo en 2006 se oficiaron 4.313 bodas entre homosexuales en España, la cifra anual más alta en esta primera década. Desde entonces los matrimonios no han bajado de 3.000 al año. La incertidumbre, sin embargo, llevó a muchos a pensar en el “ahora o nunca”. En septiembre del 2005, poco tiempo después de la entrada en vigor del matrimonio igualitario, el PP recurrió la ley ante el Tribunal Constitucional. El partido, entonces en la oposición, consideraba que las bodas entre homosexuales “desnaturalizaban” el matrimonio. Un largo silencio —el tribunal tardó siete años en resolver el recurso— hizo que las parejas ya casadas temieran por la validez de su unión. El Constitucional avaló la norma en noviembre de 2012.
Solo en 2006 se oficiaron 4.313 bodas homosexuales en España, la cifra anual más alta en esta primera década
Y así como ahora están en las estadísticas de matrimonios, también están en las de divorcios, que empezaron a aparecer en 2007. El INE tiene las cifras de las uniones homosexuales celebradas entre 2005 y 2014. En el caso de las separaciones, sin embargo, por ahora solo cuenta con el desglose de datos hasta 2013. Los números dan cuenta de una característica: proporcionalmente, las personas del mismo sexo se divorcian menos. En este periodo de nueve años, de 2005 a 2013, 1.858 de los 28.310 enlaces entre personas del mismo sexo se disolvieron en procesos de divorcio, separación o anulación. Es decir, el 6,56% de las uniones homosexuales terminaron en una ruptura.
Las tasas de separación han sido más altas en el caso de los matrimonios heterosexuales. En el periodo 2005-2013 se registraron 1.626.783 matrimonios y 1.075.893 divorcios, separaciones y nulidades entre parejas heterosexuales. Esto quiere decir que por cada 10 bodas entre hombres y mujeres hubo 6,6 rupturas.
En otras palabras, de los 1.077.751 divorcios, separaciones y nulidades registrados entre 2005 y 2013, apenas 1.858 —el 0,17% del total— corresponden a rupturas entre parejas del mismo sexo.
Aunque entre las parejas del mismo sexo se registren menos divorcios si se compara con las cifras de las parejas heterosexuales, ese dato ha ido en aumento año tras año, sin excepciones. Los primeros se registraron en 2007, con 59 rupturas entre parejas que habían contraído matrimonio, según la base de datos del INE. Desde entonces, el número no ha hecho más que subir hasta llegar a las 549 disoluciones en 2013, la cifra anual más alta.
Como ocurre también con las parejas heterosexuales, el divorcio es el tipo de disolución matrimonial entre quienes deciden separarse; ha sido la elección de 1.773 parejas del mismo sexo (95,42% del total). Las separaciones son mínimas (22) y las nulidades, casi inexistentes (4).