La Guardia Civil se disculpa tarde
Dice en su disculpa la Guardia Civil que no querían equiparar la violencia que ejercen los hombres sobre sus parejas o exparejas, con la que puedan ejercer las mujeres en las mismas circunstancias, pero resulta difícil creer tal afirmación, porque ¿qué otra cosa se puede pretender poniendo juntas ambas imágenes?
El primer mensaje de la Guardia Civil, ya eliminado, revelaba un absoluto desconocimiento tanto de las estrategias de sensibilización y comunicación sobre la violencia de género, como de los contenidos de las políticas gubernamentales para su prevención y erradicación.
Cuando desde la sociedad civil se pide formación y especialización de las instituciones que están implicadas en la persecución del delito y la protección de las víctimas de la violencia de género, desde luego, nos estamos refiriendo a la necesidad de contar, por ejemplo en la Guardia Civil, con agentes que sepan enfrentarse de forma directa al problema. Pero formar especialistas no es suficiente. Es necesario que la totalidad de la institución cuente con la formación y cualificación mínima para no cometer “errores” como el que cometió ayer.
Puede que haya a quienes una cosa como esta no les parezca tan grave, pero quizá cambien de opinión si consideran el hecho de que tras un mensaje aparentemente cargado de intenciones igualitarias, la guardia civil ha contribuido a la difusión de una material de organizaciones que están pidiendo la derogación de la Ley Integral contra la violencia de género, difundiendo información falsa sobre los servicios que el gobierno pone a disposición de las víctimas y distribuyendo una manipulación de un logotipo del Gobierno de España que podría considerarse como ofensivo y ultrajante para el propio Gobierno.
La falta de criterio sobre la defensa de la igualdad entre mujeres y hombres, considerar que los comportamientos de las mujeres y los hombres son siempre simétricos, es fruto de la ignorancia y de un prejuicio muy extendido contra el feminismo. Tardar tanto tiempo en reconocer que uno se ha equivocado, es fruto de la torpeza y la soberbia de quienes creen que el feminismo se dedica a perseguirles en su verdad. Y es que el machismo es eso, torpeza e ignorancia, que defiende que el reconocimiento y defensa de los derechos de las mujeres es un mal para los hombres y no un beneficio social que incide en el bien común. Las instituciones públicas harían bien en eliminar estas ideas del desempeño de la función pública y ejemplos como este sólo contribuyen a dar alas a un pensamiento que está en la raíz de la discriminación por razón de sexo.
Errores como estos, en definitiva son un obstáculo para un adecuado desarrollo de las políticas de igualdad y pueden ser incluso un problema para algunas de las miles de mujeres que acuden a un cuartel de la Guardia Civil para poner una denuncia si no hay una persona directamente especializada en ese momento. Una pena que el trabajo de especialización y mejora de la Guardia civil en este campo se haya visto afectado por el desconocimiento del equipo de comunicación que maneja su cuenta de Twitter. Una pena que además, una institución responsable también de nuestra seguridad, carezca de la flexibilidad y los reflejos suficientes para reparar un error de estas características en mucho menos tiempo del que se ha utilizado esta vez.
Bienvenidas sean estas disculpas aunque sean tardías, pero precisamente por el tiempo que han tardado en llegar, es imprescindible que las personas responsables de la Guardia Civil nos cuenten qué es lo que van a hacer para que algo como esto no vuelva a suceder. Sólo así podremos creer que no pretendía hacer el daño que su mensaje ha hecho, sólo así podemos confiar en su disposición de mejora para proteger a las mujeres víctimas de la violencia de género y contribuir a la prevención y erradicación de esta lacra en el futuro.