‘Considerar al transexual un enfermo es perpetuar la discriminación’

La OMS lo cataloga de ‘patología’

Un momento de la concentración realizda en Madrid

Un momento de la concentración realizda en Madrid. | Efe

Más de 35 ciudades de todo el mundo acogen este fin de semana diferentes manifestaciones por la desclasificación de la transexualidad como enfermedad en el catálogo de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Madrid ha sido la primera en alzar su voz con una marcha que partió ayer de la plaza de Chueca encabezada por la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FELGTB).

Esta plataforma se suma a la convocatoria promovida por la Red Internacional por la Despatologización de la Transexualidad 2012para denunciar, a partir de hoy, que “seguir considerando esta condición como una enfermedad es querer perpetuar la estigmatización y discriminación hacia los hombres y mujeres transexuales”.

La estela de la homosexualidad

Con esta reivindicación, la FELGTB recoge el sentir del coletivo transexual en todo el mundo, que pretende conseguir lo que en su día se logró con la homosexualidad.

Hasta 1973, esta opción sexual estaba incluida en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM), un listado de gran influencia, elaborado por la Asociación Americana de Psiquiatría, que se acepta de manera unánime en la comunidad científica para abordar homogéneamente el tratamiento de las patologías.

Tras una extensa revisión sobre el tema, los expertos encargados de actualizar dicho catálogo decidieron excluir la homosexualidad del mismo, además de instar a todos los profesionales sanitarios e instituciones a rechazar toda la legislación discriminatoria contra gays y lesbianas.

Sin embargo, la OMS tardó bastante más en seguir esta senda y no fue hasta 1990 cuando eliminó la homosexualidad de su catálogo de enfermedades.

“Llevamos tanto tiempo como nuestros compañeros homosexuales con esta reivindicación”, señala Mar Cambrollé, coordinadora del Área Transexual de la FELGTB, “ahora quizá estamos haciendo más ruido porque se acerca la revisión del DSM y del catálogo de la OMS, que será en 2012, y queremos hacernos oír“, afirma, en alusión al retraso con el que se están aplicando estas medidas.

A pesar de que la Ciencia, por regla general, acepta que la transexualidad no es una enfermedad ni un trastorno mental, sino una discordancia entre la identidad sexual que tiene el cuerpo y la que registra la mente, lo cierto es que su inclusión en este tipo de listados oficiales condiciona negativamente la vida de los transexuales.

“Si se parte de la base de que somos enfermos, todos los protocolos médicos que se nos aplican no son como los de cualquier persona; además, eso favorece las políticas discriminatorias. En definitiva, contribuye a prolongar la exclusión que sufrimos”, explica Cambrollé.

En España, habrá concentraciones en Barcelona, Bilbao, Coruña, San Sebastián, Vitoria, Madrid, Zaragoza, Granada, Las Palmas de Gran Canaria, Oviedo o Valencia, entre otras ciudades, y se pedirá al Gobierno que apoye con una declaración institucional la desclasificación de la transexualidad como enfermedad en los manuales de la OMS.

Aparece el cadáver de una mujer en avanzado estado de descomposición

Un empleado de la funeraria transporta el cuerpo por el portal del inmueble hacia la calle

Un empleado de la funeraria transporta el cuerpo por el portal del inmueble hacia la calle. | Raúl Ochoa

La Policía investiga la muerte violenta de una transexual, de nacionalidad colombiana, cuyo cadáver se encontró este jueves en el salón de la vivienda del cuarto piso del inmueble con el número 5 de la calle de los Alfareros, en el barrio de San Pedro y San Felices.

El cuerpo, que presentaba heridas de arma blanca, pero que falleció casi con toda seguridad por asfixia, llevaba varios días -de entre tres y cuatro, según fuentes consultadas-, en la vivienda.

La fallecida, cuyo nombre se corresponde con las iniciales Linsia C. C. y de unos cuarenta años de edad, vivía sola en el piso y se dedicaba a la prostitución.

La Policía acudió a la vivienda al recibir la llamada de una tía de la fallecida que llevaba varios días intentando ponerse en contacto con ella sin conseguirlo. Además de la imposibilidad de hablar con ella, se percibía en la planta mal olor debido a que se había iniciado ya el proceso de descomposición del cadáver. Otra llamada alertaba a los Servicios de Emergencia del 112 al filo de seis y veinte de la tarde.

La causa y la fecha de la muerte se conocerá con más detalle cuando este vierees se efectúe la autopsia del cadáver en el Instituto Anatómico Forense. Una primera hipótesis indica que la muerte pudo ocurrir después de que la víctima se peleara con su o sus agresores, aunque en principio se cree que fue una sola persona quien cometió el crimen.

La puerta de la vivienda no estaba forzada

Los policías encontraron rastros de sangre en la estancia donde aparecio el cadáver. La puerta de la vivienda no estaba forzada, por lo que se considera que la abrió bien porque era una cita concertada o alguien conocido.

Las primeras investigaciones para determinar la autoría de este crimen se centran en conocer a quiénes frecuentaba la víctima y cuál era su círculo de relaciones. Varios allegados prestaron declaración en las dependencias de la Comisaría de Policía.

Algunos vecinos del inmueble se había quejado ya con anterioridad del número de entradas y salidas de personas de la vivienda. De hecho, los investigadores hablaron con varios vecinos en el mismo lugar de los hechos. Una de las personas interrogadas señaló con posterioridad a este periódico que ni había observado nada extraño ni escuchado ruidos anormales en la vivienda donde apareció el cadáver durante estos días.

Sí confirmó que era un piso alquilado en el que entraban y salían diferentes personas a cualquier hora del día. Tres miembros de la Policía Científica de la Comisaría de Burgos permanecieron durante más de dos horas en la vivienda. Abandonaron el inmueble poco antes de que los servicios funerarios trasladaran el cuerpo sobre las ocho y media de la tarde, pero regresaron de nuevo al piso poco después. Fuentes consultadas señalaron que estos agentes volverán hoy al piso para, ya con luz natural, efectuar una inspección ocular y un registro más exhaustivo del lugar donde ocurrieron los hechos.

La presencia de varios coches patrulla de la Policía atrajo la atención de vecinos y transeúntes que permanecieron en los alrededores observando las idas y venidas de policías y miembros de los servicios sanitarios.

El 60% de las personas infectadas por el VIH en el mundo desconoce que tiene el virus

MADRID.- Las matemáticas no engañan. Si en un año (entre 2007 y 2008) el número de individuos con VIH que tienen acceso a la terapia antirretroviral aumentó en un millón pero el número de nuevos infectados crece a un ritmo de casi 2,7 millones anuales, la cuenta sale negativa. Negativa para los afectados, para los países más desfavorecidos, para quienes trabajan por lograr frenar la epidemia de sida y, sobre todo, negativa para la salud mundial.

El último informe de ONUSIDA, realizado en colaboración con UNICEF y la Organización Mundial de la Salud (OMS), alaba los avances realizados a lo largo de 2008 en la lucha contra la enfermedad pero reconoce que aún quedan muchos retos pendientes.

El primero de ellos, reducir la transmisión de un virus que en la actualidad afecta a 33 millones de personas. Algo que se antoja especialmente difícil si se tiene en cuenta que más del 60% de los infectados desconoce que lo está. Una situación que les lleva a no tomar las medidas de precaución que debieran y, por tanto, a pasar el VIH a otros sin saberlo, según recoge el documento, que ha recopilado datos de 158 países.

El segundo, aumentar el acceso al tratamiento. La cobertura universal fijada para 2010 parece inalcanzable pero el objetivo es acercarse lo máximo posible a esta meta. Se estima que a finales del pasado año, cuatro millones de personas estaban recibiendo la terapia, un incremento importante (en 2007 eran tres millones) pero que aún deja sin fármacos a más de cinco millones de los casi 9,5 que se calcula que necesitan tratamiento con urgencia.

El mayor progreso se ha realizado en los países del África subsahariana, la zona más afectada por la epidemia de sida. El 44% de los seropositivos de esos lugares toma la medicación, un porcentaje superior al del resto del continente y a la cobertura lograda en el Sur y el Este de Asia (37%) y en Europa y Asia Central (23%).

“Este informe muestra un gran progreso en la respuesta global al VIH, pero aún necesitamos hacer mucho más” ha declarado la directora general de la OMS, Margaret Chan. “Los servicios de prevención están fallando, porque no llegan a todos”, añade.

Falta personal sanitario

El tercer reto es fortalecer los sistemas de salud de las zonas más desfavorecidas y mejorar el acceso a las pruebas. Aunque durante los últimos 12 meses los sitios que realizan los test de VIH han aumentado un 35% en los países de medianos y bajos ingresos, la cifra es insuficiente. Además, según las estimaciones de la OMS harían falta alrededor de cuatro millones más de trabajadores sanitarios preparados y entrenados para atender las necesidades de los pacientes seropositivos.

Aún así, ONUSIDA destaca el hecho de que en 39 países, incluyendo 19 de África subsahariana, se ha duplicado el número de pruebas realizadas en tan sólo un año. Y señala que son las mujeres, más que los hombres, las que más se preocupan por realizarse el test. Por el contrario, la atención a las embarazadas y los niños sigue siendo un aspecto que debe mejorar. Sólo el 45% de las seropositivas en estado recibe fármacos para evitar la transmisión al bebé y, la mayoría de ellas, viven en los países ricos.

En relación con el precio de los fármacos antirretrovirales, el informe muestra que la mayoría de las medicinas de primera línea han rebajado su precio entre un 10% y un 40% en los últimos años. Sin embargo, los de segunda línea, necesarios cuando se desarrollan resistencias, siguen siendo caros.

La ‘condena’ del sexo

Globalmente, la vía más rápida y más común utilizada por el VIH para propagarse y traspasar fronteras es la sexual, seguida por la inyección de drogas intravenosas. “Centrarse en las poblaciones con un alto riesgo de infección, como las trabajadoras del sexo y los hombres que mantienen relaciones con otros debe ser la prioridad de todos los programas de prevención”, recoge ONUSIDA.

Respecto al uso del preservativo, los últimos datos indican que alrededor del 60% de los hombres que hacen el sexo con otros varones utilizó un condón en su última relación anal, aunque la cifra varía según el país. Los más concienciados con los profilácticos son los varones de América Latina. En cuanto a las prostitutas, la media de uso del condón alcanza el 86%.

El documento también incide en la necesidad de luchar contra el estigma y el tabú que rodea a las relaciones homosexuales en muchas partes del mundo y que condenan a quienes las practican a guardar silencio.

Preguntas y respuestas de la vacuna del sida

MADRID.- El sueño que la comunidad científica lleva persiguiendo dos décadas se ha empezado a hacer realidad en Tailandia, donde los ensayos en fase III con una vacuna contra al sida han mostrado, por primera vez, que es parcialmente eficaz. El hallazgo, que ha revolucionado a investigadores en todo el mundo, insufla un poco de aire a este campo de investigación, marcado en los últimos años por varios fracasos. La buena nueva lleva el nombre químico de RV144. ¿Qué se esconde tras estas siglas? elmundo.es se lo cuenta en 10 preguntas.

    1. ¿Qué es RV144?

Es una combinación de dos vacunas (ALVAC y AIDSVAX) que se ha probado en más de 16.000 voluntarios en Tailandia con edades entre los 18 y los 30 años, en el mayor estudio realizado hasta la fecha en humanos con una inmuización contra el sida.

    1. ¿Cuáles eran los objetivos de la investigación?

El ensayo, en fase III, pretendía probar la capacidad de la vacuna para prevenir la infección por VIH y ver si reducía la carga viral (la cantidad de virus circulando en la sangre) en caso de que los participantes en la investigación se infectaran.

    1. ¿Cuáles han sido los resultados?

La vacuna combinada ha mostrado que previene la infección en un 31,2% de los casos y ha sido segura y bien tolerada. Aunque los científicos reconocen que es “un resultado modesto”, representa el mayor paso conseguido nunca en la investigación de estas vacunas. Sin embargo, la RV144 no ha influido nada en la carga viral de los infectados, tal y como se pensaba cuando se planteó el estudio. Los autores indican que “aún necesitamos entender mejor el mecanismo de acción y cómo este producto reduce el riesgo de contraer el VIH”. Asimismo, la eficacia se ha comprobado para la cepa E del virus, poco común en Europa, y hay que ver si funciona igual en otras cepas.

    1. ¿Quién fabrica las vacunas?

ALVAC está desarrollada por Sanofi Pasteur mientras que AIDSVAX está desarrollada por Genentech, que tiene una licencia y un acuerdo de distribución con VaxGen, uno de los primeros implicados en el estudio.

    1. ¿Quién ha realizado el estudio?

El estudio lo ha llevado a cabo el Ministerio de Salud Pública de Tailandia en colaboración con un equipo de investigadores tailandeses y estadounidenses. Ha estado coordinado por el Programa militar de investigación de VIH de EEUU y por el Instituto de ciencias médicas de las Fuerzas Armadas de Tailandia.

    1. ¿Quién lo ha financiado?

El Gobierno de EEUU, por medio del la división de sida del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID), los Institutos Nacionales de Salud (NIH) y el Departamento de Defensa han puesto el dinero para los ensayos. El Ministerio de Sanidad de Tailandia, GSID (una organización cofundada por tres ex ejecutivos de VaxGen, propietaria de una de las vacunas que se han usado en la combinación) y Sanofi Pasteur (fabricante de la otra vacuna) también han apoyado la investigación.

    1. ¿Dónde se hizo?

Los ensayos se han realizado en las provincias de Rayong y Chon Buri, al sureste de Tailandia.

    1. ¿Por qué en Tailandia?

Porque el Ministerio de Salud del país fue uno de los primeros del mundo en desarrollar un Plan Nacional contra el sida y un Plan Nacional de Desarrollo de la vacuna contra el VIH y porque su gobierno considera que la investigación en una vacuna es una parte esencial de los programas para hacer frente a la epidemia y está comprometido con este esfuerzo.

    1. ¿Qué ha sucedido con los voluntarios que se infectaron durante la investigación?

Todos los participantes que adquirieron el VIH durante la investigación han tenido acceso gratuito al tratamiento antirretroviral y la asistencia médica necesaria. Asimismo, se les ha ofrecido formar parte de un estudio separado para seguir su evolución. El hecho de que se infectaran no tiene que ver con la vacuna -que no introduce en el organismo el virus- sino con prácticas de riesgo en las que han incurrido fuera de los ensayos.

    1. ¿Qué implicación tiene este hallazgo para los pacientes?

A pesar del entusiasmo con el que ha sido recibido el descubrimiento, los investigadores recuerdan que “sólo es un paso -importante- que muestra el camino sobre por dónde debe ir la investigación de las vacunas contra el VIH, pero de momento no estará disponible para su distribución”.

Las claves para frenar la pandemia de sida

Marcha en Los Ángeles para pedir más dinero para la investigación del VIH

Marcha en Los Ángeles para pedir más dinero para la investigación del VIH. (Foto: AFP)

MADRID.- ¿Podría un programa universal, voluntario y anual de pruebas del sida, que pusiera inmediatamente en tratamiento a aquellos que dieran positivo para el VIH, poner fin a la transmisión del virus? Un modelo matemáticoelaborado por la OMS respondía hace unos meses a esta pregunta y concluía que en 10 años esta medida podría reducir la incidencia del sida a una infección por cada 1.000 individuos al año, frente a las 20 por cada 1.000 que se registran en la actualidad. No obstante, poner en marcha esta iniciativa no es tan fácil como parece sobre el papel.

Anthony Fauci, director de los Institutos Nacionales de Alergias y Enfermedades Infecciosas de EEUU (NIAID) y uno de los mayores expertos en sida, y Carl W. Dieffenbach, director del departamento de VIH de los NIAID, han elaborado una agenda de investigación con todas las áreas que habría que mejorar para que la implantación del programa de ‘pruebas y tratamiento’ (‘test and treat’, según su nombre inglés) lograra realmente estos ambiciosos objetivos.

Tal y como publican en ‘Journal of American Medical Association’ (JAMA), consideran que hay que analizar detalladamente la viabilidad de universalizar el test de sida, la relación entre el estado de la infección y las posibilidades de transmisión, la eficacia de la terapia antirretroviral como medida preventiva, el impacto a largo plazo de la resistencia a los fármacos, los comportamientos sexuales, el beneficio de comenzar el tratamiento cuanto antes y el coste-eficacia del programa ‘prueba y tratamiento’.

“Potencialmente, el modelo matemático de la OMS constituye una importante estrategia de salud pública para luchar contra el VIH. Sin embargo, se basa en muchos conceptos que hay queevaluar y someter a debate público antes de lanzar las campanas al vuelo”, explica Fauci.

La idea de ‘prueba universal y tratamiento’ parte de la siguiente premisa: la terapia antirretroviral suprime la carga viral (la cantidad de VIH circulando en la sangre de los afectados) hasta hacerla indetectable en muchos pacientes. La eficacia del virus para transmitirse es directamente proporcional a la carga viral que presenta el individuo seropositivo. Por tanto, dado el efecto que la terapia tiene sobre este aspecto, es razonable pensar que los fármacos son una buena herramienta para evitar nuevos casos. El problema es que hay muchos otros factores que pueden echar por tierra estas esperanzas.

Los obstáculos para extender la prueba

Incluir el test de sida como parte de la rutina médica es algo que las principales instituciones médicas recomiendan desde 2006. Pero a pesar de las campañas para concienciar a la población de su importancia, muchos ciudadanos se niegan a hacérsela. Fauci y Dieffenbach señalan que los motivos para este rechazo son muchos y complejos, desde cuestiones sociológicas o culturales hasta el miedo al estigma.

Asimismo indican que poner en tratamiento a todos aquellos que den positivo no es tan sencillo. Hay muchas cuestiones que impiden a los pacientes seropositivos pasar del diagnóstico al tratamiento, entre ellas, la falta de un seguro médico, la escasez de recursos, el abuso de sustancias o enfermedades mentales que impidan al afectado seguir la terapia o, simplemente, la dificultad de aceptar el nuevo estado serológico, que hace que algunas personas nieguen su enfermedad.

También explican los autores de este artículo que la terapia antirretroviral necesita ir acompañada de otras medidas para que la prevención sea realmente eficaz. Es necesario reducir los comportamientos sexuales de riesgo, diagnosticar cuanto antes la infección por VIH, ya que en los primeros momentos el virus tiene más capacidad para transmitirse, y tener presente la cada vez mayor resistencia a los fármacos. “Es conveniente analizar cómo se están transmitiendo las cepas del virus resistente y qué mutaciones están experimentando”, escribe Fauci.

Por último, para que la estrategia ‘prueba y tratamiento’ sea realmente eficaz tiene que demostrarse realmente un beneficio significativo de iniciar la terapia cuanto antes tanto a nivel individual como comunitario. Y, por supuesto, la medida tiene que ser rentable y coste-eficaz para la sociedad.

‘Seropositivo: entrada denegada’

MADRID.- Ni a Barack Obama ni a John McCain -uno de los dos será el próximo presidente de EEUU- sus adversarios podrán echarles en cara que el país de la democracia niega la entrada a personas sólo por estar infectadas por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). Hace tres meses que EEUU eliminó, gracias a las presiones internacionales, esta prohibición (aunque aún no ha entrado en vigor). Sin embargo, la norma aún sigue presente en muchos lugares del mundo.

“Seis décadas después de que se adoptara la Declaración Universal de Derechos Humanos, resulta chocante que todavía haya discriminación hacia las personas con VIH. Esta realidad no sólo hace que los afectados mantengan su condición en secreto y que el virus se propague en la oscuridad, sino que dice mucho de nuestra humanidad. Pido un cambio urgente de estas leyes”, declaró en junio Ban Ki-Moon, secretario general de la ONU.

Un documento, realizado conjuntamente por la Sociedad Internacional del Sida (IAS), la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Fondo de Población de la ONU y numerosas instituciones más, recoge que en 2008 quedan demasiados territorios que imponen algún tipo de restricción a los individuos con VIH, “pese a que está más que demostrado que esta medida no protege la salud pública“, insiste el informe.

Las restricciones pueden hacer referencia a la entrada en el país, a la estancia en el mismo por un periodo de tiempo determinado o a la residencia fija. “En cualquiera de los casos son actitudes que no contribuyen en absoluto a lograr el objetivo del acceso universal a los fármacos antirretrovirales. Al contrario, lo que hacen es aumentar el estigma y la discriminación hacia estas personas”, dice Ratri Suksman, representante de CARAM Asia, una organización que lucha contra el sida y que ha participado en la elaboración del documento.

Para los organismos firmantes de este informe, que se distribuyó en la última Conferencia sobre el Sida celebrada en México, las prohibiciones no son sólo un obstáculo que atentan contra la libertad de movimiento de los seropositivos, sino que también afectan a su salud, al desarrollo y contradice otros derechos humanos. Impide que la gente visite a sus familiares en otros países o que vayan a estudiar o trabajar fuera.

La petición de visados para acceder a otros países ya sea por asuntos laborales, estudios o vacaciones es uno de los ejemplos de discriminación hacia los seropositivos que ha recogido en España el Observatorio de Derechos Humanos y VIH/Sida Red2002.

Los más afectados

Aunque el número de personas que se han visto discriminadas por estas normativas se desconoce, los organismos saben que los más afectados son inmigrantes que buscan trabajo en otros países.

Los expertos en enfermedades infecciosas y salud pública han dejado claro, en numerosas publicaciones, que las personas con VIH que viajan no suponen una amenaza para la salud pública “porque el virus no se transmite simplemente por la presencia de un seropositivo o por un contacto casual” y, de hecho, los países en los que entran sin impedimentos no han registrado ningún problema.

El documento también denuncia que bajo estas normativas prohibicionistas a muchos viajeros les realizan las pruebas del sida sin su consentimiento, sin respetar el derecho de confidencialidad y sin ofrecerles ningún consejo o asesoramiento en el caso de que den positivo.

La prueba de VIH, también recomendable para las personas mayores de 65 años

MADRID.- Si el amor no tiene edad, el sida tampoco. Las estadísticas señalan que el 53% de los individuos entre los 65 y los 74 años (el 26% entre los 75 y los 85 años) se mantiene sexualmente activo. Y, también, está expuesto al virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). Un equipo de la Universidad de Duke (EEUU) ha evaluado la relación coste-beneficio que tendría hacer las pruebas del sida en esta población y concluye que es una medida eficaz.

“Muchos de nosotros asociamos el VIH con los jóvenes, pero los datos indican que el 19% de los infectados reciben el diagnóstico a partir de los 50 años“, destaca Gillian Sanders, profesora de medicina en la Universidad y principal autora del trabajo, que se publica en ‘Annals of Internal Medicine’. “La edad no protege a nadie del virus. Se es tan vulnerable a los 60 años como a los 16”, recuerda.

Por eso, aunque los CDC (los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de EEUU) recomiendan que todos los ciudadanos con edades comprendidas entre los 13 y los 64 años se hagan la prueba del sida, Sanders y su equipo, con miembros de la Universidad de Stanford, proponen que se incluya también a los pacientes de más edad.

Su afirmación se basa en un trabajo en el que han estimado los efectos saludables y económicos de un programa voluntario de ‘screening’ de VIH en personas entre los 55 y los 75 años, cuyo estado serológico era desconocido. Se tuvieron en cuenta aspectos como el tipo de actividad sexual, el número de parejas sexuales y el sexo de la persona. Asimismo se imaginaron distintas situaciones, como suponer que el participante tenía, de media, una pareja con riesgo de estar infectada o que no iba con múltiples parejas.

Para saber si la eficacia de este programa, los investigadores estimaron el aumento en la supervivencia que resultaría de la detección temprana del VIH y de iniciar el tratamiento antirretroviral. Así, para un paciente de 65 años que descubriera que está infectado, la identificación del virus a través de las pruebas supondría un incremento de medio año en su esperanza de vida. Para un individuo de 75 años, el aumento sería de cuatro meses.

Dentro del presupuesto

En cuanto a los costes, depende de la prevalencia de la enfermedad por grupos de edad, de los años del paciente y de si ha tenido una pareja o una conducta que conlleve riesgo de contagio.

Asumiendo que el 0,5% de la población estudiada tuviera VIH, los investigadores calculan que las pruebas del sida en los pacientes con más de 65 años que no son sexualmente activos costaría 55.440 dólares (unos 35.750 euros al año), mientras que para los individuos sexualmente activos el coste bajaría hasta los 30.020 dólares (19.360 euros). Para Sanders, estas cifras entran dentro de lo aceptable y de lo que se considera una buena relación coste-beneficio.

“Nuestro estudio indica que la medida es buena, especialmente si la persona ha tenido una pareja sexual de riesgo, ya que a esas edades muy pocos utilizan el preservativo“, declara. Eso sí, matiza que “no está indicada para aquellos individuos cuya esperanza de vida sea más corta debido a enfermedades como el cáncer o patologías coronarias”.

11 CONFERENCIA EUROPEA DE SIDA: Seropositivo a los 70

MADRID.- K. contrajo el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) antes de que fuera descubierto por la comunidad científica, pero no lo supo hasta que cumplió 70 años. Este hombre homosexual, nacido en 1930, descubrió su estado en el 2000, cuando ingresó en el hospital con fiebre alta, sin apetito y con sarcoma de Kaposi. Fue entonces cuando le dijeron el diagnóstico. Tenía sida.

Pese a su avanzada edad, a este paciente no le sorprendió nada la noticia. “Nunca me gustó practicar el sexo con condón, así que supongo que ha tenido algo que ver”, confesó a sus doctores. Su caso es uno de los que ha expuesto Bernard Hirschel, del Departamento de Enfermedades Infecciosas del hospital universitario de Ginebra, en la 11 Conferencia Europea sobre Sida (EACS), que se celebra en Madrid.

Cada vez más personas descubren que tienen VIH cuando pasan la barrera de los 50 y en estos casos “hay que tener en cuenta otros factores que no se valoran tanto cuando el diagnóstico se hace a una edad más joven, como son la incidencia de algunos tipos de cáncer, el incremento del riesgo cardiovascular o la influencia que el virus puede tener en el deterioro del cerebro”, afirma Hirschel.

Si en 1998 tan sólo el 5% de los pacientes con VIH era mayor de 50 años, en la actualidad este colectivo supone el 25% de los afectados. La mayoría de ellos son hombres. Para el especialista de Ginebra, el principal problema para tratar a estas personas es que “por el momento contamos con muy pocos datos sobre el manejo del VIH en mayores”, ya que hasta la introducción del tratamiento antirretroviral de alta eficacia a mediados de los 90, los individuos infectados no tenían mucha supervivencia.

Además, indica este doctor, “tampoco hay mensajes específicos para este grupo de población. Los esfuerzos de prevención se suelen centrar en personas más jóvenes”.

Más factores de riesgo

Mr K. no ha sido el único en conocer en la vejez que es seropositivo. El paciente A., que nació en 1919, se enteró a los 81 años de que el virus estaba en su organismo. “Ingresó en el hospital con tuberculosis y un amigo suyo estaba seguro de que tenía sida, así que nos convenció a todos para que le hiciéramos las pruebas y éstas confirmaron su sospecha”, ha explicado Bernard Hirschel.

Una de las dificultades que plantean este tipo de pacientes es que, en algunos casos, no siguen bien la terapia y entonces ésta no es eficaz. “El señor A., por ejemplo, se negaba a tomar las pastillas, principalmente las de color azul, y pedía constantemente que le inyectaran los fármacos”.

Por otro lado, la infección por VIH unida a la edad avanzada “aumenta el riesgo de infarto de miocardio, de enfermedades cardiovasculares y de otras patologías”, afirma el experto del hospital suizo. Además, el estado del paciente con sida puede verse empeorado por la presencia de otros trastornos como “hipertensión o diabetes”.

En cuanto a la relación entre el cáncer y el VIH, el doctor Hirschel señala que entre los pacientes seropositivos que superan los 50 años se ha visto una mayor incidencia de los tumores de pulmón, próstata, ano, hígado y Hodgkin, por este orden.