La Fiscalía abre diligencias contra Cañizares por sus declaraciones sobre el «imperio gay»
El colectivo Lambda denuncia al cardenal arzobispo de la diócesis de Valencia por un presunto delito de odio a raíz de sus palabras sobre que la ideología de género es “la más insidiosa y destructora de la humanidad”
La Fiscalía Provincial de Valencia ha abierto diligencias de investigación penal contra el cardenal arzobispo de la diócesis, Antonio Cañizares, por un presunto delito de odio, a raíz de la denuncia presentada por el colectivo Lambda, a la que se adhirieron otras 55 entidades sociales, por las declaraciones del purpurado sobre el “imperio gay”.
Según han confirmado fuentes del ministerio público, el decreto de apertura de diligencias se firmó este pasado lunes. De la denuncia se encargará la Fiscalía de Delitos de Odio, cuya delegada es Carmen Andreu.
El colectivo Lambda presentó el pasado viernes la denuncia contra Cañizares por las recientes declaraciones del purpurado sobre el “imperio gay” y la ideología de género. Para las entidades que se adhirieron a la denuncia, “discursos de odio como el del arzobispo Cañizares no pueden quedar libres de condena” y consideraron que retirar las palabras que hayan podido ofender “a ciertos sectores de la población no es suficiente”.
A mediados del pasado mayo, el cardenal Antonio Cañizares, en una misa conmemorativa de la patrona del Pontificio Instituto Juan Pablo II de Valencia, defendió el “bien precioso de la familia cristiana” al tiempo que lamentó que en los últimos años “ha asistido a una importante escalada contra la familia por parte de dirigentes políticos, ayudados por otros poderes como el ‘imperio gay’ y ciertas ideologías feministas”. A principios de junio, ante la polémica suscitada, emitió una carta en la que retiró sus palabras.
Por otro lado, a finales de mayo, al término de la procesión del Corpus Christi, señaló en la Catedral de Valencia que la ideología de género es “la más insidiosa y destructora de la humanidad de toda la historia” y lamentó que “tratan de imponernos poderes mundiales más o menos solapadamente con legislaciones inicuas, que no hay que obedecer”.