El Obispado de Sigüenza prohíbe a un hombre dirigir una cofradía por ser homosexual
Este vecino del municipio guadalajareño de Brihuega ha denunciado que el párroco, con autorización del Obispado, le ha vetado para formar parte de la directiva de la Cofradía de la Virgen de la Peña porque “no vive acorde con la moral cristiana”.
Guillermo Domínguez, cofrade y vecino de Brihuega, ha sido vetado por el párroco del municipio, Mariano Marco, para formar parte de la directiva de la Cofradía de la Virgen de la Peña. ¿La razón? Su orientación sexual.
En un comunicado, Domínguez asegura que el cura le ha prohibido dirigir esta institución católica porque “no vive acorde con la moral cristiana”, una decisión que, según afirma, ha tomado con la autorización el Obispado de Sigüenza, todo ello a pesar de haber sido aprobada su candidatura el pasado agosto por el resto de la directiva, tras un primer intento de veto por parte del párroco a nivel individual.
Sobre este asunto se ha pronunciado la asociación WADO LGTBI de Castilla-La Mancha, que ha manifestado no tolerar esta actuación que han calificado como “desprecio e intolerancia”.
El presidente del colectivo, Ignacio de la Iglesia, ha considerado “una aberración que este tipo de actos queden impunes”, y ha señalado que si vetar a alguien por su orientación sexual es ya un caso grave de discriminación “no entendemos que, además, desde la Iglesia se puedan hacer estos vetos en organizaciones seglares”.
Además, desde la asociación han pedido al párroco que se retracte y pida perdón al vecino de Brihuega, instando también a los ayuntamientos de Guadalajara y Azuqueca de Henares a quesancionen sin subvención pública, colaboración económica o partidas publicitarias al Obispado de Sigüenza, cumpliendo así con unas mociones aprobadas en ambos consistorios, pues en las resoluciones se contemplaban medidas contra “las personas jurídicas que no respeten la diversidad afectivo sexual”.
Explicación del Obispado
Por su parte, el vicario de la diócesis de Sigüenza-Guadalajara, Agustín Bugeda, ha justificado en algunos medios de comunicación que el veto al cofrade no es por su orientación sexual, sino porque “no respeta las normas de la Iglesia” y que sería igual si fuera heterosexual viviendo en pareja sin tener el sacramento del matrimonio.
Tras esto, el presidente de WADO ha afirmado no creer que “no haya en alguna cofradía de Guadalajara ninguna persona en la directiva que sea soltera, viva en pareja o que esté divorciada”.
“Si fuéramos realistas y estrictos según se postulan, incluso aquellas personas que vivan en matrimonio y lleguen a usar métodos anticonceptivos en sus relaciones sexuales tampoco podrían formar parte porque la Iglesia considera que el sexo solo tiene un objetivo: la procreación”, ha agregado.
De la Iglesia ha considerado que estas palabras “son debidas a que desde la Diócesis han visto la metedura de pata al respecto y están intentando limpiarse las manos” y ha concluido que “el problema es que el daño, no sólo del cofrade, sino de cualquier persona que se sienta identificada con él, está ya hecho”.