Denuncian a dos obispos por afirmar que la Ley de Transexualidad madrileña “retuerce la naturaleza humana”
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El Observatorio contra la LGTBfobia ha denunciado a Reig Pla y López de Andújar, obispos de Alcalá de Henares y Getafe, y el auxiliar de este último por un supuesto delito de incitación al odio
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Días después de la aprobación de la norma cargaron contra ella en una carta en la que afirman que la libre determinación de la identidad de género es “un supuesto derecho”
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Los obispos consideran que la ley es parte “de los escalones programados científica y sistemáticamente” contra “el orden de la creación”
El Observatorio Español contra la LGTBfobia ha denunciado este miércoles a los obispos de los municipios madrileños de Alcalá de Henares y Getafe, Juan Antonio Reig Pla y Joaquín Mª López de Andújar y Cánovas del Castillo y al auxiliar de este último, José Rico Pavés, por atacar la Ley de Transexualidad aprobada el pasado 17 de marzo en Madrid con la abstención del PP. Días después, los obispos suscribían una carta en la que concluyen que la libre determinación de la identidad de género es un “supuesto derecho” y afirman que la norma conlleva “la sumisión de las personas a un poder totalitario” que “pretende abolir cualquier norma moral” y “retuerce la naturaleza humana”.
El colectivo LGTB considera que estas y otras palabras del documento vulneran el artículo 510 del Código Penal y constituyen un supuesto delito de incitación al odio porque fomentan “la discriminación contra las personas transexuales”, en palabras del abogado Estanislao Naranjo. La denuncia, interpuesta ante la Audiencia Provincial de Madrid, asegura que los obispos “niegan el derecho reconocido por ley” al afirmar que la definición de la identidad de género es un “supuesto derecho”.
Para Naranjo se trata “de una intromisión en los poderes públicos. Cómo si la Iglesia pudiera decidir qué es derecho y qué no. Ese poder ya lo tuvo hace muchos años”, afirma. “Difícilmente se podrá defender el derecho de personas que se consideran discriminadas cuando esa defensa se funda en una comprensión equivocada del ser humano”, escriben las autoridades eclesiásticas.
Los obispos dicen manifestar en su polémica carta “todo el respeto hacia los que han promovido esta ley y sus posibles destinatarios”, a los que al final de la misma califica de “afectados”. Sin embargo, sostiene Naranjo, “no es una ley que obligue a nada, sino que los ciudadanos pueden acogerse libremente a ella o no”. A lo largo de seis páginas, Reig Pla y López de Andújar afirman que la Ley de Transexualidad, celebrada por la mayoría de colectivos LGTB como un avance sustancial, es “injusta y a nadie obliga en conciencia”.
Otro de los párrafos que más han indignado al Observatorio contra la LGTBfobia y que motivan la denuncia es el que vincula la norma con “graves atentados contra el quinto mandamiento y los facilita respecto al sexto y noveno”. Estos son, para la Iglesia, “no matarás”, “no cometerás actos impuros” y “no consentirás pensamientos ni deseos impuros”. “Está haciendo una clara llamada al odio contra los que se acojan a las medidas de la ley”, sostiene el colectivo, que ya había puesto en conocimiento de la Fiscalía de Delitos de Odio el contenido de la misiva.
Los obispos consideran que la ley es “solo una parte de los escalones programados científica y sistemáticamente” contra “el orden de la creación” y aseguran que el legislador se muestra “heredero” de lo que ellos llaman “la ideología de género”. Por último, critican el matrimonio entre personas del mismo sexo al sostener que la ley que lo permite “abrió la puerta a que cualquier combinación afectiva pueda terminar siendo reconocida como matrimonio. Lo mismo va a suceder con estas leyes”, dicen.