Persisten las fobias contra el colectivo LGTBI: a los chicos “les cuesta salir del armario” por miedo al rechazo
Piden la implicación de la comunidad educativa para avanzar en la aceptación de la diversidad sexual
Euskadi avanza contra la discriminación del colectivo LGTBI, pero queda mucho camino por recorrer. ¿Por qué si no es por miedo al rechazo un joven gay no se atrevería a contárselo a sus amigos?
Según un estudio elaborado por el Gobierno vasco, elaborado en base a encuestas entre adolescentes entre 14 y 16 años, a los chicos les cuesta “mucho más salir del armario” que a las chicas por miedo al rechazo de sus amistades masculinas. Y eso, pese a que en el colectivo de las lesbianas persiste una invisibilidad social mayor.
Este miedo al rechazo es algo que deja entrever que, pese a que en general, los adolescentes vascos “aceptan la diversidad sexual”, perduran en nuestra sociedad “fobias más sutiles” y por lo tanto “más difíciles de detectar”. Esas que llevan, por ejemplo, a sentir incomodidad ante lesbianas o gays o mostrar desagrado ante besos o abrazos entre ellos en público.
Hoy, Día Internacional contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia, porque un 17 de mayo de 1990 la Organización Mundial de la Salud sacó la homosexualidad del listado de enfermedades mentales, el Gobierno vasco, a través de una declaración institucional, reconoce que pese a los “innegables” avances en la conciencia social frente a la diversidad social, persisten en el País Vasco “delitos de odio que encuentran en la LGTBIfobia su razón última”.
Y para atajar esta realidad, “la escuela representa un espacio privilegiado”.
La directora de Innovación Educativa del Gobierno vasco, Lucía Torrealday, y el director de Política Familiar y Diversidad del Gobierno vasco, Ernesto Sainz, han pedido que la comunidad educativa se convierta en “un agente activo en la lucha contra la LGTBIfobia“, la implicación de la sociedad, de los medios de comunicación y de las familias, para erradicar esta lacra.
Según el estudio realizado entre adolescentes de 8 centros escolares vascos, persiste actitudes entre los escolares que favorecen conductas LGTBfóbicas.
Por ejemplo, siguen en la mente de muchos adolescentes ideas como que la “homosexualidad o el lesbianismo es una moda”, ” que se conoce si una persona es gay o lesbiana por sus gestos” o que “la bisexualidad es moda y postureo”.
En cuanto a la percepción de los transexuales, su condición genera “confusión” y se les considera “extraños y valientes”. La intersexualidad apenas se conoce, por lo que ni siquiera tienen ideas preconcebidas.
Según el estudio las chicas tienen una actitud “más positiva y más abierto” que los chicos frente a la diversidad.
Sainz ha pedido hoy que haya “mayores referencias a trevés de los medios de comunicación que permita a los adolescentes tener “una visión más integral” de estos colectivos