Condenado a 10 años de cárcel el homicida confeso de una transexual
Un colectivo LGTB critica a la Fiscalía por llegar a un acuerdo en el crimen de Alicante
El primer juicio que se celebra en la provincia de Alicante por la muerte violenta de una persona transexual se ha saldado con diez años de cárcel. Es la pena que ha aceptado hoy, al inicio de la vista, Ilan Laouni R.M., tras declararse culpable de un delito de homicidio. La actuación de la Fiscalía en este caso ha sido cuestionada por el colectivo de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales Diversitat, que ha convocado una concentración de repulsa a las puertas del tribunal.
El Ministerio Público solicitaba inicialmente 15 años de cárcel para el homicida confeso y otro acusado, Daoud D. No obstante, el fiscal ha llegado a un acuerdo previo con los abogados defensores y ha modificado su escrito de acusación. Ha rebajado su petición inicial de condena para Ilan Laouni R.M. en cinco años. Al mismo tiempo, ha considerado que el otro sospechoso Daoud D. no participó en la agresión mortal a Lyssa Da Silva y se limitó únicamente a encubrirla. Este último procesado será condenado por tanto a un año y casi cinco meses de cárcel y quedará en libertad el próximo miércoles, cuando cumple precisamente ese tiempo de prisión preventiva.
El acuerdo no tiene vuelta atrás. El jurado popular encargado de dictar un veredicto tendrá que ceñirse a la calificación fiscal por el principio acusatorio.
El crimen, el primero de una persona transexual del que se tiene constancia en esta provincia, ocurrió el 21 de julio del pasado año en un piso de la Albufereta, una zona de playa de la ciudad de Alicante. El homicida, de 22 años, había conocido a Lyssa, una transexual brasileña de 33 años, esa misma madrugada y al llegar a casa mantuvieron relaciones sexuales. Con posterioridad surgió una discusión entre ambos por motivos que no han quedado del todo aclarados, probablemente por “una cuestión de dinero”, según el fiscal. En el transcurso de esa discusión, Ilan propinó una brutal paliza a la víctima.
Lyssa aguantó una lluvia de puñetazos y patadas que le causaron una fuerte conmoción cerebral y un derrame abdominal que acabó finalmente con su vida. El compañero de piso del criminal llegó poco después a la vivienda y le ayudó a deshacerse del cadáver. Lo dejaron tirado en el ascensor del edificio y limpiaron las manchas de sangre. Incluso lavaron una colcha. Trataban así de borrar cualquier rastro de la agresión, pero la Policía tardó apenas unas horas en localizarlos y detenerlos en el mismo domicilio.
El colectivo LGTB Diversitat ha criticado hoy a la Fiscalía por no apreciar en este caso la agravante de delito de odio. Su secretario general, Toño Abad, ha asegurado a los periodistas que Lyssa fue asesinada por su identidad sexual, en un acto de “violencia machista por transfobia”.
Una veintena de personas se ha concentrado a las puertas de la Audiencia de Alicante para solidarizarse con el viudo de la fallecida, Paco, quien ha calificado entre lágrimas de “irrisoria” las penas de 15 años que inicialmente solicitaba el Ministerio Público para ambos acusados. La concentración ha contado con el apoyo de la plataforma feminista de Alicante y la presencia de la concejal de Igualdad, María José Espuch. Abad ha recordado que el homicida confesó en su día que había matado a Lyssa al descubrir su identidad sexual. “Se trata de un asesinato machista y tránsfobo. No es un crimen común”, ha precisado.
Diversitat ha recibido en lo que va de año 26 consultas por agresiones a gais, lesbianas o transexuales en la provincia de Alicante. Esta organización ha hecho un llamamiento a la Fiscalía para que se apoye en ella en la persecución de los ataques a este colectivo.
El manifiesto leído por los convocantes pone de manifiesto la “vulneración de derechos” que sigue sufriendo las personas transexuales, que están abocadas a la “exclusión social” al verse marginadas en diferentes ámbitos de su vida.
“Lyssa sufrió una muerte brutal. La asesinaron a sangre fría y el desprecio de los asesinos por ella fue tal que después se echaron a dormir”, según Diversitat.