Daniel Zulaica : “Como el VIH ya no mata, la gente ha perdido el miedo y ha bajado la guardia”

En febrero de 1985, Zulaica atendía su primer paciente de sida. Dedicado en cuerpo y alma a luchar contra el VIH, se retira, a sabiendas de que la enfermedad está bajo control

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Zulaica se jubila el 31 de diciembre.Foto: Jose Mari Martínez

BILBAO – Se jubila por todo lo alto, con un congreso de sida en Donostia, su ciudad, que reúne a lo más granado de la especialidad .

-Sí, estos días se reúnen más de 700 expertos de este campo y eso ya indica la relevancia. Además lo hemos podido hacer coincidir con el 1 de diciembre, el Día Mundial del Sida.

Pero la OMS acaba de decir que en la zona europea ha habido un 7% más casos de VIH. ¿Se está revertiendo la tendencia? o ¿nos las prometíamos demasiado felices?

-Los datos de la OMS hablan de todo Europa e incluyen Rusia, Ucrania… que son países con muchos consumidores de drogas, que no utilizan las medidas preventivas que se usan en Europa Occidental. Pero si consideramos nuestro entorno más cercano, la tendencia está estabilizada desde hace diez o quince años. En el conjunto del Estado hay unas 3.000 nuevas infecciones cada año y en Euskadi alrededor de 150.

Sin embargo un tercio de los vascos no sabe que son portadores del VIH.

-Bueno el porcentaje oscila dependiendo de las estadísticas. Pero lo cierto es que hay muchas personas que desconocen que son portadores. A través de ellos se puede transmitir el virus y conocer que se está infectado por el VIH permite ponerte en tratamiento cuanto antes y que tu organismo se deteriore menos.

Ahora ya casi no se habla de sida como en los 90 cuando había tantos fallecidos. Pero el VIH sigue ahí.

-Sí por eso decimos que es importante el diagnóstico precoz, que las personas que estén infectadas lo sepan. Y en Euskadi tenemos muchos medios y se han puesto muchos recursos para ello. Por ejemplo desde hace seis años están los test rápidos de las farmacias. Vas a las siete de la tarde a una farmacia y en 15 minutos ya tienes el resultado.

¿Se ha bajado la guardia con el sida y se cree que es algo del pasado?

-Yo creo que sí. Que como el VIH ya no mata, la gente le ha perdido el miedo, ha bajado la guardia y ha relajado los hábitos. Este es un daño colateral de los tratamientos porque siempre que hay terapias eficaces, se da el mismo fenómeno. Un paso adelante en los tratamientos son dos pasos atrás en la prevención. Pero como dicen los afectados, a pesar de que el VIH se haya convertido en una enfermedad crónica, es mejor no estar infectado.

¿Imaginaban la progresión de los tratamientos?

-Hace 30 años no había medicación y la media de vida de los pacientes era de 60 días desde que eran diagnosticados. El antes y el después en los tratamientos lo marca 1996.

¿Qué pasó aquel año?

-Aparecieron los nuevos antirretrovirales. Y además se descubrió que asociándolos de tres en tres -porque se iban descubriendo cada vez más familias-, se conseguía más éxito. Porque aunque el virus mute se hace resistente a uno de ellos pero a tres es muy difícil.

¿Los nuevos diagnósticos corresponden a personas jóvenes?

-No, entre los jóvenes no hay más casos. La edad media de los nuevos infectados ronda los 37 años. Mientras que hace 20 años los afectados eran las personas que consumían drogas intravenosas, ahora el colectivo de hombres que tienen sexo con hombres es el que contabiliza más del 50% de las nuevas infecciones. Por eso Osakidetza quiere incidir en este colectivo gay con la adopción de estrategias preventivas.

En los últimos tiempos, usted se ha hecho cargo también de la estrategia para la hepatitis C. Y todo con el común denominador de que los tratamientos para las dos enfermedades son caros no, carísimos.

-Pues sí, en su día, los tratamientos del VIH también eran muy caros pero progresivamente fueron apareciendo genéricos y se han abaratado. Con la hepatitis C, Osakidetza ha hecho un gran esfuerzo y se ha tratado a aquellos pacientes que lo necesitaban. La diferencia es que el tratamiento de la hepatitis cura y el del sida es de por vida.