Medio centenar de muertos en un tiroteo en un club gay de Orlando
En torno a 50 personas han muerto y 53 han resultado heridas a consecuencia del tiroteo ocurrido esta madrugada en el club gay Pulse de Orlando, según han informado las autoridades estadounidenses en rueda de prensa.
El autor ha sido identificado como Omar Mateen, de 29 años de edad, de la localidad de Port St. Lucie (también Florida), según han confirmado fuentes policiales a la cadena CBS. Estas mismas fuentes han precisado que Mateen, de ascendencia afgana, mantenía lazos con radicales islámicos pero carecía de antecedentes delictivos.
El padre del atacante ha asegurado en declaraciones a la CBS que se trata de un ataque homófobo. «Esto no tiene nada que ver con la religión», ha declarado el padre que ha indicado que su hijo se enfadó hace dos meses cuando, durante una visita a Miami, vio a dos hombres besándose.
Seddique indicó que cree que ese incidente en Miami puede estar detrás de este tiroteo en el club Pulse. «Estamos pidiendo disculpas por el incidente. No éramos conscientes de que estuviese planteando ningún tipo de acción. Estamos en estado de shock al igual que todo el país», ha dicho.
Por su parte, el agente especial del FBI Ron Hopper ha señalado en rueda de prensa que no pueden clasificar este suceso todavía como un «crimen de odio o terrorista» pues las investigaciones siguen abiertas.
Tiroteo y toma de rehenes
El incidente comenzó en torno a las 2.00 de la madrugada -las 8.00 en Euskal Herria-, cuando el individuo ha cruzado varios disparos con al menos nueve agentes de Policía antes de atrincherarse en el local, un conocido club de ambiente gay donde se encontraban al menos un centenar de asistentes que tomó como rehenes.
Múltiples unidades de Emergencias y Policía -entre ellas unidades de artificieros y equipos especiales – llegaron al lugar conforme la Policía ha podido confirmar que el individuo también transportaba lo que ha sido descrito como «un artefacto sospechoso». Pasados unos minutos y tras los esfuerzos infructuosos de un negociador, la Policía ha decidido entrar en el local y han matado al asaltante.
Tras el tiroteo final, en el que intervinieron las unidades de acción rápida SWAT y un vehículo acorazado, la Policía ha conseguido rescatar con vida a 30 personas del local, que han recibido inmediatamente atención médica in situ. Se desconoce el estado exacto de los heridos, de diversa consideración.
Al poco de terminar el incidente, la Policía ha realizado una «detonación controlada» del artefacto que portaba el atacante, sin dar más detalles.
El congresista demócrata por Florida Alan Grayson ha indicado que no hay evidencias de que haya otras personas o grupos relacionados con este suceso y ha explicado que los agentes han acudido a la casa del sospechoso para recabar información de sus computadoras, escritos y mensajes en las redes sociales.
La policía no ha divulgado todavía información sobre las víctimas de la matanza, pero se da por seguro que había muchos hispanos entre el público atraídos por una «Latin Nigth. Reggaeton, Bachata, Merengue, Salsa», según rezaba el cartel de la discoteca.