EL CORREO: La vacuna brasileña contra el SIDA supera las pruebas con animales
Una nueva vacuna contra el sida que desde 2013 comenzó a ser experimentada en primates pasó de forma satisfactoria las primeras pruebas de análisis, anunció el investigador que dirigió el trabajo, Edecio Cunha Neto. “Pusimos a prueba la respuesta inmune de los animales y los resultados fueron excelentes”, declaró Cunha Neto a la edición digital del diario Folha de Sao Paulo.
Según la también científica Susan Ribeiro, quien participa en el proyecto, “las respuestas” en primates “fueron mucho más intensas que lo que habíamos encontrado en ratones”. La vacuna, que es desarrollada por la Facultad de Medicina de la Universidad de Sao Paulo (USP) junto con el estatal Instituto Butantan, utiliza partes del virus VIH inalterados, método diferente de la mayoría de investigaciones realizadas hasta el momento en las que se utiliza la proteína entera.
En una entrevista concedida en noviembre pasado, Cunha Neto dijo que las investigaciones tienen como objetivo encontrar un método seguro y eficaz de inmunización contra el sida para ser usado en seres humanos. Los estudios realizados desde 2001 llegaron a 18 péptidos que son candidatos a producir fuertes reacciones del sistema de defensa inmunológico.
Las pruebas en ratones modificados para tener una inmunología similar a la de los humanos mostraron que es posible señalar células responsables de la identificación de patógenos invasores para identificar esos péptidos y poderlos así atacar. La premisa es que si el sistema inmunológico aprende a reconocer este material rápidamente y reacciona para destruirlo eso es lo que va a hacer para encontrar el VIH de verdad.
Los datos obtenidos por el proyecto piloto son alentadores, pero el éxito de la prueba no es definitivo todavía debido a que uno de los problemas es el número reducido de animales, indicó el grupo investigador. La idea ahora es ampliar las pruebas a 28 monos y desarrollar un protocolo diferente, que implica otra forma de administrar la vacuna.
Si todas las pruebas son exitosas, apuntaron los responsables de la investigación, estará allanado el camino para los ensayos clínicos en humanos. El grupo de la USP busca socios en el sector privado para llevar a cabo este paso final, que implica una inversión de alrededor de 250 millones de reales (76 millones de euros).