Wyoming y la rebelión de los autobuses contra el odio de Hazte Oír

El ‘autobús del odio’ de los ultracatólicos de Hazte Oír ya tiene su contundente respuesta en las calles. Tras la polémica surgida con esta campaña con un mensaje transfóbico ya han surgido varios autobuses alternativos para promover el respeto a la identidad sexual y en contra los mensajes de odio.

En Valencia, el Ayuntamiento de la ciudad ha sacado a las calles un autobús de la Policía Local rotulado con el lema “Ante el odio, denuncia”. El vehículo, que ya fue utilizado en la última manifestación del orgullo gay, invita a los ciudadanos a denunciar los delitos de odio.

El consistorio ya había anunciado que la Policía Local impediría la entrada en la ciudad al vehículo de Hazte Oír. “Somos una ciudad inclusiva y este autobús no es bienvenido porque puede incitar al odio”, aseguró la concejala de Protección Ciudadana, Anaïs Menguzzato.

El bus de ‘El Intermedio’

Por su parte, desde el programa El Intermedio de La Sexta, han anunciado que sacarán a la calle un autobús para responder al de la asociación ultra. El autobús estará rotulado con los colores del programa y llevará el mensaje “La identidad de género no se elige, que no la elijan otros por ti”.

En su programa de este miércoles, el Gran Wyoming analizó la polémica e ironizó, asegurando que “en lugar de Hazte Oír deberían llamarse ‘Háztelo Mirar’”. “Tiene pinta de que ese autobús siempre llega tarde… al menos sus planteamientos tienen 50 años de retraso”, consideró.

Otros buses alternativos están empezando a salir, por ejemplo en Barcelona la cervecería Moritz ha rotulado un pequeño autobús con las palabras de la madre de un niño transexual: “Entender la diversidad nos enseña la importancia de ser uno mismo y las consecuencias de no serlo”.Este jueves el Juzgado de Instrucción Número 42 de Madrid ha acordado como medida cautelar la prohibición de circulación del autobús desplegado por Hazte Oír hasta que no retire el mensaje contra la transexualidad. En su escrito, se decreta la prohibición de circular de este autobús, al entender que su mensaje “no se limita a exponer” el ideario del colectivo, sino que se dirige a personas con una orientación sexual “distinta” para lesionar su “dignidad”.