El Vaticano ‘niega la bendición’ al embajador francés por ser gay

Una figura de cera del Papa Francisco, ante la catedral de Nôtre Dame. IAN LANGSDON EFE

Una figura de cera del Papa Francisco, ante la catedral de Nôtre Dame. IAN LANGSDON EFE

 

Laurent Stefanini tiene 54 años, es un diplomático francés con una larga trayectoria a sus espaldas, soltero, sin hijos y además es un fervoroso católico. La suma de todos esos ingredientes lo hacían perfecto para convertirse en el nuevo embajador francés ante la Santa Sede, y es justo por eso por lo que el presidente François Hollande decidió en el Consejo de Ministros del pasado 5 de enero nombrarle para ese cargo.

Sin embargo, cuatro meses después Stefanini aún no se ha podido incorporar a su puesto. El motivo es muy sencillo: el Vaticano no ha dado el plácet a su nombramiento. Muy en su estilo la Santa Sede se limita a dar la callada por respuesta, sin revelar los motivos por los que se niega a dar su bendición a su designación como nuevo embajador francés. Pero parece claro: Stefanini es gay, abierta y declaradamente gay.

Pero si el Vaticano se niega a dar al diplomático el visto bueno que normalmente requiere la designación de un nuevo embajador, París tampoco da su brazo a torcer. “No cambiaremos de candidato”, señalan fuentes del Palacio del Eliseo. “Es uno de nuestros mejores diplomáticos y cumple todos los requisitos para desempeñar des cargo”, indican fuentes próximas a Hollande citadas por el diario católico ‘La Croix’.