Cañizares llama a desobedecer las leyes basadas en la ideología de género

El cardenal arzobispo de Valencia se ha referido expresamente a la Comunidad Valenciana y ha pedido «a quien corresponda» evitar «una próxima legislación para no ir contra el hombre ni contra la humanidad»

El arzobispo de Valencia, el cardenal Antonio Cañizares

El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares. / Manuel Bruque (Efe)

El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha pedido a los católicos que desobedezcan aquellas leyes que consideran injustas basadas en “la ideología más insidiosa y destructora de la humanidad de toda la historia, que es la ideología de género”. Según informa hoy el Arzobispado en un comunicado, Cañizares se expresó en esos términos anoche en la Catedral, al término de la procesión del Corpus Christi.

El cardenal urgió a los fieles valencianos a “encarnar el proyecto eucarístico en la vida cotidiana, en la familia, en la escuela, en la fábrica”, lo que implica “testimoniar que la realidad humana no se justifica sin referencia al creador”. Precisamente, según el Arzobispado, “esto es lo que destruye la ideología más insidiosa y destructora de la humanidad de toda la historia, que es la ideología de género, que tratan de imponernos poderes mundiales más o menos solapadamente con legislaciones inicuas, que no hay que obedecer”.

Al respecto, Cañizares se refirió expresamente a la Comunidad Valenciana y pidió “a quien corresponda” evitar “una próxima legislación inspirada en esa misma ideología para no ir contra el hombre ni contra la humanidad”, y añadió: “Valencia no se merece eso, no puede ser punta de lanza en la aplicación de tal ideología insidiosa”.

Asimismo, dijo: “Que nadie tema ni vea en la Iglesia y la fe cristiana (…) ninguna amenaza a la justa autonomía de lo terreno y a la justa y sana laicidad”. “No podemos someternos a una mentalidad inspirada en el laicismo, tampoco en la ideología de género”, declaró también, pues a su juicio “ambas ideologías llevan gradualmente, de forma más o menos consciente pero certera a la restricción de la libertad religiosa hasta promover un desprecio o ignorancia de lo religioso”.